❄Final❄

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ADVERTENCIA ⚠

Cero hate hacia este bebé.
Comentarios ofensivos serán eliminados.

Conozcan y disfruten conmigo mis pensamientos y fantasías tras la escritura, pero no rompan esa fina línea entre la realidad y la ficción. 💖

Ya se que dije que no adentraría a ningún personaje (conocido para ustedes en la vida real) pero es que, este hermoso chico me tentó desde el principio, por ello les pido respeto. Es ficción, nada más.

Dicho esto... Disfruten!





























- Lim Jaebeom - el detective que su padre había contratado meses atrás leía unos papeles en sus manos. Jimin sentado sobre la cama de la habitación de aburridas blancas paredes, fruncía el ceño mientras le escuchaba hablar. Incómodo, no hubiese querido despegarse un sólo instante de su novio si no fuese porque debía ser atendido a sus leves raspones y las preguntas de los policías y del sujeto frente a él que, parecían no poder aguardar.
- ¿Lo conoces? - le mostró una foto que sacó de entre los papeles.

Había estado sentado en la fría cama todo el rato que llevó esperando al hombre luego de que colocaran la férula en su brazo. Había resultado con una leve fractura y Jimin maldijo el momento en que estuvo sobre esa camilla mientras el médico revisaba minuciosamente su extremidad, los minutos en que tardó en realizarse la radiografía y odió a todo mundo allí, cada segundo era una odisea lejos de su chico.

Había estado de mal humor y distraído hasta que su campo auditivo había captado aquel nombre.

- Esto debe ser una puta broma - restregó su rostro con su mano libre, siseando ante el ligero dolor que los medicamentos no habían quitado por completo.
- Estoy muy estresado, podemos dejar esto para más tarde.

- Debemos estar al tanto de todo. Descubrir a fondo cuáles y por qué fueron las intenciones del sospechoso para..

- Si lo conozco - le contestó e interrumpió de mala gana, fulminando al hombre con la mirada.

- Bien, necesito saber cada detalle. Entiende por favor, sólo estoy cumpliendo con mi deber por tu bienestar.

Jimin sonrió de lado, respirando profundo luego, antes de explotar.

- Mi bienestar ¿ah? Entonces no hiciste bien tu trabajo todos estos meses en que no lograste ni tú ni tu equipo en dar con una sola pista del culpable - el hombre se mantuvo en silencio - ¿No se supone que lo tienen bajo control ahora? El culpable se encuentra inconsciente y esposado en la cama, no irá a ningún lado y doy mi palabra, puse a mis guardaespaldas en vigilancia en su habitación no vaya a ser que los ineptos que pusiste a cargo le dejen ir si despierta - se bajó de la camilla con algo de dificultad gracias a sus músculos tensos y miró al hombre desde abajo, nunca dejándose intimidar por la altura del otro.
- Mi novio está también inconsciente en otra puta habitación mientras yo estoy aquí, turbado por todo lo que sucedió y tu quieres que responda ahora tus preguntas, ¿precisamente ahora?

El hombre suspiró, guardando el bolígrafo en su mano y apagando el aparato con el que grabaría la conversión para no omitir detalles.

- Ve, pero debo interrogarlo a él también cuando despierte. Es el protocolo joven Park, lo siento.

Jimin esquivó el cuerpo contrario pasando por su lado sin mediar otra palabra más.

Salió hasta el pasillo y por más rápido que quiso caminar su propio cuerpo no respondía, dolorido por los acontecimientos de hacía tan solo horas atrás.
Unos cuantos metros de distancia y llegó hasta la habitación custodiada por un policía, quien le saludó con una reverencia a la que Jimin no puso atención y abrió la puerta tan rápido como pudo.

Le dolía el alma y la existencia ver la imagen frente a sus ojos.

Se acercó despacio, no queriendo ni resonar sus propios pasos en el suelo y llegó hasta él.

Sólo estaba dormido.

Jeongguk se había vuelto a desmayar cuando los paramédicos le subieron a la ambulancia.

"Tal vez estaba esperando que estuviera acompañado, no quiso dejarme sólo" Pensó Jimin a su lado cuando emprendieron camino al hospital.

Se tranquilizó cuando le dijeron que su pulso estaba bien, sus signos vitales normales. El estrés de la situación provocando más estragos que los golpes de la caída.

Su chico era tan fuerte.

Sin embargo Jimin no podía evitar sentir sus ojos aguarse. Ver su bonito rostro magullado, su pie izquierdo también con una férula que le dificultaría caminar correctamente por algunas semanas. Los raspones en sus brazos debido a lo rústico del asfalto.

Jimin se culpaba. Luego de escuchar ese nombre Jimin lo hacía.

Jeongguk dormía después de que le drogaran con medicamentos, dada las múltiples pequeñas heridas y golpes su cuerpo estaba más que exhausto y por única vez agradeció al doctor por ponerle a dormir por algunas horas.

Acarició con delicadeza su pelo, se veía menos brilloso por el polvo de la carretera aún opacando. Delineó sus cejas, el puente de su nariz y no quiso tocar su mejilla hinchada por miedo a lastimarle.

Suspiró.

Bajó su dedo hasta sus finos labios entre abiertos, alegrándose poquito de que no tuviese algún feo aparato conectado. Estaba allí por daños externos y no muchos. Lo agradecía, podría irse a casa en tres días como mucho.

Dejó su dedo allí, en sus labios, escondiendo su rostro cansado en el espacio de su cuello y hombro. Se sentía molido, pero no tomaría un descanso, no cuando debía cuidarlo a él.

Perdido en mil y un pensamientos, logró percibir el leve olor de su perfume, aún permanecía entre el olor a sangre y polvo de la carretera a pesar de que su cuerpo fue limpiado y su ropa reemplazada.

Jimin se relajó un poco allí, sintiéndose maravillado ante la sensación de estar seguro en su pecho aunque en ese instante fuera Jeongguk quien estaba débil.

Aspiró y soltó aire, provocando que su pecho subiera y bajara, empujando al pecho contrario y Jimin se sobresaltó cuando sintió calidez en su dedo. Alzó la vista y quiso llorar nueva vez cuando aquellos galanes ojos le miraban mientras sus labios daban un beso en la punta de su dedo.

- Hola. Eres muy bonito ¿por qué lloras?

Jeongguk sonrió cuando Jimin soltó un sollozo.

Se abrazaron con cuidado de no lastimarse, hasta que el menor cayó más en la realidad y le apartó con lentitud.

- ¿Por qué traes eso? ¿Estás bien? - estaba pálido.

- No puedo creer que estés preguntando eso cuando el que está en cama eres tú - besó sus labios con cautela.
- Estoy bien, amor, sólo fue una leve fractura.

Le enterneció en sobre manera ver como Jeongguk levantaba su mano y acariciaba el borde de los pequeños moretones en su piel.

- Estoy bien, bebé - le repitió, tomando su mano entre la suya para depositar pequeños besos en cada raspón de sus dedos.

Se habían besado mutuamente las heridas del alma y del cuerpo. Así como debió ser siempre.

- ¿Qué pasó con.. todo lo demás? - preguntó, embobado ante los actos del mayor.

- Pues.. - Jimin tomó asiento al lado de la cama, atrayendo la silla al lado, su cuerpo gritando ante los movimientos más no le prestó atención.
- Tienes un pequeña lesión allí - le señaló su propio pie, donde estaba la férula, explicándole la ubicación de sus golpes como si de un infante se tratara.
- Afortunadamente, todo lo demás fue superficial, sobrevivirás a esto pero no se si sobrevivirás a mi.

Sonrió

- Lo demás.. - Jimin continuó, luego de lograr sacar aquella bonita sonrisa que tanto amaba.
- El auto quedó hecho mierda - Jeongguk bajó la mirada y Jimin de inmediato le levantó el rostro, haciendo que volviera a mirarle.
- Ni se te ocurra pensar bobadas. Compraré otro, igual ese ya era viejo - el menor negó, sin dejar de escucharle con atención, ladeando su cabeza para estar en posición más cómoda.
- Los chicos están aquí, pero no he podido verlos - apretó sus labios y Jeongguk se tensó.

- ¿Por qué? Deja el suspenso.. - se detuvo cuando movió quizá muy brusco su cuerpo y le dolió todo.

- Tranquilo, no ha pasado nada malo - volvió a acariciar su pelo, buscando calmarle un poco.
- El detective estuvo haciéndome unas preguntas luego de que me revisaran, y cómo estabas dormido no dejaron pasar a nadie más que no fuera yo a verte, tampoco tuve chance de salir de la habitación hasta ahora - Jeongguk se relajó, más seguía sabiendo que algo le presionaba.

- Jimin..

- Conozco al supuesto culpable de todo esto - le dijo, bajando sus hombros, notándose afligido y Jeongguk se alteró. No podía, no quería que se sintiera culpable por cosas que pasaron.

Los toques en la puerta les interrumpieron, una de las enfermeras adentrándose a la habitación luego de recibir el permiso.

- Joven Park, Joven Jeongguk - les saludó amable con una reverencia.
- Es hora de su medicamento - se dirigió esta vez hacía Jeongguk y este asintió.
- ¿Lo ha tolerado bien? Se le administrará cada 6 horas y..

-¿Seis horas? ¿Qué hora es?

- Son las 6:30 de la mañana, amor - estamos aquí desde anoche - el menor abrió los ojos, sintiendo uno de ellos doler y Jimin negó, sonriendo.
- Será un calvario lograr que sanes pronto, eres muy inquieto, pareces un bebé.

- No me regañes, ya pareces mi mam.. ¡Mamá! - su rostro volvió a doler.
- ¿Ella sabe?

- Ya cálmate, te lastimarás - acarició su brazo mientras la enfermera administraba la dosis correcta en la jeringa, sonriendo por lo bajo ante la ternura de aquellos dos.
- Fue la primera persona a la que le dije a Nam que informara, mi padre ya lo sabía cuando llegamos aquí. Ella dijo que vendría temprano a la ciudad así que debe venir en camino.

- Conociéndola, estoy seguro que quiso venir en seguida.

- Me llamó, luego de hablar con Yoongi y Nam, ella me llamó - Jeongguk estaba sorprendido.
- Bueno, ellos le dieron el número de uno de los chicos que nos cuidaban y él me pasó la llamada cuando ella marcó, mi celular murió junto al auto - rascó su nuca como si aquello fuera nada.
- En fin, le dije que no había sido nada grave para no alterarla. Me dijo que cuidara de su pequeño - apretó poquito la mejilla sana y Jeongguk se ruborizó, haciendo reír bajito a su novio.

- Siento interrumpir, pero sus amigos han estado aquí toda la noche, en sala de espera - el corazón se les estrujó a ambos.

- Me gustaría que pasaran todos ¿se podría?

- Sólo pueden pasar tres personas, no se permiten más, joven Park - la mujer joven les dijo.
- Son cinco personas, les informaré la situación y ellos pueden ponerse de acuerdo en quienes vendrán primero, o si gustan, ¿llamar a alguien en específico?

¿Cinco personas?

- Bien, hágalo así, ellos podrán decidir, estoy seguro que Yoongi está durmiendo en algún asiento - la enfermera asintió y se retiró luego de cumplir su labor.

- Gracias - se escuchó por la habitación, casi con timidez y Jimin encaró nuevamente con él, sus hombros se relajaron por inercia.
- Por quedarte a cuidarme - Jeongguk dijo y juraba casi haberlo escuchado ronronear cuando acarició su rostro y él se apoyó en aquella caricia.

- No tienes ni que decirlo, estaré para ti siempre.

- Claro que debo agradecerte, mira esas ojeras.

- Ah ha, pero tu si sabes como dañar el momento, Jeon.

No podía enojarse con él, no cuando él era su felicidad.

- Avísenme si estarán con sus maricadas o doy la media vuelta.

- Hola Yoongi.

Los chicos habían llegado. Yoongi tapaba sus ojos, haciendo su entrada épica.

- No me agradas pero me alegro que estés vivo, Jimin.

- También te quiero, Yoongi.

- Hubieras colgado las patas y se nos hubiera muerto el idiota aquel también.

Namjoon se golpeaba la frente, Seokjin sonreía con los brazos cruzados en su pecho.

- Bueno ¿y tú porque me faltas al respeto de esa manera? ex rubio oxigenado, copia pirata del tal Grey pero versión mini ahorca pendejos ¿ah? ¡Soy tu hyung! - volvió a decir.

- Creo que ya empezó a quererte, Minie - Jeongguk por fin dijo, y luchaba por no reír o sus golpes dolerían como el demonio.

- Es que estás igual de enano que yo, no me apetece darte aires de superioridad.

- Vayan a darse amor a otro lado - Namjoon se acercó hasta la cama, revisando de pies a cabeza con la mirada a su amigo.
- ¿Cómo estás, Nochu? - dos hermosos hoyuelos se pintaron en sus mejillas.

- Sobreviviré, aunque tal vez me tire del puente más cercano si tendré que soportar a estos dos - señaló a su novio y a Yoongi, con una mueca burlona en su rostro.

- Oh amigo, yo te acompaño - chocaron palmas, cómplices mientras Yoongi rodaba los ojos y Jimin se dejaba envolver en el cálido abrazo de Seokjin.

-Estábamos muy preocupados por ustedes - dijo este último.
- Yoongi no dejaba de preguntar cuando podríamos entrar.

Eso si era una sorpresa.

- Oye no digas eso o creerán que me preocupan más de lo que está permitido.

Sin embargo, no se rehusó cuando Jimin se acercó y le abrazó.

Jeongguk y Namjoon estaban boquiabiertos.

- No saben cuanto deseé que estuvieran con nosotros - Jimin casi murmuró cuando se apartó del mayor.
- Estaba muy asustado cuando lo ví tirado allí y y-yo..

El recuerdo reciente le golpeó de repente y con la misma rapidez Yoongi y Seokjin volvieron a abrazarle, dándole la seguridad de que todo estaba bien y lo seguiría estando de allí en adelante.

Tres pasos atrás, Namjoon sonreía al mirar la escena y la reacción de Jeongguk, susurrándole un "te dije que aprenderían a llevarse" que el menor aún se le dificultaba creer.

Igual sabía, que el más gruñón de sus mejores amigos tenía un corazón puro debajo de toda esa apariencia desinteresada.

- La enfermera nos dijo que sólo podían pasar tres pero en sala de espera habían cinco, ¿Hobi hyung está ahí?

- Oh, sí, se quedó con Taehyung, dijo que pasaría más tarde a verlos.

- ¿Taehyung está aquí? -

- Si Kook, cuando se nos informó yo estaba con Nam, él llamó a Hoseok y..

- Estábamos cenando los tres - interrumpió Yoongi.
- El se ofreció a traernos a Hobi y a mi, no quiso apartarse más hasta saber de ustedes - desde lejos se podían percibir sus mejillas algo rosadas.
-Par de mocosos, por su culpa casi muero de asfixia con el puto arroz. Quería venirme luego de la cena y por poco casi me voy.

- Es una lección, te he dicho que no comas luego de las 8:30, hyung y por lo demás, aprendes a tomarle el gusto a irte también- Definitivamente, Jeongguk siempre gozaría de molestarlo.

Minutos pasaron en los que el sol terminó de presumir sus rayos.
Hablaron hasta estar más tranquilos, sabiendo que lo material se recuperaría fácil y que lo verdaderamente importante que eran sus amigos se recuperarían en algunos días más.

- Necesito decirles algo - Jimin estaba nervioso y ni siquiera entendía la verdadera razón.

Eran cosas del pasado, no tenían porque afectar su presente ¿cierto?

Jeongguk tomó su mano como primer instinto, haciéndole sentarse en la cama esta vez, dándole seguridad para que soltara lo que fuese que le estuviese incomodando.

- Es sobre.. el supuesto culpable de los atentados - los presentes dentro de la habitación se tensaron.
- El detective me dijo su nombre hace ya un rato, pero le dije que hablaríamos más tarde, tenía largo rato sin saber de Kook y quise venir primero a verlo - el aludido apretó su mano, la que no estaba lastimada y Jimin suspiró profundo antes de seguir.
- Yo.. bueno, hace unos años, luego de terminar con Ryan, m-me involucré con un chico por no sé, tres meses quizá, nunca fue algo serio, lo hice más por despecho que por algo más - los demás le escuchaban atentos, incluyendo Jeongguk quien no soltó su mano un solo instante. Jimin lo agradecía.
- Resumiré porque lo demás quizá no sea relevante - hizo una mueca, su rostro delatando su confusión.
- El fue quien me presentó al hombre con quien aprendí todo lo que sé acerca de, bueno, las artes eróticas -  no recordaba la última vez que se había avergonzado al decir aquello delante de alguien.

- ¿Es un don fetiches también?

Yoongi no se detenía incluso en temas serios. Lo que le sorprendió fue ver la sonrisa algo rota en el rostro de Jimin cuando esperó otra reacción.

- No lo era, sólo era amigo de mi maestro o eran familia no lo sé, no recuerdo, sólo.. me alejé de él cuando comencé con las prácticas hasta una noche en la que me llamó y me dijo que estaba sintiendo cosas por mi - Jeongguk dejó de mirarle leves instantes.
- Le dejé en claro que no me interesaba ese tipo de relación y luego, simplemente no lo volví a ver, ni siquiera en la cafetería donde trabajaba, desapareció hasta.. ¡Dios! no entiendo una mierda. Eso sucedió hace años, no volví a saber de él, nunca le hice daño ¿por qué querría hacer esto ahora? ¿Por qué a Jeongguk también?

- ¿Crees que intentaba también dañar a Kook? - Namjoon preguntó, tan confundido como los demás.

- Estoy seguro. Todo empezó después de conocernos y.. Me siento tan mal por esto.

- Hey, nada de eso ¿bien? Algo más debe haber - Jeongguk le tranquilizó.
- ¿Como se llama?

- Le conocíamos por JB pero su nombre completo es Lim Jaebeom.

Jeongguk tosió.

Sus moretones y raspones dolieron como si su cuerpo hubiera vuelto a impactar contra el asfalto tras el brusco movimiento.

Seokjin buscó rápidamente agua, Jimin masajeaba su cuero cabelludo en un intento de calmarle así como le hacía su madre cuando era un niño.

- Amor, tranqu...

- Una foto, ¿hay alguna foto suya? - le interrumpió luego de tomar el agua.

- El detective tiene toda su información, puedo decirle que venga - Jeongguk asintió casi desesperado y Jimin no tardó demasiado en hacerle llamar con el mismo policía de guardia en la puerta.

Tan solo pasaron pocos minutos en los que el detective llegó, los demás decidieron retirarse por privacidad antes de recibir al hombre y Jimin se sentía demasiado inquieto sin saber lo que pasaba por la mente de Jeongguk cuando miraba la foto imprimida en papel que el hombre le mostró.

- Es él.. - dijo al fin, bajando la foto hasta su regazo y mirando a la nada, luego a Jimin y este se sintió varado en la nada.

- No entiendo - y Jeongguk le atrajo de vuelta hasta la cama, a su lado.

- ¿Recuerdas la historia que te conté? La historia de esta cicatriz - señaló su mejilla, el sitio en su rostro donde había una pequeña marca y Jimin aún no lograba entender.
- Era él, el mismo que estudiaba en la escuela donde yo asistía, me molestaba cada que podía hasta ese día donde se le fue la mano y mi amigo Yugyeom le devolvió los golpes. Pero desapareció junto con sus padres luego de eso, tal como has dicho que no lo volviste a ver tú, entonces..

- Espera, creo que primero debo contarle al detective mi vínculo con él - Jimin le dijo, pero el hombre frente a ellos no parecía sorprendido ni menos.

- Debo saberlo si, pero no creo que sea tan necesario - el hombre les extendió una tableta, un video en pausa tras la pantalla.
- Deben verlo. El sospechoso ha despertado hace una hora, le he hecho unas preguntas y por seguridad, tanto su padre, joven Park, como el cuerpo de policía y yo hemos decidido que ustedes no deben acercarse, por ello verán su declaración y aceptación de culpa desde aquí.

Ambos se miraron, anonadados con lo irreal de la situación y sin titubear más, Jeongguk le dió play.

- ¿Conoces a las siguientes personas? - el detective le mostraba dos fotos, mostrando estas a la pantalla y luego al sujeto esposado sobre la cama.

- Park Jimin y.. - Jimin sintió asco al ver la retorcida sonrisa en su rostro tras pronunciar lo siguiente.
- Mi adorado Kookie.

¿Qué?

- ¿Es esto autoría directamente tuya? O existen más personas involucradas en esto.

- Dejemos las formalidades - le contestó con la misma sonrisa ladeada.
- Nadie me ayudó, de igual manera gastarán su tiempo en investigarme y se darán cuenta de que lo que digo es cierto entonces, al punto.

El detective asintió.

- ¿Por qué? ¿Cuáles son tus razones?

- ¿No puede simplemente meterme preso y ya? Esto me aburre - se removió en la cama, lastimando sus brazos con el metal. El detective se mantuvo recto en su lugar.

Algo no estaba bien, sus gestos extraños, la forma en que buscaba lastimarse tirando de las esposas.

- Odio a Jimin ¿sabe? - el detective alzó una ceja, sus manos detrás de su espalda manteniéndose calmado.
- Le declaré mi amor hace años y el hijo de puta me rechazó - se interrumpió a si mismo tras una exagerada y escandalosa risa.
- Pero no es por eso por lo que lo odio - se sentó de golpe, su gesto cambiando a uno sombrío y el detective sintió escalofríos cuando le miró.

- ¿Entonces? - se mantuvo impasible, siguiendo la corriente de la extraña y retorcida conversación.

- Jeongguk siempre fue muy despistado- se tiró de golpe para acostarse de nuevo, su lengua remojando sus labios y su mirada al techo, como si estuviese recordando para poder relatar sus recuerdos.
- Nunca se dió cuenta de que daba la vida por él.

Jimin pausó la imagen, preocupado de que aquello pudiera volver a alterar a su chico pero este le miró, dándole seguridad.

- Estoy bien - besó sus nudillos maltratados y volvió a reproducir las imágenes.

- ¿El joven Jeon alguna vez intimó de algún modo contigo?

- Era tan guapo y hace meses, cuando volví a verlo casi me acerco - le desvió la pregunta, como si estuviese hablando sólo.
- Pero estaba con él, sonreían y entendí ¿sabe?

- ¿Qué entendiste? - le preguntó, no forzándolo a ir a su ritmo sino yendo él al suyo.

- Que estaban enamorados - otra risa escandalosa, se frenó de golpe para seguir.
- Nunca si quiera hablé con mi Kookie pero siempre lo amé, nunca le pedí perdón por lo que le hice y por eso me fuí lejos. En cambio la vida es una puta, me puso a Jimin en el camino y con él si tuve el sexo más delicioso de mi vida pero me rechazó, y para completar mi miseria, años después descubro que la persona que quise estaba enamorada del chico que fue siempre mi gran amor, ¿suena ridículo verdad? Como si el karma me jugara una mala broma. - rió - Comencé a seguirlos desde ese día.

El detective asintió nuevamente, meciéndose en sus talones.
- Quisiste matarlos.

- Quise matarnos a los tres - aquello hizo que la piel del hombre se erizara.

- ¿Por qué? - mantuvo la tranquilidad, no debía alterarlo, menos cuando notaba sus manos halando cada vez con más fuerza las esposas.

- No lo sé - le dijo ahora calmado.
- No odio a Park por su rechazo, lo odio porque lo quise, y porque se enamoró de lo que debía ser mío.

Jeongguk fue quien pausó las imágenes esta vez, respirando profundo, su mente turbada tras las declaraciones.

- Lim fue diagnóstico con trastorno de identidad disociativo desde su juventud, más sus padres dicen haberlo tenido controlado, no obstante llevaban tres meses sin conocer su paradero. Se le harán nuevos estudios pues sus reacciones y comportamiento denotan pequeños episodios de psicosis, no soy experto en ello pero en mi experiencia de años, tengo la segura sospecha - suspiró antes de tomar la tableta nuevamente.
- Será trasladado a un centro de salud mental, donde se le realizarán todos los estudios pertinentes y del resultado de ellos dependerá su juicio. El juez podrá determinar si se le otorgará cumplir sentencia en la cárcel o si se le aislará a cumplir dentro de un centro de salud mental especial, con más seguridad para pacientes como él.

Jimin y Jeongguk no entendían mucho de aquello, estaban demasiado impactados por la situación, por lo que el detective prosiguió hablando.

- Quiero que sepan que están a salvo ahora, este caso será estrictamente vigilado y custodiado, de igual forma mi consejo sería que tomen vacaciones luego del juicio, no será tan alargado, tenemos las pruebas y su total declaración de culpa así que si aún se sienten algo inseguros lo cual es entendible, salgan del país hasta que las cosas se calmen, despejen la mente. Pero les doy mi palabra, el pagará por sus actos - ambos asintieron un poco más relajados ante sus palabras.
- Siento lo de esta mañana joven Park pero este es mi trabajo, como usted entenderá.

- Discúlpeme también, estaba muy preocupado y alterado con todo esto.

El hombre hizo una reverencia antes de dar la media vuelta y salir de la habitación.

- Esto parece una mala broma - Jeongguk suspiró dolorido, colocando su cabeza de vuelta en la almohada y Jimin corroboró una vez más la inmensa conexión que mantenían tras escucharle decir aquello.

- Ya pasó, bebé - se miraron, sus labios se buscaron como si fuesen metal e imán.

- Duerme un poco conmigo - dijo sobre sus labios y Jimin agradeció, necesitaba descansar un poco. No dudó en subir sus pies a la cama y acurrucarse en su pecho con cuidado.

No pudieron llevar a cabo el plan, pues una hora más tarde los padres de Jeongguk habían llegado, preocupados, y Jimin habría deseado conocerlos en persona en otras circunstancias, más, fue agradable estar allí con ellos, ver como la señora Jeon les mimaba a los dos mientras Yoongi se burlaba.

Se sentía acogedor, familiar.

Y el sentimiento fue aún más inmenso cuando sus padres llegaron luego de doce horas de vuelo,agotados pero todos su pesares yéndose lejos cuando les vieron de pie, solo con algunos raspones y el brazo en aquel artefacto.

El señor Park prometió hacer una fiesta cuando se recuperaran mientras las dos madres platicaban sobre lo lindos que sus hijos se veían juntos.

El padre de Jeongguk le sugería sobre cuales serían los mejores licores para la fiesta.

Y mientras, Jimin y Jeongguk miraban el caos que eran sus progenitores juntos pero felices al fin por la armonía que se creaba, agradeciendo a las alturas de que los ánimos se calmaran.

Si, porque primero debieron soportar la ira de los Jeon al ver a ambos chicos en ese estado y como si fuera poco al final del día el señor Park casi puso patas arriba el hospital.

Fue un alivio que todo terminara en risas y debates sobre el mejor vodka.

Las dos familias se llevarían bien.
















































- ¡Espera! baja con cuidado, aún debes cuidar tu pie - Jimin se estresaba cada media hora pues como ya sabía, su novio era muy inquieto.

- Odio estas muletas - puchereó - Ya no me duele, me quiero quitar esta cosa.

- Jeongguk, es tu primer día fuera del hospital, ¿cómo pretendes quitarte la férula tan pronto? - Hoseok le ayudaba a bajar del auto, sosteniéndole las muletas mientras Taehyung aparcaba el auto y Jimin sostenía en su hombro no lastimado el bolso con la ropa y utensilios personales que habían utilizado durante los tres días de su estadía en el hospital.

- Bien - tomó las muletas, acomodándolas correctamente para apoyarse en ellas.
- Necesito un baño urgente, huelo a medicinas y enfermedad.

- Pero te duchaste antes de salir, amor - Jimin vigilaba cada pequeño paso que daba.

- ¡Incluso el agua olía a analgésicos!

Jimin negó, Hoseok reía. Así habían sido los últimos días, soportando sus dramas infantiles y sus quejas por no dejarle parar de la cama.

Jimin sólo se despegó de su lado el día anterior, tardó cuatro horas exactas en las que Jeongguk se quedó con su padre y Namjoon.

Sus madres había ido con Jimin, con la excusa de que debían comprar algunos medicamentos difíciles de conseguir.
Yoongi no había ido en todo el día. El padre de Jimin sólo había ido en la mañana al hospital.
Taehyung y Hoseok les acompañaron algunas horas y cuando recibieron una llamada se fueron de inmediato.
Seokjin tampoco había aparecido y la hermana de Jimin había estado algo nerviosa el rato en que conversó con él.

Todo estaba muy extraño.

-Es una suerte que el ascensor funcione, tienes dicha Kook - Hoseok dijo y a Jeongguk le pareció aún más extraño que entre su hyung y su novio compartieran una ligera mirada y una discreta sonrisa.

- ¿Qué pasa? - volvieron a mirarse, más serios esta vez.

- ¿De qué me perdí? - Taehyung les alcanzó antes de entrar al elevador.

- ¿Tú sabes algo? - el mayor mordió sus labios y Jeongguk entre cerró los ojos
- Si sabes. Ya díganme que sucede chicos.

Y sus palabras se cortaron cuando el elevador de su edificio abrió sus puertas y este estaba repleto de rosas blancas y rojas colgadas en elegantes arreglos en las paredes.

Blanco y rojo, esos colores se habían vuelto especiales.

- Vamos bebé, tus preguntas serán respondidas cuando lleguemos.

No dijo alguna palabra más, impresionado y curioso por los detalles que suponía había planeado su novio en complicidad con sus amigos.

- ¿Qué.. qué es esto? - volvió a preguntar cuando estuvo en su piso y todo el pasillo hasta la puerta de su departamento estaba lleno de pétalos entre blancos y rojos.

Comenzaba a sentirse nervioso y no entendía ni siquiera el por qué.

Ninguno de los tres a su lado dijeron algo. Hoseok y Taehyung caminaron adelante dejándolos atrás.

Entraron al departamento, dejando la puerta abierta y Jimin caminó adelante dejando a Jeongguk sólo en el pasillo.

No entendía.

Caminó despacio, las muletas y su pie lastimado no le dejaban hacer mucho y casi se desmayó cuando asomó primero su rostro dentro y divisó a sus familias y amigos alli, todos con una gigante sonrisa. El pequeño departamento adornado con globos y más flores.

Jimin de rodillas en medio de la sala.

- Si me dices que no, seré tu pequeño acosador por la vida entera hasta conseguir que aceptes.

- Jimin.. - su voz temblaba.

- Cásate conmigo, Jeon Jeongguk.

Escuchó a lo lejos el chillido emocionado de su madre y Seokjin.
El señor Park y su padre con con una botella de Champaña cada uno.

Entonces, esto era.

Luego de lo que habían vivido, Jimin no planeaba desperdiciar un mísero segundo más sin unirse a él.

- Se va a desmayar - se burló Yoongi, con el celular en manos capturando el momento.

El golpe seco de la palma de la señora Jeon en la frente de Yoongi haciendo reír a los demás.

Jimin comenzaba a sudar, su mano extendida y en ella un hermoso anillo.

Uno igual al que él ya traía adornando su dedo pues más que un anillo de compromiso sería uno promesa más que ambos cargarían.

- Amor, yo..

- Sí.

- ¿Si?

- Acepto. Aceptaré todo lo que venga de tí, siempre.

Las mejillas de Jimin casi dolieron tras la sonrisa, se puso sobre sus pies tan rápido y le abrazó con tal emoción que dolió, pero ninguno de los dos prestaron atención.

Se fundieron en un beso, allí, delante de las personas más importantes de sus vidas.

Yoongi, Hoseok y Taehyung sujetaron sus manos.

Seokjin y Namjoon se fundieron en un abrazo.

Los señores Jeon imitaron la joven pareja y buscaron también el calor de sus labios.

Yongsun lloraba mientras grababa el lindo momento. Contenta, por poder ver la felicidad nuevamente en su hermano, siempre sería su pequeño.

El señor Park y su ex esposa chocaron sus puños, como buenos amigos.

El ambiente ligero les embriagaba a todos.

Jimin no volvió a sentir que faltaba calidez en sus días luego de conocerlo a él. Por más que quiso negarlo.

- Ya no eres el pequeño monstruo de hielo. No te conozco, Park - Jeongguk bromeó sobre sus labios luego del beso, su frente apoyada en la suya.

- Este soy el verdadero yo. Tu le diste vida a lo que yo creía vida pero no era - cerró sus ojos para sentir su respirando caliente. Quería permanecer ahí, con él, por mucho, por siempre.

- No cambiaría lo que viví contigo, nunca te arrepientas de lo que pasó, de lo que pasamos - depositó un beso en su frente, dejándole claro que los errores sólo fueron aprendizaje.

Jimin aún sonreía.

- Entonces, Park Jeongguk se escucha hermoso ¿cierto?

- ¿Por qué? Yo soy más alto que tú.

- ¡Eso no tiene sentido!, tonto - estalló en carcajadas ante su carita risueña.

Jeongguk era hermoso a sus ojos, siempre lo fue.

- Eso quiere decir que mi apellido debe dominar.

- Pero soy mayor - fingió un tierno puchero.

Jimin era hermoso ante los suyos, siempre también lo fue.

- Jeon Jimin.

- Park Jeongguk.

- ¿En Corea está permitido el matrimonio con roce de espadas? Digo, eso es más importante ahora.

- ¡Yoongi!

- Ya no se puede opinar.. Bueno ya me callo.

Esos eran los momentos que lucharían por vivir de allí en adelante.

Siempre juntos.

Porque se encerró en lo imposible y cuando menos lo esperó, el fuego de un alma inocente llenó de calor su helado corazón. Aquel verano golpeó su solitario invierno y su sol abrazó al fin su alma fría.








Fin✨











¿Y si les digo que aún falta el epílogo y un capítulo extra? 💖

Les daré más amor, ¡así que no estén tristes!

Gracias por llegar hasta aquí.
Disfruté mucho compartir esta bonita, loca y pervertida experiencia con ustedes ✨

Esperen los capítulos extras. Besos 💋 y si extrañarán a estos dos tanto como yo, les invito a leer mi nueva historia " Activo... ¿Tú? " disponible en mi perfil.

💕Denle mucho amor a los bebés siempre 💕



¡Los amo!

Denme amor, porque este capítulo se llevó 5,500 palabras, siendo el más largo de todos, hahaha.

See u soon 💜








❄BigBabe_ Jeon

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