Gran Plaza del Pueblo de los Monjes, 11:36 A.M.

-¿Es esto todo lo que tienen?- Pregunta Jin con cierto tono de desilusión en su voz. -Veo que aun les falta mucho por mejorar si desean cumplir sus objetivos...-

-Grrr... ¡T-tu lo pediste, anciano!- Exclamó Gold aun sin perder la sonrisa en su rostro. -Typhlosion, llegó el momento.-

-¿Gold, estás seguro de esto? Pregunta Silver al saber a la perfección lo que iba a hacer el de Pueblo New Bark. -Cuando entrenamos apenas si pudiste-...

-Creeme, lo se Pero es necesario. Esta situación lo amerita si es que queremos tener al menos una pequeña oportunidad de ganar.-

Luego de todo lo dicho por su entrenador, Typhlosion empezó a rugir con furia. Ahora, de su espalda poco a poco se comenzaron a generar llamas de color azul incandescentes, las cuales cubrieron por completo el cuerpo del pokémon de fuego, cosa que terminó por asombrar de sobremanera a todos los monjes que miraban el combate.

Un prolongado y abrumador silencio se hizo presente a lo largo y ancho de la gran plaza debido al inesperado y repentino cambio en el color del fuego del Pokemon de Gold. Muchos de los monjes presentes se quedaron perplejos ante lo sucedido y varios otros no le daban crédito a lo que veían sus ojos.

-¿Qué es eso?- Pregunta tanto atónito como sorprendido uno de los monjes que observaba la batalla a un lado de Crystal y Zuki. -¿F-fuego de color azul?-

-Jamás había visto algo como esto en un pokémon de su especie.- Manifiesta otro perplejo monje al estar parpadeando repetidas veces en clara señal de incredulidad. -El fuego de ese Typhlosion es... azul. ¿C-como es eso posible?-

-La razón es bastante más sencilla de lo que parece.- Indicó rápidamente Crystal, quien involuntariamente aplicó un cierto aire de grandeza en su voz. -El cambio en el color del fuego se debe a-....

-¡NO ES MOMENTO PARA QUE LO EXPLIQUES!- Interrumpe Zuki con molestia y al utilizar su mano derecha para taparle la boca a su compañera. -Por el momento solo disfruten de la batalla. ¿De acuerdo?-

-Realmente muy interesante, Gold.- Señala Jin ahora sonriendo y peinando cuidadosamente su larga y grisácea barba con la punta de sus dedos. -Puede sentir en tu corazón y en el de Typhlosion una fuerte conexión que sobrepasa con creces a la de los entrenadores comunes. Te felicito por conseguir algo como eso.-

-¿Una conexión que sobrepasa a los entrenadores comunes?- Repite Silver con curiosidad y levantando una de sus cejas ante lo dicho por el monje. -¿A que se refiere con-...?-

-Typhlosion, cuando te de la señal utiliza Flame Wheel (Rueda de fuego).- Vociferó súbitamente Gold.

-Hmmm... Pero de nada vale una conexión tan buena, si eres tan impulsivo.- Aclaró Jin con seriedad. -Medicham, prepárate para contraatacar cuando Typhlosion se acerque.-

-¿Qué rayos crees que estás haciendo?- Preguntó agresivamente Silver al escuchar y ver cómo Gold anunciaba tan despreocupadamente su próximo ataque. -Atacar de frente no creo que-...

-Solo confia en mi.- Propuso enérgicamente el de New Bark, quien aún mantenía su sonrisa. -Se lo que estoy haciendo. Pero para esto necesito de tu ayuda.-

-Tch... Detesto como no tienes idea cuando tienes ese estúpido brillo en tus ojos.-

Ante lo dicho por Silver, Gold terminó por inclinar su cabeza y después observó al pelirrojo con desconcierto. -¿De qué rayos estás hablando, Silver?- Pregunta Gold. -¿Qué brillo?-

-Desde la primera vez que nos vimos en Ciudad Cherrygrove, note como siempre que se te ocurre un plan te brillan los ojos.-

-Y-yo no tenía idea de eso...-

-Olvida eso por el momento y dime cual es el brillante plan que se te ocurrió. No tenemos tiempo que perder.-

-Uhhh... Solo necesito que le ordenes a Feraligatr que utilice Hydro Pump (Hydro bomba) a toda potencia contra medicham cuando te de la señal.- Informa en voz baja Gold. -Yo me encargare del resto.-

-Pero ya intentamos algo similar hace un rato y no funciono del todo bien.-

-Hehehe, pero esta vez funcionara.- Aseguro el de oscura cabellera con confianza. -Te garantizo que te servire a ese Medicham en bandeja de plata.-

-Tch... Solo espero que sepas lo que estás haciendo.- Murmura Silver al exhalar con molestia. -Nuestra victoria depende de esto...-

-¡Typhlosion, ahora! Utiliza Flame Wheel (Rueda de Fuego) y acaba con Medicham.-

-Hmmm... Medicham ya sabes que hacer.- Manifiesta serenamente Jin al escuchar a Gold. -Contraataca cuando se acerque lo suficiente.-

Milésimas de segundo después de escuchar la orden de su entrenador, Medicham con notable tranquilidad en sus ojos, adoptó una posición defensiva en espera de que Typhlosion se acercara lo suficiente para contraatacar.

Por su parte, Typhlosion dio un pequeño brinco y luego se dispuso a correr en línea recta para atacar a Medicham, tal cómo le indicó su entrenador. Por otro lado, tanto Silver como Feraligatr se limitaron solo a observaban con impaciencia lo que ocurría frente a ellos y en espera de la señal de Gold para poder volver a participar en la batalla.

-¡Medicham, Psycho Cut (Psico Corte).-

-Eso es justo lo que quería que hicieras. Typhlosion, Quick Attack (Ataque rápido).- Ordena Gold al ver que su pokemon estaba a escasos metros del rango de ataque de Medicham. -Terminemos con esto.-

-¿Con que un ataque doble?- Comenta el anciano monje con asombro por la tan atrevida apuesta de Gold. -Medicham concéntrate y no pierdas ni por un segundo de vista a ese Typhlosion.-

Sin otorgarle algún tiempo para reaccionar, Typhlosion desapareció cómo por arte de magia de la vista de todos gracias a su prodigiosa velocidad. Posteriormente y en un abrir y cerrar de ojos, el pokémon de fuego volvió a aparecer, pero esta vez a espaldas de su oponente, quien al no poder reaccionar a tiempo, fue impactado y luego impulsado violentamente en dirección a dónde se encontraba Feraligatr.

-¡AHORA!- Exclamó el de New Bark. -¡Es todo tuyo, Silver!-

-¿Así que a esto te referias con servirlo en bandeja de plata?- Pregunta retóricamente Silver, para entonces sonreír ampliamente. -Ya lo escuchaste, Feraligatr. Utiliza Hydro Pump (Hydro Bomba) a toda potencia y terminemos esta batalla de una vez por todas.-

Aprovechando la enorme oportunidad de oro que le otorgaron Gold y Typhlosion, Feraligatr escupió un gigantesco chorro de agua de alta presión el cual impactó en su totalidad en Medicham. Inmediatamente después de esto y ante la atenta mirada de todos los presentes, el pokémon de Jin se estrelló contra un pequeño árbol cercano a la plaza, lo que provocó que el mismo se hiciera añicos debido a la fuerza con la que Medicham fue atacado. Ahora, una pequeña capa de polvo y aserrín cubría el sitio en dónde se había estrellado Medicham.

Una infinidad de murmullos y preguntas empezaron a brotar por toda la plaza debido a lo sucedido. Gold y Silver se miraron fugazmente el uno al otro tanto sorprendidos como satisfechos por el increíble resultado de sus ataques en combinación.

-¿Nuestro líder fue... derrotado?- Se escuchó qué preguntó con cierto temor uno de los monjes. -¿Quienes son esos niños?-

-El líder no puede perder de esa forma.- Se escucha decir a otro monje. -Me rehúso a creer que unos simples niños puedan vencer a nuestro líder tan fácilmente.-

-¿Ellos ganaron, verdad?- Pregunta nerviosamente Zuki, mientras que miraba de reojo a Crystal. -Dime por favor que ellos ganaron...-

De manera lenta, Crystal terminó por negar con su cabeza. -No tengo idea.- Replicó la de coletas al cruzarse de brazos. -Me gustaría darte una respuesta, pero tengo un muy mal presentimiento de todo esto...

-Hohohoho... Felicidades jóvenes entrenadores.- Vocifera Jin, instantes antes de empezar a aplaudir lenta y sonoramente, cosa que provocó automáticamente el silencio de todos y cada uno de los monjes que murmuraban alrededor de la plaza. -El trabajo en equipo que demostraron fue realmente sorprendente y debo confesar que jamás me espere algo como esto. Pero por desgracia no es suficiente.-

-¿No es... suficiente?- Repite Gold. -¿Que rayos quiere decirnos con eso?-

-Medicham, High Jump Kick (Patada de salto alto).-

-¿EHHHH?-

-¡MALDICIÓN... FERALIGATR Y TYPHLOSION, SEPARENSE!- Ordenó Silver de un desesperado grito, cuando esté notó vagamente cómo desde dentro de la capa de humo el pokémon de Jin se incorporaba para atacarlos.

Sin embargo y cómo si de un relámpago se tratara, Medicham en un rápido y único movimiento le propinó una brutal patada a Typhlosion en su estómago, cosa que dejó automáticamente fuera de combate al pokémon de Gold. Milésimas de segundo después y aún en la misma acción, Medicham, gracias al impulso que tomó de su primer ataque, salto en dirección a Feraligatr y lo derrotó también al impactar una mortífera patada similar a la que había conectado en Typhlosion.

Una cálida oleada de aplausos y silbidos se empezó propagar rápidamente, como el fuego dentro de un viejo bosque, entre los monjes que estaban en la plaza. Muchos de ellos aplaudían la gran victoria de su líder. Pero también varios otros aplaudían debido al increíble esfuerzo que demostraron Gold y Silver en batalla.

-Que suerte tenemos.- Comenta con mucha alegría uno de los monjes. -No todos los días podemos ver en acción a nuestro líder y mucho menos verlo batallar dos (2) veces en menos de una semana.-

-Estos niños de hoy en dia si que son fuerte.- Se escucha decir a otro monje mientras se alejaba de la plaza para volver a sus quehaceres. -Tienen un muy buen futuro por delante...-

-¿Se encuentran bien?- Pregunta nerviosamente Crystal al acercarse junto a Zuki a donde estaban Gold y Silver.

-Creo que estaré bien.- Replica Gold con visible desilusión, a la vez que esté regresaba a su Typhlosion para que descansara un poco. -Solo que me cuesta trabajo asimilar que el pokémon de Jin nos derroto a ambos con un solo ataque. Osea, era obvia la diferencia de niveles entre nuestros pokémon. Pero jamás pensé que la batalla acabaría de este modo.-

-No te deprimas por eso, Gold.- Argumento Zuki. -Lo hicieron muy bien a pesar de pelear contra un oponente muchas veces más fuerte que ustedes. No tienen nada porqué avergonzarse.-

-Tch... Perdimos porque bajamos la guardia cuando pensamos que lo habíamos derrotado.- Reconoce Silver con resignación al también regresar a Feraligatr a su pokebola. -Nuestro error fue nuestro estúpido exceso de confianza.-

-Me alegra mucho que sepan y reconozcan cuál fue su error.- Señaló el monje Jin, para entonces regresar a su Medicham y luego acercarse al grupo de Gold. -A pesar del resultado, debo decir que ambos pasaron con creces la última prueba de la Torre Sprout. Estoy extremadamente complacido con ustedes y también con el progreso que lograron demostrar en batalla.-

Silver respondió haciendo una pequeña y torpe reverencia ante el anciano monje. -Odio admitirlo, pero usted es realmente fuerte.- Reconoció el pelirrojo. -Muchísimo más fuerte de lo que imagine desde un principio.-

-Esperen un momento, yo tengo varias preguntas para usted.- Interviene desesperadamente Gold. -Por ejemplo-...

-Sus preguntas las responderé a su debido tiempo.- Anunció rápidamente Jin. -Existen varias cosas que deseo hablar con ustedes. Pero en privado...-

-¿Hablar con nosotros en privado?- Repite Silver al levantar una de sus cejas. -¿Es realmente esto necesario?-

Ahora, Jin replicó a lo dicho por Silver con una sonrisa. Poco después, el monje abrió otra pokebola de la que se materializó un pokémon de color negro con blanco, el cual flotaba sobre la tierra y tenía el aspecto de una robusta estatua hecha de barro.

-¡Ohhhhh... Un Claydol!- Exclamó Crystal, para luego cómo por acto reflejo sacar su Pokédex. -Este es otro pokémon originario de la región Hoenn y-...

-Claydol, Teleport (Teletransportación).- Ordena Jin, al sentarse en el suelo y luego adoptando una pose de meditación. -Por favor llévanos a casa...-

Inmediatamente después de lo dicho por Jin, el pokémon de tipo psíquico rodeo por completo el cuerpo de Gold, Silver, Crystal y Zuki en un aura de color azul oscuro. Posteriormente, el grupo empezó a levitar, mientras que ahora lentamente todo a su alrededor se empezaba a distorsionar en medio del aire hasta el punto en que todo se tornó tan negro como la noche.

-Uhhhggg... M-mi cabeza. Me siento tan... Mareado.- Exclamó Gold, al ahora estar visiblemente desorientado y aturdido. El, de manera torpe intentaba mantenerse de pie, junto a los demás, sobre lo que parecía ser una superficie hecha de madera dentro de una amplia, oscura, solitaria y espaciosa habitación. -C-cómo odio teletransportarme...-

-P-por desgracia este es uno de los varios molestos efectos secundarios de la teletransportación.- Informa débilmente Crystal, mientras qué activamente intentaba ignorar las náuseas que sentía. -Mientras más lejos se viaja, peores y más duraderos son los efectos secundarios en nosotros los humanos.-

Uhhh... C-chicos. ¿E-en dónde rayos estamos? Pregunta Zuki con nerviosismo. -¿A donde rayos nos teletransporto ese anciano? Y-yo apenas sí puedo ver aquí dentro.-

-No lo se. Pero estoy bastante seguro de que no estamos ya en el pueblo de los monjes.- Declaró suspicazmente Silver. -¿Acaso no notaron cómo la temperatura bajó de golpe? Es cómo si nosotros estuvimos bajo-...

Inesperadamente para el grupo y justo antes de que Silver pudiera terminar lo que deseaba decir, las luces dentro de la oscura habitación se encendieron de golpe. Segundos después, Jin se materializó con Claydol y también junto a un viejo cofre de color dorado con plateado.

-Bienvenidos a uno de los tantos niveles subterráneos de la Torre Sprout.- Vocifera alegremente Jin. -Lamento mucho el traerlos desde tan lejos. Pero era justo y necesario.-

Al escuchar lo dicho por Jin, Crystal rascó nerviosamente una de sus mejillas y luego intercambió una confusa mirada con Zuki. Por su parte, Silver frunció el ceño y se cruzó de brazos ante la noticia.

-¿QUE RAYOS ESTAMOS HACIENDO EN CIUDAD VIOLET?- Preguntó Gold agresivamente y de un grito. -P-por si no lo recuerda, nosotros tenemos que llegar lo más rápido posible a Ciudad Olivine para-...

-Enishi Tsubasa...-

-¿Ehh?-

-El aura que te rodeo a lo largo de nuestra batalla es idéntica al aura que irradiaba Enishi Tsubasa cuando lo conocí hace muchos años atrás...-

En ese momento, tanto Silver como Zuki y por último Crystal, fijaron sus ojos automáticamente sobre Gold, en busca de alguna explicación de cómo el monje sabía el nombre de su padre.

-¿E-Enishi Tsubasa?- Repitió lentamente Gold, para después mirar con cierta desconfianza al anciano monje. Todo esto, mientras que el corazón del joven entrenador empezaba a palpitar cada vez más y más rápido. -¿Por que ahora menciono ese nombre frente a mi?

-¿El es tu padre, cierto?-

Cómo por acto reflejo, Gold apretó sus labios y dudo en responder. El prefirió guardar silencio y evitar mirar a Jin a la cara.

-Ya deberías saber que no puedes ocultarme nada, Gold. Tanto tu corazon como tu silencio respondieron a mi pregunta.-

-¿Y que si el es el padre de Gold?- Cuestiono agresivamente la menor de las chicas kimono. -¿Acaso tiene algo de malo que lo sea?-

-Hehehe... En lo absoluto.- Proclamó Jin con una nostálgica sonrisa. -Simplemente me parece muy curioso cómo está trabajando el destino últimamente con las cosas.-

-¿Que tiene que ver el destino con que Gold sea el hijo de Enishi?- Pregunta ahora Crystal con impaciencia. -No le veo nada de curioso a eso.-

-Claro que sí es algo curioso.- Aseguró el anciano monje en tono desafiante. -Veran... Hace alrededor de veinte (20) años atrás durante uno de mis viajes y cuando aún podía ver con mis ojos, yo conocí y luego entrene a dos (2) excepcionales entrenadores pokémon que tenían un increíble talento innato para las batallas. Uno de ellos fue "El Campeón sin Corona" Enishi Tsubasa, mientras que el otro fue el fundador del Equipo Rocket, Giovanni D' Antonio...-

Gold término inconscientemente por dar un par de pasos hacia atrás hasta casi chocar contra el pelirrojo. -¿Mi padre y Giovanni fueron sus alumnos?- Repitió lentamente el de New Bark, para entonces mirar de reojo, junto a Zuki, a Silver.

-¿E-es esto cierto?- Pregunta ahora Silver con incredulidad. -¿R-realmente usted entrenó a Giovanni?-

-Es correcto, jovencito. Durante nuestra batalla de hace un rato, Gold tenía un aura muy similar a la de su padre, Enishi. Mientras que tu, Silver, tenias un aura idéntica a la que alguna vez rodeó a Giovanni antes de que el decidiera fundar el Equipo Rocket...-

-No lo entiendo... ¿Porque Silver tendría la misma aura que tuvo Giovanni en el pasado?- Cuestionó súbitamente Crystal, poco antes de fijar su mirada en Silver y luego en Jin. -¿Es acaso porque ambos fueron parte del Equipo Rocket en algún momento?-

Al instante, la pregunta de Crystal dejo y creo un incómodo silencio dentro de la habitación, mismo que perduró por varios largos segundos.

-Por desgracia, esa no es la respuesta.- Declaró Silver al negar con su cabeza y después soltando un largo suspiro. -La razón es porque Giovanni es mi... Padre.-

-¿EHHHHHHHHHHHH? ¿H-hablas en serio?-

-Se que es algo un poco difícil de creer. Pero por desgracia es la verdad...-

-P-pero... entonces tu...eres el...-

-Soy el legítimo heredero del Equipo Rocket.- Reconoció tristemente el pelirrojo. -El motivo por el que me uní a ellos fue para hacerme mucho más fuerte junto a mis pokémon y así destruirlos desde adentro en un futuro no muy lejano. Yo solo deseaba rectificar el mal que causó mi padre en el mundo.-

-Yo... lo siento mucho.- Se disculpó Crystal, a la vez que esta agachaba su cabeza y apretaba sus labios por breves instantes. -Creo que ahora empiezo a entenderte un poco más...-

-Descuida.- Manifiesta Silver al forzar una débil sonrisa. -Yo debí habértelo dicho antes...-

Segundos después, Crystal se volteo y luego miró a Gold y a Zuki con notable seriedad. -¿Ustedes ya sabían de esto, verdad?-

-Ehhh... P-pues sí.- Indicó Gold en un avergonzado tono. -Zuki y yo nos enteramos de esto antes de que dejáramos Ciudad Ecruteak.-

-¡Olviden eso por el momento!- Ordenó enérgicamente Zuki, para luego fijar su mirada en el monje. -¿Porque nos trajo a este lugar? Dudo mucho que fue solo para contarnos que entrenó a los padres de Gold y Silver...

Acto seguido, Jin abrió el viejo cofre y sacó del interior de este cinco curiosos brazaletes, los cuales tenían dos pequeñas ranuras en su superficie, y aparentemente estaban hechos de oro y plata. -Eres bastante perceptiva, jovencita.- Señaló el anciano de manera tranquila. -La verdadera razón del porque los traje hasta la Torre Sprout fue para hacerles formal entrega a todos ustedes de estos brazaletes. Con ellos, podrán megaevolucionar hasta dos de sus pokémon a la vez, si es que consiguen sus megapiedras, claro está.

-¿M-megaevolucionar hasta dos pokémon a la vez?- Repitió Silver con visible extrañeza. -¿E-en serio se puede hacer algo cómo eso?-

-¿Cómo es eso posible?- Pregunta ahora Crystal. -S-sí se supone que solo puede existir una única conexión entre entrenador y pokémon durante la megaevolución. N-no compren-...

-Los entrenadores comunes y corrientes no pueden tener más de una conexión con sus pokémon durante la megaevolución.- Aclaró Jin sin titubear y con seguridad. -Sin embargo, existen raros casos de entrenadores que han podido utilizar un equipo completo de seis pokémon megaevolucionados a la vez. Esos brazaletes fueron hechos en la lejana región de Alola y ayudan a los entrenadores a canalizar y soportar la carga física y mental de mantener hasta a dos pokémon megaevolucionados a la vez.-

-E-entiendo... ¿Pero está seguro de esto?- Preguntó Gold al mirar fijamente y con muchas dudas los brazaletes que tenía Jin entre sus manos. -Se ve que son realmente valiosos y-...

En un rápido acto y ante las miradas de los demás, Silver dio un par de pasos al frente. Luego de esto, él se acercó a Jin e inesperadamente tomó uno de los brazaletes. -Muchas gracias por el obsequio. Manifestó el pelirrojo, mientras que se lo colocaba en su muñeca izquierda. -Confío en que esté brazalete me ayudara a cumplir mis objetivos a corto plazo.-

-Quizás sí lo haga o quizás no. Desde ahora solo tu serás el responsable de lo que suceda en tu futuro inmediato.- Denunció el monje, cuando esté hizo entrega de un brazalete a Crystal, otro a Zuki y luego los dos últimos a Gold. -Pero de todas formas confío mucho en que ellos serán de utilidad para ustedes en su viaje.-

-¿Porque me dio dos brazaletes a mi?- Pregunta el de New Bark al fruncir el ceño. -N-no comprendo...-

-¿Acaso no es obvio?- Pregunta retóricamente Silver, cruzándose de brazos en el proceso. -Tch... Definitivo qué eres realmente torpe y cabeza dura cuando te lo propones.-

-¿H-huh?-

-El segundo brazalete es obviamente para la rubia psicótica que tienes por amiga.-

Ante todo lo expresado por Silver, Jin procedió a sentarse en el suelo en posicion de meditacion. -Silver esta en lo correcto, Gold.- Afirma el monje. -Cuando finalmente la encuentres y la hagas entrar en razón, entonces entrégale ese brazalete cómo un regalo de mi parte.-

-D-de acuerdo. Juro por mi honor de entrenador qué encontraré a Kelly y la haré entrar en razón.- Declaró Gold, justo antes de colocar un brazalete en su muñeca derecha y el otro guardándolo en su mochila de viaje. -Ya lo verán.-

-Hehehe, ahora que todo está en orden y ya finalmente aclaramos las cosas un poco mejor, es el momento de darles a ustedes mi último regalo.- Señaló Jin. -Prepárense.-

-¿Ultimo regalo? Repitieron todos al unísono. Poco después, el pokémon del monje volvió a rodear al grupo en un aura de color azul oscuro.

-¡Claydol, Teleport (Teletransportación)!-

-Ughh... N-no otra vez...-