lección 00

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

❝Kim NamJoon, se requiere su presencia en la oficina del director inmediatamente❞

NamJoon levantó la mirada de su libreta con curiosidad al escuchar el anuncio a través de los parlantes que colgaban encima de la pizarra.

¿Él había solicitado por el director? ¿Para qué? Eso nunca había pasado, y no creía haber hecho algo para ser reportado.

El profesor también pareció pensárselo antes de mirarlo y señalar la puerta.

—Está excusado, ve—

Kim asintió y tras guardar sus cosas salió del salón. Camino hacia la oficina del director con intriga. Tocó la puerta dos veces, escuchando el "adelante" del hombre, accedió.

El señor Jung lo miró con una sonrisa ladeada, impecable en su silla de cuero. Señaló una de las sillas de plástico que estaban delante de su escritorio, invitándolo a que se sentara. NamJoon cerró la puerta e hizo lo indicado, mirando a Jung fijamente.

—¿Me mandó a llamar, señor? —

—Sí, NamJoon. Espero no haber interrumpido ninguna evaluación— el nombrado sacudió la cabeza.

—Solo estábamos repasando la clase anterior—

—Perfecto. En ese caso, te explico— dijo ladeando la silla y sonriéndole más. —Dado que eres el mejor promedio de tu clase y destacaste en la prueba de actitud al inicio del año, junto al orientador hemos decidido incluirte en el programa de tutorías para ayudar a los alumnos con dificultades a nivel académico— hizo una pausa, mirando al alumno, que se mantenía impresionado en su asiento. —¿Estás al tanto de lo que implica? —

El chico se tomó un momento antes de responder.

—Creo que si. Me asignaran un estudiante con promedio bajo para que le aplique lecciones, ¿No? —

—Eso mismo. ¿Hay algún problema con ello? —

NamJoon lo pensó. ¿Lo había? Bueno, probablemente fuera algo complicado impartir clases a otro chico teniendo él sus propios deberes, pero aparte de eso, probablemente le vendría bien. Sería una manera de aprender a organizarse correctamente, y haber tenido ese antecedente podría ayudarlo a la hora de buscar un cupo de universidad. Según le había comentado Jackson, era algo que muchas instituciones tomaban en cuenta.

—Obviamente recibirás una pequeña beca por tu ayuda— continuó Jung, claramente tratando de interesarlo más en el asunto. —Sé que debimos consultarte primero, pero BoGum y yo de verdad necesitamos el apoyo de un muchacho de tu madurez—

—Entiendo. Si acepto ¿A quién me tocaría ayudar? —

—No sé si conoces al alumno Kim SeokJin de segundo año—

NamJoon alzó las cejas, sorprendido.

Decir que "lo conocía" sería poco. SeokJin era colega de Jimin, era su mejor amigo. Por ende, ellos habían conversado una que otra vez en alguna reunión o algún receso. Jin era de esos chicos que son callados generalmente, pero que cuando abren la boca automáticamente caen bien. Nam no se considera su amigo, pero honestamente se sentiría más cómodo como tutor de SeokJin que de algún otro chico desconocido.

—He tratado con él anteriormente— le contestó al director.

—¿Se llevan bien? —

—Más o menos. No hemos tenido ningún problema— frunció los labios, pensando. —No sabía que Jin tuviera problemas con las clases—

Jung suspiró, rascándose la nuca eventualmente.

—Los tiene. Le han quedado siete materias—

—¿Siete? — jadeó. —Pero en segundo año se ven once—

—Precisamente por eso necesitamos a alguien que nos ayude— afirmó, mirando a NamJoon con severidad. —Puedes intentarlo por unas semanas. Si ves que es demasiado para ti y empieza a generar trabas en tus estudios, vienes a hablar conmigo y le asignaremos otro tutor. Pero de verdad nos gustaría que lo intentaras—

Kim abrió la boca para responder, siendo interrumpido por el ruido de la puerta al ser tocada.

—Adelante— dijo Jung.

En ese momento entró SeokJin a la oficina, con las manos en los bolsillos y una mirada desinteresada. 

—¿Que necesita, director? — habló, cambiando su mirada a NamJoon. Sonrió ladinamente. —Oh, Nam Hyung. ¿Qué hace aquí? ¿Peleó con un libro en la biblioteca? —

Kim rodó los ojos con gracia. Este niño no era el más respetuoso de todos, pero de alguna forma era imposible tomarse sus bromas a mal.

—Te mandé a llamar para decirte que ya conseguimos a alguien que te ayude con tus clases— explicó el director, haciendo que ambos lo miraran. —NamJoon, ¿Estás de acuerdo? — consulto, a lo que este aceptó con la cabeza.

Jin arqueó las cejas.

—Espere, ¿NamJoon Hyung será mi tutor? —

—Jamás pude imaginar que serías tan vago, Jin-ah — se burló, consiguiendo que el chico lo mirara mal. —Pues sí, ahora seré tu tutor. Sacaremos adelante ese promedio—

Seok hizo una mueca disconforme, pero él no se opuso a esto. Probablemente imaginaba que el director no le permitiría replicar de todos modos. 

—Entonces está decidido— dijo con satisfacción. —Deberán elegir un día en el que realizarán las tutorías—

—Me vendrían bien el viernes— comentó Jin.

El moreno meditó un segundo.

—¿No pueden ser dos días? —

—¿Dos? — cuestionó el director perplejo. Jin también parecía confundido.

—Es que... creo que nos caería bien ocupar el mayor tiempo que podamos—

—Bueno— habló. —Supongo que eso queda en ustedes. Luego enviaré a BoGum para verificar sus avances, ¿De acuerdo? Si tiene alguna duda recurran a su oficina— tras un asentimiento por ambos lados, el hombre les señalo la puerta. —Pueden volver a sus clases—

Ellos hicieron una reverencia antes de salir. Caminando por el pasillo hacia sus salones, SeokJin fue el primero en hablar.

—No sabía que eras un tutor voluntario—

—Es mi primer día— admitió, divertido por la expresión del menor. —Al parecer el director está tan preocupado por tu promedio que tuvieron que recurrir al plan de contingencia— se rio, obteniendo una mueca apenada del chico.

—Que vergüenza que sepas sobre mis notas— murmuró. 

NamJoon le palmeó el hombro amistosamente. 

—Hey, nada de que avergonzarse. No sé cómo le hiciste para que se te quedaran siete materias, pero estoy seguro de que podremos arreglarlo, ¿Vale? — le consoló entusiasta.

—No creo que sea tan fácil— masculló con la mirada en el piso.

—Nadie dijo que lo sería, pero buscaremos el modo— apostó tomándole la mano. SeokJin alzó las cejas y lo miró con los ojos bien abiertos. —No somos amigos, pero nos llevamos bien ¿No es así? Eso podría ser muy útil a largo plazo— sonrió de oreja a oreja, hablando con demasiado seguridad. —Y no soy alguien fácil de vencer. Estoy decidido a sacarte adelante. Así que, ¿Por qué no cambias también tu mentalidad? —

Seok tragó grueso y asintió con la cabeza. NamJoon le acarició el cabello y camino hasta la puerta de su salón, pero antes se giró y, con una sonrisa ladina, finiquitó.

—Le pediré tu número a Jimin para avisarte cuándo empezaremos. Nos vemos, Jin-ah—

Y entró despreocupadamente, incapaz de imaginarse que acababa de aceptar enseñarle al lobo a abrir la puerta de la cabaña.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro