— ¡Manic abreme la puta puerta!

— ¡No hasta que me des mi jodido anillo!

Scourge se repega como gusano en la puerta.

— ¡NO ERA MI INTENCIÓN ARROJARLO A LA  PECERA Y QUE TU PEZ SE ATRAGANTARA Y SE MURIERA POR ÉL!

—¿¡QUÉ!?, ¿¡SE MURIÓ MI PEZ!?

— Ups.

El verdecito se va lentamente mientras Manic llora y destruye las cosas favoritas de su amorcito.