Pertenecer al mundo exclusivo de la realeza no es tan fácil como se imagina, no tener el control de tu propia vida, y tener que seguir estrictamente ciertas reglas durante todos los días de tu vida no parece ser el anhelo de cuento de hadas con final feliz que todos comentan. Al parecer el mundo real es más cruel de lo que uno imagina, la simpleza se limita a páginas de libros para niños, que desean el camino de la ilusión para crear seres felices hasta afrontar con el crecimiento y aunque se crea que bifurcar dos mundos bien diferenciados es lo correcto, no puedes separar seres por una barrera esperando ver el mundo de color blanco y negro, porque si lo haces, eres como esos seres que omiten la realidad, priorizando una ficción para evitar ver las matices de color gris.

Un día como hoy en "Durmstrang College of Magic" es digno de recordar, los seres místicos, estudiantes ingresantes en el internado tienen su primer día en las lujosas y hermosísimas instalaciones del establecimiento. Durante miles de años, seres como hadas, nomos, elfos, sirenas y espadachines de las familias más poderosas del planeta acceden a la formación académica liderada por la Rectora Brilligte Collins. Es una de las hadas de luz más antiguas de todos los tiempos, siendo considera un inoco para esta escuela, no solamente por su antigüedad y experiencia, sino por su belleza, poder e inteligencia deslumbrante. Con gran autoridad ha sabido estar al mando del colegio desde hace muchísimo tiempo, transmitiendo su esencia, donde su objetivo por años fue y seguirá siendo formar seres honorables, hermosos y astutos, pero alejados de toda la maldad que pueda contaminar sus puras almas.

Éste año es memorable, debido a que hace mucho tiempo, no participaba una integrante de la Realeza, y es que Keleth le Black de la Valliere es la heredera al trono del Palacio "Sepher" actualmente liderado por su progenitores.
Keleth es una Sílfide con tan solo 15 años de edad, sin embargo, no se encuentra en su mejor momento, o como otros dicen, está muy cerca de la oscuridad.

—Estoy muy orgullosa de que inicies tu formación en esta alta casa de estudios hija, yo egresé aquí, y puedo garantizarte que esta escuela cambiará para bien tu estilo de vida.

—No tengo opciones madre, además prefiero esto, a seguir estudiando sola como una prisionera dentro del castillo, teniendo que ver a esos detestables profesores entrar y salir de casa—comenta Keleth mientras se dirigen al instituto en una de sus limusinas.

—Cuando crezcas entenderás que todo lo que tu padre y yo hacemos por ti, es por tu bien.

—A veces lo dudo, si lo hicieran dejarían que tuviese más libertad.

—No voy a discutir los últimos minutos contigo, pero estoy ansiosa porque inicies tu vida aquí, tal vez te puedan educar como siempre he querido.

Keleth solo la ignora, con certeza de que eso será difícil, ya que soportó tantos años las estrictas normas de la corona, que recientemente inició su movilización rebelde en contra de las personas que quieran imponerle lo que tiene que hacer.

El chófer de su familia estaciona el vehículo tras atravesar el brillante portón dorado situado en la entrada de la escuela, Keleth baja segundos después de su madre, y observa la cantidad de personas a su alrededor.

—Esto debe ser una broma, no puedo creer que voy a compartir momentos con estas estúpidas personas —piensa en voz alta y luego se vuelve a introducir a la limusina enfurecida.