~Capítulo 43~

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Hace muchos años los dragones danzaron, dejando tras de sí un rato de perdición y muerte. Dicen que las semillas de tal conflicto fueron plantadas en los tiempos del Conciliador, pero no es posible estar seguro de eso. Por otra parte, no podemos negar que la lucha no fue comenzada por disputas de hombres.

Todo comenzó cuando dos mujeres, una princesa y una reina, desearon lo mismo: ser la primera dama del reino, la más bella, la más querida; en definitiva, tener el poder. Si bien la princesa y la reina no eran parientes de sangre, sí lo eran los dos pretendientes al Trono.

La princesa Rhaenyra y el príncipe Aegon eran los dos hijos del rey Viserys I, pero ninguno tenía amor fraternal por el otro. A la muerte del monarca, y a pesar de ser Rhaenyra la heredera designada por el mismo, la lucha estalló. Los bardos la llamaron «La danza de los dragones», pero en realidad fue una matanza que casi acaba con el pueblo y los propios Targaryens.

Algunos maestres dicen que es importante conocer la historia para que los errores del pasado no se vuelvan a cometer.

Entonces tal masacre no volvería a pasar.

¿O no?

Bastet no quería dudar sobre si su decisión era la correcta o no. Ayudar a Cersei Lannister por el control del reino no era algo que pudiera traerle beneficios. Solo cuando era niña había deseado recuperar el Trono de Hierro, pero ahora que podía tenerlo a su alcance si quisiera no le parecía muy tentador. No quería inmiscuirse en el enfrentamiento entre rosas y leones, pero no podía dejar que el asesinato de Nana Cotha quedase sin castigo.

Su hermana había matado a la única madre que había conocido y quería venganza. Sangre por sangre. Ayudar a Cersei no significa recuperar el trono, era mucho más. Jamie decía que los Tyrell también tenían dragones dispuestos a ayudarlos. No, no iba a ayudar a Cersei porque quería un frío asiente. Iba a luchar junto con la leona porque quería venganza.

Quería matar a su hermana.

-Ya lo he decidido. Cersei quiere fuego, pues tendrá fuego -contestó Bastet a Jamie-. Pero no vamos a hacer nada hasta que sea necesario. Nosotros no daremos el primer golpe.

-Está bien. Mi hermana prefiere también ver el movimiento de las piezas antes de jugar.

-Y una cosa más. -Jamie pareció un poco preocupado ante lo que estaba a punto de pedirle-. Quiere que Cersei cumpla su palabra. Tendré aquello que deseo, todo lo que desee. Sin objeciones

-Un Lannister siempre paga sus deudas.

{ ﹀﹀﹀﹀﹀﹀(🥀)﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀ }

-Tu ama me ha dicho que no puedes dormir. -Dany se sentó en la cama.

Zhaerys miró con recelo a su madre. La sirvienta no tendría que haberse chivado.

-Zhar -Dany acarició lentamente la cara de su hija-, tienes miedo otra vez, ¿verdad?

Zhaerys asintió.

-La otra noche soñe que la mujer mala que mandó matar a Aerys venía a por mí. -Zhaerys empezó a llorar al recordar esa pesadilla-. Soy una niña buena, pero Aerys también era bueno.

-Tú padre y yo no dejaremos que te ocurra nada malo. Los dos estamos para protegerte.

«En realidad los tres» . Sí, le había negado a Daario la paternidad de su hija, pero él la protegería, ¿verdad? Zhaerys no dejaba de ser su sangre y si por Aerys hubiera dado la vida, ¿por qué no por ella?

«Pero no le prohibí acercarse a él. Daario sentía más cariño por el hijo de otro que por la suya propia» , pensó resignada. Otro error más que cometió.

Podría haber dejado que Daario pasase tiempo con la pequeña sin la necesidad de que se supiese la verdad. O incluso mejor: podría haberle mentido desde el principio y no hacerle saber que era su hija.

«¿Por qué se lo dije?», se habría ahorrado problemas de no hacerlo.

«Porque creías que le querías y él a ti» , se respondió a sí misma. Pero él la quería de verdad, ¿no? Era su capitán, había traicionado a los suyos por ella, él era suyo. Y ella lo quería. ¿O quería lo que le hacía sentir? ¿Deseaba tanto sentirse amada de verdad por alguien que no podía ver la verdad?

-Mamá, ¿qué me va a pasar ahora? ¿Soy una niña lo suficientemente buena? -preguntó Zhaerys sacándola de sus pensamientos.

-¿A qué te refieres?

-¿Voy a ser la siguiente reina después de ti?

Aquello la dejó descolocada. Zhaerys nunca había preguntado por el trono. Le gustaba imaginarse al lado de Aerys como su Mano o guerrera, pero siempre era su hermano el que llevaba la corona.

-Papá me dijo que yo sería la siguiente reina, pero que tenía que ser una niña buena.

-Sí, Zhar, ahora que la mujer mala nos quitó a tu hermano eres la siguiente en la línea de sucesión.

-No, papá me lo dijo antes de que eso pasara, que iba a ser reina antes que Aerys.

-¿Qué? -preguntó sorprendida.

-Aerys también se puso raro cuando se lo dije. Me contestó que a lo mejor me casaba con algún rey.

Daenerys estuvo con su hija hasta que esta pudo dormirse. Después, ya sola, pudo reflexionar sobre lo que Zhaerys le había contado.

No tenía pinta de que la niña se hubiese inventado la historia. Hizdahr le había asegurado que sería ella la reina y no Aerys.

«A lo mejor me casaba con un rey...»

Ahora todo cobraba sentido.

Hacía menos de una luna que había recibido una carta que no supo decir si era falsa o no. Volvió a leerla.

Dada la situación actual no espero que creas mis palabras. Y teniendo en cuenta que esta misma carta ha llegado con tanto secretismo haces bien en dudar. La verdad, yo también lo haría.
En caso de que decidas creerme, he de decirte que aunque a simple vista pueda parecer tu enemiga, soy como tú. Las dos somos mujeres que deben sobrevivir en un mundo de hombres. A ambas nos han vendido como simples trozos de carne para el disfrute de hombres y ambas hemos sido obligadas a yacer con ellos para tener a sus hijos. No soy tu enemiga, porque me considero casi igual a ti. Las noticias de que gobiernas en Meereen tú sola, como tus antepasados, me dan fuerzas para seguir. Yo no quería la corona que ahora llevo, no quería que mis futuros hijos soporten todo lo que ello conlleva. Pero no me queda otra. Fui vendida tres veces por mi propio padre a traidores. De ser este otro mundo, tal vez hoy seríamos familia, pero, por desgracia no ha sido así. Tú eres la verdadera reina y por eso ruego por tu ayuda. Solo te pido que salves a mi hija. Ambas somos madres y seguro que sabes que el amor hacia un hijo nos obliga a hacer lo impensable. Por eso te pido ayuda. Podrás pensar que no ganas nada, pero te equivocas: recuperarías lo que por derecho es de tu familia. Estoy dispuesta a que mi hija se case con algún hijo que tengas en el futuro, o nuestros propios nietos. Te daría todo mi apoyo para que gobiernes y nadie diría nada porque nuestra alianza no daría lugar a dudas sobre los derechos que os fueron arrebatados.
Te ruego que salves a mi hija, porque otro dragón a puesto sus miras en ella. Ella y el león quieren todo y harían cualquier cosa, incluso matar a niños inocentes. De madre a madre, te pido ayuda.

Ahora todo estaba más claro.

La habían traicionado incluso en su propia casa. Su niño había muerto porque Bastet deseaba el trono. Le habían contado que había estado encinta durante su estadía en tierras lejanas. Debía de tener escondido al niño para que ella no lo encontrase. Por otra parte, Hizdahr le había prometido a Zhaerys ser reina.

«A lo mejor me casaba con un rey...».

¡Había matado a su niño! Puede que la Lannister no deseara matar a su nieta, pero tal vez el plan de su hermana era que su retoño tuviese dos esposas como Aegon.

No iba a permitir que nada de eso ocurriese.

{ ﹀﹀﹀﹀﹀﹀(🥀)﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀ }

-Mamá, ¿quién es este hombre tan feo? -preguntó uno de los trillizos.

-¡Hijos míos, por fin os conozco! ¡Soy vuestro padre!

Bastet y Richard contemplaban la escena sin saber muy bien qué hacer o decir. Serhat les había pedido que lo acompañasen a la reunión familiar y allí estaban.

-Sin duda alguna, no han salido a mi tío -le susurró Richard.

-No aguantaría a tres bardos más como él -contestó Bastet.

Acabada la extraña reunión, Bastet se marchó a buscar a Jamie. Había algo que necesitaba aclarar. Lo encontró con Tyrion mirando a Viseniam.

-Oh, aquí estás. Jamie y yo estábamos discutiendo sobre el tamaño de Viseniam. Yo diría que es mucho más grande que los cráneos que de los últimos dragones que hay en la Fortaleza.

-Hay algo de lo que tenemos que hablar. ¿Puedes dejarnos a solas?

-No estarás dudando del ofrecimiento de mi hermana -dijo cuando Tyrion se marchó.

-En realidad hay algo que quiero saber. Te ganaste tu apodo al matar a mi padre. Quiero saber por qué lo hiciste.

-Para salvar a miles de personas.

{ ﹀﹀﹀﹀﹀﹀(🥀)﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀ }

-Ella ya lo sabe. Me ha preguntado por la muerte de su padre y se lo he dicho.

-¿Y ha reaccionado mal? -le preguntó Brienne.

-No sabría decir. Parecía que se esperaba algo así.

Brienne lo miró sin decir nada. Eso era algo que le gustaba de ella, no necesitaba excusarse. Toda su vida sintió que debía explicarse ante todos.

Con Brienne era distinto.

-Si ella no ha dicho nada de lo que debas preocuparte deja de darle vueltas. Intenta dormir.

Jamie no sabía cómo había ocurrido exactamente, simplemente pasó. Pero no sentía que Brienne fuese un veneno como lo era Cersei.

{ ﹀﹀﹀﹀﹀﹀(🥀)﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀ }

-¡Esto es inadmisible! ¡Yo soy el rey!

-Les he ordenado yo que te traigan -hizo oírse Daenerys-. Estás aquí por traición. Yo, Daenerys Stormborn, reina de Meereen, te condenó culpable por traición.

-¿Mi reina, qué...?

-Encadenadlo -ordenó. Cuando Daenerys vio que Hizdahr ya estaba preso dio otra señal-. Hizdahr zo Loraq, ¿conoces a estos niños? -Él ni afirmó ni asintió-. Son tus hijos bastardos.

-No sería el primer hombre con bastardos. ¿Qué teme mi reina de unos simples niños?

-Los hijos no deberían pagar por las faltas de sus padres -dijo Daenerys ignorándolo-. Es una lástima que no vaya a ser así. Yo perdí a mi hijo, tú verás morir a tus bastardos.

Y así fue.

Y él sería el siguiente. Por traición, por aliarse con su hermana y ordenar la muerte de su pequeño. Pero la suya sería una muerte más dolorosa. Antes de ordenar a Drogon que lo quemase, se acercó para susurrarle al oído.

-De nada te sirvió aliarte con mi hermana. Cada vez que me tocabas, cada vez que me llamabas «mi reina» mi cuerpo se estremecía del asco. Y una cosa más: Zhaerys no es tu hija. - Se deleitó al decirlo. Su mayor secreto revelado al fin-. Dime, ¿qué se siente al saber que todo lo que has hecho no ha servido para nada?

Al ghiscaro no respondió. Afrontó la muerte ardiente en silencio, tal vez demasiado sorprendido al saber la verdad.

{ ﹀﹀﹀﹀﹀﹀(🥀)﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀﹀ }

-¿Drogo? ¿Qué ocurre, por qué me despiertas?

-Ha venido Jamie muy preocupado. No me explico cómo no lo has oído.

Bastet soñaba con Isatra Neferbah otra vez. La fallecida princesa le advertía.

«El destino ya está llamando y no hay vuelta atrás».

-Ha llegado un mensaje.La reina Cersei ha huido a Roca Casterly mientras que la capital se fortifica-le intentó explicar Drogo-. El reino está dividido. Las tropas Tyrell marchan atacando a sus enemigos. El rey Tommen Baratheon ha muerto.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro