Al volver al salón, Mark se encontraba con la boca abierta, sus ojos brillaban y botaba un poco de saliva por su boca. No miraba a ningún lugar en concreto, parecía estar fantaseando cosas en su cabeza.

-Ey, Mark. ¿Te encuentras bien? -traté de no alzar mucho la voz para no asustarlo de lo ido que estaba.

-Eh... eh... ¿Liu? -Mark recuperaba poco a poco su consciencia, parecia como si estuviese dormido con los ojos abiertos, se comenzó a rascar un poco la pupila de su ojo izquierdo -¿Las clases ya iniciaron?

-No, la maestra aún no ha llegado -miré levemente a la entrada del salón al decir eso -Por cierto, ¿Como te fue con Lily? -no soy el tipo de personas que hace este tipo de preguntas pero tenía mucha curiosidad

-Ella... -Mark junto sus manos y entrelazo sus dedos poniendo la muñeca de su mano izquierda en su mejilla derecha flexionando levemente su brazo -es tan genial -sus ojos volvieron a parecer estrellas y expulso un poco de saliva por su boca

Fruncí un poco mis cejas y lo miré con cara de disgusto.

-"¿Que demonios te pasa?" -pensé

-¿Sabias que es de alemania? También tiene un gato y le gusta tocar el violin. Ella es increible amigo, la deberias conocer -Mark con su torso ya girado hacia mi posición puso las palmas de las manos en el respaldar de su silla tratando de acentar sus emociones probablemente

-¿Ella te contó todo eso? -con la misma cara de antes le hice aquella pregunta. No es por menospreciar a Mark pero, dudo que alguna persona (además que yo claro está) se haga amigo de el tan facilmente

-Eh, no. Solo la anduve espiando -su rostro cambió radicalmente, no fue maquiavelico, simplemente aparentó como si hubiera sido algo normal.

-"Estas loco" -era lo que pensaba decirle, no obstante me retracté y una lagrima de "avergonzamiento" (No se si esa palabra existe) me recorrió la mejilla mientras mi ceja izquierda se movia de abajo hacia arriba rapidamente mientras mis ojos permanecian cerrados -No creo que sea buena idea espiar a las personas de esa manera -un poco mas relajado estiré mi brazo hacia mi termo del agua que estaba junto con mi mochila

-Oh vamos, no es tan malo... -decidí darle un pequeño sorbo a mi termo -por cierto, ¿A que está buena la lider del club de literatura?

Sin terminar de darle el sorbo a mi termo decidí escupir toda el agua que estaba en mi boca y comencé a toser

-¿Siempre tienes estos tipos de pensamientos todos los dias? -no grité, pero elevé mi tono de voz un poco

-Oh, vamos -Mark miró hacia otro lado y encogia un poco sus parpados -¿A poco no pensabas lo mismo que yo cuando la viste?

Por lo visto si fue el la persona que Emma mandó a la mierda.

-Ella... es linda, lo admito. Pero solo eso ¿Ok? -aparté un poco mi mirada y sacudí mis manos como una señal de negación

-Claaaro -Mark encogió sus hombros, apartó un poco su mirada y abrió sus palmas de las manos. Yo aproveché y tomé un poco de agua -de todas maneras, ¿Que cosas hiciste allá?

Terminé de tomar mi sorbo de agua, recosté mi espalda en el respaldo de la silla, giré un poco mi torso y puse mi brazo derecho alrededor de la punta del respaldo de la silla. Puse mi pierna izquierda sobre la rodilla de mi derecha mientras continuaba sosteniendo mi termo con la mano izquierda.

-Solo hablamos de un par de cosas -le di un pequeño sorbo al agua que tenia y me limpié un poco la garganta -ella me recomendó un libro -agaché mi cuerpo para buscar el libro en mi mochila, lo saqué y se lo mostré a Mark -ni siquiera lo he ojeado -baje mi mirada hacia el centro de la portada admirandola por unos cuantos segundos

-Se ve interesante -Mark estaba mirando la contraportada del libro por unos segundos, después aparto su mirada rapidamente y se echó para atrás levemente -pero como ya sabrás no me gusta leer así que si pienso saber mas de el solo buscaré un resumen por internet

Me quedé impactado durante unos segundos

-¿Liu...?

-¡¿Como te atreves a despreciar a los libros de esa manera?! -tomé sus hombros y los sacudí rapidamente -Ya, ya, está bien, está bien

Me tranquilicé un poco y deje de sacudir sus hombros. No obstante, mis manos permanecían y apretando un poco sus hombros, fruncí mis cejas y con la mirada mas fria que pudiese tener le dije unas palabras a Mark:

-Los libros son sagrados, es lo que nos ha hecho posible trasnmitir los conocimientos de hace miles de años. Nunca los menosprecies de esa manera

Mark apartó levemente su mirada y una pequeña gota de sudor recorrió su mejilla. En ese momento llegó la maestra. No nos dió tiempo de hablar mucho más.

Durante las clases la maestra alcanzó a copiar algo en la pizarra que luego borró y no me dio tiempo de copiarlo.

-Mark, ¿Me puedes prestar tu libreta un momento? -mientras le decia eso le estaba dando unos toques con la goma del lapiz en su espalda

-Em... Esta bien -Mark dio una media vuelta sobre su cintura y me entregó su libreta cerrada

La libreta no era muy grande, pensé que seria mejor que se hubiese comprado una mas apropiada para dar las clases a lo largo del año. Antes de abrirla levanté mi vista un momento y ví a Mark un momento. Estaba realmente aburrido con su palma izquierda de la mano puesta en su mejilla derecha.

-¿Cómo eres tan confiado? -pensé mientras abría su libreta

Cuando la abrí, no podia creerlo. No es que Mark escribiera mal o no respetara los margenes, es que no escribia nada. Oh bueno, eso no es del todo cierto. Mark tenía unos dibujos de unos personajes estilo manga. Entre ellos estaba un chico de pelo blanco que tenia un cierto parecido conmigo. Este estaba concentrando algo de... ¿Poder? en su mano izquierda. Parecía un fragmento de hielo puntiagudo. Tambien habia una chica de pelo negro con ojos morados, tenía el pelo lacio que le cubria parte de su cara, unos pantalones de azul oscuro y unos tenis de color rojo escarlata. Y tenia en la mano izquierda... ¿Una navaja? No era de un tamaño normal, mas bien era una navaja de caza con un diseño bastante peculiar. Su hoja no estaba del todo recta y tenia una curvatura en su parte de atrás.

-¿Te gustan? -dijo Mark volteando sobre su eje y haciendo una pequeña sonrisa mientras tenia abierta la palma de su mano izquierda justo al lado de su mejilla. Lo mas probable es que adquirió ese gesto para no levantarle sospechas a la profesora.

-Se ven interesantes -es lo primero que se me vino a la cabeza para decir -pero, ¿No tomaste notas del tema que estamos dando?

Mark hizo un gesto de indiferencia y recostó su barbilla en su brazo derecho, que estaba justo por encima del respaldar de la silla.

-No es que me parezca aburrido, aunque también lo es. Es solo que me aburren las clases en general

-MARK -la maestra alzó un poco su tono de voz. Se notaba que quería contener la calma -¿Quieres pasar al frente y resolver este problema?

Mark volteó sus ojos y se dirigió hacia la pizarra.

-Bieeen, lo haré -Mas que nervioso, Mark parecía disgustado en el momento que la profesora lo llamó. No parecía nervioso en absoluto.

La profesora tenía una mirada maquiavelica en su rostro. Se quedó mirando a Mark directamente mientras el con una solvencia se rascaba un poco la cabeza.

-Profesora disculpe, pero ¿Por qué toma x como un número diferente de cero? -Mark miró a la profesora directamente a los ojos. El no la estaba mirando con una mirada provocadora, mas bien fue una mirada de contraataque.

La profesora por su parte hizo una sonrisa de nerviosismo, subía y bajaba la ceja rapidamente mientras una gota de sudor le recorria por su mejilla. Era un autentico duelo de miradas y Mark tenía una clara ventaja. La profesora sabia que no podia ganar entonces decidió admitir su error.

-Oh si, ¿Como se me puedo pasar eso? -se puso a corregir su ejercicio -Muchas gracias Mark, puedes sentarte -Mark ni siquiera sonrió, unicamentese dirigió a su puesto y sentó volviendose a poner en la misma postura que estaba antes. Cabe decir que los estudiantes se lo quedaron mirando durante unos pocos minutos.

-¿Como hiciste eso? -le di unos pequeños toques con sus cuadernos y extendí mi brazo un poco para pasarle su libreta de dibujos

-¿Como hice que cosa? -Mark recibió su libreta y giró su cabeza un poco a su derecha

No me enojé, pero la expresión de mi cara que era parecida a la que tenia la maestra podia indicar algo diferente.

-Olvidalo -el tono de mi voz se volvió un poco rasposa

-Esta bien -Mark cerró los ojos, hizo una sonrisa y dió media vuelta para continuar con la posición aburrida que siempre tiene

¿Como puede ser tan bueno? No me sentia celoso, bueno, quizas un poco. Pero me parecia curioso como una persona como Mark, que sabe dibujar y es bastante bueno en clases sin nisiquiera esforzarse y además ser muy carismatico dificilmente encontraba amigos. En mi caso fue diferente, nunca fui el mejor en nada. En algunas ocasiones tuve que hacer varios favores para tratarme de ganar la confianza de los demás (en la mayoria de los casos no funcionaba). Pero Mark, es diferente. El tiene todas las caracteristicas que yo siempre quise tener: Es carismatico, es bueno en clases, incluso sabe dibujar. ¿Podré ser tan bueno como el algún dia?

...

Al terminar las clases me despedí de Mark y me dirigí a casa. No paso nada muy emocionante en el trayecto salvo algunos pensamientos que van y vienen en mi cabeza. Mi madre se iba al trabajo por lo que tenía que abrir las puertas con mis propias llaves. Al hacerlo recordé que habia prestado el libro en la biblioteca. Por ser el primer dia no nos pusieron tareas asi que tenia bastante tiempo libre para leer el libro. Mi plan era leer alrededor de 50 paginas pero terminé leyendo alrededor de 100. El libro me estaba encantando, en resumidas cuentas trataba de dos chicos que a pesar de que el mundo no los dejaba estar juntos. Ellos decidierón intentar con todas sus esperanzas hallar su felicidad. No lo habia terminado para entonces, pero a pesar de solo haber leido menos de la mitad me estaba pareciendo una maravilla. El libro tiene unas cuantas frases que me gustaría compartir en los capitulos siguientes.

...

-¡LIU, SE TE VA A HACER TARDE! -gritó mi madre desde la cocina

Me levanté de mi cama aún con el libro sobre mi rostro, miré el reloj que estaba colgado en la pared. YA ERAN LAS 7:31 Y TODAVIA NO ME HABIA BAÑADO NI DESAYUNADO.

-AHHHH -grité mientras me puse en marcha a bañarme y desayunar lo mas rapido posible

Salí disparado como un rayo a la escuela sin haber desayunado del todo. Aún tenia restos de comida en mi boca, pero era mejor que llegar tarde, al menos eso creia. El clima era bastante fresco, estabamos en primavera por lo cual no hacia demasiado frio. Al llegar a la escuela alcancé a ver un ave de color rojo encima de la reja de la entrada/salida. Se trataba de un cardenal rojo. Su color y contraste resaltaba a la vista haciendo imposible evitar tomarle una foto. De repente el cardenal se acercó hacia mi y se poso en mi brazo haciendo que pudiera admirar su color un poco mas. No hacia nada en particular, simplemente movia su cabeza levemente de un lado a otro.

-Creo que es bastante lindo -dijo una voz que se me hacia familiar -Em..., es por el ave, lo digo por el ave -Emma apartó su mirada mientras sus mejillas se ponian como un tomate y comenzaba a mover sus manos en señal de negación. En mi caso, bajé un poco mi mirada mientras mis mejillas se ponian igual de rojas que las de Emma.

El cardenal que hace un momento estaba posado en mi brazo elevó sus alas y se alejaba.

-¡Espera! -traté de que se quedara pero fue inutil, de todas formas. ¿Que hago hablandole a un pajaro?

-Lo siento... -dijo Emma en voz baja -No quise ahuyentarlo -Emma bajo un poco la mirada y encogió las manos

-No..., no te preocupes -abrí las palmas de mis manos en dirección hacia ella tratando de tranquilizarla. A simple vista Emma parecía ser una persona bastante fría pero en realidad era bastante calida

-También creo que el ave es bastante bonita -rasqué un poco la parte de atrás de mi cabeza. Hubo un silencio de unos pocos segundos sin embargo se sintió como varios minutos largos.

-El libro...

-SÍ -no alcancé a terminar mi horación cuando Emma dijo eso. Emma se volvió a avergonzar y bajó la cara nuevamente.

-Me está gustando bastante -decidí cerrar los ojos y hacer una pequeña sonrisa mientras hablaba -¿Te gustan las aves? -¡¿Que clase de pregunta pendeja acababa de decir?!

Emma apartó su mirada un poco, el rostro de vergüenza que yacia un momento estaba en su rostro acababa de desaparecer, ahora los iris de sus ojos se dilataron. No parecía triste, mas bien se sentía vacia.

-Yo... -prefiero no hablar de eso

En ese momento sonarón las campanas de la escuela, indicando que las clases estaban apunto de iniciar.

-Tengo que irme -dio media vuelta y se empezó a alejar de mi, ni siquiera se despidió con su mano. En ese momento el cardenal que hace unos minutos se habia alejado se habia vuelto a posicionar en mi brazo mirandome fijamente.

-¡¿Y tu que rayos haces mirando?! -creo que tengo que dejar de hablar con pajaros antes de que piensen mal de mí

//El cardenal rojo tiene distintos significados interesantes. Varios de ellos son que estas aves nos ayudan a encontrar fuerzas para seguir adelante, a su vez nos ayuda a reconectar con nuestros seres queridos fallecidos y también simboliza un romance apasionado. El significado que quiera darsele a esta escena se lo dejo a interpretación del lector