" Todos estábamos en un gran valle. Este era mi cuartel operativo desde que mi "adorado padre" me expulsó del reino de los demonios. En mi opinión no se que es peor: si traicionar a tu propio clan o que este te expulse por ser una "mala influencia",en serio ¿A qué clase de tonto se le ocurre una escusa como esa para expulsar a la deshonra a una princesa?, nada menos que al Rey de los Demonios, mí padre. Lo único positivo de esto es que yo no tengo que soportar su fea cara todos los días. Pero en este momento no hay mucho cambio a lo que sufría en casa. Todos estaban en un prado rodeados por montañas. Apoyado en una de estas se encontraba, El Rey de los Gigantes, Dolor. A su lado estaba flotando el Rey de las Hadas, Gloxila, con sus grandes alas. Separados de ellos, se encontraban los cuatro Arcángeles, yo estaba en el medio de ellos dos intentando calmar los ánimos, o si, se me olvido añadir que estaban discutiendo de lo lindo. Atrás mío se encontraban Elizabeth y Meliodas uno al lado del otro.

- ¡ CALLENSE! -grité con mi acostumbrado pulmón. Tenía que gritar así o sino no se callaban y estaban diciéndose de todo menos que sus mamas eran lindas. Y todo comenzó cuando el sujeto insoportable llamado Ludociel dijo que los demonios tenían que ser exterminados. Ese sujeto no me agrada y yo no le agrado a él especialmente. Pero volviendo al tema da mi grito todos ellos voltearon a verme asombrados pues yo siempre soy muy tranquila y no suelo gritar.

-¡Hay!- dijo la voz de Meliodas, el estaba escondido detrás de Elizabeth y asomaba la cabeza para verme- ¡Se enojó, esto es malo!

Yo puse los ojos en blanco, este nunca cambiará, ni aunque tenga mujer madurara.

- Grandes reyes, Cuatro Arcángeles no hay necesidad de discutir así. Yo los he convocado para hablar de una gran propuesta.- Tome aire y empecé a hablar.- Como ya saben comenzará la Gran Guerra Santa y se ha formado el "Stigma", pero, y no digo que estoy a favor de la guerra, les debo sugerir crear una "Tierra neutra"...- me interrumpieron, y adivinen quién fue.

- Creo que su opinión sobre la situación no fue requerida "Princesa"- dijo Ludociel con su tono de desagrado por lo que soy y burla porque ya no lo soy más.

- Silencio Lord Ludociel, déjala concretar la idea- dijo el Rey Gloxila.

- Si, tengo curiosidad sobre esa " Tierra Neutra"- me dijo el rey Dolor.

- Bueno el plan es este: ven lo grande que es este valle, planeo convertirlo en "Tierra neutra", o sea un refugio, para cualquier habitante de los cinco clanes. Una vez curados de sus lesiones puede elegir si quedarse aquí o irse. Pero en el caso de quedarse no será considerado un traidor...

- ¡Esto es ridículo nosotros podemos fácilmente curar a todos y... !- decía Ludociel enojado.

- No digo que no sean capases, solo digo que muy posiblemente en una circunstancia de vida o muerte , casi seguro eligen la vida de su camaradas de clan sobre el resto de los clanes- dije.

- ¡Cómo se atreve!- dijo el déspota, digo digo, Lord Ludociel.

- Tiene un punto muy válido, ¿Pero cómo sabemos que usted no hará lo mismo?.- dijo Gloxila, racional como siempre.

- La razón es que yo no pertenezco a ningún clan, ya no. Pero al mismo tiempo pertenezco a todos. Yo y mis sanadores somos las personas más calificadas para esto- dije.- pero hay una condición.

- ¿Cuál es?- dijo el Rey Dolor.

- Como este lugar defenderá la diversidad de los clanes o sea. No será tolerado ataques discriminatorios sin provocación. Entonces- mire significativamente a Lord Ludociel. - No abra diosas que ataquen demonios si porque si. Y quién lo intente, caerá sobre él o ella el poder de los cuatro clanes- todos quedaron en silencio. Sorprendidos.

-¿ Estás sugiriendo que ataquemos a nuestros aliados si  alguien no cumple está norma?- dijo Gloxila.

- No, sé que no lo harán, les estoy pidiendo que me otorguen un poco de su poder para hacer cumplir esa ley.- todos se quedaron con la boca abierta. Luego se retiraron para hablar sobre el tema. Cuando volvieron el primero en hablar fue Gloxila.

- Sabes lo que estás pidiendo ¿verdad? Nunca antes se hizo esto antes. Una sola persona con los poderes de los cuatro clanes.... Aunque se pudiera y tu cuerpo los asimilará hay algunas cosas que tienes que saber...

- El poder que tendrías es muy grande  y  como no es tuyo en realidad, no podrás soportar tanto tiempo los poderes...- dijo Dolor.

- Sin mencionar que cuando se agote tu resistencia a ellos estarás más frágil que un bebé recién nacido,física,espiritual y energéticamente. Así que no te recomendamos usarlos muy seguido.- termino de decir Elizabeth.

- Un momento usaste  la palabra " usarlos" ¿o sea que aceptan?- dije llena de esperanza.

- Por supuesto que n....- dijo Lord Ludociel pero paro al ver que Elizabeth caminaba hacia mí y me ponía una mano en el hombro derecho.

- Yo soy Elizabeth, hija de la Suprema Deidad, Gobernante del Clan de las diosas y yo te otorgó una parte del poder de las diosas- dijo Elizabeth mientras que en sus ojos aparecía el símbolo del Clan.

Gloxila se me acercó, puso su mano en mi hombro izquierdo y dijo:

- Yo Gloxila, Rey de las Hadas, Gobernante del Clan Hada te otorgó un poco del poder de las hadas

También se me acercó Dolor y puso suavemente uno de sus dedos en mi cabeza mientras también decía.

- Yo Dolor, Rey de los gigantes, gobernante del Clan de los gigantes, te otorgó una parte del poder de los gigantes.

Yo miré hacia las sombras y dije:

- Te vas a quedar ahí todo el tiempo o piensas participar- dije con una sonrisa. De ahí salió un chico con cabello rosa, gafas y que parecía más una chica, ¿ Adivinan quién es?

- Hola- dijo Gowter saludando como si nada apariciendo de la nada,a todos les dio un ataque de miedo por la sorpresa que les dio a todos. No lo habían percibido.

- es uno de los Diez Mandamientos- dijo Ludociel levantando el brazo  preparándose para atacar. Gowter levantó las manos como un niño diciendo " yo no lo hice".

- Estoy en "tierra neutra"- dijo la marioneta.- hablando de eso no suena tan bien, tiene más estilo" Tierra segura" ¿ No?

- Me gusta, me gusta. La dejamos así - dije con una sonrisa. Él siempre tenía las mejores entradas.

- Es cierto, no querrás romper las reglas ¿No?- dijo Elizabeth.

Ludociel bajo su mano a regañadientes. Gowter se me acercó y me puso su mano en mi pecho y dijo:

- Yo Gowter del Desinterés, miembro de los Diez Mandamientos y miembro del Clan de los Demonios te otorgó una parte del poder demoniaco.

Entre todos sentí un gran calor empezó a crecer en mi interior y a la vez mi cuerpo empezó a brillar

Así nació la Doncella de los Clanes...

La representante de todos los clanes...

La pacificadora entre ellos...

Conocida por su legendaria benevolencia...

Y su enorme ira con un gran poder destructivo...

La creadora de " Tierra segura"..."

Mientras recordaba como comenzó está historia de la Doncella de los Clanes, miraba fijamente a mi enemigo.

Nos preparamos y empezó la pelea. O más bien su huida. El sabía que un golpe mío y se convertiría en puré de caballero. Nuestras velocidades era muy similares. Podía sentir que estaba usando a todos esos caballeros con esa habilidad llamada "vinculo". Pero no importaba. Cuando el se distrajo hice que las plantas que estaban a sus pies crecieran y lo atacaran. El las cortaba con su espada. Mientras hacia esto, en mi mano cree un pequeño ark y luego lo envolví con materia oscura, el resultado fue una esfera del tamaño de mi palma. Él ya se había liberado de mis plantas cuando yo se la tiré.

-¡ Eclipse mortal!- dije.

El lo esquivo por los pelos, casi no la cuenta. Mi ataque  impactó en una gran montaña que estaba atrás de él. La destruyo, la dejo echa polvo, literalmente. Y solo era una pequeña esfera.

El caballero estaba con la boca abierta del asombro. Y por una vez pude ver el miedo en su mirada. Volé hacia  él, lo agarre de la armadura y subi tan alto como pude. El temblaba de miedo, esta a punto de darle el golpe fina, cuando...

crak, crak

Oh no. Mi tiempo se acabo, ese sonido siempre indica el fin de mi transformación. ¿Quieren saber de donde viene ese ruido?

De todos mis huesos rotos. Y cuando digo todos es TODOS. 

Sentí mi cuerpo perder la transformación y volver a la normalidad. Mientras tanto yo caí en picada.

-" ¡Mierda, mierda! ¡Sabia que era mala idea!"- escuché a Guardián.

Caí sobre el, sobre su lomo. Lo que es igual a caer sobre una cama de plumas. Esta acostada en su lomo mientras el corría. No podía ni mover la cabeza.

- "Tenemos que irnos"- dijo Guardián.

-"No, recoge primero a Meli y después nos vamos"- le dije mentalmente, ni fuerzas tenia para hablar.

- "Estas loca mujer ¡Estas loca!"- dijo él pero igualmente se acerco rápidamente donde estaba Meliodas. Voltio la cabeza y dijo- " Al menos alguien demuestra tener cerebro ¡Eso Ban que no te contagien la locura, huye huye!"

-" Guardián hagamos la conexión también quiero ver"- Como estaba en contacto con su pelaje pude acceder a la conexión. Es una técnica que compartimos en la que yo puedo ver lo que el ve. Los dos veríamos por los ojos de el.

- ¡Que verguenza huir tras la derrota como perdedores vulgares! Como sea, no te dejaré huir-  dijo el caballero. Oh no, se había recuperado y estaba arriba de nosotros y en frente de Meliodas. Guardián le gruño- Bueno, pero que tenemos aquí, tengo que decir que me impresionas. Por un momento tuve miedo y casi nadie a logrado eso. La leyenda de la Doncella  de los Clanes es cierta. El  Gran Maestro Hendrickson estará complacido de tenerte para sus experimentos. Pero primero- volvió a concentrarse en Meliodas.- ¡ Me encargare de  todos ustedes en cuanto acabe con su héroe!

En ese momento Diane apareció detrás de el y casi le da con su martillo. Pero lamentablemente el lo esquivo. 

- ¡Vaya vaya, sigues con vida, Diane, la serpiente!- dijo el caballero con humor.El tonto no sabe lo que le espera. 

Diane tomo a Meliodas entre sus manos.

- Capitan... - Nos miro a Guardián y a mi- Ángela...-  le ofreció a Guardián  su brazo y él se subio por el hasta llegar hasta el hombro. Luego Se puso alrededor del cuello de Diane como si el fuera una bufanda. Se preguntarán,  ¿por qué no me caí?. Guardián estaba poniendo toda su magia en mantenerme pegada a su lomo. Diane estaba dándole la espalda al caballero. Parece que a este le molesto porque tosió para que le prestara atención.

- Discúlpame. Lamento interrumpir su conmovedora reunión, pero no me gusta que me ignoren.- dijo el.

- ¿Fuiste tu?- dijo Diane.

- Si me entregas a la Doncella de los Clanes, al criminal y a la princesa, no pondre una mano sobre ti o tus...- decía el caballero pero diane lo interrumpió.

-¿Tu hiciste esto?- dijo Diane volteandese un poco. El caballero retrocedió.

-Sabes que te daré un consejo muy útil "No te involucres con mediocres y cuida las decisiones difíciles" ¡Porque tu Gideon no es rival para mi Vínculo! 

- ¿Fuste tu quien lastimo al capitán y a Ángela? - dijo Diane dándose vuelta, levantando alto su martillo , intentando darle al caballero. Pero el nuevamente lo esquivo. Así Diane empezó a revolear su martillo intentando darle y el esquivándolo, no sin dificultad, hay que decir.

- Pero aún debo llevar devuelta a la Doncella, a Meliodas y a la princesa- dijo el caballero mientras esquivaba los ataques de Diane, como si hablara con alguien. Avanzo un poco, pero luego retrocedió- ¡Entendido!- dijo el caballero para salir huyendo. Diane estrello su martillo a la tierra e hizo su técnica.

- ¡Catastrofé Madre!- dijo ella.  La tierra se rompió y empezó desprenderse de la tierra. Mientras se formada devuelta en el cielo. Una vez toda junta la tierra Diane volvió golpear esta con su martillo y de golpe volvió a la suelo.

- "Ya nos podemos desconectar"- dije.

-"¿Segura?"- dijo Guardian.Su voz sonaba exhausta. A mi no me engaña, no me queda casi nada de energía ni magia por usar la transformación, él a estado manteniendo la conexión mientras se concentraba para que no me cayera. Debe de estar exhausto. Pero mejor no decirlo. Para no herir su ego diciendo que ya esta exhausto y no podrá soportar más.

- "Seguro"- le dije.

 Vimos a los chicos y Diane se acecó a ellos.

- ¡Oigan!- dijo 

-¡Señor Meliodas, Ángela..!- dijo la voz de Elizabeth. Guardián desendió y me dejo suavemente en el suelo. Elizabeth, King y Ban se me acercaron y me miraban asustados, yo les daba miradas de  "no pasa nada, ya se me pasará, no se preocupen"

Diane abrió su meno y ahí esta mi hermano, también hecho bolsa, pero mucho mejor que yo.

- ¿Qué paso?- dijo él, Diane lo froto por su mejilla antes de devolverlo al suelo. Luego a mí me roso con su dedo meñique la mejilla temerosa de que me rompa más huesos de que ya me rompí. Sonreí levemente. 

-¿Me perdonas lo que haré...?- dijo Ban.

Yo asentí suavemente.

- Señor Meliodas...- dijo Elizabeth. Pero en este momento Ban corrió y de dio un puñetazo a mi hermano que lo envío a volar, y el aterrizo en las rocas.

-Perdona capitán, así quedamos a mano. ¿Si?- dijo Ban.

-Si, a mano. -dijo Meliodas.- Elizabeth se hacercó a él.

- Señor Meliodas- dijo Elizabeth a Meliodas ayudándolo a pararse.

- Discúlpame- le dijo el. Ella estaba tan feliz que lo abrazo. Dejandolo muy sorprendido.- ¿Por que haces eso?

- Señor Meliodas...- dijo Elizabeth.- Señor Meliodas...

-¿Oye te digo algo?- le dijo él.

-¿Si?- dijo ella.

- No tienes nada debajo- dijo mientras le apretaba la nalgas a Elizabeth.

-¡capitán!- dijo Diane

-¡Pervertido!- dijo Hawk.

En circunstancias normales también habría gritado. Pero estas no lo son y estaba muy débil y cansada para gritar. Al parecer Meliodas lo noto porque me buscó con la mirada y al encontrarme en el suelo sus ojos se abrieron grandes y el miedo apareció en ellos.

-¡HERMANITA!- grito corriendo hacia mi al llegar a mi lado se arrodillo, mirándome de arriba a bajo no sabiendo en donde agarrarme sin romperme algo- lo hiciste ¿No es así?- pregunto con tristeza, pero él ya sabia la respuesta, aun así asentí suavemente.- Tonta imprudente.

-Capitán retirarte- dijo Ban, cuando Meliodas lo hizo, el inmortal dijo- solo espero que funcione. Hiperrecuración- dijo arrojándome  una de las esferas que les había robado a las caballeros.

Me sentí mejor, bueno físicamente, me había curado y mis huesos ya no estaban rotos. Pero mi energía como las demás cosas seguían siendo bajas y casi nulas. Pero algo es algo,intente sentarme  y Meliodas y Ban se me acercaron para ayudarme.

- Tómatelo con calma- me dijo Meliodas.

- Un paso a la vez- me dijo Ban.

- No me roben mi diálogo. Eso es lo que yo les decía cuando eran niños- mi voz por fin salio, suavemente, pero salió.

- Entonces escucha tus propios consejos- me dijo King con una sonrisa.

-¡Oye King!- dijo Diane - ¿Tus heridas son dolorosas?

King  rió un poco

- Tranquila me duele solo un poco.- dijo el dándole una dulce sonrisa

Ban, que se había levantado y caminado hacia la espalda de King dijo:

- No hagas tanto alboroto por un rasguño- dijo dándole al rey de las hadas una palmada en la espalda. Solo para que este gritara demostrando que si le dolía ese "rasguño", un grito bastante agudo por cierto.

Piedras atrás de nosotras se demolieron.

- ¿Que fue eso?- dijo Hawk.

 Elizabeth se acerco para ver quien era. Resulta que fue Griamore con el cuerpo de Verónica.

- ¡Griamore!- dijo Elizabeth.- ¡Estas bien!- Griamore estaba llorando.

- Soy un fracaso como Caballero Sagrado- dijo él- No pude protegerla como  me había ordenado la princesa Verónica. Esa fue su ultima orden antes de morir. Siento mucha vergüenza- dijo abrasando el cuerpo de Verónica.- Fallé... le fallé a las dos.

- Griamore, gracias por siempre haber cuidado de mi hermana- dijo Elizabeth en tono triste.- Por favor sepultala a las orillas del lago  Pienes. Ella amaba en ese lugar. Las tres solíamos jugar a orillas del lago todo el tiempo.-  dijo dándole la espalda a Griamore y comenzando a caminar hacia nosotros, agarre la mano de Meliodas entre las mías y la apreté, él me devolvió el apretón, él entendía como me sentía.- Detendré a los Caballeros Sagrados pasa lo que pase. Lo juro por ella.

- ¿Cuando se volvió así de fuerte?- dijo Griamore mirando al cielo.

Mientras todos veían la escena vi a Howzer aparecer en un tornado, quedarse mirando a Diane un poco y luego desaparecer en otro tornado.

Griamore tomo a Verónica entre sus brazos y empezó  a caminar lejos de nosotros. Mientras lo veíamos alejarse, Ban molestaba a King tocándole donde le dolía.

- Oigan ¿Creen que pretenda volver al reino?- dijo Hawk

- Ni idea. Al parecer, los Caballeros Sagrados no son una orden, monolítica.- le respondió Meliodas.

- Oye algo me inquieta ¿Donde esta tu espada capitán?- dijo Ban.

- Creo que la robaron- dijo Meliodas.

- Pero esa espada era muy importante¿No es así?- dijo Elizabeth. Ahora que lo pienso, ¿Por qué es importante? Nunca se lo pregunté porque la obtuvo después de lo que paso con Danafor y no queria hacerlo sentir mal, pero es verdad. ¿Por qué es tan importante...?- ¿No lo inquieta?

- Todo esto me inquieta. La situacion es seria,- dijo Meliodas con cara de preocupacion y con los brazos cruzados. Cuando este tipo se pone serio es algo muy grave. - Pero ustedes estan bien. Y eso es lo importante- dijo mirandonos a Elizabeth y a mi. Ella se sorojo y yo sonrei de oreja a oreja.

Diane agarro a mi hermano de su pantalon para acercarlo a su cara y decirle

- También estoy bien yo- dijocon un puchero.

-¿A que te refieres? ¿Como no vas a estar bien? Eres enorme.- dijo Meliodas como si nada. Oh,oh.Nunca le digas a una  chica que es enorme. Puede entenderse por gorda...

- Seguro que está bien.- dijo Hawk.

- Porque es increíblemente fuerte- dijo King desde su almohada. Meliodas olio a Hawk. Mi hermano estaba con un chichon en su cabeza, adivinen quién se lo ocasionó...

-Se me antojo comer cerdo...-  le dijo Meliodas  a Hawk, mirandolo  sospechosamente.

- ¡No te hagas el chistoso!- dijo Hawk.

-Bueno hay que volver al bar- dijo Meliodas, se dirigio hacia mí y me cargo en estilo princesa- Vamos hermana-yo le rodeé el cuello con mis brazos.

- ¿No me vas a retar?- le dije bajito para que él solo me escuchara.

- No. Estas hecha bolsa, ya habra tiempo para regaños cuando estes más recuperada- miro atras- y hay alguien más que se merece un buen descanso- mire en su dirección, Guardián estaba lastimado y cansado, pobresito mío.

- Guardián transformate- en el momento que se transformo en un gato se desmayo- Elizabeth si no es mucha molestia ¿ Lo cargas y lo llevas a descansar? Se lo merece.- Elizabeth lo hizo. 

-Tambien descansa, hoy fuiste mí heroína- me dijo Meliodas yo apoyé la cabeza en su pecho y mientras escuchaba el bombeo de sus corazones me fui quedando dormida...

ºººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººººº

Me desperte en la cama que comparto con Meliodas y Elizabeth. Llevó puesto un camisón de seda blanco. Guardian esta acurrucado durmiendo plácidamente al lado mío.Es tan lindo cuando duerme y no me crítica o dice sus frases sarcásticas. Y en este momento está ronroneando. En la mesita de luz a mi lado habia una nota, con la letra de Meliodas:

salimos 

en un ratito volvemos

descansa

Te queremos mucho

M,E,B,K,D y H

Se me formó una sonrisa de felicidad en los labios. Pero sentí un agudo dolor un mi mano derecha. Al alzarla para ver que era vi una mancha oscura en el medio de la palma. Intenté sacármela con saliva y con las uñas, pero era inútil no salía. ¿Qué es esa mancha...?

Bueno hasta aquí el capítulo. Espero que les haya gustado. Déjenme sus comentarios.

Al fin saben lo que es la Doncella de los Clanes, pero me mucha curiosidad ustedes que pensaba que era cuando la mencione por primera vez o antes de esta explicación, sean honestos.Porfisss dígamelo, o mejor dicho escríbanme lo en sus comentarios.

Se esta acercándose el momento de la verdad en el que Ángela se enfrentará a la gran verdad de su adorado Meliodas...

Pero todo esto sucedera despues gracias por leerme...

Sin mas que agregar

Saludos Cordiales