Juwon.

No entiendo mucho, la verdad sigo en estado de shock, Sowon duerme pegada a mi pecho, desde que llegue a esta casa no se ha despegado de mí, me trajeron pañales, mantas, ropa para ella y para mí, además de que me han dejado la comida completa, solo recogen los platos y se van, vinieron a revisarme a mi y a mi bebe. Pero no he visto a el hombre de nombre Jin.

Pero a pesar de que no he salido de esta habitación, me siento libre, segura y tranquila.

Quite a Sowon de mi pecho y la puse en mi hombro para sacarle el aire, escuche que tocaron un poco la puerta, se asomo un rostro masculino, era él.

—Hola, buenos días —miro a Sowon en mi hombro —¿aun duermen? Puedo volver más tarde.

—No, esta bien, ella duerme, pero estoy despierta de hace rato.

—Bien, venia a desayunar contigo, si me permites.

Asentí, todo su enorme cuerpo entro con la bandeja de comida, no es que no le prestara atención anteriormente, pero es muy alto, sus hombros anchos lo hacen lucir algo enorme, pero algo es su apariencia es delicado a la vez de atractivo, nunca había visto a un hombre tan impresionante, en todos los sentidos.

—Si me permites —dejo la bandeja en la cama —puedo dejar a la pequeña...

—Sowon, su nombre es Sowon.

—Sowon, me encanta —sonrio —la puedo dejar en la cuna.

Dude un poco pero se la entregue, en realidad confiaba demasiado en este sujeto, pero solo había interactuado con él un par de veces, aun así, cumplido su promesa de sacarme de esa casa, de mantener segura a mi bebe, de darme una segunda oportunidad. Mi bebe se veía enorme en sus brazos, pero también se notaba tranquila al dejarla en la cuna no hizo ningún ruido.

No soy tonta, la manera en que me libero, no paso desapercibida, pero en el fondo hubiera deseado que Kyhun estuviera en ese cuarto, esa noche y verlo caer.

—El doctor me dijo que tus heridas sanaran bien, que mientras sigas con los analgésicos que te dio, tu lactancia será segura además que te ayudan al dolor.

Me sirvió un tazón enorme de arroz, dejo una porción de kimchi y demás complementos, a un lado, él se comenzó a preparar el tazón de bibimbap, lo imite viendo lo bien que se veía su plato.

—Perdón por no venir antes, pero tenia que arreglar algunas cosas, además el nacimiento de mi sobrino, puso la cabeza patas para arriba, pero tan pronto terminé con todo, vine a verte.

—¿Por qué haces todo esto?

Se había metido un enorme bocado de comida a la boca, alzo una ceja mientras masticaba de manera despreocupada, trago un poco y aun con un poco de comida respondió.

—Pensé que es claro que me gustas.

Tomo un bocado más, siguiendo comiendo mientras mi corazón se había acelerado a una velocidad que no conocía antes.