—pero, ¿por qué me estás contando esto a mí? ¿no tendría que ser ella quien se entera primero? es tu novia. —Sam habla casi en voz baja.

en la mañana apenas llegó a la biblioteca a saludar a su mejor amiga, encontró a Taehyung en el lugar, y aunque no tenía ninguna intención en saludarle, el chico prácticamente la arrastró hacia una de las estanterías del lugar, y fingiendo leer juntos, comenzó a platicarle lo que había ocurrido el día de la boda de Namjoon. todo y cada uno de los detalles que él le había contado y la historia de él y su padre, de la manera más resumida posible.

—porque no sé cómo decírselo a ella, no es tan fácil.

—bueno, pudiste decirme a mí, no veo por qué a ella no.

—necesito que me tú ayudes con eso. —suspira— por eso te digo a ti, Sam.

—es que ella necesita saberlo de tu parte, no de la mía. —la chica se cruza de brazos.  

—entonces dame una idea para hacerlo.

—sólo respira hondo, dile que tienes que contarle algo importante y le cuentas todo, más a fondo, no como me lo contaste a mí. 

—pero...

—Taehyung, ya dejaste pasar una semana, ¿qué día es hoy? Lunes, ¿cuánto más vas a dejar pasar? ¿esperarás que quede un día para decirle? más te vale que no, porque me aseguraré que lo sepa antes y si de verdad la quieres, lamentarás haberlo ocultado.

el chico aprieta los labios, nervioso. suspira, llevándose el cabello hacia atrás. vuelve a tomar el libro que estaba usando para desviar la atención y lo abre, leyéndolo sólo unos segundos.

"La luz es fácil de amar. Muéstrame tu oscuridad"

¿Valery seguiría amándole incluso sabiendo su oscuro pasado? ¿y si ella también le critica como su familia lo ha hecho por años? no puede permitirse perder a la chica que le ha hecho sentir único, quien le ha recordado que hay una razón para seguir adelante.

y es que él jura que desde que Valery ha llegado a su vida, ha encontrado aspectos de él mismo que antes no conocía, como que le gusta realmente el chocolate caliente. dejó de tomarlo hace muchos años cuando las fiestas de navidad dejaron de celebrarse en su familia, y ahora puede disfrutarlo con entusiasmo. 

también ha empezado ha dibujar un poco, pues ha visto algunos dibujos de ella en algunos papeles que probablemente hace cuando está aburrida, y ella ha mencionado varias veces que le gusta hacerlo. se ha interesado en ello, y aunque no es muy bueno, lo hace porque a su novia le gusta.

—perdón, sé que es difícil para ti y no te estoy ayudando en nada, pero ella merece saberlo. si le guardas el secreto y se lo dices con poco tiempo antes de irte, sufrirá mucho. —Sam suspira, dándole unas palmadas en su hombro.

la chica se levanta, y sin antes despedirse de ambos, finalmente sale del lugar. Taehyung se mantiene en su lugar unos segundos, observando el libro en sus manos, ni siquiera está leyéndolo, simplemente observa cómo las palabras están escritas en él.

—¿es un libro de compilaciones de poesía? —el chico se sobresalta levemente en su lugar, observa a su novia, quien se sorprende también ante su reacción.

—eh, sí, eso creo... —observa la portada, apenas dándose cuenta de lo que agarró.

—¿pasa algo? —le observa, sin embargo, él no es capaz de decir algo— no quiero molestarte, sé que te he preguntado esto varias veces en lo que va de la semana, pero realmente estoy preocupada por ti. has estado muy distraído últimamente. —suspira, agachando la mirada— estoy a tu lado, Tae, lo que sea que necesites, puedo ayudarte, en serio.

el chico aprieta los labios, realmente se siente mal porque ya ha dejado pasar una semana y aún no puede contarle todavía; sin embargo, no quiere dejarla, sabe muy bien que le ha dicho a su primo que se irá con él en un mes, pero simplemente no quiero dejar a su novia. los últimos seis meses a su lado han sido los más felices de su vida, ha encontrado una manera de olvidarse de todo lo malo que le rodea, ha podido olvidar lo solo que solía sentirse, ha olvidado lo miserable que había estado por años.

¿dejarla ahora? ni siquiera él mismo está listo para hacerlo.

—¿puedes darme un tiempo? prometo contarte lo que pasa, es sólo que no creo poder hacerlo ahora.

y Valery solamente puede sonreírle.

—el tiempo que necesites, Tae.

sin embargo, el chico sabe que no es el tiempo que necesite.

porque tiempo es lo último que tiene.

✧ ✧

—¡hey! ¿recibiste la invitación? —Valery corre a su mejor amiga, que se encuentra acostada en el sillón de la sala, observando su teléfono.

—¿qué cosa?

—¡la invitación a la reunión! oh vamos, sé que la recibiste.

—hm... —le mira confundida— no sé de qué hablas, no recibí nada, supongo que no estoy invitada a lo que sea que te hayan invitado. —se encoge de hombros, regresando la vista a su teléfono.

Valery aprovecha el momento y toma el teléfono de Sam, y antes que siquiera pueda levantarse del sillón, la mayor ya está corriendo hacia el baño, donde se encierra rápidamente. revisa el celular de su amiga, entrando al correo electrónico, donde después de entrar a elementos eliminados, encuentra la invitación que ha recibido ella hace varios minutos. sale, encontrándose con Sam al lado de la puerta.

—¿por qué la eliminas? ¿no crees que sería bueno ver a nuestros compañeros de universidad? han pasado casi 2 años. —la chica sonríe, animadamente, realmente quiere ver a sus compañeros. sin embargo, sólo obtiene un suspiro por respuesta.

—no quiero. —niega con la cabeza— no voy a ir. no quiero ver a esa gente, para mí dejaron de existir hace más de dos años.

—vamos Sam, ¿recuerdas la vez que fuimos al bar en Londrés aunque la mayoría acababa de cumplir 18 años y fuiste el alma de la fiesta? 

—sabes que no fue sano hacer eso. 

—pero te divertiste. —vuelve a sonreírle— anda, además. —su mente se ilumina de nueva cuenta— ¿quién sabe? quizá va Ryan, hace mucho no lo...

—no. —enseguida niega— mucho menos voy a ver a ese tipo, te lo diré justo ahora: lo odio, ¿sí? ahora, dame el teléfono. —la menor extiende la mano, en espera de su aparato electrónico.

—bien, entonces iré yo sola. —le devuelve el teléfono. 

Sam no dice nada, sin embargo, sabe que realmente su mejor amiga asistirá aunque ella no vaya. ¿y si alguien intentaba hacerle lo mismo que a ella hace años? se golpea mentalmente, dirigiendo la mirada al correo electrónico que indica la fecha y el lugar: Miércoles (lo que significa que es el día en el que ya se encuentra), a las 10 pm.

revisa la hora, todavía falta casi media para eso. y aunque la ubicación es un simple restaurante de sándwiches, ¿por qué la hora es tan tarde? 

—nos vemos, Sam, no te duermas tan tarde.

—Val... —pero ella ya ha cerrado la puerta del lugar. 

maldita sea...

la menor toma el abrigo azul que ha comprado hace 2 semanas, se asegura de llevar la llave consigo y sin antes tomar su cartera con rapidez, sale del lugar lo más rápido posible, corriendo hacia su mejor amiga, que alcanza a ver a una distancia realmente considerable. 

Sam corre lo más rápido que puede, sin embargo, cuando está a punto de llegar a ella, Val ya ha subido al autobús, y este, ha arrancado. se detiene observando al autobús alejarse, respira por unos segundos, apoyando sus manos sobre sus rodillas. 

espera por varios minutos el siguiente autobús, está tan desesperada que aunque apenas pasaron cinco minutos, siente que ha estado media hora esperándole. 

ahora sólo espera que ella esté bien.

Sam baja en el lugar más cercano a donde debe llegar, camina unos cuantos metros y finalmente se encuentra frente al restaurante. observa los cristales, sólo para darse cuenta de la gran cantidad de gente que hay. 

en realidad sólo hay unas quince personas, sin embargo, su corazón late con rapidez y miedo. observa a su mejor amiga riendo y disfrutando del momento, sin embargo, aunque quiere entrar al lugar, sus manos sudan. su cuerpo tiembla y siente que la leve caminata que ha hecho hacia el lugar le ha cobrado cuenta, pues su respiración es realmente anormal. 

ni siquiera ha logrado observar al chico que más daño le ha hecho, sin embargo, sabe que si no ha llegado, en algún momento lo hará. vuelve a replantearse, ¿realmente Valery estará en algún peligro si ella no está allí? se odia porque quiere huir, pero se odia más porque sabe que si algo le pasa a Valery, será su culpa.

—¿Sam? —una voz chillona le interrumpe, da un pequeño salto, observando al chico detrás suyo, quien también era un compañero de universidad— ¡oh por Dios, Samantha Williams realmente está aquí! —el chico festeja, chiflando y gritando, logrando llamar la atención de la gente— ¿qué diablos haces aquí? ¡vamos! —el chico enrolla su brazo alrededor de su cuello, mientras la hace caminar a su paso.

—yah, espera. —la chica pone algo de fuerza, sin embargo, es completamente inútil. la fuerza de aquel chico es como la de un toro, y aunque está intentando separarse, es demasiado difícil.

las personas en la mesa comienzan a festejar, mientras algunos de los chicos comienzan a chiflar con morbo.

—¿quién lo diría? ¿Seungchul? ¿con Samantha? ¿qué sucede, Sam? ¿te quedaste sin gustos buenos? —los presentes ríen ante el comentario de uno de ellos. la chica rueda los ojos, es precisamente lo que ha querido evitar.

—hey, tranquilo, yo tengo novia, aunque con Sam, ¿quién no podría resistirse? ¿no es cierto? —todos vuelven a reír, finalmente, el chico suelta a Sam, y ahora que está frente a aquellas personas que tanto daño le hicieron, vuelve a sentir que va a morir.

—hey. —Valery le incita a sentarse a su lado, y la chica apenas y puede reaccionar. camina casi temblando hacia el lugar vacío al lado de su mejor amiga, y prefiere mantenerse en silencio— ¿por qué estás...

—¿no vas a comer? todos ya hemos pedido algo. —una chica interrumpe a Valery, quien simplemente quiere preguntar qué le ha hecho cambiar de opinión.

—no tengo hambre, gracias. 

—¿de qué hablas? come algo, aunque, que no sea el chico que atiende, es lindo, pero, ¿te molestaría dejármelo a mí? —aquella chica le guiña el ojo, haciendo reír a las chicas a su lado también.

—yo...

—eso fue innecesario. —Valery le dedica una mala mirada— ¿crees que fue gracioso? sólo sonaste estúpida. o bueno, un poco más.

—yah, sólo bromeaba, además ambas sabemos que Sam...

—no. —le interrumpe— no hables de lo que no sabes, sólo cállate, ¿quieres? —Valery empuja levemente su bandeja de comida.

Sam observa a su mejor amiga, quien solamente puede sonreírle con un poco de culpa. la chica le mira mal también, sin embargo, prefiere guardar silencio ante las palabras de Valery.

—¿no vas a comer algo? —Valery pregunta esta vez a su mejor amiga— yo te invito, anda. —la mayor extiende su cartera, y aunque Sam la niega, se levanta por un momento.

se forma en la fila para hacer su pedido, esperando su turno, está realmente nerviosa. ¿en qué momento ha empezado a temblar? sólo puede ver cómo sus manos sudan y tiemblan con intensidad, y quiere llorar nuevamente, pero sabe que hacerlo sólo será ridículo.

—¿Sam? —observa a su derecha, sin embargo, apenas ve al chico, aprieta los ojos. observa a su izquierda, donde están todos sus compañeros, realmente desea que nadie le haya visto, así que regresa la mirada al frente, intentando disimular— wow, ¿estás molesta conmigo?

—mira hacia el frente. —el chico le dedica una mirada confundida, sin embargo, observa hacia el frente como ella acaba de decirle— perdóname, no pueden verme contigo, no ahora.

—¿por qué? ¿de qué hablas?

se odia a sí misma, porque tiene que fingir que ni siquiera conoce al chico que le ha estado ayudando, a quien le ha tomado un cariño significativo y que cree puede llegar a amar algún día, sólo porque no quiere que piensen mal de él o le digan algo que sabe no es cierto.

—lo siento tanto, de verdad. pero no pueden saber de nosotros.

—Sam, mírame. —Seokjin le observa directamente, sin embargo, ella se mantiene firme— Sam.

—sólo haz como que no me conoces, si quieres cuando salga de aquí puedo llamarte y...

—no. —Seokjin se ha exaltado levemente, elevando la voz un poco. Sam voltea a ver a sus compañeros, que al parecer no han prestado suficiente atención— ¿por qué haces esto? 

—no quiero que escuches todo lo que ellos dirán, me verás de otra forma. no quiero que me veas así.

—Sam, sabes que yo nunca...

—no te imaginas todo lo que ellos dirán, y es mentira, pero hace mucho daño. —Sam suspira, apenas ha mirado una vez a Seokjin cuando él la ha saludado— ven. —la chica rompe la fila, dirigiéndose hacia donde están los baños, pues de ese lado está completamente oculto hacia la vista de las personas en la mesa— ellos son mis compañeros de universidad, no debía estar yo aquí, pero no quiero dejar sola a Val, no quiero que le pase algo, nunca me perdonaría eso. —pasa saliva, no sin antes asomarse hacia la mesa de sus compañeros rápidamente— sólo por hoy, por favor, de verdad no quiero que escuches todo lo que ellos dicen de mí, y no quiero que te digan algo a ti, sé que si me ven contigo lo harán, tú eres especial para mí. —el chico toma su mano, acariciándola levemente.

Sam se odia. se odia tanto. se odia por tener que esconder al único chico con el que es feliz. pero sabe que si alguien la ve con él, empezarán a decir cosas horribles, y la dañarán.

—debería regresar. —Sam suspira, apretando los labios. 

Seokjin lleva sus manos al rostro de la chica, acariciando sus mejillas suavemente, sin embargo, debe actuar rápido o descubrirán que no está donde se supone debería estar. sus manos rozan y la chica se da vuelta, para caminar lejos del pequeño muro que los oculta.

—te quiero. —Seokjin se asegura de recordarle. y aquello le rompe, porque no puede ni imaginarse lo mal la ha pasado como para pedirle que finja no conocerla.

—yo a ti. —finalmente, puede caminar.

pero, ¿realmente las cosas eran así de fáciles?

apenas camina fuera del pequeño muro, un chico aparece, y de por sí la mira llena de confusión, puede sonreír cuando ve a Seokjin caminando tras de ella.

—¡wow! ¡Sam! ¿tan rápido? sí que tienes un don, eh. ¿por qué no nos presentas a tu nuevo amigo? —el chico jala del brazo a Sam, quien apenas y puede mantener el equilibrio ante el fuerte jaloneo que ha recibido.

—déjame. —intenta sonar agresiva, mientras pone cierta fuerza al ser jalada— te lo pido, no hagas esto. —el chico ríe ante el comentario de Sam, pues suena desesperada.

—¿por qué? ¿no quieres que conozcamos al chico con el que acabas de follar? 

—te dijo que la sueltes. 

—amigo. —aquel chico comienza a reír en voz alta, logrando llamar la atención de sus compañeros en aquella mesa— ¿acaso sabes con quién acabas de hacerlo? sólo es una ramera que encuentras por ahí, a ella no le importas, no la defiendas, te botará en cuanto encuentre alguien que le guste más que tú. 

—cierra la boca, imbécil. —Sam apenas y puede forcejear, sin embargo, el chico vuelve a reír ante sus intentos inútiles por soltar su agarre.

—mira, no sé quién seas pero más vale que la dejes ahora o...

—¿qué está pasando aquí? yah, Luke, ¿no te enseñaron a ser respetuoso? —nuevamente uno de sus compañeros se une a lo que pronto parecía tornarse mal— deja a Sam, ¿por qué no mejor invitas a su novio a sentarse con nosotros? —parece funcionar, pues a pesar que lo hace bruscamente, suelta su brazo, levantando ambos brazos en seña de paz— ¿qué te parece acom...

—no, él ya se iba, y yo también.

—hey, deja que él responda. —el chico mira a Seokjin, casi amenazándole con la mirada.

—oh, lo siento, pero no creo que pueda, sólo estaba de paso.

—yah, chicos. —se voltea a ver a sus compañeros— el novio de Sam no quiere hacernos compañía.

los chicos presentes se levantan de su asiento, dirigiéndose hacia Seokjin, mientras lo toman de los brazos y lo jalan casi forzosamente con ellos. Seokjin camina involuntariamente, pues sabe que entre tantos chicos definitivamente no es capaz de hacer algo por sí solo. 

—parece que tu novio sí quiere quedarse. —el chico frente a Sam encoge los hombros, dedicándole una sonrisa burlona. 

se da la vuelta, regresando a la mesa. Sam se mantiene estática en su lugar, quiere llorar, definitivamente quiere hacerlo. sus manos comienzan a sudar de nueva cuenta y sólo puede regresar al lugar en el que antes ha estado. definitivamente aquella reunión es una mierda.

—¿y qué? ¿cuánto le pagaste para que estuviera más tiempo contigo en vez de buscarse a alguien? —el chico que antes ha molestado a Sam se dirige a Seokjin, quien solamente puede tensarse en su lugar.

—Luke, por dios, qué inmaduro. —mira a Seokjin— no le hagas caso, está loco.

Sam mantiene la mirada agachada, está realmente avergonzada. ¿por qué? ¿por qué tenía que seguir a Valery? ¿por qué tenía que tener esa reputación en la universidad? ¿por qué salió con Ryan en primer lugar? todo es su culpa, es su culpa por haber querido a aquel chico y verlo como una buena persona.

—pues no te ves como su tipo, déjame decirte. a Sam le gustan los hombres maduros, sabes a qué me refiero, ¿verdad? —sus compañeros comienzan a reír, sin embargo a aquellas tres personas en la mesa no le hacen ninguna gracia aquellas bromas.

—por ahí escuché que no hubo ni un solo maestro en la universidad con el que ella no haya estado, vaya, Sam, ¿qué se siente ser la puta de la escuela? ¿con los maestros? 

—claro, ¿recuerdan cuando varias mujeres, madres de los estudiantes, se quejaron de ella por meterse con sus esposos? eso sí que es repugnante, ¿con hombres casados? —ríen.

—oh, no nos tomes a mal. —aquel chico vuelve a dirigirse a Seokjin, quien luce cada vez más molesto— tu novia no es una santa, en realidad. probablemente esté haciéndolo con veinte tipos aparte de ti. —la silla de Sam resuena en todo el lugar. 

se levanta rápidamente, sintiendo las lágrimas correr por sus mejillas. Seokjin ni siquiera le da tiempo a caminar tan lejos, pues ya está siguiéndola, sin embargo, alguien a su lado toca su brazo.

—no vale la pena, es una puta cualquiera, te abandonará cuando se le dé la gana. —Seokjin separa su brazo agresivamente, sin embargo, antes de marcharse, vuelve a escuchar aquella voz— no te arrepientas cuando la encuentres por ahí con un tipejo que no seas tú. —ya está, sólo quiere alcanzar a Sam. 

—¡la puta va a llorar! —es lo último que logra escuchar antes de salir de aquel lugar.

—todos ustedes son una bola de imbéciles, ¿alguna vez vieron por ustedes mismos todos esos rumores como para creerlos? no. sólo los escucharon y empezaron a repetir como gaviotas enjauladas. —Valery ríe amargamente— pero claro, ¿qué se puede esperar de personas que ven el acoso como algo bueno? lo digo porque todos ustedes sólo hablan y hablan sin saber nada. —niega con la cabeza, riendo sarcásticamente— no vuelvan a buscarnos nunca en su vida. ¿sí? espero que no les pase que algún día alguien cree un rumor sobre ustedes y arruine su vida entera. —vuelve a reír— ¿espero que no? olvídenlo, ojalá les pase aunque sea una vez. —Valery finalmente se da la vuelta, caminando lejos de ellos.

finalmente está fuera del lugar, pero no hay seña de su amiga. observa a todos lados, pero parece ser que ya ha tardado mucho. toma su celular, llamándola, pero a pesar que lo hace seis veces, ella no contesta el teléfono. cambia de destinatario, y en unos segundos, su novio atiende el teléfono.

—¿sí?

—¿puedes llamar a Seokjin y preguntarle dónde está? 

—¿qué pasa?

—te lo explico después, si él te contesta y te dice dónde está, por favor dímelo enseguida, estoy intentando llamar a Sam.

—de acuerdo.

Valery llama unas diez veces más a su mejor amiga, sin embargo, cuando vuelve a llamar, su teléfono marca directamente a buzón, y no entra en tono. ¿acaso apagó su teléfono? está preocupada, y quiere regresar a gritarle a sus compañeros por haber arruinado todo, sin embargo, sabe que a pesar que es culpa de los compañeros, ella también es culpable de lo que ha pasado.

se golpea mentalmente, seguramente Sam cambió de opinión por ella, pues desde que ambas entraron a la universidad, Sam suele actuar como la mayor, le cuida y nunca la ha abandonado en casos así. sabe que ha cambiado de opinión porque ella le ha dicho. 

su teléfono suena y lo revisa desesperadamente, el nombre de Taehyung aparece en la pantalla y desea que tenga buenas noticias para ella.

—dice Seokjin que dejes de llamarla, que ella está bien, bueno, no emocionalmente, pero físicamente está bien, él está a su lado, quiere que les un poco de espacio, sólo por hoy. —Valery suspira, llevándose el cabello hacia atrás, está tan frustrada— ¿dónde estás? iré por ti. 

—pero Sam...

—ella está con Seokjin, no le pasará nada, confía en él. —respira hondo, negando con la cabeza. quiere encontrar a su mejor amiga, pero no quiere tampoco presionarla.

—te enviaré mi ubicación en un segundo, si quieres. 

en cuanto vuelve a observar su teléfono, unas pequeñas lágrimas resbalan por sus mejillas, pero Valery se encarga de limpiarlas al instante, camina unos cuantos metros, escondiéndose bajo un árbol.

y en unos solos minutos, Taehyung ya está a su lado, y ambos se dirigen a la casa del chico, en completo silencio. la chica se acomoda en el sillón de la sala, se siente tan frustrada. ¿cómo es que todo ha acabado así?

—hey, está bien. Sam está bien, no pasa nada.

—es mi culpa. —pasa saliva, vuelve a sentir que empezará a llorar en cualquier momento— yo le dije que fuéramos, y ella se negó, le dije que iría sola, y seguro ella quiso ir para no dejarme con esa gente sola. es mi culpa, Tae. —Valery cubre su rostro con ambas manos, y esta vez, deja que las lágrimas salgan de sus ojos.

¿por qué ha tenido que ser así?

—Val, mi amor, no es tu culpa, no lo es. —Taehyung cubre su cuerpo con sus brazos, abrazándola para intentar tranquilizarla— sabes que Sam pensaría lo mismo. eres su mejor amiga.

—si tan sólo no la hubiese presionado, nada habría pasado, Tae, sí es mi culpa. —sus sollozos se vuelven más altos, y se aferra con fuerza a su novio, quien intenta tranquilizarla de alguna manera.

—no es tu culpa, linda, no lo es. —el chico besa su frente, abrazándola suavemente.

"La razón por la que la noche puede verse así de hermosa, seguramente no es a causa de esas estrellas o luces, es a causa de nosotros"

✧ ✧

Valery ha estado esperando a Sam por algunas horas, y quiere rendirse cuando el reloj marcan las dos de la mañana, sin embargo, se sobresalta cuando la puerta del lugar resuena. se levanta del sillón, observando a la chica que apenas y entra.

—¿sigues despierta? mañana debes ir a trabajar, Val. —le observa.

sus ojos lucen rojos y están un poco hinchados, sabe que probablemente ha llorado bastante, pues no suele ponerse así a menos que realmente lo haya hecho por un buen rato.

—Sam, lo siento, de verdad. —pero ella es capaz de sonreírle.

—¿de qué hablas? no es tu culpa, no tienes por qué disculparte. 

—pero yo...

—hey, no. —Sam se acerca a su mejor amiga, poniendo su mano en su hombro delicadamente— nada de esto es tu culpa, ¿sí? no tienes nada que ver con esa gente, tú eres diferente. —Valery guarda silencio, apretando los labios— no es tu culpa, ¿sí?

la mayor asiente con la cabeza, no del todo segura. Sam le sonríe, asegurándole que todo está bien. 

—deberías dormir. 

pero, ¿cómo podría estar bien? sabe que miente, porque no quiere preocuparla ni hacerla sentir mal.

¿a base de qué se ganó esa reputación? quiere saberlo con mucha desesperación. sin embargo, si Sam no se lo va a decir, Valery se encargará de averiguarlo. 

definitivamente lo hará.