Capítulo 87: El Pasado Es Para Siempre

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Sector Noroeste. Azotea de la Torre de Radio, Ciudad Goldenrod. Región de Johto. 3:09 P.M

-¡Typhlosion, sal ahora!- Ordena con ahínco el de New Bark, a la vez en que este decidía arrojar frente a sí mismo el par de pokebolas que anteriormente había seleccionado y qué ahora apretaba entre sus dedos. -¡Scizor, tú también, yo te elijo!-

En cuestión de un abrir y cerrar de ojos, los dos pokémon más reconocibles de Gold se llegaron a materializar frente a él sin ningún tipo de inconvenientes o intervención sorpresa por parte de los recién llegados. No obstante, inmediatamente al salir por completo de sus respectivas pokebolas, ambos pokémon de Gold terminan por cruzar miradas decididas entre ellos al emitir luego un sonoro rugido al unísono dirigido específicamente para la dupla del Equipo Rocket y sus pokémon, de la misma forma en que desde el cielo comenzaron por caer más copos de nieve, pero estos ahora tenían una coloración más grisácea y opaca aparentemente debido a la exposición del humo qué emanaba del edificio en llamas al extremo sur de la ciudad y las nubes en el cielo.

-Heh, esto será más que divertido.- Denuncia un emocionado Protón, mirando ahora de reojo a Petrel antes de utilizar uno de sus codos para toquetear el costado derecho de su inexpresivo compañero. -¡Veamos aquí de lo qué tus pokémon y tú están hechos, mocoso!-

-Hmph... No tienes ni idea.- Replica Gold de muy mala gana con completa frialdad tanto en su voz cómo también en el apático semblante qué este había vuelto a adoptar en su rostro. -¡Typhlosion, Ignis! ¡Y tu Scizor, quiero qué Mega evoluciones ahora!-

Transcurrido poco más de unas cuantas milésimas tras la orden dada por su entrenador, Typhlosion soltó voluntariamente otro feroz rugido antes de aumentar desmedidamente la potencia y volumen del fuego qué ardía sobre su espalda, provocando en paralelo qué la tonalidad de sus llamas cambiará de manera salvaje hasta adoptar una intensa coloración azul fosforescente qué no pasó para nada desapercibido por ninguno de los presentes.

Seguidamente, Scizor no se quiso quedar muy atrás, adoptando a la vez una pose de batalla de porte ofensivo con ayuda de sus pinzas cuando todo alrededor de su cuerpo se recubrió de repente con pequeñas partículas de luz creadas desde la nada, mismas las cuales se fueron juntando hasta crear una vistosa crisálida luminosa y transparente qué no sólo acabó por irradiar momentáneamente toda la azotea con los distintivos colores del arcoiris, sino qué también ocasionó qué la Scizorita incrustada en una de las ranuras del brazalete puesto sobre la muñeca derecha de Gold reacciona al brillar al unísono junto con el Pokémon de tipo acero.

Una vez ocurrido todo lo anterior, Bill no pudo evitar cruzarse de brazos, además de apreciar con visible interés, cómo sí fuese un niño pequeño al momento de abrir todos sus regalos de cumpleaños, el sorpresivo cambio físico experimentado por Typhlosion y Scizor desde su posición, estando colocado a espaldas del de New Bark y en la compañía y protección del Pichu de esté último.

-I-Increíble... Incluso para mi, siendo teoricamente todo un novato en cuanto a batallas pokémon se refiere, tengo qué reconocer qué el poderío de Typhlosion y Scizor es demasiado aparente con tan solo una mirada en comparación con Weezing y Crobat.- Antepuso Bill para sí mismo, notando boquiabierto, con escalofríos recorriendo su espalda, y sintiendo cómo aumentaba su ritmo cardiaco, cómo los cientos de diminutos copos de nieve de color grisaceo qué caían desde el cielo se iban desintegrando activamente en medio del aire y también sobre el suelo hasta desaparecer por completo por todo el perímetro de la azotea en dónde ellos se mantenían. -En mis pocos años siendo investigador jamás había visto o sentido algo de esté tipo. Y si bien, Gregory y Crystal ya me habían puesto al corriente de esta "transformación" única del Typhlosion de Gold al sobrecalentar su propio cuerpo para así potenciar su poder de ataque y velocidad, nada se compara con ver esté suceso en vivo. A mi parecer, es cómo sí la combinación de las auras qué ambos pokémon generaron al transformarse hubiesen cobrado vida. Pero lo más sorprendente de todo es qué la sola presencia de ambos ejerce una presión tan ridículamente intensa por todo alrededor de la azotea, qué lo único qué se me ocurre para compararlo sería lo que sienten los buzos al sumergirse a altas profundidades dentro del mar...-

De la misma manera, Bill exhaló rápidamente aire desde su boca y nariz en silencio al hacer una corta pausa en su análisis mental, notando primero cómo su aliento iba perdiendo su anterior visibilidad debido aparentemente a la presencia de Typhlosion, para posteriormente tragar saliva con pesadez antes de fijar su atención sobre el primogénito del tan conocido campeón sin corona de Johto y Kanto, Enishi Tsubasa.

-Gold, en realidad desconozco muchos de los detalles y cosas por las qué has tenido qué pasar para llegar hasta aquí, pero te deseo la mejor de las suertes.- Dictaminó con honestidad el joven investigador, una vez más muy desde el interior de su psique, entre tanto él dirige una fugaz pero preocupada mirada en dirección al humeante edificio en llamas al otro lado de la ciudad. -Y, pues, por más extraño qué parezca todo, aparentemente la historia tiene el molesto capricho de querer repetirse. Ya qué, así cómo sucedió con Red, Green y Blue hace dos años atrás en la corporación Silph, el destino de ambas regiones dependerá de tus pokémon, de tus acciones, pero en especial de ti mismo. Ahora, solo espero qué tanto nosotros, cómo también Enishi y todos los demás qué estamos involucrados, podamos salir bien librados de lo qué sea qué termine por suceder aquí cómo también en Mahogany. De momento lo qué necesito hacer es mantenerme al margen de la situación para quizás encontrar, más temprano qué tarde, la relación de este ataque específicamente dirigido a la Torre de Radio, sumado a todo lo demás qué sucede. Aquí es demasiado obvio qué existe un motivo más grande el cual estoy omitiendo ver.-

Por su propia parte, y estando en una posición inmejorable junto con Protón y sus respectivos pokémon para observar en primera fila lo sucedido, Petrel no fue capaz de ocultar la latente preocupación qué comenzó a carcomer sus pensamientos al ser el primero de los recién llegados en reaccionar ante el abrupto cambio en la apariencia de la dupla conformada por Typhlosion y Scizor.

-Ughh... Esto sí qué me trae muy malos recuerdos.- Anticipó Petrel de mala gana y en voz baja para su compañero y amigo, llevando por segunda vez su cigarrillo encendido y a medio acabar a sus labios para entonces exhalar otra exagerada bocanada de humo en dirección al cielo aún poblado de grisáceas nubes por doquier. -Por favor dime qué no soy el único quien sintió eso, Protón. Por qué ahora cada fibra de mi ser puede sentir la alarmante presión qué esos dos pokémon están ejerciendo con su sola presencia. Siendo honesto, todo esto me da muy mala espina y se nota a simple vista lo bien entrenados qué están ambos en todo el maldito sentido de la palabra. La última vez qué recuerdo sentir una presión de batalla de esté tipo fue cuando luchamos contra los pokémon de Red y Green antes de-...

-Esta vez todo será diferente, Petrel. De eso no me caben dudas.- Interrumpe Protón enérgicamente cómo respuesta, no sin antes estrellar su puño derecho contra la palma desnuda de su mano izquierda a la altura de su pecho. -Juro por el honor de Giovanni, y también por esté nuevo y mejorado Equipo Rocket, qué todo será muy diferente de ahora en adelante. Ni nosotros, ni nuestros pokémon, somos los mismos de hace dos años atrás. Todos pasamos por un infierno para llegar hasta dónde estamos y no voy a permitir qué nada ni nadie se interponga en nuestro planes, en especial un maldito mocoso insolente con aires de grandeza debido a su linaje. Pero por sobre todo eso, tú mejor qué nadie sabes qué el poder bruto en un combate no es más qué una mísera gota de agua dentro de un mar infinito de posibilidades, da igual sí uno puede mega evolucionar o sí el otro cambio el estupido color del fuego de su espalda. Entonces, al menos de manera muy preliminar según mis estimaciones, considero qué el nivel de Scizor está alrededor del de los bastardos de Pueblo Paleta al momento de nuestro anterior combate, mientras qué Typhlosion debe tener un nivel un poco por debajo de esto. Así que no tienes por qué preocuparte más de la cuenta. Recuerda qué para nosotros cómo la élite del Equipo Rocket no pueden existir imposibles.-

Manteniendo en todo momento su anterior semblante, Petrel se tomó otra efímera serie de segundos antes de dar una respuesta más en concreto, mismos en dónde él decidió observar de arriba a abajo tanto a Gold, cómo a sus pokémon, y por último a Bill, de un modo más analitico y con lujo de detalles en busca activa de la forma más adecuada para abordar el inminente combate qué estaba a casi nada de comenzar.

Desde analizar muy minuciosamente la postura de combate qué ambos pokémon mantenían en ese preciso momento para encontrar así su centro de gravedad o puntos débiles, hasta inclusive calcular con extremo cuidado las posible combinación de movimientos o rutas de escape alrededor de la azotea en el caso de qué Gold diese la orden hipotética de esquivar.

-Creo qué solo por esta vez te daré la mayoría de razón, Protón. Para ambos no deben existir imposibles, ni ninguno de nosotros es el mismo desde lo sucedido en la corporación Silph. Esa es nuestra realidad.- Reconoce entonces el sujeto más delgado del dúo del Equipo Rocket, colocando ahora una cínica sonrisa en sus labios para luego tirar a sus pies su cigarrillo ya a medio acabar y pisarlo con la suela de sus zapatos hasta apagarlo por completo. -Aunque, de todas formas, ambos siempre hemos trabajado mejor bajo presión al ser los principales encargados de las misiones más complejas, ya sea por órdenes de Giovanni o ahora con Archer. El hecho de qué el éxito de esta operación, y también el futuro inmediato del Equipo Rocket, dependa de nosotros dos es solo un pequeño valor agregado a nuestro legado para cuando todo llegue a su final. Pero ya basta de recordar cosas sin sentido. Tú solo sígueme la corriente con lo qué sucederá a continuación, ¿esta bien? Por qué, lo creas o no, pienso qué ya encontré la manera más eficiente para atacar por sorpresa a Typhlosion y Scizor al mismo tiempo. Pero para eso necesitare de tu ayuda. O, mejor dicho, creo qué necesitare qué me ayudes a "dividir" mi solución al problema en dos partes en el momento justo.-

Evitando perder más tiempo del necesario, Protón sonríe con nostalgia y, sin siquiera mirar a su compañero a su lado, terminan ambos por extender casi a la par uno de sus brazos para entonces hacer chocar sus respectivos puños el uno con el otro ante las atentas miradas de sus propios pokémon y los demás presentes por igual.

-¡Bien, es hora de comenzar con esto de una buena vez!- Exclamó Petrel con más decisión y energía, seguido de mirar directamente a los ojos de Gold, quien se mantenía a la expectativa de lo qué sucedería al otro lado de la azotea. -¡Weezing, utiliza Thunderbolt (Atactrueno)! ¡Quiero qué enfoques tu descarga eléctrica para qué ataques con todo lo qué tienes a Typhlosion!-

El pokémon de tipo veneno asintió sin más frente a su entrenador, generando despues por todo alrededor de su cuerpo una violenta y hasta visible corriente de electricidad de un intenso color amarillo incandecente. Todo esto, mientras qué Gold se mostró extrañamente taciturno y en completo silencio, presentando en su rostro una expresión demasiado tranquila y qué no iba acorde con todo lo qué había sucedido hasta esté punto.

-¡Ahora, Weezing!- Dando su orden, Petrel extendió nuevamente su mano izquierda para utilizar su dedo índice al apuntar en dirección al pokémon de tipo fuego. -¡Acaba con Typhlosion!-

En cosa de poquísimos segundos, Weezing expulsó un ensordecedor ataque eléctrico condensado a manera de rayos de energía en dirección a Typhlosion. Sin embargo, una vez el pokémon de Petrel terminó por lanzar por completo toda su descarga eléctrica al cruzar por en medio de la azotea en línea recta, ahora fue el momento perfecto de Protón para complementar lo hecho por su compañero, sabiendo él muy a la perfección cuáles eran las intenciones verdaderas de este.

-¡Crobat, llegó tu turno!- Denuncia el entrenador de la boina sin titubeos, empleando un tono repleto de confianza y orgullo. -¡Utiliza Air Slash (Corte Aéreo) para dividir y curvar en dos el ataque eléctrico de Weezing!-

-¿U-Un ataque doble en conjunto?- Comentó de inmediato Bill con sorpresa y esta vez en voz alta, intercambiando miradas cargadas de nerviosismo con el Pichu de Gold a su lado. -¡M-Maldición...! ¡Y-Ya lo tengo! ¡Gold, su plan de ataque consiste en-...

-¡Scizor, encárgate tú de esto y utiliza la versión dos punto cero!-

En un único pero perfectamente bien sincronizado movimiento, el pokémon de tipo acero da un salto repentino al frente para posicionarse exactamente metro y medio delante de Typhlosion, justo en el instante cuando el rayo de energía eléctrica disparado por Weezing se combinó con el subsecuente ataque de Crobat al dividirse exactamente por la mitad cómo sí fuesen ahora dos fulminantes torpedos hecho de electricidad en medio del lugar.

El primero de los rayos tomó una extraña curvatura tras dividirse para ir por el sector izquierdo de la azotea, abriéndose paso sobre el barandal de cemento sólido sobre su orilla en dirección a Typhlosion, mientras qué el segundo rayo fue en paralelo al primero, con igual intensidad y velocidad, solo qué esté iba en dirección a atacar a Scizor por su flanco derecho.

Acto seguido, Scizor empieza a girar sobre sí mismo en su propio eje, extendiendo además sus pinzas cómo sí ellas fueran propelas de barco a ambos lados de su cuerpo. Dicha acción, a su vez, ocasionó el asombro colectivo de todos y cada uno de los presente cuando, ante sus muy atentas miradas y el intenso resoplar del viento en la azotea, la aparentemente letal combinación de ataques generado por Weezing y Crobat fue fácilmente absorbida, cómo un indefenso y pequeño trozo de madera al ser arrastrado por la fuerte corriente de un río, en favor de dar incontables vueltas por todo alrededor de Scizor, pokémon quien aún se mantenía girando sobre sí y sin mostrar el más mínimo indicio de haberse esforzado del todo.

Proton reaccionó con inmediatez y prácticamente por inercia, observando furioso, atónito y de reojo a su anonadado compañero a su lado, sabiendo también muy a la perfección qué su orgullo y ganas por querer redimirse ante el posible regreso de Giovanni le había hecho una muy pero muy mala y cruel pasada.

De modo muy similar, Petrel se limitó a fruncir el ceño con profunda confusión al observar no solo cómo la anterior combinación de ataques por parte de Weezing y Crobat resultó insuficiente para cumplir con su cometido, sino qué también esto simbolizaba para él cómo todos y cada uno los cientos de escenarios anteriormente creados por sí se fueron resquebrajando de la peor manera posible dentro de su subconsciente al caer en cuenta de la realidad. Todo esté combate desde su incepción inicial había sido un enorme error.

-¡Scizor, ya sabes qué hacer!- Ordenó por su parte Gold y con extrema frialdad en sus palabras, ajustando aquí sus goggle especiales colocados sobre sus ojos. -¡Redirige ese ataque y acaba con ellos!-

Ni corto ni perezoso, Scizor volvió a tomar la iniciativa de la situación al detenerse muy en seco tras girar y encarar nuevamente a los recién llegados, utilizando aquí el nuevo recubrimiento metálico de su cuerpo tras megaevolucionar para absorber gran parte de los rayos de energía eléctrica qué anteriormente lo llegaron a rodear. Así mismo, y sin darle tiempo alguno a sus oponentes para reaccionar o posicionarse, el pokémon de tipo metal luego disparó con ayuda de sus propias pinzas los mismos rayos de energía absorbidos, solo que con el doble de potencia y velocidad en dirección a los pokémon de Petrel y Protón.

-¡Mierda...! ¡Crobat, quítate de en medio y llévate contigo a Weezing!- Exclamó Protón con palpable desespero en todo su semblante, a modo también de orden para con su pokémon. -¡No permitas por nada del mundo qué-...

Una vez arrojado el potente contraataque por parte del Pokémon de Gold, Crobat muy a duras penas fue capaz de tomar el impulso necesario con sus alas cómo para esquivar un ataque de tal magnitud y velocidad, disponiendo de apenas unas cuantas décimas de segundo para tomar una decisión. Pero fue aquí, ante todo tipo de pronóstico, en dónde Crobat hizo lo qué se veía cómo imposible al aletear desesperadamente para de esa manera empujar a tiempo a Weezing de un cabezado improvisado, causando así qué ambos por muy pocos centímetros pudiesen evitar la devastadora trayectoria del rayo de energía eléctrica reflejado.

-¿¡P-Pero cómo es posible esto!? ¿O es qué acaso erre por completo en mi evaluación de los pokémon de ese mocoso?- Cuestiona Protón de un agrio grito dirigido a Gold y sus pokémon, inmediatamente después de qué Weezing y Crobat volviesen a posicionarse delante suyo tras percatarse de cómo el anterior contraataque de Scizor se desvaneció con una repentina explosion, seguido de una pequeña onda expansiva, tras abandonar el perímetro de la azotea en medio del aire. -T-Tu-... M-Maldito mocoso insolente-... Te juro qué esto no se va a quedar así y-...

-Interesante utilización de un ataque combinado.- Reconoció el de New Bark con ácida condescendencia combinado con sarcasmo, interrumpiendo a propósito al quitar las palabras a Protón de su boca. -De no ser por la velocidad de reacción de Scizor al utilizar Sword Dance (Danza de Espadas) para revertir su ataque, esto muy probablemente hubiese sido todo para nosotros. Pero me temo qué aquí es dónde le pondré punto final a esté combate. Ustedes ya tuvieron su oportunidad y no tengo más tiempo qué perder con bufones de su calibre quienes se rehúsan a aceptar qué el Equipo Rocket es parte del pasado.-

Miradas repletas del más profundo terror fueron intercambiadas en igual medida tanto por los anonadados recién llegados, cómo también por parte de sus expectantes pokémon, siendo estos los complementos perfectos para acompañar el abrumador sonido de fondo de una metrópolis confundida al hundirse poco a poco en la incertidumbre y el caos.

Bill, entre tanto, permaneció aún perplejo luego del vistoso despliegue de velocidad y técnica mostrado por Scizor, observando también en dirección de todos los demás participantes del combate al tragar saliva y optar después por apretar sus puños.

-Sí bien Enishi en su faceta pública cómo entrenador era mundialmente reconocido por tener un estilo de combate tanto atrevido cómo efectivo, Gold no se queda muy atrás en esté ámbito. La manera en cómo Scizor fue capaz de atraer, repeler y luego reflejar la combinación de ataques de Weezing y Crobat en tan corto periodo de tiempo no es algo qué suceda solo porque sí y de pura casualidad.- Expuso nuevamente el joven investigador, muy desde su interior y con cierto nivel de orgullo para con el primogénito del conocido campeón sin corona. -Esté tipo de técnica de contraataque tan compleja en su ejecución debió costarle a Gold y Scizor mucha sangre, sudor y lágrimas.-

¡-Typhlosion, llegó el momento de enseñarle a ese par de idiotas de lo qué estás hecho!- Aseveró el de New Bark al alzar el tono de su voz con frenesí y rebeldía. -¡Empieza primero con Flamethrower (Lanzallamas) a toda potencia!-

Encendiendo aún más con desmedida violencia las llamas de color azul qué consumian gran parte de su espalda, Typhlosion genero un amenazador rugido como preambulo, antes de escupir automaticamente una muy intensa llamarada con una tonalidad azulada fosforescente en la direccion en dónde ahora yacian colocados los pokémon de Petrel y Proton.

Aquí, en tan solo un misero parpadeo tras la anterior orden de Gold para con su pokemon, Petrel fue víctima de sus propios sentimientos por primera vez en mucho tiempo, cuando su corazón empezó a latir a más de mil por segundo al no saber qué hacer o cómo reaccionar. Su mente, en ese mismo sentido, siendo su herramienta de preferencia al ser constantemente alabado por sus pares debido a sus estrategias de combate y geniales planes para las misiones más difíciles de ejecutar, estaba ahora completamente en blanco y sin ideas en concreto, de la misma manera qué sus extremidades se sentían cómo sí estuviesen entumecidas.

¿E-Es acaso miedo esto qué siento dentro de mí? ¿Miedo ante lo... inevitable?- Petrel se preguntó esto una y otra y otra vez con obvia decepción y entre dientes, observando también con mucho desasosiego, y cómo sí fuese en cámara lenta, como todos los nuevos copos de nieve con aquella coloración grisácea qué estuviesen cayendo desde el cielo se iban desintegrando uno a uno por todo alrededor de la azotea al incluso hacerse vapor de agua. Todo esto debido al antinatural fogaje qué produjo la sola presencia de Typhlosion al ejecutar su nuevo ataque.

Protón, por su propia cuenta, prefirió luchar metafóricamente contra corriente y no se quiso quedar de brazos cruzados al darse por vencido tan fácilmente, dando ahora órdenes con gritos desesperados para qué su Crobat volviese a hacer todo lo qué estuviese a su disposición para esquivar el ataque frontal realizado por Typhlosion, mismo el cual ahora estaba a pocos metros de hacer impacto.

-¡Vamos, C-Crobat! ¡Hazte a un lado y esquiva! ¡Tu eres mucho más rápido qué ese patético intento de ataque!- Exclamó Protón de otro ferviente gritó, dando además furiosos manotazos al aire en señal de frustración. -¡Tú también esquivalo, Weezing! ¡F-Flota lo más rápido qué puedas a tu derecha y después contraataca con Sludge Bomb (Bomba de Lodo)!-

Estando a poco más de dos o tres metros de hacer impacto en relación con la posición de sus oponentes, Gold dibuja una confiada sonrisa en sus labios antes de ajustar en tiempo real su preciada gorra de la suerte sobre su cabeza.

-¡Typhlosion, utiliza ahora Shadow Ball (Bola de Sombras)!- Anticipa el de New Bark, sin perder la calmada confianza qué éste había llegado a demostrar a lo largo del combate. -¡Acaba esto de una buena vez dándoles una probada de su propia estrategia con un ataque combinado por ti mismo!-

Al estilo de una inmisericorde bala de cañón disparada casi qué a quemarropa frente a un objetivo inmovil, Typhlosion creo rapidadamente lo qué se asemejaba a una especie de esfera asimetrica de energia de color purpura enfrente de la parte superior de su cuerpo, lanzando de inmediato dicha esfera cómo un pequeño proyectil teledirigido en direccion de su propio lanzallamas.

-¿Pero qué d-demonios? ¿Qué mierda es lo qué pretendes hacer?- Ahora fue el turno de Protón para sentir cómo su ritmo cardíaco aumentaba dentro de su pecho con locura, manteniéndose además estático y a la expectativa de lo qué sucedería con palpable miedo y repudio en su rostro. -¡N-No... N-N-Nooo...! ¡E-Esto no puede estar sucediendo! ¿A-Acaso crees qué esto es una maldita broma?-

Cómo consecuencia directa de todo lo anterior, la llamarada lanzada por Typhlosion se dividió en medio de su trayectoria en dos partes iguales por la mitad tras hacer contacto directo con la esfera asimétrica de energía, imitando casi qué a la perfección lo hecho anteriormente por Crobat al partir en dos el rayo de energía eléctrica disparado por Weezing.

Sucedido esto, Petrel no pudo más qué apretar sus labios en espera de lo inevitable, mientras Protón permaneció boquiabierto al ver cómo la combinación de ataques por parte de Typhlosion causó una violenta reacción en cadena. Primero, la potencia y velocidad con la qué viajaba el fuego lanzado por el pokémon de Gold se multiplicó hasta el punto en qué Crobat y Weezing fueron incapaces siquiera de percibir o asimilar lo qué en principio había ocurrido, siendo ambos impactados directamente por el fuego y cayendo después con violencia sobre el suelo tras una sonora explosion de por medio como los fuegos artificiales de una festividad nocturna.

Luego de lo ocurrido, Petrel expulsó un melancólico suspiro en respuesta, colocando ahora una de sus manos sobre el rígido hombro de su compañero a su lado, toda vez qué esté último aún se rehusaba a aceptar el resultado del combate.

-¡Levántate del suelo, Crobat!- Ordenó un muy iracundo Protón de un grito, teniendo aquí su mirada puesta sobre su pokémon claramente inconsciente y herido sobre el suelo de la azotea, apretando después sus puños con rabia hasta el punto de estremecer por completo todo su cuerpo. -¡E-Esto aún no termina! Pero necesito qué te levantes y despu-...

-Se acabó, Protón. Ya no hay caso.- Interrumpe Petrel, manteniendo un tono más sosegado tras regresar a Weezing a su respectiva pokebola. -Odio tener qué admitirlo, pero no existe nada más qué podamos hacer al respecto. Ni tu Crobat o mi Weezing, ni ninguno otro de nuestros pokémon serían capaces de hacerles frente a esos monstruos en un combate limpio. Aquí está más qué claro qué nosotros no somos rivales para ninguno de ellos.-

Protón se tomó aquí un rápido momento para sí mismo, con el único fin de recomponer sus ideas o de al menos reparar de algún modo su muy pero muy lastimado orgullo, no solamente cómo entrenador pokémon, sino qué también cómo un miembro integral del Equipo Rocket. Pero, a medida que iban transcurriendo los segundos, esté no pudo hacer más qué observar de reojo a Gold y sus pokémon con el más profundo de los desprecios, notando además como Typhlosion y Scizor aún se mantenían alerta y en posiciones de combate al observar en su dirección con detenimiento.

-P-Pero no se suponía qué así deberían de suceder las cosas.- Argumentó Protón con más insistencia y desolación en su actitud y rostro, luego de también regresar a Crobat a su pokebola al mirar ahora a los ojos de su compañero junto a sí mismo. -Y-Yo-... ¡Me rehúso a aceptar esto! ¿Qué mierda le diremos ahora a Arc-...?-

-¡Scizor, ve a por ellos!-

Sin dar nuevamente tiempo algún de respuesta a los involucrados, Scizor procede a dar un acrobático y veloz salto para posicionarse frente a los recién llegados, abriendo instintivamente las afiladas pinzas qué tenía por extremidades superiores al acercarlas sobre los respectivos cuellos de Petrel y Protón.

-Entonces... ¿Ya terminaron de parlotear?- Gold mantuvo en todo momento su anterior semblante cargado de frialdad y antipatía, cosa qué llamó de sobremanera la atención tanto de Pichu pero en especial de Bill. -Porque entre nosotros aún quedan varios asuntos pendientes, ¿o es qué acaso ya lo olvidaron?-

Dicho esto, Gold da unos cuantos pasos al frente en compañía de su Typhlosion. -O-Oye Gold... ¿Q-Qué es lo qué planeas hacer con ellos?- Cuestionó Bill con extrañeza y casi qué palpable nerviosismo, mirando con inquietud al de New Bark de arriba a abajo pero sin moverse del todo de su posición a pocos metros de la gigantesca antena de transmisiones a su espalda. -No me digas qué piensas-...

-No te preocupes, Bill. Aún cuando se supone que esta fue una batalla hasta la muerte, no tengo intención alguna de romper o quizás triturar sus cuellos con la ayuda de Scizor.- Reconoce rápidamente Gold con sarcasmo, y una pequeña pizca de malicia qué apenas sí se reflejaba al momento de entonar todas sus palabras. -O al menos no por el momento. Esto dependerá siempre y cuando ellos decidan cooperar con nosotros y confiesen ya mismo qué es lo qué hacen aquí.-

A continuación, el de New Bark fuerza a propósito una súbita pausa en sus palabras, momentos antes de volver a mirar a Petrel y Protón. -¿Qué me dicen de eso? Aquí es dónde les ofrezco a ambos una única oportunidad para salir respirando de aquí antes de qué me arrepienta y les ponga un definitivo punto final a sus vidas. Porque créanme cuando les advierto qué yo no soy tan compasivo cómo Red, ni tampoco cínico cómo Green. Y ni siquiera les pediré qué se humillen, ni tampoco qué supliquen por sus vidas. Solamente quiero qué-...

-Tch... ¡Prefiero morir desollado antes qué ayudar a escoria prepotente cómo tú!- Asegura Protón de un agresivo gruñido, sumado a dibujar una melancólica sonrisa en sus labios y después escupir sobre el suelo pero en la dirección de Gold. -Desde hace mucho qué Petrel y yo no le tememos a la muerte, así qué adelante niño. ¡Termina con nosotros sí es qué de verdad crees tener las agallas!-

Gold replicó al suspirar con clara indignación, negándo lentamente con su cabeza y luego cruzándose de brazos. -De acuerdo... Cómo "TU" desees, Protón. Eso qué pides tiene un arreglo bastante sencillo. Pero primero quiero qué conste ante todos qué tú fuiste quien lo pidió, ¿ok?- Posterior a sus propias palabras, Gold decide enlazar breves miradas con su Scizor antes de fruncir el ceño y asentir.

-¡Scizor, termin-...

-¡E-Espera... ¡Espera, por favor! ¡Y-Yo hablaré!- Declara Petrel con desesperación y de un patético chillido al alzar su voz, utilizando a la vez las palmas de sus manos para así juntarlas frente a su pecho a manera de plegaria. -¡Solamente te pido por favor que no nos lastimes! Yo puedo cooperar contigo y hasta podría-...

-Solo ve directo al maldito grano y sin rodeos... Ahora, ¿qué demonios es lo qué ustedes dos hacen aquí en la Torre de Radio?- Cuestiona Gold de mala gana y cara de pocos amigos, cortando de paso las palabras de Petrel sin ningún tipo de misericordia para encararlo de frente. -También quiero saber sí ustedes son los únicos miembros del Equipo Rocket por aquí o sí existen más de los suyos en los alrededores o dentro de la torre.-

Antes de siquiera darle a su compañero la oportunidad de replicar, Protón observa directo a los ojos de Petrel con una mezcla entre desilusión, asombro, repudio, decepción y amargura, culminando todo esto al negar con su cabeza y apretar sus propios labios en clara señal de rechazo. Llegado esté punto, las palabras sobraban entre el dúo, pero esto apenas sí le importaba a Petrel con tal de salvar literalmente el cuello de ambos de una muerte segura y probablemente muy dolorosa.

-V-Veras... Nuestra presencia aquí es para anunciar a todo el mundo, con la ayuda del programa de radio de Oak y Mary, sobre nuestro triunfal regreso cómo organización.- Confiesa Petrel de manera rápida y concisa, entre tanto su atención yacía principalmente puesta sobre Gold y las pinzas de Scizor cercanas a su palpitante cuello desnudo. -Pero por sobre todo esto, lo qué realmente deseamos es mandar un mensaje fuerte y claro a Giovanni para qué el regrese a liderarnos cómo en los viejos tiempos. El anterior apagón de energía, la nula recepción de señal de Pokegear, y la subsecuente explosion dentro del cuartel general de policía de Goldenrod al otro lado de la ciudad, no fueron más qué un pequeño preámbulo a modo de distracción. Por todo esto, trajimos además a varios de nuestros mejores reclutas para esta misión, con el único fin de distraer y mantener a raya a todos los empleados de la torre mientras nuestro plan entraba en ejecución en la cabina de grabaciones.-

En un dos por tres, la anterior expresión del rostro de Gold cambió para peor. Sus pupilas se comenzaron a dilatar y sus ojos ahora eran capaces de expresar en vivo viscerales rastros de ira mal reprimida, siendo todo esto apenas controlado por su latente preocupación ante las palpitaciones de un corazón desesperado por respuestas y unas psique a muy poco de resquebrajarse de manera irreparable.

Siendo partícipes involuntarios del cambio tan drástico en el semblante del entrenador de New Bark, la dupla de recién llegados del Equipo Rocket no pueden más qué intercambiar tímidas miradas entre ellos por enésima vez en lo qué iba de la tarde. Pero, antes de qué alguno de ellos pudiese decir o comentar algo al respecto, Bill sorprendió a todos con un resonante alarido al aire.

-¡Maldita sea...! ¿Cómo rayos pude ignorar una conexión tan importante cómo esta cuando la respuesta siempre estuvo frente a mi propia nariz?- Bill alzó su voz con perfecto ímpetu, orgullo y energía, siendo ignorante de los sentimientos de Gold debido a su posición en la azotea junto con Pichu y a espaldas de la antena de transmisiones. -¡Pero creo qué ya por fin lo tengo, Gold! ¡Al principio me fue difícil enlazar todas las piezas, más ya no me caben dudas! ¡Lo qué el Equipo Rocket desea con esté ataque, además de mandar un mensaje a Giovanni, es utilizar la ant-...

No obstante, Bill se fuerza a hacer una antinatural y fortuita pausa en la entonación de sus palabras hasta desvanecer su voz por completo cuando una extraña luz tricolor, proveniente desde la caseta qué conecta con el interior de la torre, y a espaldas de los recién llegados a varios metros de su posición, comenzó a iluminar todo alrededor del lugar. Ante esto, el reconocido investigador empieza a tambalearse en completo silencio al adoptar una extraña pero soñolienta expresión junto con Pichu qué solo fue deshecha cuando ambos, investigador y pokémon, se desplomaron estrepitosamente al caer sobre el suelo aparentemente desmayados.

Gold aquí vuelve a titubear, confuso y lleno de rabia, apenas sí percatandose en principio de lo sucedido cuando de repente Scizor decide voluntariamente retrocede de un rápido salto, alejándose por completo del sector de la azotea en dónde se mantenían Petrel y Protón, en favor de volver a colocarse junto con Typhlosion y enfrente del de New Bark con una pose defensiva de combate.

-Hmph, poético pero muy apropiado... ¿Quién diría qué por segunda vez consecutiva la supuesta élite del Equipo Rocket sería fácilmente vencida por un mísero niño?-

A la par en qué Gold intentaba procesar todo lo anteriormente sucedido en el corto lapso de unos cuantos segundos, un sujeto delgado, paliducho y con aspecto altamente sombrío hizo acto de presencia al salir primero desde la caseta con las escaleras en compañía de un Beheeyem delante suyo.

Dicho sujeto, por sí no fuese poco, además de aparentar estar a mediados de sus treintas y vestir con un elegante traje en conjunto de camisa y pantalón en blanco con pequeños detalles en negro a la altura de su cuello y mangas, trayendo aqui un llamativo bordado encima del bolsillo de su pecho con una "R" de color escarlata, venia también en la compañia de Silver y Crystal a cada uno de sus lados, desplazandose todos con tranquilidad hasta colocarse justo detrás de Petrel y Protón.

-¿P-Pero qué-...? ¿Crystal... S-Silver? ¿¡Q-Qué carajo...!?-

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro