Capitulo 47

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Valentina POV

Miré a Juliana a los ojos y vi una pequeña sonrisa formarse en sus labios mientras apretaba fuerte mi mano, y yo, petrificada en aquel lugar, solo podía mirarla. Mi corazón latía fuerte y mis piernas amenazaban con dejar de cumplir su función... ¿De verdad dijo lo que tanto desee? ¿De verdad sus padres lo han escuchado? ¿De verdad terminó su estúpida relación con el estúpido aquel? Todo estaba en total silencio, nadie se movía, quizás todo a mi alrededor se había detenido, ¿estaré soñando? Si es así, que nadie me despierte. Iba a ser feliz con Juliana, sea donde sea, frente a quien sea. Seriamos ella y yo, sin importarnos nada...

- ¿Eres feliz? – Le pregunto si madre.

- Nadie jamás me había hecho tan feliz como ella.

- Debo irme. – dijo su padre.

Miré a Macario pero ya él estaba caminando hacia la puerta, Juliana me soltó y fue tras él, pero Lupe la detuvo.

- Dale tiempo...

Juliana asintió y agachó la mirada, me acerqué a ella y simplemente la abracé, dejé un pequeño beso en su frente y ella me rodeó la cintura con los brazos.

- Te amo - susurré.

- Y yo te amo a ti, Val. - dijo fuerte y claro.

Yo sonreí pues sabía que ella quería que su mamá lo supiera y entendiera que es amor, simple y puro amor.

- Y bien, ¿qué vamos a comer? – pregunto su madre intentando calmar un poco el ambiente.

- Pedí sushi.

Me guiñó un ojo y fue hasta la cocina a servir mientras yo me fui donde Oli y Mariana quienes jugaban sentadas tranquilamente en el piso.

- Hola pequeñas.

Oli sonrió al escucharme, yo me senté en el piso y Oli se sentó en mis piernas mientras seguía jugando con las piezas de madera.

- ¿Es tímida? – me pregunto Mariana.

- Un poco.- sonreí.

- No ha hablado mucho desde que estoy aquí.

- Es muy pequeña aún, ni siquiera tiene dos años...

- ¿Te gusta ser mamá?

Casi me ahogo con mi propia saliva. Eso no lo vi venir... Ni siquiera lo había pensado de esa manera.

- Es que... Si mi hermana y tú están juntas, Oli es hija de ambas ¿no?

¿Juliana querría eso? Ella no lo había dicho antes, jamás me propuso compartir la custodia... Yo tampoco se lo pregunté, pero...

- ¿No estás muy pequeña para sacar esas conclusiones?

- No.

Me reí y me levanté cargando a Oli... Caminé hasta la cocina y vi a Juliana y a Lupe hablando animosamente lo cual era bueno, según mi punto de vista.

- Oh, cariño, hablábamos de ti. – me dijo Lupe sonriéndome.

- ¿De mí?

- No, de ti - señaló a Oli mientras Juliana reía. La bebé, sorpresivamente, extendió los brazos y se dejó cargar de Lupe.

- Espero que se lleven bien. – dijo Juliana.

- dile eso a tu hija, yo ya parezco amarla.

Juliana sonrió y se acercó a mí, rodeó sus brazos en mi cintura y me abrazó fuerte mientras veía a Oli.

- Muy lindo todo, pero... Tengo hambre. – Mariana dijo, poniéndose las manos sobre el estómago.

Todos nos reímos. Ayudé a poner la mesa con Juliana para poder sentarnos a comer, yo sabía dónde estaba todo así que no fue problema para mí, creo que Lupe lo notó.

- Buen provecho. – dijo Juliana.

- Igual - dijimos todas al unísono.

Oli se sentó en las piernas de Juliana mientras para poder comer, Juliana había preparado algo diferente para ella, pero no sé exactamente que era.

- Cuéntame Valentina... ¿Cómo es que enamoraste a Juliana? – Vaya, mi suegra no se andaba por las ramas. Suena lindo ¿No? Mi suegra... por fin.

- Pues... - miré aquellos ojos chocolates y me perdí -. Creo que ella me enamoró a mi.

Juliana sonrió y yo la imité.

- Yo quiero decirles algo - ambas la miramos - Sé que apoyé a tu padre con aquella absurda idea de que Daniel era el hombre para ti. Cuando te vi salir con él, supe que ni siquiera te atraía, no era el tipo para ti... ¿Pero que podía decir yo? Tu padre comenzó a hacer negocios millonarios con él y todas las noches me hablaba del potencial que tenía el cómo tu pareja. ¿Sabes por qué se apresuró a buscarte alguien? Porque cuando aquellas fotos de ustedes salieron, ambos notamos algo ahí. Cuando las veíamos juntas e intentaban ocultar las cosas, se notaba. La manera en la que tú, Valentina, ves a mi hija es simplemente encantadora. Y la manera en la que mi hija te ve a ti... Jamás vi tanto amor en sus ojos. Yo era una persona de mente cerrada, chapada a la antigua, pero entendí que vivimos tiempos diferentes y que el amor es solo eso... Amor. Cuando Juliana fue secuestrada tu sufriste tanto, Valentina.... Te veía llorar, te veía suplicar a Dios que ella apareciera con vida, te veía sufriendo, no comías, no dormías... ¿Qué hizo Daniel? Seguir con su vida, de vez en cuando llamaba, pero eso era todo. Tu arriesgaste tu vida por ella y eso jamás lo olvidaré.... Debes amarla mucho y, si es así, tienes toda mi bendición.

Miré a Juliana y se limpiaba algunas lágrimas, se levantó y abrazo a su madre... Yo sonreí y me levanté también, la abracé mientras susurraba un "gracias". Juliana y yo íbamos a ser felices ¿por qué no iba a agradecerle? Juliana es todo lo que quiero y todo lo que necesito, y ahora, sé que podrá ser mía, ante los ojos de todos.

La cena terminó y Lupe llamo a su chófer para que viniera a buscarla, pronto nos quedamos solo Oli, Juliana y yo otra vez... Bueno, Oli se durmió profundamente así que fue a acostarla. Apenas salió del cuarto de la bebé la sujeté por la cintura y la apreté entre mi cuerpo y la pared.

- Valentina... Me asustaste.

- Lo siento - sonreí.

Clave mi mirada en sus labios, la distancia entre nosotras era tan mínima que resultaba torturador. Mordió su labio inferior y todo mi cuerpo reaccionó ante ese pequeño movimiento. Mi mano derecha se coló por debajo de su camisa acariciando suavemente y ella se contrajo ante el toque, yo sonreí pues amaba tener ese efecto en ella. Me acerqué a sus labios y atrapé su labio inferior entre los míos, jalé suavemente y succioné a mi gusto. Comencé a besarla lentamente, delicada, ella me correspondió de la misma manera tierna. Era amor, era un beso de amor. Me separe de ella cuando el aire nos faltó, pero nuestras frentes seguían juntas y nuestros ojos conectaron...

- Te amo - susurré.

Ella sonrió y subió su mano hasta mi nuca, enredándola con mi pelo.

- ¿Lo harás siempre? –

- Hasta el día en que muera. - afirme y eso era cierto, la amaría hasta que mi corazón dejara de latir, inclusive aun entonces...

- ¿Lo prometes?

- Lo juro.

Se acercó a mí y me besó, todo dentro de mi explotó ante su beso porque sabía todo el amor que ella quería transmitirme en ese momento.

- Te amo - susurró contra mis labios.

Yo sonreí contra los suyos y ella me imitó.

- Ven... - la cargue tal cual hacen los novios en la luna de miel cuando llegan a la habitación. Ella rió mientras caminábamos al cuarto, dejo un besito en mi mejilla y yo sonreí.

Delicadamente la deje sobre la cama y me incliné para besarla, luego me levanté y comencé a sacar sus zapatos, se rió cuando me frustré porque tenía que soltar un poco los cordones, pero terminé haciéndolo bastante rápido.

Me subí sobre ella sin poner todo mi peso contra su cuerpo y volví a juntar nuestros labios, esta vez el beso se tornó más intenso... Llevé mi mano dentro de su camisa y toqué su abdomen perfecto. Bajé un poco y comencé a besar su piel descubierta a medida que subía su camisa, la saqué por completo y besé su cuello a mi antojo, lamí y succioné, dejando una marca, se veía muy sexy.

Me levanté un poco, sentándome a horcadas sobre ella y la imagen que tenía frente a mí era demasiado perfecta. Mordí mi labio inferior mientras con la punta de mi dedo recorría el contorno de su sujetador, luego lleve mi dedo por el centro de su estómago hasta el botón de su pantalón, lo desabroché y lleve mis labios a su vientre, al dejar el primer beso noté como su vientre se contrajo, sonreí y seguí repartiendo besos por todo su cuerpo.

Tomé sus manos e hice que se pusiera de pie, metí las manos dentro de su pantalón y lo bajé muy lentamente mientras besaba sus piernas, lo saqué por completo, pero no subí, la miré y ella mordió su labio inferior... Comencé a besar la parte interna de sus muslos y su respiración comenzó a agitarse.

Me puse de pie y mi mano derecha se deslizo desde su pecho hasta su entrepierna, ella jadeo cuando mi mano se detuvo ahí, comencé a moverla muy lentamente sobre su ropa interior y ella gimió, podía notar su humedad, incluso por encima de su ropa interior. La besé y su lengua inmediatamente buscó la mía, su ropa interior comenzaba a estorbarme así que la hice a un lado, toqué su humedad y jadeé, ella gimió. Quitó mi camisa muy rápidamente junto con mi sujetador y ella comenzó a jugar con uno de mis pezones mientras nuestras lenguas seguían en contacto constante.

Mis dedos jugaban con su centro y sabía que, por lo húmeda que estaba, no tardaría en llegar al orgasmo, así que me agache y de un solo tirón saqué su ropa interior y mi lengua comenzó a jugar en el lugar de mis dedos. Ella gimió fuerte y subió una de sus piernas a mi hombro y enredo su mano en mi pelo, haciendo presión. Sus gemidos eran cada vez más altos y mi lengua se movía cada vez más rápido, succione y sostuve sus piernas, ella gimió alto y sentí sus piernas temblar y contraerse llegando al orgasmo.

Me levanté y quité su última prenda para luego besarla nuevamente. Mis manos se fueron hasta su trasero apretándolo fuerte haciendo que ella gimiera. Hice que enredara sus piernas en mi cintura y volví a acostarla en la cama... Pero ella se volteó dejándome debajo de ella. Besó mi cuello y, sabía que mañana tendría una marca, pero sinceramente no me importaba.

Con la punta de la lengua recorrió todo mi pecho hasta llegar a uno de mis pezones, lo rodeó con la lengua y luego se lo llevo a la boca por completo. Lo mismo hizo con el otro, yo gemía, pero su intención no era quedarse ahí. La miré mientras ella quitaba mi pantalón junto con mi ropa interior, separó mis piernas y yo la miré, mi respiración comenzó a agitarse cuando comenzó a acariciar mis muslos y arañar sin llegar a hacerme daño. Me miro y sonrió, llegó hasta mis labios y me besó, yo tomé su rostro y guié el beso, casi exigente. Cuando sentí uno de sus dedos estar dentro de mi gemí alto contra sus labios.

- No hay nada que me guste más que escucharte gemir.

Su voz estaba ronca y jadee de nuevo porque ella sabía cómo me ponía que me hablara cuando lo hacíamos. Otro de dos dedos entró en mí y yo me aferre fuerte a las sábanas, sus labios se fueron a mi cuello y yo comenzaba a perderme en cada embestida. Pero se detuvo y me miró.

- ¿Q-que? – apenas si podía hablar.

- ¿Quieres que siga? - sonrió.

- No juegues conmigo ahora, Juls.

- Pídemelo - mordió el lóbulo de mi oreja.

-¿Qué?

-Pídemelo, o no voy a seguir – Sonrió maliciosamente.

- Joder, Juliana, sigue...

- ¿Te gusta?

- ¡Si, me encanta, así que sigue!

Ella rió y volvió a estar dentro de mí, pero esta vez más fuerte y más rápido. Una de mis piernas quedó entre las suyas y ella comenzó a moverse contra ésta haciendo notar su humedad.

- Mierda.

Mordió mi cuello y comenzó a embestir mucho más rápido, sentí como mi vientre se contraía y los espasmos llegaron a mí, explotando en un orgasmo. Ella también llego, y cayó sobre mi cuerpo. Me incorporé rápido y la puse debajo de mí, sin esperar la penetre con dos dedos, ella gimió alto, bese sus pezones y su cuello, su cuerpo estaba muy sensible después de dos orgasmos y eso me encantaba, la mire y estaba apretando con fuerza las sabanas, con el dedo pulgar comencé a jugar con su centro mientras la embestía rápidamente, no tardó mucho en volver a tener otro orgasmo, yo caí rendida sobre ella.

- Mierda... - nuestras respiraciones estaban muy agitadas y las dos quedamos completamente sin fuerzas. - Te amo - susurró mientras sus ojos se cerraban.

Yo sentía mis ojos tan pesados que solo sonreí y la abracé a mi cuerpo.

El resplandor del sol entraba al cuarto y, molestaba. Froté mis ojos y sentí el peso del cuerpo de Juliana junto al mío. Sonreí al verla... Miré el reloj y se hacía tarde, hoy tenía otra sesión de fotos.

- Juls.. -susurré - Juls...

- ¿Uhm?

- Se nos hace tarde...

Ella abrió muy poco los ojos y elevó la comisura de sus labios al verme, yo le sonreí de vuelta y besé cortamente sus labios.

- Buenos días. – le dije dejando un corto beso en sus labios.

- Quiero despertar así todo el tiempo.- se acurrucó más a mi cuerpo y yo reí.

- ¿Te llevaras a Oli al trabajo?

Ella asintió.

- Esta bien... Voy a ducharme.

- Oh Dios, todo me duele - dijo al estirarse y yo me reí.

- ¿No quieres ducharte conmigo?

Me levanté y caminé hacia el baño, ella me veía atentamente, sin decir nada, parecía perdida, pero sus ojos no se separaron de mi cuerpo.

- ¿Juls?

Agito su cabeza y miró mis ojos.

- ¿Que?

Me reí y negué con la cabeza.

- Que si te duchas conmigo...

-: Aunque es una gran oferta... Oli debe estar por levantarse, así que anda. - se rió.

Luego de ducharnos, cada una por su lado, nos vestimos y Juliana vistió a Oli mientras yo hacia el desayuno. Cuando estábamos comiendo, el timbre sonó.

- Yo voy... - aún andaba en medias y con el pelo desordenado, pero no importaba, seguramente sería el portero o algo así.

Caminé hasta la puerta y abrí...

- Daniel... - susurré.

- ¿Valentina?

______________________

Esta historia NO me pertenece, es una adaptación realizada con la autorización de su autora Laurendruxgs

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro