Jimin seguía llorando y Jungkook ya no sabía que hacer, hace más de una hora que su omega seguía llorando, Jungkook lo abrazó.

—Cariño ya. —le acarició la espalda—. Lo que ellas digan no me importa.

—Ellas tienen razón en una parte Jungkook. —se alejó un poco—. Yo.. —dejó salir un suspiro largo—. Perdí mi virginidad a los diecisiete, con un alfa que me juro ser mi destinado. —miró sus manos nervioso—. El era dulce y gentil conmigo e incluso para nuestra primera vez, se cuidó bastante, dijo qué ambos éramos jóvenes para tener un cachorro.

—Jimin... —susurró Jungkook.

—Íbamos en lo mejor de nuestra relación, hasta que una hermosa chica omega apareció. —sonrió con pesadez—. Ella era su destinada. —miró por un momento al pelinegro—. Aunque se disculpó conmigo... me sentí sucio y usado.

—¿Entonces lo de los alfas ricos es verdad? —preguntó el alfa.

—Bueno. —suspiró—. Muchos alfas comenzaron a decirme que eran mis destinados solo para dormir conmigo y luego burlarse de mí. —acarició su vientre—. La mayoría que iba detrás de mí eran alfas con dinero. En ese tiempo mi familia pasaba por problemas económicos muy graves, es por eso que muchos hablan que yo estaba con alfas ricos con dinero. —le tomó la mano a Jungkook y lo miró fijamente a los ojos-. Pero debes saber que eso nunca paso.

—Solo eran rumores. —dijo Jungkook.

—Admito que sí pasé algunos de mis celos con mi mejor amigo, pero era al único que le sentí confianza luego de estar sumamente dolido. —tocó su cuello—. Hubo un tiempo en el cual mis padres me pusieron el collar para evitar ser marcado por un alfa. Cuando me hablaste en el super dudé si acercarme o no, pues muchos alfas con los que estuve fingían ser tiernos para llevarme a la cama y luego deshacerme como basura, pero luego de ver que esas no eran tus intenciones me acerque a ti.

—Tenias miedo a volver a salir lastimado. —Jungkook lo abrazó con fuerza—. Jimin, tanto mi lobo como yo te amamos, y se que dices la verdad, mi lobo me lo dice y yo te juro por nuestro amor y por lo más valioso que vamos a tener, que es nuestro cachorro, que ya no estarás nunca más solo. —le besó la frente—. Perdón por llegar tarde a tu vida Jimin.

Jimin no dijo nada, solo se dispuso a abrazar al alfa el cual le susurraba cuanto lo amaba mientras le acariciaba el vientre. El omega le agradecía a la diosa Luna por haberle puesto en su vida a tan maravilloso alfa como lo era Jeon Jungkook.