"Esa noche, la luna blanca desprendía un rayo que caía justo sobre un lugar del bosque y un niño cuyo nombre es Xiumin, el cual era bastante curioso se interno en el bosque y encontró un libro tirado, a lo lejos una cabaña tenía luces encendidas por lo que decidió ir hacia el lugar a entregar el libro, llamó a la puerta pero nadie abrió, volvió a llamar y esta vez un grito agónico se escuchó por lo que decidió empujar la puerta y entrar muy despacio, entonces vio algunas luces sobre unas escaleras encendidas y abajo todas las luces apagadas.

Después un grito y un fuerte llanto acompañadas de súplicas y palabras que eran inentendibles le siguieron, un sonido de trompetas distorsionado y una voz muy aguda y bella comenzó a cantar una melodía muy envolvente, el niño se atrevió a dejarse guiar por la voz, hasta que llego a la parte alta de la casa asomándose por una pequeña rejilla de lo que supuso era la entrada hacia la azotea del lugar.

Un gran festín se podía ver, mesas con comida y animales sobre esta, muy apetitoso por cierto, hombres y mujeres usando largas túnicas negras y cuellos rojos, su rostro no se veía debido a que usaban máscaras con una figura muy peculiar, todos tenían la mitad de la máscara derretida y la otra mitad parecía que pertenecía a una niña.

La voz comenzó a recitar algo muy rápidamente y entonces vio algo que lo dejó aterrado, al terminar el recital una daga con el filo de cobre y la empuñadora bañada en oro se clavó o más bien dicho la clavaron en el corazón de una mujer que yacía desnuda de cintura para arriba y hacia abajo una larga y hermosa falda blanca con muchos diamantes la adornaba.

La música y el llanto cesaron, las súplicas se dejaron de escuchar pero la hermosa voz seguía hablando mientras jalaba la daga y abría por completo el área del pecho donde fue clavada, el corazón aún tenía espasmos y la sangre fluía por todo el inerte cuerpo.

Después se prendió una llama de fuego con color azul alrededor que consumía el cuerpo e inflaba el vientre de la mujer, de pronto la persona que cantaba comenzó a rociar a los asistentes  con la sangre que emanaba del corazón y conforme les caía la sangre se arrodillaban sobre el pie izquierdo como haciendo una reverencia.

Del vientre inflado de la mujer salían miles de criaturas terroríficas, eran del tamaño de un duende, pero de aspecto humano con rostro de animal y el color café era lo que las caracterizaba.

Los grandes ojos de una de esas criaturas voltearon hacia donde se encontraba el pequeño, que comenzó a correr lo más rápido que le permitían sus pequeñas piernas, la criatura extraña se desintegro entonces y miles de búhos salieron volando sobre el bosque, mientras el niño aún tenía el libro entre sus manos."

Un frenesí, fue lo que sobresaltó al escritor haciendo que despertará agitado, como si hubiese corrido un maratón.

Parte de su escrito estaba arruinado debido a que el sudor y demás fluidos que desprendía del rostro y manos hicieron que la tinta se corriera.

Un poco perezoso, se despertó y pudo ver en el noticiario una vez más esas noticias, muy tristes a su parecer ya que al vivir en un pequeño condado, era muy novedoso lo que se vivía y todos los que sabían y conocían, tenían cierto temor a ir a ese sitio.

"Noticia de última hora:

Fue hallado el cuerpo de una mujer, maniatado, con signos de tortura pero este además del martirio al cual fue sometido, presenta una extraña señal, en su brazo izquierdo posee una herida en forma de luna y en su vientre parece ser que le dieron a beber algún tipo de sustancia que hizo reacción con algunos jugos del estomago y explotó desde dentro, su rostro tiene diversos golpes, al parecer fue hace apenas unas tres horas atrás aproximadamente debido al tiempo de descomposición que tiene el cuerpo.

Se cree que primero fue sometida por algún animal salvaje debido a diversas mordeduras que presenta y después fue sometida por algún hombre, debido a la fuerza de los golpes que lograron zafarle la parte inferior de la quijada.

En pantalla aparece su foto, para si alguien la reconoce llame al número de emergencias o vaya directamente a la estación de policía a reconocer y reclamar el cuerpo de lo contrario será llevado a la fosa común.

Con este ya son 15 el número de asesinatos que se registran en estas dos semanas. Todos tienen en común que dejan el símbolo de una luna sobre el cuerpo y son atacados con algún animal.

Tomen sus precauciones y recuerden llamar a emergencias si se sienten amenazados."

Término de escuchar las noticias y apago el televisor.

Esa chica él la conocí, era su vecina, Park Jihyo, una joven de apenas 23 años.

"¿Qué le habrá pasado para volver tan tarde a casa?" pensaba el escritor. Pero antes debía ir con su vecino a notificarle sobre su hermana o por lo menos a darle el pésame.

Salió  casi de inmediato y se aventuro a la casa vecina.

Toc. Toc. Toc.

El escritor tocaba la casa vecina con insistencia esperando que se atendiera su llamado. Después de algunos minutos el escritor esperaba pacientemente a que su vecino le abriera, cosa que ocurrió instantes después.

Un joven de pelo platinado y mejillas abultadas abrió.

-Dis...Disculpe, buenas tardes mi nombre es Min Yoongi y soy su vecino de al lado. -Se presentó el peli azul, un poco nervioso, debido a que dar una noticia de ese grado era algo difícil.

-Park Jimin, un gusto vecino, ¿en qué puedo ayudarle? - El peli plata le respondió como si tuviese algo de prisa pero con una sonrisa.

-Bueno verá, puede poner las noticias locales, creo que le interesará la más reciente y yo lamento mucho lo ocurrido. -Apenas termino de hablar salió corriendo hacia su casa.

Jimin un poco confundido entró y puso las noticias, minutos después un desgarrador llanto se escuchó en el vecindario.

Yoongi por su parte salió corriendo a su casa y se encerró en su habitación, la cual estaba repleta de fotos de su madre: Min Yoonji.

-Listo mami, con ella se termina mi tarea aquí. Ahora podré ir contigo. Ya hice pagar a todos los que te asesinaron. -Decía el escritor mientras sonreía al ver las fotos regadas por el piso de cada uno de sus asesinatos y él simplemente se desvanecía.

Ahora iría a otro tiempo para seguir vengando la muerte de la mujer que le dio la vida. 

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