- Te veo tranquilo - comenta Pablo colocándose a mi lado y yo me encojo de hombros restandole importancia - ¿has arreglado las cosas con Marc?, porque creo que es la primera vez que os he podido ver a los dos juntos durante la concentración y sobre todo teniendote aquí como si no pasara nada.

- Fui ayer a su habitación después de estar hablando con Tenas - explico y el sevillano me mira sorprendido - cuando apenas estaba comenzando a hablar me estaba dando cuenta de que yo volvía a ser el único que se arrastraba, así que me levante y salí de su habitación avisandole que la unica forma de hablar esto, era que estaba vez él diera algo más y que no esperara solo trabajo por mi parte.

- Bien - responde y yo lo miro dudoso - supongo, si tú te has quedado más tranquilo con eso supongo que está bien.

- Das maravillosos consejos Gavira ¿te lo había dicho alguna vez? - ironizo y ambos nos miramos unos segundos antes de empezar a reir - estoy tranquilo por el simple hecho de que ahora le toca a él demostrar si de verdad quiere que hablemos todo y lo volvamos a dejar todo como minimo como lo teníamos antes o quiere hacerse el súper capitán invencible y dejar nuestra amistad a un lado por lo menos durante una temporada.

- Está esperando renovación ¿no? - pregunta y yo asiento con mi cabeza - tal vez quiera concentrarse en eso primero, y así poder planear lo demás con tranquilidad, piensa que a lo mejor no le sale rentable centrarse en arreglar vuestra relación cuando le quedan una temporada en el equipo, y puede tambien que su súper reacción, mega exagerada después de perder el clásico cuando os estabáis jugando un ascenso venga provocada por el miedo de no conseguir esa renovación o ese contrato que realmente le valga la pena.

- ¿Y esa pedazo de defensa que te acabas de marcar a su favor que es?, que parece que tu amigo es él no yo - reprocho y el 6 me mira divertido negando con su cabeza - yo tambien actue con miedo y al único al que le he hecho daño ha sido a mi mismo así que ahora mismo la verdad es que no me sirve de mucha escusa.

-  No lo estaba defendiendo idiota - contesta antes de dar un golpe amistoso a mi hombro y yo ruedo los ojos - mientras sigas con problemas amorosos soy el cuerdo de la amistad así que debo darte la otra versión de la vida para que no pienses que el dramatismo solo se ceba contigo y deja a los demás viviendo felices en una vida de en sueño.

- ¿Lo tuyo desde que estás con el catalán que está siendo? - interrogo sorprendido - normal que tu hermana te lo quiera pegar con pegamento, has madurado en dos meses de relación lo que no has hecho en toda tu vida casi.

- Pero serás - se queja intentando golpearme y yo río mientras le esquivo - ven aquí Garrido.

- Ven tú a por mi Gavira.