La tormenta

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Noob.- ¡Thomás! - tocando al demonio - Smoke respira y cálmate!

El demonio soltó a la bruja para sujetar bruscamente al sombrío y generar gases tóxicos.

Noob.- Tho-Thomás -tomando con sus manos los brazos del otro - Se que estás ahí y me escuchas...

Smoke.- Soy Enenra, Noob... - disminuyendo su fuerza -

Noob.- Se que Thomás me escucha y se que no quieres lastimarme. - tomando el hombro derecho del otro -

Smoke.- Parece que no conoces lo hostil de mí... - volviendo su cabello a la normalidad -

Noob.- Tu no lastimarías ni por error a los que quieres Smoke. - abrazando al otro -

Smoke.- Bi-Han... - volviendo a la normalidad - yo... - desmayandosé -

Jun.- Enenra no es controlable hermano... - incorporándose - ¿Qué haremos ahora?

Noob.- Usaremos mi otra opción, también te debo decir que nos encargamos del Shira Ryu y ahora sigue acá.
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Kuai.- ¡Hanzo!¡¿Dónde estás?! - congelando a varios onis -

La ordas no paraban, tenía miedo si a su par le pasará algo malo y vió un escapa a la multitud. Tras una ventana abierta entro al templo libre de enemigos, un silencio muy pesado lo acompañaba y no ayudaba.

Noob.- Hola hermanito... - saliendo de un black hole -

Kuai.- ¿Qué planeas Noob Saibot?

Noob.- ¿Por qué la frialdad? - sonando sarcástico -

Kuai.- Tu lo dijiste... Compartir sangre no nos hace hermanos.

Noob.- Todavía estás a tiempo... Únete a mí y te tendré piedad.

Kuai.- Prefiero morir que unirme a ti...

Noob.- Si así quieres...

Noob generó una sombra un bastante peculiar, ya que a diferencia de Saibot está sombra tenía una mueca perturbadora con ojos más abiertos, está sombra corrió al instante impactando en el cryomante que en un flash todo cambio.
Al abrir sus ojos vió el clan en ruinas, el cielo rojo y varios cadáveres. Sin saber que pasó avanzo encontrando escenas más grotescas, quedó en shock al ver mutilados a Cassie y su equipo a excepción de Frost, avanzó y se topo a más de sus amigos asesinados de maneras horribles.
Cayó de rodillas al ver a Smoke con cortes en todo el cuerpo y una sonrisa tejida literalmente, Jun con una venda sangrada en sus ojos y estos en sus manos llegó a una parte donde pudo ver a dos personas.

Kuai.- ¿Frost?

Frost.- ¿Vió que tengo potencial? - empuñando una daga - ¿Scorpion es la prueba final?

Sin decir algo más tomo a Hanzo para cortar su cuello y cayendo al suelo.

Kuai.- ¡Hanzo! - reteniendo lágrimas -

Frost.- Matar te da poder y tú hora llegará...
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Aquel piromante se las ingenio para meterse al templo y dejar a los demonios, el silencio reinaba y no bajaba la guardia.

Noob.- Veo que Kuai y tú son muy unidos... - saliendo de la oscuridad - ¿Tan fuerte es su lazo?

Hanzo.- ¡No te atrevas a lastimarlo!

Noob.- Va a lamentar tu muerte...

Jun.- Déjamelo a mí. - entrando -

Hanzo.- Ya pudimos contigo bruja.

Jun.- ¿Quieres jugar con mis marionetas?

Con una señal entraron Mileena y Tanya, sus rostros no reflejaban nada y tal era obra de Jun. Ambas mujeres empezaron a atacar al piromante el cual trataba de no dañarlas puesto que no eran responsables de sus actos mientras la bruja y Noob miraban.

Hanzo.- ¡¿Cómo es que las encontraron?!

Noob.- Tras una visita a tu hogar ellas no dudaron como varios en defender, su esfuerzo en vano como sus muertes.

Jun.- Tal parece que ellas te tienen aprecio.

Noob.- Me adelantaré al templo del cielo, acabas con él y sus amigas y te diriges.

Jun.- Entendido hermano.

Noob desapareció en un black hole, Jun miraba divertida la pelea mientras Hanzo trataba de inmovilizar a las dos para encargarse de Jun.
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Frost.- Da un paso que mi hora llegó, te mostraré mi potencial tu y tus amigos dormirán.

Kuai.- ¡¿Por qué hiciste esto?! ¡Un genocidio... ¡¿Para qué?!

Frost.- Ven sin ninguna de tus estúpidas reglas!

Aquella chica corrió de inmediato para intentar apuñalar al hombre que evitaba los ataques, en un movimiento Kuai logró sujetar a la chica para estrellarla en el suelo y congelarla sin éxito.

Kuai.- No es necesario esto... Todavía te puedes arrepentir.

Su respuesta fue una daga de hielo cerca de darle, Frost parecía no escuchar y solo trataba de lastimarlo. La chica logró hacer un pequeño corte en la mejilla izquierda del hombre que con un dolor sentimental generó pinchos de hielo en el suelo y tiró a la chica en ellos gritando de agonía.

Kuai.- Yo lo siento... Te fallé como maestro... - llorando - Y como un padre...

Ante dicho eso piso a la chica para perforar la más los pinchos y morir.

Frost.- ¿Ese es tu miedo?¿Decepcionarme? - tomando la forma de una sombra -

Aquella sombra desapareció y con ella toda la ilusión igual, Kuai solo vivió una pesadilla y sabía que estaba en la realidad.

Kuai.- ¡Hanzo! - siguiendo su camino -
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Hanzo.- No ganarán nunca Jun! Pudimos con peores cosas! - sujetando a la voraz para lanzarla a la otra -

Jun.- Todo está fríamente calculado, tú y mi hermano son particulares... Son opuestos en habilidad y emocional pero están unidos.

Hanzo.- ¡Se llama amor! Algo que dudo conozcas.

Jun.- Claro que lo conozco, aunque no lo creas amo mucho a mis hermanos ya que son mi única familia.

Hanzo.- Noob a diferencia de Kuai no conoce eso, solo te usará y luego te eliminará para tener el poder!

Jun.- Eso no es verdad... - quedando en shock -

Hanzo aprovechando el momento guío a las marionetas que lo perseguían hacia la bruja que sin percatarse chocaron con ella tirando la. Hanzo que vio el abanico en el suelo lo tomó para romper una pequeña parte que bastó para liberar a sus amigas.

Mileena.- ¿Qué pasó?

Hanzo.- Es una larga historia, pero me podrían decir cómo llegaron Noob y sus aliados al clan

Tanya.- Scorpion perdonanos, estaba todo normal hasta que aparecieron demonios y defendimos pero Noob apareció y unos copos de nieve...

Mileena.- Descuida la mayoría logró escapar y están a salvó, pero el clan fue quemado...

Hanzo.- De nuevo... Pero el Shira Ryu se ha levantado como el Fénix y lo hará de nuevo.

El momento paro cuando notaron como empezaba a propagarse un incendio que no tardaría en acabar todo el templo.
Al mismo tiempo pudieron escuchar los gritos de Sub-Zero.

Hanzo.- Llevense a Jun! Yo iré por Kuai.

Tras ver cómo escapaban las otras no dudo en correr guiandose por los gritos de su novio, en un pasillo a la entrada de una gran habitación vio de la otra entrada al cryomante.

Hanzo.- ¡Kuai!

Kuai.- ¡Hanzo!

Ambos de inmediato se unieron en un abrazo con besos.

Hanzo.- ¿Te hicieron daño? - soltando lágrimas -

Kuai.- Estoy bien, ¿A ti te hicieron daño? - limpiando las lágrimas del otro -

Hanzo.- ¿A quien le importa?

Kuai.- A mí me importa!

El cryomante tomo de las mejillas al otro para besarlo dulcemente mientras era tomado de las caderas y levantando uniéndose más, ignorando el incendio desaparecieron en un torbellino de fuego del piromante.

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