Pov Escritora:

Pasaron meses, años desde la muerte de Jungkook. Fué duro para algunos de sus amigos al igual que para él.

Durante esos meses y años, él los acompañaba en todo, cuando uno de ellos tenía depresión o bajones, aparecía en sus sueños para ayudarlos en lo que podía, se encargaba de ser un ángel guardián para ellos.

Siempre estando ahí, siempre cumpliendo su promesa de estar con ellos vivo o no. Lejos o no. Siempre estando ahí.

Puede ser que esta historia no le halla interesado a nadie, no le llamó la atención a algunas personas, puede También que fué confuso o muy absurdo, con mucho dolor u otra cosa.

Pero para mí esto fué una lección, el que la persona importante para mí la hizo entender. Me hizo entender.

Yo pasé por todo esto y un poco más, pero no quería aburrirlos.

Lo que fué pasar todo esto fué duro en el momento y a veces el recordarlo. Pero seguro se preguntarán... ¿ cómo es capaz de contar todo eso en una historia? O ¿Por qué se lo toma a la ligera?

Siendo sincera, esto lo tuve guardado desde muuuy pequeña, pude decir todo cuando empecé el psicólogo, solamente me podía contar a mí misma, consolarme a mí misma desde esa edad de tan solo tres años para arriba. Si le decía que sentía a mí mamá sabía lo que iba a decir "déjate de joder".

Nunca le conté a mí mamá lo que sentí todos estos años porque sabía que me iba a criticar. Si le contaba a mí familia también me criticaría. Me diría lo mismo de siempre "hay personas que pasaron peores", sí, pero yo oculté cosas. Miles de veces les dije "ustedes no me conocen del todo, mis amigos sí." Pero nunca me escuchan.

Decidí una forma para desahogarme y una forma para hacer entender a chicos de mí edad, menos o mayores para ayudarlos en esto.

Ahora estoy escuchando como mí hermana menor me contesta, como mí tío jode por pelotudeces, en estos días he sentido necesidad de dejar salir lo que tengo dentro.

Desde que comenzó la cuarentena con la relación con mí mamá no fué buena.

Al principio estaba feliz, no iría al colegio, estaría con mí familia todo el tiempo y la pasaríamos mejor, podría hacer que el lazo de madre e hija sea más fuerte. Pero me equivoqué.

Esto creo que me está haciendo pasar a un estrés y de estrés a casi depresión.

Puede ser que esto no es nada, a veces me digo "esto no es nada, hay cosas peores" pero en el momento, nosotros sentimos que es mucho que no podemos más y queremos dejar de sentir tal cosa.

Yo lo que hago es llorar por las noche en silencio, no puedo llorar en paz, no tengo habitación propia, sigo durmiendo en un colchón en medio del comedor y al lado mío mí mamá y hermanita menor.

Lloro y para ella es molesto, me retaría porque no la dejaría dormir ya que ella trabaja en la mañana.

Ayer me regañó porque me reí al ver algo en la tele, creo que ella se estaba durmiendo. Ella me dijo "respetá un poco, loca" lo dijo enojada...

Cada vez hablo, ella está presente y me calla. No puedo hablar. Me tengo que quedar en silencio. No me abraza como antes, no me llama con esos apodos tiernos, me insulta, se enoja conmigo.

A veces pienso y me pregunto ¿Por qué no me abortó?
Estaba con un hombre que no la trataba bien como debía ser y que estaba con mujeres mientras.

Mí abuela una vez me contó "tú mamá a tu edad era alegre, cariñosa y pegada a nosotros (a mí abuelo y a ella) era amorosa". Ahí me dí cuenta que después de todo lo que pasó la hizo como es, fría y dura.

En eso, yo le dije a mí abuela; "me gustaría regresar al tiempo y verla así, hablarle a esa niña, jugar con ella." Lo dije al frente de mí mamá también. Ella estaba presente.

Yo no me maté cuando tenía alrededor de cuatro o cinco años, sabía y me decían; mí conciencia y mis amigos imaginarios "debes estar presente, por tu mamá". Lo hice, sufrí de igual manera que ella. Cambié por un año pero volví a ser una niña feliz, no me volví fría como ella, pero cada uno tiene una distinta forma cambiar.

Muchos de mis amigos me decían que hable con mí mamá, pero sabiendo como es ella y la veces que lo intenté, no funcionará.

Hubo un mes en cuarentena en la que me hacían sentir culpable, así lo sentía, así es como les conté, les contaba a mis amigos lo que pasó y qué sentí. Hasta mí mejor amigo tuvo las ganas de pegarle a mí mamá.

Voy a ser sincera; hubo noches en las que casi tiro todo y le pegaba a ella o agarraba el cuchillo para apuñalarme. Pero siempre al último momento me detuve.

Mucha veces una voz en mí cabeza me decía que era horrible y otras cosa feas, pero yo negaba eso, aunque me dolía, obviamente.

Yo, para no hacerme daño, hablo conmigo misma, trato de dasahogarme hablando sola en mí mente, acaricio a mí gatita, le doy mimos, lloro en el patio o voy y me quedo mirando el atardecer y anochecer, eso me calma, miro videos graciosos, miró los estados de mis amigos, hablo con mis amigos de otra cosa que no sea mi sufrimiento.

¿Por qué no lo cuento tanto ahora? Bueno, yo sé cómo manejarme, pero cuando uno de mis amigos están mal, quiero ayudarlos, porque sé lo que se siente no ser escuchado.

Me encanta ir al psicólogo, cuando iba pedía que sea todos los días, pero sabía que eso no era posible, cuando venía el cura/padre a mí colegio católico, pedía inmediatamente hablar con él, quería hablar con un adulto que no sean mis profesores.

...

No soy la única en mí familia que quiso su muerte.

Mis primos más cercanos también sufrieron.

Fabricio:
Él es mí primo más cercano y grande, tiene alrededor de 16 o 17 años creo yo, por su altura, el que veo más seguido antes de la cuarentena. Él cuando era chiquito vió también violencia. Su padre venía borracho o no y veía como él pegaba a su madre y hermana de mí mamá, la mayor también de el grupo más cercano de familia.
Hasta un día vió cómo su papá agarraba del cuello a su madre. Mí tía, la siguiente hermana de mí mamá del grupo cercano, estuvo ahí y agarró con una botella lo partió en la cabeza del hombre. Se separaron. Mi tía tuvo a otro hombre, pero a veces recibía maltrato de él sino mal me equivoco.

En un año nuevo o navidad había visto un móvil de policía, (camioneta) era muy chiquita yo para entender lo que pasaba y mí mamá me mandaba adentro para no ver nada.

Evelín:
La siguiente, tiene 15 años, este año cumple 16, es hija de mí tía quien salvó a mí tía (mamá de Fabricio). Ella es hija única pero en un pasado fué hija menor, hermana menor... Ella para mí, es la perfecta y nieta/sobrina/hija querida de todos. Yo lo veo así, hasta yo la quiero, es buena onda y alegre, pero en un pasado sufrió también por la pérdida de su hermano mayor, mí primo.

Agustín:
Era el nombre de mí primo más grande que Fabricio. Murió a los 17 o 18 años. Mí familia (por lo que yo sé) desconocen la razón exacta por cual murió.
Agustín tampoco tuvo un pasado lindo, para nada.
Fué rechazado por la familia de su padre y por el propio padre.
No me acuerdo mucho cómo me contó mí abuela lo que pasó, pero después de su muerte el padre lo quería ver. Pero no pudo o eso creo.

Yo era muy pegada a él, Siempre era él.
Era alegre, amoroso, divertido pero sus notas no eran buenas según mí abuela.

La vez que murió, mí mamá me lo contó, tenía ocho o siete años cuando pasó eso, él, del auto de su padrastro,mí tío, (porque el padre de la Evelín no era su padre, aunque lo trataba como si fuera su propio hijo) agarró cadenas creo que algo gruesas, se subió al árbol del patio y con eso se lo puso en su cuello y lo sujetó de una rama, se tiró y se murió...

Siempre, desde ese día, cuando mis profesores al momento de rezar preguntaban si queríamos pedir algo o agradecer. Yo siempre pedía por mí primo, por Agus y por mí tía, que sufrió una enorme depresión. Yo no entendía tanto, por eso no me afectaba, pero al paso de los años lo entendí y me puso demaciado triste, al punto de llorar todas las noches o cuando recordaba algo de él.

Cuando yo entré en depresión, mí tío me dijo "fué egoísta el que se matará Agus, porque mirá cómo quedó tu tía después de eso, tomaba muchas pastillas para dormir y otras cosas más. Pensá cómo estaría tu mamá si te pasa algo." Yo hasta ahora lo sigo pensando. Pero como me trata quiero que reaccione el como me trata antes de que yo haga una locura. Quiero que me escuche después de casi 10 años. Lo vengo pidiendo desde los cuatro años...

Valentina:
Esta es mí prima, se lleva unos pocos meses con Evelín, ella no vió lo que pasó, pero su madre sufrió un poco cuando estaba embarazada de ella, no sé exactamente, por lo que no puedo contar mucho, pero sus padres hace un año se separaron, por tercera vez, las veces que se separó venía a mí casa para dormir, hasta que se cansó de ser tratada en esa casa y vino con nosotros.

Su padre es como casi parecido el mío, solo que de sicópata (? Sería unos 50% por ahí. Unos días después de la separación definitiva vino a mí casa, entró a mí casa mientras yo dormía la siesta, mí tío también, entró a casa y le gritó a mí abuela, le rompió todas las pertenencias a mí tía y se las tiró por toda la casa.

Yo me dí cuenta porque al salir para tirar algo ví el móvil/patrulla de policía afuera de mí casa (en realidad sería de mí abuela) y me asusté al ver toda la ropa de mí tía destrozada en la mesa de afuera. Y sin querer escuché lo que había pasado. Creo que mí prima se puso muy mal por la separación, pero al igual que me pasó a mí, salía gracias a su padre, la dejaba salir con sus amigas y así.

Luego seguiría yo, como grupito de estas edades.

Yo; Dariana Agostina Tapia:

Por lo anterior, mis problemas ya saben.
Pasé;
_ Problemas familiares
_abuso
_depresión en la que salí sola sin ayuda mientras más problemas venían a mí.
_En mí infancia no pude dormir correctamente la mayoría de la veces, vijilando si venía mí papá para pegarle a mí mamá y yo estar despierta para protegerla en el momento, aunque era tan solo una niña.
_aprender de todo lo que sé por mí misma.
_ Perdí algunos seres queridos.
_Sigo esperando el amor de mí mamá.
_Sigo esperando que mí familia me entienda.
_Sigo esperando mi muerte.

Cuando tuvieron mi hermana, perdí un poco de la atención de mí familia. Ya mí mamá no jugaba conmigo en las noches a un juego de mesa, ya no me decía tanto esos apodos cuando me despertaba.

El pasar unos pocos años, mí hermana cuando cumplió 1 o 2 años, me trataba... Mal, cuando yo de apodo le puse "Angélica" o algo así, era relacionado con un ángel. Pero no me trataba bien, sé que el ser una bebé no entendía nada y no tenía correctamente controlado sus emociones. Pero conmigo era agarrar el palo y perseguirme por toda la casa, mirarme con cara de pocos amigos, nos dejarme agarrar mis dulces de mí cumpleaños y mandarme al frente cuando no hacía la tarea. Todavía lo sigue haciendo. Se cree que me puede retar porque aprovecha que mí mamá me regña con todo lo que hago, al igual que mí familia. No puedo hacer nada más que guardar otra carga en mí enorme mochila llena de ladrillos, esos ladrillos son mis sentimientos, mis miedos y demás.

Todavía recuerdo la vez que me rompió el dibujo que le hice para su cumpleaños número 2 o 3 en mis narices. Eso dolió que hasta casi lloro. Pero me contuve. No quería llorar al frente de todos por una estupidéz.

Yo era la única que la entendía cuando hablaba.

Yo era la quien cuidaba de ella de bebé, meses después de que nació mientras mí mamá estaba ocupada o mis padres discutiendo.

Pero me gustaría saber ¿Yo cuidé de ambas? Para mí que sí. Aunque sea pequeñas cosas que hice.

Aparte de que me quitó cosas ella, como la atención y demás, también me quitó mis sueños de chiquita.

Mí mamá había comprado una canción para ella, para que se durmiera y yo mirando de una esquina con ganas de llorar, porque mí mamá nunca hizo eso por mí pero sí con ella.

Robó la atención de mi primo favorito, de Agustín.

Sé que cuando era niña era hartante, rompía todo (pero no queriendo), era celosa, era llorona o competitiva. Pero apesar de todo, fuí alegre. Fuí fuerte... fuí atenta con ustedes.

Las veces que venían mis primos, me sentía sola. A veces hablaban entre ellos, ellos hacían pijamadas mientras yo me iba de nuevo a mí infierno.

Lo bueno de esa infancia... Fué que me mantuve alegre lo más que podía, bailaba clásico dándome paso para expresar lo que tuve que contener.

Hoy no cené bien que digamos. No tengo ganas de nada. Tengo miedo de volver a ser una Agostina fría y sin corazón de vuelta.

Hoy también casi tiro todo. Casi meto mí cabeza en el plato de sopa. Casi estrello el vaso al piso.

Me lo tomo a la ligera a veces estás situaciones, porque confío en ustedes.
Porque sé que deben estar pasando algo parecido.

Pero ahora mismo estoy llorando.

Perdono a todos los que me hicieron mal.
Principalmente a mí papá
A mí mamá.
Aunque mí mamá está ganando mucho odio de mí parte... Pero la sigo queriendo que ahora mismo me da ganas de abrazarla... Pero no puedo, estoy llorando y me va a regañar.

Quiero morir...
A veces pienso que ya es mí hora.
Ya ayudé...
Ya protegí a mí mamá...
Ya cuidé a mí hermana...
Ya me cansé de aprender, de caminar aunque sea lento, de sentir impotencia y de hacer la puta tarea. Sí, la tarea también me pone tarada.

Cómo sea.

Creo que caminaré un poco más. Solo un poco más ¿No?