Extra 3

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

—Hoseok —el chico al otro lado de la puerta me vio confundido.

—Disculpe, ¿lo conozco? —peguntó con el ceño fruncido, además, no parecía tener la intención de salir del apartamento.

—Entonces, ¿fuiste capaz de olvidar a quien era tu mejor amigo? —inmediatamente, su expresión cambió.

Me observó de arriba hasta abajo, pero al final solamente negó con su cabeza y sonrió con nerviosismo.

—En serio, no lo conozco, además, sería imposible que...

—Vine a disculparme, perdón por haber sido un idiota contigo, arruiné tu matrimonio, me comporté de un modo grosero cuando no lo merecías.

—¿Quién te lo contó? —a ese punto sus manos habían comenzado a temblar.

—Hope, sé que es una locura, fui asesinado hace varios años y en teoría estoy muerto —di unos pasos hacia el interior del apartamento, mientras él permaneció inmóvil y algunas lágrimas amenazaban con salir —. Si no lo fuera, ¿cómo podría saber que solíamos escaparnos de las clases para ir a jugar video juegos? Espera, esa es demasiado usual, pero siempre fui tu mala influencia y te incentivé a fumar por primera vez cuando teníamos 14 años, a los 15 años nos emborrachamos, te desmayaste y tu madre te castigó por un mes. De todos modos, me metía por la ventana de tu habitación y te hacía enloquecer por el alcohol que escondía en mi bolso. Solías llamarme Tae Tae.

—No... no, puede ser... —antes de que lograra decir algo más, se desmayó.

Cuando lo llevé a su habitación para dejarlo sobre su cama, me di cuenta de que todo parecía estar intacto, la mayoría de decoraciones eran las mismas y se hallaban en el mismo sitio. Incluso, nuestras fotos juntos seguían en los portarretratos.

Sentí mi corazón encogerse, las ganas de llorar me sobraban.

Me senté a su lado por algunos minutos y toqué su cabello. Quizás debía irme, pero me negaba rotundamente a abandonarlo.

En ese momento pensé que siempre, es decir, que en vida también fui un demonio. Lastimaba a las personas que me querían sin ninguna compasión y no comprendía del todo el concepto de amor. Además, las personas vivían mejor en mi ausencia.

¿Quién iba a extrañarme? Más bien se libraron de mí.

No iba a dejarlo, necesitaba que al menos una persona me dijera un "Te extraño" y escuchar de sus labios un "Te perdono" y aún si no lo hacía, me sentiría un poco más tranquilo.

Le preparé un chocolate caliente e hice las galletas con chispas de chocolate, aquellas que solía hacerle cuando me visitaba.

Ingresó a la cocina, mientras yo estaba sacando las galletas del horno, las cuales coloqué en un plato. Coloqué la jarra de chocolate caliente y el plato de galletas sobre el comedor. En todo momento, él me siguió con la mirada.

—Come, te lo he preparado como en los viejos tiempos —sus ojos se aguaron nuevamente y estalló en llanto.

—¿Cómo te atreviste? ¡¿Cómo te atreviste a abandonarme?! Eres un tonto y egoísta. Estabas pasando por un momento difícil y nunca me dijiste nada —me rodeó con sus brazos y me apretujó con todas sus fuerzas —. No importa si ahora no entiendo nada o esto es una locura o un tipo de alucinación, pero te extrañaba y me dolía no haberte abrazado por última vez.

—Te debo más de una explicación, pero por ahora solo quiero que hablemos y compartamos tiempo juntos, como en los viejos tiempos.

***

Tal vez era absurdo porque efectivamente se me había hecho tarde; sin embargo, después de la muerte comencé a intentar reparar los daños que había hecho en vida, incluso si aquello ya no tenía sentido. Además, ya no sería juzgado nuevamente, entonces las "buenas" acciones no significaban nada y no lograrían nada, solo alivianarían un poco mi carga.

—Tae es tan lindo —Fred apretujó mis mejillas.

—Ni siquiera me dejas tener un momento a solas o reflexionar en paz sobre la muerte.

Como siempre, el risueño chico ignoró mis palabras y se comportó de una forma melosa.

Estaba cambiando tarde, aunque eso podría hacer "mejor" mi infernal vida eterna, la cual debería aprender a vivir. En algún momento debía hacerme la idea de que era imposible volver el tiempo atrás y caer en mi realidad actual. Adiós a quien alguna vez fue el Taehyung vivo, quien tampoco me enorgullecía, ahora era un demonio y seguramente era peor, pero aprendería a vivir.


*****

Hola, espero que estén bien.

Ya este era el último capítulo extra, pero a partir del próximo fin de semana comenzaré a publicar la pequeña historia de Tae y So Hee.

Muchísimas gracias por continuar leyendo el fic, hasta pronto.💖

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro