Marcy no pudo concentrarse lo suficiente durante sus clases de piano. Solo podía pensar en Anne, en su casi beso, en la forma en la que ella estaba dispuesta a entregarle su primer beso. Marcy recordó su primer beso... Había sido con Lance. Un asco total, por cierto. El chico era un completo idiota, pero Marcy estaba ciega de amor. Había hecho locuras por el... Pero eso ya quedaba en el pasado.

"Al menos no le entregaste tu virginidad, idiota" Esto era lo único que Marcy había hecho bien durante su relación con aquel estúpido: negarse aunque él lo pidiera mil veces.

Odalia: No, Marcy, no... Volviste a equivocarte -Dijo, ayudándola a colocar sus dedos en la posición correspondiente- Así. Concéntrate, por favor -Marcy simplemente asintió, sintiéndose enojada consigo misma por no lograr tocar aquella pieza que llevaba semanas practicando.

Finalmente terminaron las torturantes clases de piano, y Marcy estaba dispuesta a salir corriendo por la puerta cuándo la voz de Anne la detuvo.

Anne: ¿Quieres que te acompañe? -Pregunto tímidamente. De inmediato, Marcy sintió los ojos de Odalia y Amity, quien estaba sentada en el sofá junto a Anne escribiendo mensajes con su celular, fijos en ella- Ninguna de los dos vinos en auto así que... Además, vivimos cerca.

Odalia: ¿Viven cerca?

Marcy simplemente asintió, no consiguiendo que las palabras salieran de sus labios.

Anne: En realidad, somos vecinas.

Amity: Espera... ¡¿Qué?! ¡¿Por qué no me lo habías contado, Anne ?!

Odalia: Hija, por favor... No es como si te hubiese ocultado una novia o algo así.

La chica alta simplemente se quedó callada, y Marcy recordó, apenada, la situación tan comprometedora en la cual Amity las había descubierto.

Anne: ¿Qué dices, Marcy?

Ella simplemente pudo asentir con una tonta sonrisa en el rostro. Tomo su patineta y abrió la puerta, esperando a Anne. La chica de la ventana se acercó rápidamente y, luego de despedirse de Amity y la señora Blight, salió por la puerta seguida de Marcy.

Comenzaron a caminar en silencio, solo mirándose de vez en cuando, Marcy sonriendo y suspirando cada vez que pensaba en ella.

"Háblale, idiota"

Marcy: ¿Dónde está auto?

"¡Idiota! ¡¿No pudiste encontrar nada mejor de que hablarle?!"

Anne: Mi auto esta en el taller ahora mismo. Se le pincharon los dos neumáticos delanteros...

Marcy: ¿Ambos? -Marcy la vio asentir- Eso es extraño.

Anne: No cuándo Gus lo hace -Confeso, bajando la mirada.

Marcy: ¿Es la primera vez que lo hace?

Anne: Marcy, no quiero hablar de eso -Fue lo único que dijo. La chica de ojos Verdes simplemente asintió, sabiendo que la respuesta sería no.

Y el silencio apareció entre ambas. De vez en cuando Marcy deseaba hablar, pero sus palabras parecían demasiado estúpidas en su mente y cerraba su boca. Finalmente, una pregunta escapo por sus labios.

Marcy: ¿Te molesta si uso mi patineta? Prometo no ir muy rápido...

Anne la miro sonriendo y, por un momento, Marcy sintió que su corazón estaba teniendo un ataque, pero sin incluir el dolor.

Anne: Te dejare usarla si me enseñas a usarla primero -Propuso. Marcy simplemente fijo sus ojos en los de ella unos instantes y asintió.

Coloco la patineta sobre el suelo y ofreció una mano a Anne. La ayudo a subirse lentamente, llevando su mano libre a la cintura de la chica para mantenerla estable. Anne dejo salir una carcajada de su boca cuándo Marcy comenzó a mover lentamente la patineta, haciéndola avanzar.

Su risa era la gloria.

Anne estuvo cinco minutos más sobre la patineta, Marcy jamás debilitando su agarre, hasta que finalmente decidió bajarse.

Marcy: ¿Ya puedo subir?

Anne: Por supuesto -Contesto con una sonrisa que Marcy imito.

Subió a su patineta con seguridad y comenzó a avanzar junto a Anne, que caminaba con los ojos puestos en el suelo y una hermosa sonrisa en el rostro.

Marcy: Anne Banana, sobre lo que paso en la casa de la señora Blight...

Anne: No me pidas que lo olvide de nuevo. No voy a hacerlo.

Marcy: No es eso... Es solo que... en serio quería besarte -Susurro sin mirarla fijamente.

Anne:... ¿Por qué...? ¿Por qué no lo haces ahora? -Pregunto, Marcy identificando su voz avergonzada de inmediato. Jamás le había resultado tan sencillo percibir las emociones de las otras personas.

Marcy: Porque estoy enferma...

Anne: Marcy...

Marcy: Estoy enferma, y tu no mereces algo así. Tu primer beso debería ser con una supermodelo o algo parecido. Alguien que no tenga todo lo que yo. Alguien que no esté tan jodidamente jodida.

Fue entonces cuando Marcy sintió un tirón en su chaqueta y casi cayo de la patineta. Antes de darse cuenta sus pies estaban sobre el suelo y el rostro de Anne estaba más cerca de lo que debería.

Anne: No me importan todos los problemas que puedas tener, Marcy. Quiero que mi primer beso sea contigo y... ¿Acaso no te has visto en el espejo? ¡Eres mejor que una supermodelo plástica y ruin!... Y si tu estas jodidamente jodida, quiero estarlo yo también -Dijo decidida, sabiendo que cada palabra que salía de sus labios era cierta- Jódeme, Marcy-Susurro, las manos de la chica de la ventana sosteniendo su chaqueta, atrayéndola cada vez más hacia ella. Marcy miro fijamente aquellos labios.

Anne no era la única que deseaba aquel beso. Marcy lo necesitaba. Cada parte de su interior gritaba por aquellos labios.

"Jodeme, Marcy" Una extraña sensación recorrió su cuerpo al recordar aquellas palabras. Anne Boonchuy podía hacerla sentir de tantas maneras que sentía que podía estallar en cualquier momento.

Sus manos encontraron su camino a la cintura de Anne y permanecieron allí, firmes, sin moverse. Los ojos de la chica de la ventana estaban cerrados, sus labios entreabiertos y sus mejillas sonrojadas. Lo único que Marcy deseaba hacer en aquel momento era besarla.

Se acerco lentamente, cerrando sus propios ojos, sintiendo su corazón acelerarse, preparada para sentir los labios de Anne sobre los suyos, cuándo "Little miss perfect" comenzó a escucharse a alto volumen.

Anne: Mierda -Susurro irritada, buscando algo en su pantalón. Se trataba de su celular. Alguien estaba llamando- ¿Mamá?... ¿Qué sucede?... No, estoy bien... Estaba en casa de Amity... Si... Si... Mamá, por fav... Mamá... Está bien, llegare en quince minutos... Mamá, no tenemos que hablar de esto ahora... Mamá... Está bien, estoy con ella. ¿Feliz?... ¡No!... ¡Mamá, no!... Pero mamá... Está bien, solo no me avergüences -Marcy escucho la conversación atentamente, intentando llevar el hilo de esta sin llevarlo en lo absoluto. Cuando los ojos de Anne se encontraron con los de Marcy, esta sonrío- MarMar-Susurro, aun con el celular en la mano- Mi mamá quiere hablar contigo. ¿Crees que...? ¿Puedes hablar con ella para que me deje en paz?

La sonrisa de Marcy desapareció de sus labios. ¿La madre de Anne sabia de su existencia? Dudas comenzaron a atacar su cabeza. No sabía si debía hablar o no, o si su Asperger le permitiría liberar un par de palabras. Pero, aun así, asintió al ver los ojos de Anne clavados en los suyos. Tomo el teléfono y, nerviosa, lo llevo a su oído.

Anne: ¿Si?

Sra. Boonchuy: Es bueno escuchar tu voz -Dijo. Parecía ¿aliviada? Marcy no lo sabía con certeza. No podía descifrar aquel tono de voz- Al menos así sé que eres real y no invento de Anne para encubrir noches de alcohol y sexo... ¿Cómo te llamas?

Marcy: Marcy, soy Marcy-Dijo, dejando escapar un suspiro. Sus manos estaban sudorosas, y no podía entender el por qué. De repente, sus dedos comenzaron a chasquear. Las manos de Anne de inmediato viajaron a sus manos, deteniendo el sonido, haciéndola sentir un poco menos tensa casi de inmediato.

Sra. Boonchuy: Bueno, Marcy, es un gusto hablar contigo... Solo quiero que sepas que estoy muy feliz de que hagas a mi hija feliz, pero me gustaría tenerla de vuelta en quince minutos. Su tía se quedará a cenar y ella prometió preparar la cena antes de que yo llegue...

Marcy simplemente asintió, no recordando al instante que la mujer no podía verla. Finalmente recordó esto y, con las palabras saliendo difícilmente de sus labios, dijo

Marcy: Estará allá pronto, lo prometo.

Se escucho un suspiro a través del auricular.

Sra. Boonchuy: Cuídala, Marcy-Y, por alguna razón, la chica intuyo que no solo se refería al hecho de llevarla a casa.

Marcy: Más que a mi vida -Sentencio, las palabras saliendo más fácil de lo que esperaba, su mano aferrándose fuertemente a la de Anne. Pasaron algunos segundos antes de que Sra. Boonchuy volviera a hablar.

Sra. Boonchuy: Me caes bien, Marcy. Tal vez pueda conocerte algún día.

Marcy: Tal vez... -Repitió entre suspiros, la dificultad para hablar volviendo en el acto.

Sra. Boonchuy:... Adiós, Marcy.

Y fue así como la llamada finalizo.

Marcy le devolvió el celular con una sonrisa y luego, sin pensar en lo que hacía, beso la mejilla de Anne con delicadeza. De inmediato la noto sonrojarse.

Anne: ¿Por qué lo hiciste?

Marcy: Tu madre quiere que llegues pronto, así que no podre darte tu primer beso ahora, pero... Tómalo como un adelanto.

Anne: ¿Adelanto? ¿Eso quiere decir que si vas a besarme?

Marcy: Mi cardiólogo me hizo una revisión antes de salir al hospital, así que no necesito ir mañana. Ivy y Sprig quieren que los acompañe al cine... Pero ir sola sería aburrido, así que quiero que tú vayas conmigo.

Anne pareció dudar un momento, pero finalmente asintió sonriendo.

Anne: Solo con una condición... -Impuso.

Marcy: ¿Cuál? -Pregunto, frunciendo el entrecejo.

Anne se acercó lentamente a su oído, y cuándo el aliento de Anne impacto contra su piel, Marcy pudo jurar jamás haberse sentido de aquella forma.

Anne: Mañana tendrás que besarme.

Marcy no pudo negarse. Ella deseaba aquel beso tanto como Anne.

[....]

Esa noche Marcy y Anne hablaron a través de la ventana con carteles, así como en los viejos tiempos. Marcy le había devuelto la gorra morada a Anne, quien la estaba usando en ese preciso momento, y ella tenía puesto su beanie morado. Usar aquellas prendas se había vuelto una especie de tradición para ellas.

"Cuéntame sobre tu primer beso" Decía el cartel de Anne.

"Fue horrible"

"¿Qué tan horrible?"

"¿Recuerdas la primera vez que te hablaron de la reproducción humana?"

"No podría olvidarlo"

"Peor que eso"

Marcy la vio reír a través de la ventana, y un hormigueo se apodero de su cuerpo. No la estaba escuchando, pero su risa se convirtió también en la risa de Marcy en menos de un segundo.

"Eres hermosa, Anne Boonchuy" Escribió. Las mejillas de Anne se sonrojaron al leer esto y una sonrisa apareció en sus labios.

"¿Cómo pasamos de hablar de la reproducción humana a los halagos?"

Aquí quedo el maratón, porque no hecho nada de mis tareas y lo más probable es que actualice el fin de semana. Y estaré participando como jurado para algo que diré luego xd