La relación entre Lincoln y Stella no marchaba bien luego que el peliblanco trato de sobrepasarse con ella, sentía el nerviosismo de ella cuando estaban juntos, no le cabía en la cabeza, lo que planeaba en su mente fuera tan malo, así que decidió consejos a sus hermanas, esta vez acudió a su hermana mayor, Lori, quien a contarle su historia demostró una mirada de decepción hacia él. 

 –Lori: No todas las chicas somos iguales Lincoln, reconozco que yo empecé a tener relaciones, muy joven a los quince años con Bobby, pero cuando a una chica le incomoda que le toquen su cuerpo tú debes respetar eso y punto.

–Lincoln: Ya me quedó claro. 

 –Lori: Espero que lo digas en serio, ahora ve y llámala le debes una gran disculpa. 

 El peliblanco asintió y llamo a su novia, y le pidió disculpas por lo ocurrido la otra noche, claro que ella aceptó; y todo volvió air bien entre ellos; ella otra vez le dio besos en la boca, pero nada más que eso, le advirtió que si se atrevía a hacer otro movimiento como la última vez se terminaría todo, él le prometió que eso nunca jamás volverá a ocurrir. 

Cierto día que él y Stella estuvieron en casa de ella, viendo una película de terror; su abuela estaba durmiendo y sus padres habían salido a una cena; todo parecía ir bien; hasta que en la película se presenta una escena incomoda, los protagonistas tienen relaciones sexuales, algo que ellos no se esperaban en especial ella, estaba muy sonrojada por los 30 segundos de sexo; tiempo suficiente para que Lincoln se calentará, fue al baño y empezó a masturbarse para que así se le fuera la calentura, en el baño el peliblanco se percató que había unas medias blancas y estaba 100 por ciento seguro que le pertenecían a su novia, eran blancas con líneas rojas, no le podían pertenece a su abuela ni a su madre porque ellas usan medias nylon; no perdió la oportunidad y empezó a olfatearlas, mientras las olfateaba saco su miembro y empezó a sacudirlo y se imaginaba que pasaba su pene en medio de los dos pies de Stella; eyaculo luego de un par de minutos se limpió y acudió donde su novia, pero justo cuando él sale del baño todo se vuelve oscuro.

Saca su celular usa la linterna y llega donde su novia, ella estaba un poco nerviosa, ambos salen afuera y se dan cuenta que la calle también está a oscuras, así que deducen que el corte de luz es general por toda la ciudad.

–Lincoln: No te molesta que me quede aquí hasta que regrese la luz. ¡verdad!

 –Stella: No descuida, pero deberías llamar a tu casa a ver si alguien te puede venir a recoger. El peliblanco asiente, llama primero a su mamá y le informo que en su casa la situación también es igual, luego llama a su padre quien se había llevado a vanzilla, y que iría a recogerlo dentro de una hora porque tenía que encargarse de cerrar el restaurante.

–Lincoln: En que se quedó la película- preguntó a su novia para tranquilizarla un poco por la situación. 

 –Stella: Bueno ambos entraron a una casa abandonada para huir del asesino, y quedan atrapados en el sótano. 

 –Lincoln: Entiendo.

Luego les invadió un incómodo silencio, ambos podían ver su silueta, no sabían de qué hablar, pero la calentura del peliblanco invadió otra vez su cuerpo, en la penumbra de la oscuridad él le dio un beso, ella no mostro signo de incomodidad y lo permitió, pero para él no era suficiente quería hacerle otras cosas, como tocarles sus pechos, explorar todo su cuerpo, besar su vagina; pero ella no lo permitiría, mientras lo besaba a ella, Stella empezó a tocar sus brazos y también pasar su manos por su pecho; él cruzo la línea y lo beso con locura tocándole sus pechos y también el trasero de ella, pero algo que realmente fue inaceptable es que él metió su mano por dentro de su falta con dirección a la parte intima de ella, Stella reacciono bruscamente, abofeteándole. 

 –Stella: Que fue lo que te dije. 

 –Lincoln: Lo siento, me deje llevar. 

 –Stella: Lo sientes, en verdad lo sientes, lamentas haber querido introducir tus dedos dentro de mi vagina.

El peliblanco enmudeció.

Continuará...