Veintiocho

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¿Dónde esta papá?

Edad Rayita: 14.

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La joven miraba con desinterés los comerciales, daban mas comerciales que novela. Se acercaba el día del papá, todas las publicidades eran sobré regalos para el padre. ____ miraba un poco confundida, nunca le había importado el tema de su padre, en realidad le daba lo mismo, pero ahora le entraba la duda.

Lo único que sabía era que se parecía a él, y eso porque Nemuri se lo reclama cada vez que puede.

Escuchó a su mamá cantar en la cocina, probablemente limpiaba, ya que si no es para limpiar no entra ahí, no le gusta cocinar. Solto un suspiro y le grito, Nemuri al escuchar el llamado de su hija fue hasta donde ella, tarareaba la canción mientras dejaba la escoba apoyada en la pared y se iba a sentar a su lado.

—¿Y qué ves? —Preguntó la mujer, se acomodo en el sofá y sacó su celular.

—¿Dónde está papá? —La heroína se quedó callada, miró a su hija que le miraba fijamente con sus ojos rosados, la mujer cerro los ojos mientras suspiraba. Podía responderle cualquier pregunta menos esta. No le gustaba este tema, le dolía, sufrió demasiado con la perdida de su amado.

____ entendió que era un tema difícil al ver la reacción de su mamá, se acercó a ella y le abrazo. No tenía ni la menor idea de que había pasado, pero se veía que su mamá seguía sufriendo por la perdida, que todavía siente pena, así que un abrazo no haría nada mal. Nemuri todavía sin decir nada correspondió al abrazo, ella podría ser muy fuerte, valiente, podría tener su caracter, siempre se mantenía con calma ante situaciones difíciles o preguntas de cosas malas que han pasado, pero con esto no podía.

—Si no quieres decir nada esta bien, tranquila.

—No, no, estoy bien, solo... Dame un segundo. —Nemuri respiró profundo, alejó a su hija con cuidado para después acariciar su cabeza. Siempre estuvo preparada para este momento, sabía que llegaría, pero como nunca le preguntó de pequeña supuso que no le interesa, le sorprendió que la duda le llegara de grande— Jaja... ¿Qué puedo decir?

—Quién fue supongo... Como se llamaba, que paso con él, no lo sé, dime lo que tu quieras decirme. Si no quieres esta bien, tampoco es necesario saberlo.

—Pues que puedo decir, era un muy buen hombre, siempre estaba serió pero era muy alegré, era medió confuso saber como estaba jaja... Como tú, por suerte sacaste mi inteligencia porque si no cagaste. Aunque bueno, ahora te veo y eres igualita que yo a mi edad, bien hermosa.

—Claro que soy linda, hija tuya soy.

—Si, mocosa. No digas cosas que nunca dices para hacerme sentir mejor. —Nemuri sonrió y se volvió a acomodar, se quedó pensado en que poder decir.

—¿Como se llamaba?

—Umh, Kein.

—¿Kein...?

—Si, era medió raro su nombre, pero bueno, nada que hacerle.

—¿Podría saber que le paso?

—Ah... Mira, él estuvo conmigo en casi en todo el embarazo, además cuando le dije que estaba embarazada no dudo ni un segundo en demostrarme su apoyo. Recuerdo que cuando mis papás me echaron de casa agarró mis cosas y me llevó a la suya. Y pues él no iba a la U.A, pero siempre me iba a dejar y me iba a buscar, también hablo con Nezu y le rogó que me dejara quedarme, no era necesario pues el director lo hubiera hecho sin la necesidad de rogarle, pero era él.

—¿Y?

—Todo iba bien, él siguió con sus estudios al igual que también trabajaba, le decía que no pues de dinero los dos estábamos bien, pero insistió. Estuvo siempre atentó a mi, realmente me sorprendía verlo con otra expresión que no fuera su cara de molestia, sonreía siempre y cuando llegaba a casa lo primero que hacía era saludar a mi panza en vez de a mi. Lamentablemente... Un mes antes de tú nacimiento, falleció en un accidente automovilístico. Iba en un taxi y bueno, hubo un choque. Realmente fue algo complicado, lo único que hice al enterarme fue llorar, Hizashi y Shota tuvieron que estar a mi lado día y noche para asegurarse de que comiera, durmiera o que al menos me levantará de la cama, pues los últimos dos meses no estaba yendo a clases. El punto es que no se exactamente que sucedió, no quise saber como pasó o si mas gente resultó herida, solo quería estar sola.

—Oh, lo lamentó...

—Me costó salir adelante, en realidad tuve incluso ayuda de U.A, era todo un lió. Pero tenía que salir adelante, sabía que a él le gustaría que hubiera salido adelante, al fin y al cabo faltaba poco para que nacieras. Pero... Me duele tanto, era tan bueno, estaba tan entusiasmado por ti, esperaba ansioso el día del parto, siempre decía que esperaba con emoción el momento de tu nacimiento. Quería verte, poder cargarte en sus brazos, decirte cuanto te quería y... No pudo.

Nemuri ya no pudo mas, solto un suspiro para comenzar a llorar. ____ se aferró a su mamá, le dolía verla así, mas saber la historia de ese hombre, se veía tan buena persona, se veía que amaba con todo su corazón a su mamá. Además, su mamá también le quería mucho, eso era obvio, lo amaba y demasiado.

—Ay, perdoname. Pucha ____, no me gusta llorar y menos enfrente de ti. Perdón.

—¡Llorar esta bien! Así que tranquila, estoy segura de que él esta bien, que esta en algún lugar bonito. Mamá... No es bueno guardarse la pena, puedes estar tranquila, todo esta bien.

—Mocosa, eres una combinación de Hizashi y Shota en el momento de consolar. Ay, no puede ser. —____ rió confundida al ver a su mamá reír y llorar, Nemuri ya ni sabía que hacer, se sentía mal por todo pero a la vez al tratar de no llorar le estaba dando un ataqué de risa.

Y bueno, habría que esperar a que las dos se calmaran. Nemuri reía y lloraba, ____ a la vez le estaba dando pena, en cualquier momento también podría ponerse a llorar.

Fue horrible para Nemuri, realmente no era una mujer de amar, con tan solo dieciséis años solo había tenido "amigos". Nunca una relación porque nunca sintió amor con nadie, hasta que llego Kein, ese chico con tan solo saber que fue algo de una noche y que con suerte había visto a Nemuri algunas veces se esforzó para darle una gran vida a ella y a su bebé, llevó a Nemuri a vivir con él cuando todos se fueron contra ella. Se esforzó para ganarse el corazón de Nemuri, porque sabía que no le gustaba a la chica, pero se esforzó en enamorarla y lo logró, al igual que el se enamoró también. Fueron meses hermosos, lamentablemente el hombre falleció. Es una pena pues ni siquiera pudo ver a su hija nacer, estar por lo menos ahí para su amada en el parto, para que no estuviera sola.

—Última pregunta...

—Uy, no. No mas. —La mayor se levantó y se fue con rapidez a la cocina, ____ fue detrás de ella para preguntar, al final la niña no supo como fue todo el proceso con U.A, como fue con los entrenamientos y esas cosas. Pero bueno, no era algo importante, además ya era momento de que su mamá se olvidará un poco del pasado.

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