Después de esos dos días en la playa ellos regresaron a sus rutinas diarias. 

En este momento Taehyung se encontraba sentado en una banca que estaba por la entrada de la universidad, se encontraba  esperando a Jimin. 

Se le hacía raro esperar a Jimin para después irse juntos, hace tiempo que no lo esperaba. Ya que desde que empezó a trabajar saliendo de su última clase se iba directo a la casa de Jungkook. 

Estaba viendo algo en el celular para distraerse y no aburrirse en aquella espera. 

Unos quince minutos después apareció Jimin de la mano de Yoongi y Taehyung se paró una vez los tuvo enfrente de ellos. 

— ¿Traes cosas para quedarte hoy en la casa? — pregunto Jimin una vez estuvo a su lado. 

— Si, las dejé en el carro de Yoongi — le contó. 

— Bueno vamos que mi mamá está re emocionada por verte — caminaron hasta el estacionamiento. 

— Está bien. 

— ¿Cómo te está yendo en el trabajo, Taehyung? — pregunto Yoongi. 

— No me quejo — empezó a hablar — La verdad no lo considero como un trabajo en tal ya que Jungkook se concentra más en el trabajo y solo me queda contarle cómo van mis días y así — les explico. 

— ¿Te gusta ese trabajo? — le preguntó jimin mientras se subían al auto del alfa. 

— ¿Tú no escuchas, verdad? — le responde con otra pregunta, Taehyung. 

— No me contestes con otra pregunta, Kim Taehyung — vio por la ventana. 

— Es que estoy diciendo que no me quejo del trabajo, pero siento que por la paga es mucho para un trabajo donde no se haga algo — murmuró. 

— Taehyung — Yoongi lo llama. 

— Mande. 

— Si, Jungkook, no te pone mucho trabajo es por que no sabe que ponerte hacer, pero acuérdate por cual razón te contrataron — le recordó. 

— Lo sé, pero es mucho dinero para un trabajo como ese. 

— Estás cuidando una vida es mucha responsabilidad y más si cuidas la de un empresario que en cualquier momento puede morir — le recordó. 

— Él no va a morir — negó rápidamente — El todavía tienen que vivir mucho. 

— Eso no lo sabes y mucho menos si él se niega a romper el lazo — le recordó. 

— Solo tiene miedo de que le pase algo — murmuró jugando con sus dedos de sus manos. 

— Mejor cambiemos de tema — habló Jimin. 

Taehyung ni Yoongi se opusieron. 

— Taehyung — Jimin volvió hablar. 

— Dime... 

— ¿Te gusta? — le pregunto. 

— ¿Quien? — pregunto confundido. 

— Jungkook — lo miro por el retrovisor — ¿Te gusta? — le volvió a preguntar. 

— No entiendo a qué viene esa pregunta — se sentía un poco confundido. 

— ¿Te gusta? — repitió la pregunta. 

— El es lindo, me gusta su sonrisa, sus ojos, aunque esos ojos reflejan tristeza y miedo, pero se que en el fondo esos ojos brillan tanto que se puede ver el universo — pensó en aquellos ojos del delta — Me gusta cuando arruga su nariz, su risa y sobre todo que siempre a sido muy respetuoso conmigo. 

— Le gusta — Yoongi afirmó. 

— No me gusta — le dijo. 

— Yo digo que sí — le dijo, Jimin — Nunca has hablado así de alguien, tus ojos brillan cada que hablas y más ese suspiro que soltaste cuando pensabas en el. 

— Bueno y si me gustara... él nunca me aceptaría — comentó. 

— Nunca digas nunca — le dijo Yoongi. 

— Creo que tienen que intentarlo — lo alentó — No pierdes nada. 

Taehyung se quedó pensando si intentarlo o no. 

¿No perdería nada? sabía que si, él perdería si trabajo y una amistad solo por gustar de Jungkook. 

No podía decirle y mucho menos ahora que solo faltaba poco para terminar de juntar dinero para un departamento. 

Y el trabajo ayudaba mucho ya que el dinero que ganaba era una buena cantidad.