Juliana POV
- Señorita Juliana, la fiesta de la empresa es este viernes y ya está todo listo. – Me informó Martha.
- ¿Han enviado ya las invitaciones?
- Sí. Todos los que trabajan con las Empresas Valdés están invitados.
- ¿Tienes la lista? Envíala a mi correo, por favor. –necesitaba asegurarme de que Valentina Carvajal estuviera en la lista.
- Como ordene.
Los días transcurrían y las cosas en la empresa estaban un poco tensas, el trabajo más la fiesta tenia a todos patas arriba, esta semana fue estresante pues mi padre quería que todo saliera perfecto. Pero por fin, llegó el viernes.
La junta directiva de las empresas Valdés había decretado dar libre a sus empleados este viernes pues quería que las señoritas tuvieran todo el tiempo que quisieran para la fiesta. Gracias, papá.
- Scar, ¿que te vas a poner? - dije junto al teléfono.
- No lo sé aún July. Algo cómodo, voy a sacar fotos todo el evento. Llama a Rachel...
- Bueno, adiós. – Ya no aguantaba los nervios, ¿Por qué me importaba tanto lo que debía ponerme? Era una fiesta más, pero la verdad es que quería lucir linda para... para mí, si, para mí.
Llame a Rachel.
- Hey July...
- ¿Que te vas a poner para hoy? – directo al grano
- Cualquier vestido. ¿Desde cuando te preocupas tanto por tu ropa? Siempre te pones un vestido de los miles que tienes y asunto resuelto.
- Si pero...
- Ella va. – me interrumpio. Esto de tener mejores amigas ya no me esta pareciendo algo tan bueno, creo que me conocen demasiado bien o soy muy evidente.
- ¿Qué? – No supe que mas responder
- Tu corredora. Va a ir a la fiesta... Por eso estas así. Ni creas que no me di cuenta como se miraban July.
- ¿Ella me... Me miraba como si yo le gust.. Olvídalo. - ¿Sera posible? No, no, no Juliana, eso es imposible, mejor no pienses en eso, ni en sus ojos azules tan perfectos, no en sus apetecibles labios, ni en su carita de ángel, ni en... Dios, estoy perdida.
- Sí. Suerte hoy July... nos vemos más tarde.
Mierda. Y más mierda.
Valentina POV
- Listo, no iré.- me tire sobre mi cama.
- Tienes que ir imbécil. ¿Sabes lo afortunado que eres si te llega una invitación VIP a una fiesta de las empresas Valdés? Por Dios Valentina, sigamos buscando algo que ponerte. – Mi amiga Lorena intentaba convencerme de ir, y no es que no quisiera ir, bueno, para ser honesta tenía un poco de miedo.
- Me sentiré tan incómoda. Todos se verán tan elegantes y tan de mundo... Yo... No podré... - bajé la mirada.
- Hey, mírame.- lo hice - ¿Hay algo que te ha quedado grande en la vida? No. Tu eres increíble Valentina, apenas llegas a un lugar causas sensaciones en todos los que te observan, hoy no será diferente..
- Si pero...
- A ti lo que te preocupa es... Es Juliana.
- ¿Qué? Claro que no, qué dices
- Es cierto, mira... Te sonrojaste OH POR DIOS, la gran Valentina Carvajal se ha sonrojado por escuchar el nombre de una chica. Debí haber grabado esto.
- Ya callate y sigamos buscando algo que ponerme. - Ella rió y siguió buscando entre sus vestidos y mi ropa.
- ¿Qué te parece este?
- Está lindo... Perfecto, es este.
La noche llegó, y con ella mis nervios. Me había colocado el vestido negro, unos tacones del mismo color, mi cabello suelto como siempre lo llevaba, mis ojos con delineador y mis labios con labial rojo. Estaba lista. Me subí al auto luego de que Lorena me deseara suerte, manejé hasta el club en donde sería la grandiosa fiesta del año.
Juliana POV
- Estas hermosa July. – Habia llegado junto con Scar a la fiesta, y en lo único que podía pensar eran verla.
- Tú igual.
- ¿Nos tomamos una foto juntos hija? Estas preciosa.- dijo mi papá llegando a mi costado.
- Claro, papá.
Scar preparó su cámara y nos tomó la primera foto. Eso hizo que los demás fotógrafos se interesaran por fotografiarnos juntos. Pronto,infinidades de flashes me cegaron. Cuando creí suficiente, me retiré con una sonrisa y caminé hasta donde estaba Scar.
- No entiendo por qué invitan tantos medios de comunicación. – me sentia un poco abrumada.
- ¿La fiesta del año y ellos no iban a venir? Que bueno que tu padre nos dejó cubrir el evento a nosotros, ellos no podrán publicar nada antes que yo o los demandan. - yo sonreí.
- Eres la mejor en esto, ¿cómo no te la iba a dar? - ella me abrazó.
- Deberías voltear a ver quién viene entrando... - me dijo haciendo un gesto con la cabeza para que volteara hacia la entrada.
- Qui... ¡Oh por Dios!
Decir que Valentina se veía hermosa quedaría completamente corto... Ella se veía mejor que cualquiera en esta fiesta. Caminaba tan segura de ella misma que me intimidaba. Vi como Scar le sacó una foto y sonrió mirando el resultado. La mirada de Valentina se encontró con la mía mientras un mesero le ofrecía una copa. Ella la tomó y caminó hasta donde yo me encontraba, mis piernas amenazaban con dejar de funcionar.
- Buenas noches, señorita Juliana.
Oh por Dios.
- Buenas noches, Carvajal. - ¿Es enserio Juliana? ¿Es lo mejor que se te ocurre decir? Tampoco es como que le pudiera decir: Buenas Diosa Carvajal, porque eso era lo que tenia delante de mi... una diosa.
Se acercó para dejarme un beso en la mejilla que duró más de lo que yo pensaba y menos de lo que deseaba. Sentir su perfume cerca de mi fue torturante.
- Hola. Yo existo – Scar nos sacó de nuestra perfecta burbuja. -Valentina elevó la comisura de sus labios y saludó a Scar. - Igual ya me iba... Tengo trabajo que cumplir. Nos vemos, chicas.
- Buena fiesta eh.- dijo la castaña una vez Scar se había ido.
- Supongo que sí.
- Estas hermosa.- dijo casi en un susurro.
- ¿Qué? -sonreí.
- Dije, estas her.. Oh no, no me hará repetirlo.- sonrió igual.
- Tu también lo estás. - su mirada penetró la mía tan sexy y tan intenso que mis piernas volvieron a amenazarme. Pero llegó un mesero ofreciéndonos otra copa a las dos.
- ¿Quieres ir a sentarte? – le ofreci, me sentia muy nerviosa, y quería pasar mas tiempo con ella.
Valentina: Claro... Después de usted.
- Vamos de nuevo con el usted.- ella sonrió.
Caminamos hasta una mesa pero mi papá nos llamó haciendo que fuéramos a donde él estaba sentado.
- Juliana, te quiero presentar a alguien... El es Daniel, el hijo de los dueños de una empresa italiana muy importante.
- Un placer conocerla al fin, Juliana.- besó mi mano y yo le sonreí.
Era lindo, si... Tenía el cabello negro y liso, una barba de tres días que a cualquiera derrite, ojos azules y su piel blanca. Pero no me encantó. Claro, supe de inmediato que era un buen candidato según los parámetros de mi padre.
- Un placer, Daniel.- solté su mano y miré a Valentina, noté como su mandíbula estaba tensa, ¿estaba molesta? - Papá, quiero que conozcas oficialmente a Valentina Carvajal.
- Oh, mucho gusto Valentina.- apretón de manos y luego Daniel quien se presentó solo.- Espero que te lleves la copa eh... - Valentina sonrió.
- Lo haré, señor Valdés.
- Oh por favor, dime Macario... – a mi papá no le gustaban las formalidades, creo que por eso soy como soy. Mi papá nos ha enseñado a ser humildes, respetuosos y sobretodo que no somos más que las personas que trabajan para nosotros.
-Macario... – asintió con la cabeza
- Y bueno, Juliana... Soy nuevo en la ciudad, ¿crees que podamos salir y me la enseñas? – El chico se paró junto a mí. ¿Me estaba coqueteando frente a mi padre?
- Supongo que... Mmm... Tengo algo de trabajo, pero creo que... Sí. – tampoco es que tuviera muchas opciones, debía ser educada.
Escuché como Valentina aclaró su garganta así que la miré. Ella me mantuvo la mirada hasta que él volvió a hablar, haciendo que yo lo mirara.
- ¿Me das tu número telefónico? Podríamos hablar mejor luego de la fiesta y ver cuando salir, ¿no? - mi padre se fue cuando un amigo lo llamó.
- Sí, claro.- me pasé una tarjeta de presentación que el tomó sonriente.
- Te llamaré, seguro lo haré. Por ahora, ¿quieres sentarte?
- La verdad yo estaba con Valent...- volteé a mirarla, pero no la encontré donde se suponía estaba.
- ¿decías?
- Hmm... Nada, supongo que se... Fue. – Genial, quería pasar la velada con ella y ahora todo se fue a la mierda.
- ¿nos sentamos?
- Seguro.
Me senté junto a el, el chico era lindo y estaba interesado en mi... Pero era uno más. Mientras el me hablaba sobre no se qué porque realmente no le estaba poniendo atención, miraba a mi alrededor disimuladamente en busca de unos ojos esmeralda. Sin éxito. ¿Se habrá ido? Decidí sacar mi teléfono cuando Daniel se distrajo con un chico que comenzó a hablarle en italiano y envié un mensaje.
Para: Valentina Carvajal.
Texto: ¿Te fuiste?
Mi celular vibró.
De: Valentina Carvajal.
Texto: Oh, notaste que yo no estaba.
Fruncí el ceño. ¿Qué, por qué Valentina me dijo eso? Era obvio que iba a notar que no estaba.
Para: Valentina Carvajal.
Texto: Por supuesto que lo noté, ¿por qué te fuiste?
Levanté la mirada y este chico seguía muy entretenido lo cual me sirvió de mucho, no estaba interesada en el.
De: Valentina Carvajal.
Texto: ¿Ese chico realmente cree que es más interesante otra cosa que hablar contigo? Qué idiota. Oh mira, ahí va el mesero, sirven buen vino blanco.
Elevé mi mirada de nuevo y el mesero estaba llegando a mi mesa con más copas. Sonreí pues Valentina seguía en la fiesta.
Para: Valentina Carvajal.
Texto: ¿Quieres una?
Seguía buscando sus ojos, pero no los encontraba.
De: Valentina Carvajal.
Texto: ¿Qué busca señorita Valdés?
Volví a sonreír.
Para: Valentina Carvajal.
Texto: Tus ojos.
No sé por qué pero quería que supiera que la estaba buscando a ella.
De: Valentina Carvajal.
Texto: Buscas en la dirección equivocada.
Nuevamente busqué, nuevamente sin éxito.
Para: Valentina Carvajal.
Texto: ¿Donde estás, Valentina?
Esperé que un nuevo mensaje llegara, pero eso no pasó.
- ¿Me acompaña un momento, señorita Valdés? - Di un pequeño salto en mi asiento al escuchar su voz tan cerca de mi oído.
- Sí, claro que sí.- me levanté - disculpa, hablamos luego.- me despedí con la mano del chico.
La seguí hasta una pequeña mesa para dos alejadas de todos, con una gran vista de todo Miami.
- ¡Wow! qué hermoso.
- Aquí estaba, es hermosa la vista ¿no?
Volteé y me estaba mirando, no al paisaje ni a la ciudad de Miami, me miraba a mi mientras bebía un poco de su copa, luego acomodó su cabello hacia un lado. Mierda, eso fue tan sexy.
- Lo es.- respondí. Si ella quería jugar, yo también sabía como hacerlo. Recorrí su cuerpo con mi mirada y me detuve en sus piernas, luego en sus labios, sonreí y me senté.- ¿no vas a sentarte?
- Respondiendo a tu pregunta, me fui porque no tenía tu atención.- se sentó y cruzó sus piernas. ¿Cada cosa que hace es así de sexy?
- No tenías por qué irte, pude haberme ahorrado estar ahí aburrida con un chico que ni siquiera conozco.
- ¿Los chicos te aburren? – esta conversación se estaba tornando interesante
- Algunos.
- ¿Y yo la aburro señorita Valdés?
Valentina comenzó a jugar con su dedo haciendo círculos en la orilla de copa mientras sus ojos me penetraban y la comisura de sus labios se elevaban un poco.
- ¿Parezco aburrida ahora? – y ahí estaba yo, otra vez perdida en ese mar azul
- Dígamelo usted.
- Nunca me aburres, me pareces interesante.
Ella elevó una ceja y llevó uno de los dedos que jugaban con la copa a su boca y succionó un poco, rápidamente lo quitó. No había visto nada más sexy hasta ahora que eso.
- Usted también me parece muy interesante. - se inclinó en la mesa quedando mas cerca de mi, pues estaba en la misma posición.
- ¿Sí? – trague en seco. Ella asintió mientras una pequeña sonrisa aparecía en sus labios. Ella miró los míos.
- También me parece hermosa. - dijo casi en un susurro. Su voz me traía mal y junto con eso, una de sus manos se acercó y con su pulgar acariciaba mi mejilla, luego el contorno de mis labios. Yo miré los suyos. Su roce era tan delicado y suave.
- Tú también lo eres. - susurré. Ella suspiró y miraba mis labios. Yo rogaba porque me besara en ese preciso momento, estábamos muy cerca, cada vez más.
- Juliana...- susurró - mierda.
Se alejó y yo solté un suspiro, acomodé mi cabello y me acomodé en mi silla... Ella solo me miraba.
- ¿Que te parece si...?
- ¿Mm..? - estaba medio desconcentrada.
- ¿Quieres ir a una verdadera fiesta? - me sonrió.
Yo en ese momento no me había dado cuenta que con ella iría hasta el fin del mundo si me lo pidiera.
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Esta historia NO me pertenece, es una adaptación realizada con la autorización de su autora Laurendruxgs
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