Capítulo 15

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Coramora, 27 de Septiembre del 2018

Axel dejó de cantar y pasó su mano por la cabeza un tanto frustrado, Griffin le hizo señas para que supiese que todo estaba en orden, pero él sabía que no lo estaba. No le estaba saliendo bien la canción y se encontraba al punto del llanto por eso; a Axel no le gustaba sentirse de esa forma, sentía que lo estaba arruinando, que había muchas personas detrás de él esperando que hiciera algo bueno y que no podía estropear su canción porque era lo que salía de él, era el mensaje que le daba al mundo.

Entonces, una mala canción, era un mal mensaje hacia el mundo y él no podía darles eso.

—Quiero que repitas el coro una vez más y te tomas un descanso—le dijo Garrett detrás del vidrio.

Axel se estiró un poco y botó fuerte el aire. Le dio su seña a Garrett y este colocó la melodía para que pudiera escucharla a través de sus audífonos.

—Perdóname por el mal momento que causé, por las lágrimas que cayeron a las tres de la mañana y sin nadie que supiera lo que sólo tú y yo sabíamos que fue—cantó la primera parte, esperó unos segundos y continuó—. Perdóname por el amargo de mí mentira, la que supiste con sólo verme, tenerlo todo no era suficiente, lo suficiente fue quererte.

Dejó de cantar y observó a Garrett con una sonrisa en el rostro, le enseñó su dedo pulgar como señal de que lo había hecho bien.

—Se queda, Axel—le dijo—. Mañana continuamos con la canción, ahora ve a casa a descansar.

Axel se quitó los audífonos y salió de la cabina, Griffin levantó su mano mostrando la palma para luego chocar ambos los cinco.

—Esa canción me hace poner triste—le dijo el pelinegro—. Más porque sé para quién es—colocó su mano en el corazón—. Maldito Gino—ambos rieron.

—Al menos sabes que no están peleados en el presente—respondió Axel, Griffin asintió—. No has entregado tus canciones—le comentó, Griffin se encogió de hombros.

—Tengo dos muy buenas pero que no poseen de una identidad hasta que le encuentre un buen título—respondió—. Mientras que eso sucede, podemos tocar las canciones de T.J todas sexuales y las de Gino de disculpa. Quería que las mías fueran netamente amor pero en una noche de inspiración, escribí sobre Iris y hasta ahí llegó mi propuesta.

Ambos se montaron en el ascensor para bajar hasta la recepción.

—El desamor también cuenta.

—Contaría si yo fuese Taylor Swift que hace obras de arte como All Too Well pero como soy Griffin Arlen y no sé componer tan bien...no, no cuenta—se bajó del ascensor y Axel lo siguió.

—De Kloss eres el que mejor compone—le dijo, Griffin sonrió.

—Ax, el mundo entero sabe que yo soy el mejor Kloss—dijo con fingida arrogancia. Axel rodó los ojos y caminó hacia el auto de Fausto, uno de sus guardaespaldas—. Quiero ir a ver a Marie, ¿me llevas a La Clave de Sol? —le preguntó a Fausto, este asintió.

— ¿Ya dejaste de jugar al buen amigo con ella? —le preguntó—. Los besos y los coqueteos como que no cuadran con la idea de amigos.

—Hay muchas clases de amigos, y luego estamos Marie y yo—sonrió—. La invitaré a nuestro próximo concierto, quiero salir con ella antes de irnos a Leosville.

—Vale—respondió y sacó su teléfono—. Estoy pensando en terminar todo con Miranda, ya no quiero fingir nada.

—Siendo sincero, te tardaste más tiempo de lo que me imaginé—respondió—. Pensé que la dejarías a la semana, no eres de fingir las cosas.

—Howie cree que es una buena idea.

—Que se joda Howie—dijo, Fausto se rió y Griffin sonrió—. Ve, hasta Fausto sabe que es algo estúpido lo que estás haciendo.

—Es cierto—dijo Fausto, Axel rió y sólo se encogió de hombros—. Mi sobrina dice que sus fans están juntándote con Jo y que tienen un nombre para la relación, Joxel o Jaxel, algo así era.

—Mira que interesante, hasta nombre majo le pusieron—dijo Griffin, Fausto detuvo el auto frente a La Clave de Sol—. Déjame aquí, puedes llevar a Axel a donde sea que quiera y me buscas en media hora.

— ¿Sin guardaespaldas? —levantó una ceja Axel.

—Hoy hay poca gente, estoy a salvo—respondió y abrió la puerta del auto—. Te veo en media hora, Fausto—lo saludó y bajó del auto para cerrar la puerta y caminar hacia la entrada del local.

Miró por la ventana y pudo apreciar a Marie sobre el escenario cantando. Entró y agradeció atinarle a lo de poca gente que habría y se acercó hacia la barra. Saludó a Evan, amigo y compañero de Marie y pidió un café con caramelo y una rebanada dulce de leche para sentarse en una de las mesas y comer mientras la observaba cantar.

Era tonto que a sus veinticinco años se pusiera tan nervioso con una chica; la fama le había hecho ganar experiencia pero cuando estaba con ella se sentía como si fuese un adolescente otra vez, y no podía permitírselo tan fácil.

Aplaudió cuando terminó de cantar y sonrió al ver como todos los que estaban en el lugar andaban igual de cautivados por la voz de la chica. Ella agradeció al público y bajó del escenario, caminó hacia la barra y se colocó el delantal, Griffin observó como Evan le decía algo al oído y sonrió cuando su mirada se encontró con la de ella.

La saludó con la mano y Marie se acercó con una sonrisa.

—No sabía que venías—le dijo.

—Es lo bueno de las sorpresas, nunca se sabe nada—respondió—. Siéntate, puedes comer un poco si gustas.

Marie le hizo caso y tomó la cuchara, lo señaló con ella.

— ¿Está babeada?

—Mmm—musitó—. Puede ser—le sonrió, ella negó con una media sonrisa y tomó un poco del dulce de leche y se lo llevó a la boca.

—Amo los dulces de aquí—dijo—. ¿Y por qué disfruto hoy tu visita?

—Quiero invitarte a un concierto, bueno, a mí concierto—colocó su mano sobre la de ella—. Puedes llevar a tu amigo el pintor.

—Dean.

—Lo sé, pero es divertido decirle tu amigo el pintor—Marie rió, sacó su billetera del bolsillo y sacó unos pases para su concierto—. Será en el estadio de fútbol, tendrás estos pases V.I.P para que puedas ingresar con él y puestos en primera fila para que disfrutes y yo puede verte de cerca. Puedo pedirle a Fausto que te busque.

—No hay problema, yo puedo ir con Dean a parte—dijo—. No quiero ser molestia para Fausto, no importa las veces que digas que no lo soy.

—Vale, está bien—miró su reloj—. Ya pasó mi media hora de receso, tengo que irme—se levantó un poco de la silla y se acercó a darle un beso en la mejilla—. Te veré en el concierto entonces—sonrió y se marchó.

Marie miró por la ventana cómo se alejaba y se subía a la camioneta negra que estaba frente a la puerta. Suspiró al verlo alejarse, Griffin Arlen era el chico más encantador que había conocido. No dudaba de ello.

~•~

—Por la deblin, Gino, ¿en dónde coño dejaste mis baquetas? —dijo molesto T.J, Gino suspiró y le mostró las palmas de sus manos.

—Te dije que las dejé en este mesa—la señaló—, y que no sé en donde fueron a parar.

— ¿Por qué dejas las baquetas en la mesa en donde todos pueden pasar?

— ¿Por qué me dejas las baquetas a mí? —suspiró—. Pudiste dárselas a Axel, él es más responsable.

—Disculpa sabelotodo, hasta donde tenía entendido, tú no te cansas de alardear que eres el más responsable y ordenado.

Griffin entró a la habitación y le echó un vistazo a ambos.

—Venga, ¿por qué peleamos ahora? —preguntó, T.J señaló a Gino.

—Perdió mis baquetas.

—Tus baquetas están en la mesa del estudio—respondió—. Las vi hace unos diez minutos, cuando entré a ver cómo le iba a Axel en la grabación.

T.J le echó una mirada molesta a Gino y salió sin decir nada de la habitación. Gino se lanzó en el mueble y Griffin lo siguió.

—Me encanta como haces las paces—dijo con notorio sarcasmo—. No sé cómo se te da esto de las disculpas, pero definitivamente perder las baquetas de un baterista no son parte de ellas.

—Tengo la sensación de que me dará un puñetazo un día de estos—dijo, Griffin rió.

—Y puedes combinar el morado de tu ojo con la bufanda esa fea que tienes—Gino rodó los ojos y se levantó del mueble—. Hey, sé que no quieres que te ayude en estas cosas pero conozco una chica que puede que te interese.

—No quiero salir con nadie en este momento, ni chicas ni chicos—respondió—. No importa lo lindos que sean.

Griffin asintió y prefirió no hablar de ese tema. Gino era un poco borde cuando le tocaban los temas relacionados al amor, tendía a no saber mostrar sus sentimientos de buena forma y le costaba también aceptarlos.

T.J regresó junto sus baquetas, le dio una mirada a Gino y luego pasó a sentarse al lado de Griffin. Sacó su teléfono y permaneció en silencio viendo sus redes sociales.

—Están hablando mucho de Julia en twitter, es tendencia mundial—dijo T.J y miró a Gino—. Dice que se filtraron unas fotos de ella desnuda.

Gino frunció el ceño y sacó su teléfono para también sentar en el sillón. Buscó los mensajes de twitter en donde mencionaban a Julia y se inmutó un poco al ver una foto en donde aparecía muy visible su pezón.

—Están lanzándole mierda a su imagen, andan tachándola de zorra—mencionó y apretó su mano, odiaba que dijeran esas con las chicas. No era zorra, ni puta ni nada por estilo, no tenían derecho de decir nada sobre ella ni sobre ninguna otra chica—. Iré a su casa a ver cómo está—se levantó—. Si Howie pregunta por mí le dicen que fui a la casa de mi mamá—comentó y salió de la habitación.

—Escribiré un tweet defendiéndola, ustedes deberían hacer lo mismo—les dijo a Axel y a Griffin, estos asintieron estando de acuerdo con ello.

~•~

Silvia, el ama de llaves de Julia, lo dejó pasar a la casa. Gino no tuvo que pensar mucho para descubrir en dónde podía estar, sabía que se encontraría en el pequeño estudio debajo de las escaleras que tenía en la sala. Julia amaba ese lugar, le recordaba a su casa cuando era una niña y más de una vez estuvo con Gino ahí dentro.

Tocó la puerta y al no recibir respuesta pasó y la observó tumbada en la pequeña cama que había ahí. Se acercó a ella sentándose a un lado de la cama y acarició su cabello intentando darle un poco de tranquilidad. A pesar de no verla completamente podía escuchar los sollozos sobre la almohada.

—Uno creería que luego de varios años te acostumbrarías al odio que lanzan sobre ti—dijo ella—, es una completa mentira. Nunca lo haces, sólo debes fingir que todo está bien para que no se crean que hayan logrado vencerte—hizo una pausa—. ¿Qué haces aquí?

—Estoy aquí para ti—le dijo—, puedes contar conmigo siempre. ¿No lo recuerdas? ¿En las buenas y en las malas? —ella se volteó y lo miró.

— ¿Incluso con cuatro años de relación terminada? —rió un poco.

—Incluso con todo eso—acarició su rostro, Julia suspiró y pasó su mano por sus ojos limpiándose las lágrimas—. ¿Cómo ocurrió?

—Confié en el chico equivocado—respondió—. Me mandó sus fotos y quise devolvérselo—suspiró—, ni quiera estaba saliendo seriamente con él, sólo me estaba divirtiendo. Me siento estúpida.

—Hey hey, no eres estúpida—le dijo—. Estas cosas le pasan a cualquiera, incluso me ha pasado a mí. Cuando somos famosos estamos expuestos a todo.

—Nunca he visto una polémica de ti desnudo.

—Porque no lograron subir las fotos sino que me amenazaron con ellas—Julia abrió la boca—. Sí, te dije que todos somos víctimas de esto.

— ¿Cómo lo solucionaste?

—Howie nos ayudó, imagino que tu representante hará lo mismo. Dirá algo al respecto—ella asintió.

—Me llamó diciendo que no dijera nada por el momento, que él lo iba a solucionar; pero no puedo quedarme así como si nada hubiese ocurrido. No quiero acabar con mi imagen, no me gusta. Me costó ganarme mi reputación, no puedo perderla por una foto.

—Y no lo harás, las mujeres pueden tomarse fotos desnudas si desean, estamos en el siglo veintiuno, ya deberían de armar drama por eso.

Ella le sonrió y se acercó a él para abrazarlo.

—Gracias Gino—le dijo—. Eres el mejor, de verdad lo eres. Te quiero un montón.

—Yo también te quiero, Julia—tomó su mano—. En las buenas y en las malas.

—Sabes Gino, jamás creí que podíamos ser amigos luego de nuestra relación—confesó—, pero creo que funcionamos mejor como amigos que como cualquier otra cosa—Gino sonrió—. Eres menos molesto como amigo.

—Oye, que dices, si soy tremendo novio—dijo, ella frunció sus labios y negó. Gino fingió sorpresa y la empujó echándola a la cama por completo.

Julia rió por eso y lo atrajo hacia ella para tumbarlo a su lado y permanecer los dos viendo el techo de la pequeña habitación. Tomó la mano de Gino y se movió un poco para abrazarlo colocando su cabeza en su pecho.

—Para que tener a un Kloss de novio si lo puedes tener como mejor amigo.

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¿No aman a Griffin y Marie como yo? Son unas bellezas <3

¿Cuál sería el nombre de la relación de Axel y Jane?

¿Y la de Axel y Jo?

¿Qué piensan de Gino y Julia? Yo los amo como amigos y pienso darles más momentos como esos, así que se la calan. 

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