2013

-¿verdad o reto? -me preguntó Chloe emocionada-

Era una noche del mes de Julio, terminaba otro aburrido día de vacaciones de verano, pero al menos haría pijamada con mi prima.

Estábamos sentadas sobre mi cama, ambas con la pijama puesta, y para pasar el tiempo a Chloe se le ocurrió empezar con aquel juego.

Había tanto que contar sobre el colegio, y creo que era la forma de entrar en confianza con ella.

-verdad -contesté con indiferencia-

-¿te gusta el niño nuevo? -sabía que Chloe querría saber eso-

Recordé a ese chico pelinegro que llegó hace unos meses, era demasiado tímido, si era posible no hablaba durante todo el día, a muchas chicas de mi aula les había parecido atractivo, y es que realmente lo es, pero me limité a contestar:

-no, no le conozco

-dicen que es muy lindo -Chloe sonrió-

-pues sí, JungKook es lindo -dije mientras hacía una mueca- ¿verdad o reto? -decidí continuar con el juego-

-verdad -contestó rápidamente-

-¿dejarías que Caleb tuviera novia? -intenté no reírme, sabía que era una persona extremadamente celosa con su hermano gemelo, y solo quería molestarle-

-ahora no -logré mi cometido, ella simplemente desvió la mirada haciendo su ceño fruncido, pensó unos segundos y después volvió a su postura normal- ¿verdad o reto?

-verdad -al parecer nuestra noche se iría en una sola respuesta-

-¿te gusta Tae?

No hice gesto alguno, pero sabía que me había devuelto la pregunta que yo le hice, con tal de molestarme igualmente, pero no lo logró, sirvió más para que pudiera expresar mis sentimientos.

-sí -susurré-

Esperaba alguna respuesta eufórica por parte de mi prima, un gritó o reacción acelerada, pero por el contrario se acercó más a mi y habló en el mismo tono que yo:

-me estás mintiendo -no creyó en mis palabras-

-es en serio -insistí- ¿sabes lo que es estar enamorado?

Pregunté inocentemente, esperaba que ella me diera la respuesta correcta, pues al ser un año mayor que yo me hacía pensar que ya había experimentado el amor, pero me equivoqué.

-¡hay un test en la nueva revista! -gritó, y corrió rápidamente hacia su maleta que se encontraba alado de la puerta- ¿un lápiz?

-en mi escritorio

Lo señalé, a lo que ella tomó el objeto y regresó a su lugar con la revista en mano, buscó la página indicada y comenzó a hacerme las preguntas:

-del uno al diez, ¿qué tanto piensas en ese chico? -solo miraba la revista, lo cual me ayudó a sentirme menos incomoda-

-nueve -intenté ser honesta-

-¿con cuanta frecuencia lo sueñas?

Esa pregunta me mantuvo en silencio por unos segundos, pues no le había soñado, y eso me hizo sentir mal.

-cero

Pero mi prima solo se limitó a anotar y continuar preguntando:

-cuando habla, ¿qué tanto te interesa lo que dice?

Realmente no mantenía muchas conversaciones con TaeHyung, desde su promesa se mantiene estudiando con mi padre, ambos encerrados en la vieja oficina del abuelo de Madame Marie, aun así le escuchaba atentamente en las cenas cuando nos contaba su día.

-diez

-¿qué tan nerviosa te pones al estar muy cerca de esa persona?

Eso pasaba todas las noches, TaeHyung siempre me da un abrazo de despedida antes de dormir, desde niños, jamás ha faltado su lindo gesto.

-diez

-última pregunta, ¿qué tan feliz te sientes al pensar en él?

No lo había pensado, desde pequeños TaeHyung siempre se preocupó por mi, no me dejaba sentirme triste, apesar de estar demasiado ocupado con si mismo, no dejaba de preguntarme "¿estás bien?", "¿cómo te sientes?", "¿necesitas algo?", por lo cual relacionaba la felicidad con él.

-diez -y por fin habíamos terminado-

-ahora debo sumar...

Fue interrumpida por el sonido de mi puerta, Caleb la había azotado contra la pared, lo que hizo que ambas diéramos un pequeño brinco del susto.

-¡TaeHyung fue aceptado en la universidad! -gritó-

Al escuchar esas palabras sonreí, no pude evitar emocionarme tanto por él, todo su esfuerzo valió la pena.

Dejé a Chloe y corrí hacia el pasillo donde estaban todos los cuartos, TaeHyung le mostraba a Madame Marie la pantalla de su teléfono, noté que mis padres recién salian de su habitación, y Tae se veía extremadamente feliz.

-¿y bien? -mi padre preguntó-

-¡me aceptaron! -contestó Tae-

-estoy muy orgullosa -mi abuela se acercó y le abrazó-

TaeHyung era demasiado alto, al igual que mi padre, por lo que Madame Marie quedaba a la altura de su pecho.

-¡felicidades! -gritó Chloe mientras salía de mi habitación-

-gracias -aun mantenía su sonrisa- ¿no me vas a abrazar? -preguntó mientras me miraba-

Volteé rápidamente para ver a mi prima, ella solo asintió, dándome a entender que le hiciera caso.

Caminé hacia TaeHyung y mi abuela, me uní a su lindo abrazo, yo también quedaba a la altura de su pecho, podía escuchar los acelerados latidos de su corazón, seguramente era por aquella emoción que le llenaba.

-ustedes tres también deben seguir su ejemplo -escuché a mi padre, pero todos le ignoramos, esa sería una de las primeras frases que nos dedicarían para presionarnos, y también a TaeHyung-

-creo que deberíamos volver a dormir -dijo Tae mientras nos soltaba- mucha emoción por hoy, ¿no lo creen?

-para nada, disfruta tu momento -mi madre contestó-

-quiero descansar -confesó-

-esto continuará mañana -Madame Marie habló- descansen todos

Nadie dijo más, nos limitamos a volver a nuestras habitaciones, escuché como dos puertas se cerraban, cuando yo estaba a punto de ingresar a mi cuarto, TaeHyung me tomó del brazo, haciendo que me detuviera.

-faltó nuestro abrazo -sus palabras me hicieron sonreír inconscientemente, me sentía un poco apenada pues seguramente mis mejillas se habían puesto rojas, así que rápidamente le abracé, escondiendo mi rostro en su pecho.

Ese momento me envolvió de paz, era como si el tiempo se detuviera, nada ni nadie existía al rededor, era algo casi inexplicable, y sin necesidad del tonto test, o alguna otra locura, supe que estaba enamorada, porque aunque fuera mi primera vez experimentado todo eso, algo en mi me decía que no me volvería a pasar con alguien más.

-no puedo creer que lo logré -susurró, haciéndome salir de mis pensamientos-

-yo estaba confiada en que así sería -confesé-

-te prometo que daré lo mejor, quiero cuidarte siempre

Sentía que podía explotar de amor en aquel momento, pero de repente me llegó un pensamiento que me hizo desanimarme, ¿qué tipo de amor siente por mi?.

Toda la vida nos recalcaron que somos amigos, pero TaeHyung había podido desarrollar un amor familiar conmigo, y eso haría imposible una oportunidad con él, ¿cómo podía asegurarme que sentíamos lo mismo?.

-te dejaré dormir, ¡Caleb! ¡vámonos! -gritó mientras me soltaba-

Evité mirarlo, solo di media vuelta y volví a mi habitación, Caleb cruzó conmigo, y salió mientras cerraba la puerta.

-se ven hermosos juntos -dijo Chloe mientras sonreía-

-¿quieres ver alguna película? -intenté cambiar de tema-

-claro, pero antes... -miró la revista- tienes treintena y nueve puntos, ¡estás enamorada! -volvió su emoción-

-gracias, ¿qué película? -me mostré fría-

Esa noche no quería hablar más de mis pensamientos, Chloe pareció entenderlo.

-prefiero ver los Simpson

Solo encendí mi televisor, tomé el control remoto y me dediqué a buscar el canal.

Después todo fue silencio entre las dos.

●●●

Para la suerte de Chloe se transmitió "Los Simpson: La película", ella la miraba atentamente, mientras yo hacía el esfuerzo por acompañarla, pues mis ojos comenzaban a pesar.

Observábamos la escena donde Marge había abandonado a Homero, le dejaba un mensaje en una cinta y se comenzó a ver su boda junto a una hermosa melodía.

"Why do birds suddenly appear
Every time you are near?
Just like me, they long to be
Close to you"

Mientras la canción se escuchaba, acompañada de diálogos de Homero, yo comenzaba a quedarme dormida.

Ahí comenzó mi primer sueño con TaeHyung, en mi siguiente vida.

Estaba en un auditorio, o eso parecía, había muchas personas adelante de mí saliendo, me di cuenta que sostenía una vieja cámara en mis manos, la observé unos momentos, pero alguien había gritado, captando mi atención.

-¡oye! ¡tu!

Pude sentir tensión sobre mi cuerpo, volteé rápidamente y ahí se encontraba TaeHyung en la esquina de un gran escenario, él vestía totalmente de negro, y había más personas a su alrededor, pero no reconocía sus rostros.

Me acerqué rápidamente a él, Tae se sentó, para poder estar lo más cerca de mi, nos separaba un espacio entre el escenario y una valla.

Intenté hablar, pero no podía, era como si algo más me controlara, así que él tuvo que continuar.

-hola, ¿cómo te llamas? -preguntó con aquella hermosa sonrisa sobre su rostro-

Estaba a punto de responderle, pero todo a mi alrededor comenzaba a desaparecer, lo cubría un destello dorado, hasta que llegó a Tae, que se iba poco a poco.

Ahí abrí los ojos, por alguna extraña razón estaba respirando demasiado rápido, como si hubiera tenido una pesadilla, miré con detenimiento mi cuarto, la película continuaba, y Chloe aun la observaba.

-¿estás bien? -preguntó sin quitar su vista del televisor-

-sí -contesté mientras mi respiración se normalizaba-

Pensé unos segundos en hablar de mi sueño, pero Chloe parecía hipnotizada por el televisor, decidí continuar viendo la película, pero el recuerdo no me dejaba en paz.

¿Por qué TaeHyung estaba en un escenario?.

¿Por qué preguntaba mi nombre?.

Entre otros pensamientos inundaban mi cabeza, no tuve el valor de detenerlos, así que me seguí cuestionando hasta que sin darme cuenta quedé dormida.