Estábamos comiendo, todo era aburrido para el resto, pero Yoongi y yo no podíamos dejar de reírnos entre nosotros.

— Veo que se llevan de maravilla — dijo mi mamá sonriendo

— Tenemos muchas cosas en común, creo que a eso se debe nuestra buena conexión — dijo Yoongi

— Ya terminé de comer, ¿Podemos irnos ya? — pregunté poniéndome de pié — Yoongi y yo tenemos algo que discutir... —

— Bien, vayan — dijo mi papá

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Vi cómo se iban así que yo tampoco perdí la oportunidad y salí, di la excusa barata de estar cansado y fui a perseguirlos.

Estaban cerca al jardín, Taehyung estaba recostado en el muro y su prometido al frente suyo.

— Taehyung, eres muy bonito — dijo ese chato mientras tocaba el cabello de Taehyung cabello

— Gra-acias — dijo Taehyung nervioso

— ¿Y ese broche? — preguntó el tocando mi regalo

— Me lo regaló Jisoo, ¿No es bonito? — preguntó él con orgullo

— No más que tú — en eso si estoy totalmente de acuerdo — me disculpas, tengo que ir al baño — dijo él retirándose

Vi a Taehyung viendo el paisaje tranquilo hasta que de pronto bajó la cabeza.

— Sé que estás ahí, Jungkook — dijo volteando para hacer que nuestras miradas chocaran

— Me atrapaste — dije sonriendo pero él no parecía contento por mi presencia

— ¿Sabes que es malo escuchar conversaciones ajenas? — preguntó acercándose a mí — tú como alfa debes tener respeto por la privacidad de un omega —

— Y lo hago — dije sonriendo

Estaba feliz pues era la primera vez desde hace un tiempo que me dirige la palabra y puedo verlo de cerca.

— No sé por qué estás tan feliz, pero borra esa sonrisa, no quiero verla — dijo sin mirarme

— ¿No te gusta? — pregunté sonriendo más por su comportamiento

— No me gusta — dijo él evitando verme a toda costa

— Bien, si no quieres verla yo sé un método efectivo para dejar de verla — dije haciendo que él volteé a verme con el ceño fruncido

— ¿Y cu...? —

No lo dejé terminar para apegarlo a mí y juntar nuestros labios, tuve que poner mis manos firmemente en sus hombros para que no se mueva pues se estaba resistiendo, pero eso no impidió que yo siguiera, metí mi lengua a su boca su empecé a mover mis labios sobre los suyos y pude ver como se alteraba más, no pasó mucho para que se diera por vencido pues se relajó y siguió el beso.

No dejábamos de comernos la boca, solo el sonido de los pájaros y nuestras salivas era lo que se escuchaba, en ese momento fue donde decidí soltar sus hombros para pasar mis manos a sus caderas. Lamentablemente lo bueno no dura para siempre y por falta de aire nos tuvimos que separar, cuando me aparte él estaba con las mejillas rojas y la mirada pérdida, un hilo de saliva era lo que nos unía.

— Te amo — dije acariciando una de sus mejillas

— No podemos, tienes que alejarte... — dijo él de forma lenta mientras suspiraba

— No me voy a alejar nunca de tí — dije atrayendo su mano a mi pecho — ¿Lo sientes?, mi corazón late tan rápido que tengo miedo que salga de mi pecho y se vaya contigo porque mí corazón sabe que tú eres la persona a la que queremos para toda la eternidad —

— Jungkook, yo... —

— Taehyung, mira lo que encontré — escuchamos la voz de su prometido acercándose

— Hablamos luego — dije dándole un beso simple para irme corriendo

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— ¿Qué paso Yoongi? — pregunté poniendo mis manos en mis mejillas para intentar bajar la calentura

— Encontré un lindo gatito — dijo mostrándome al gatito de la otra vez

— Es bonito, ¿Verdad? — pregunté nervioso

— ¿Tienes fiebre? — preguntó preocupado, acercándose a mí — toda tu cara está roja, pareces un tomate muy maduro y rojito —

— E-s que yo-o... — me quedé pensando en que decir — tengo un fuerte apego a los animales y cuando vi al gatito me puse así de rojo por su ternura — dije rápido

— Sí, es muy bonito — dijo él jugando con el gatito

— Yoongi, tienes razón no me siento muy bien, así que iré a descansar... — dije para irme corriendo

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— Estoy feliz — dije sonriendo hasta que la cara me doliera

— ¿Porqué estás feliz? — me preguntó Yonnah apareciendo de la nada

— ¡AH! — grité de la impresión — ¿Qué haces aquí? — pregunté intentando calmarme

— Te estaba buscando — dijo sonriendo — el joven Park me dijo que te entregara esta carpeta —

— ¿Y qué es? — pregunté extrañado

— No lo sé, me dijo que lo guardes bien — dijo ella para irse

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Era de noche, toda la tarde me quedé encerrado en mi cuarto por como me sentía, sentía todo mi cuerpo caliente y sensible.

— ¿Taehyung? — escuché la voz de Jungkook susurrando a través de la puerta — Taehyung, ábreme por favor —

— Jungkook, no es muy buen momento — dije yendo a abrir una ventana para que entre aire

— Taehyung, por favor — dijo suplicando

— Jungkook, es muy tarde para hablar — dije detrás de la puerta — mañana podemos hablar tranquilos — dije sintiéndome mareado

— ¿Estás bien? — preguntó él queriendo abrir la puerta

— Lo estoy — dije abriendo un poco la puerta

— No te ves bien, déjame pasar — dijo él empujando un poco la puerta

Me sentía débil así que tan solo ese empujón hizo que me vaya para atrás y la puerta se abriera, vi a Jungkook observándome fijamente y luego vi cómo sus ojos fueron bajando poco a poco hasta quedarse en un punto, yo también bajé mi vista para ver que era lo que observaba y en eso me acordé de la sencilla y delgada pijama que estaba usando.

— Debe-es ale-ejarte-e — dije avanzando para intentar sacarlo

— No me voy a alejar, eso ya te lo he dicho — dijo para cerrar la puerta atrás suyo y acercárse más a mí

— No-o estoy jugando Jungkook, debe-es irte — dije retrocediendo pero arrepentiéndome al instante porque apenas moví mi pierna sentí cómo algo caliente bajaba por mi ano

— ¿Estás en celo? — preguntó él deteniéndose de inmediato

— Ale-ejate — dije entrando en pánico pues mi cuerpo no me estaba respondiendo como quería — mi celo se supo-one que no debía veni-irme hasta de-espués de la boda de Jongdae — dije retrocediendo hasta que choqué con el filo de mi cama, estaba muy nervioso

— ¿Eres irregular amor? — preguntó volviendo a acercárse

— Ju-ungkook — dije suplicandole para que se vaya

— ¿Sientes mi corazón? — preguntó él agarrándome una de mis manos para apegarla a su pecho — sigue latiendo de esa loca forma solo por tí, ahora ¿Sientes eso? — preguntó bajando mi mano hasta su entrepierna — esto también sigue latiendo de forma loca por tí ¿Lo sientes amor? — yo solo pude tragar duro