Hace nueve años (Costia y Lexa)

Lexa irritada, enfadada por todo aquello que le había dicho Costia, sin contar los empujones y el bofetón, gruñó y le agarró las muñecas, empujándola contra el armario. La chica ya cansada de pelear, esperó que la ojiverde hiciera lo mismo que hacía Alicia. Ser su puta personal. Sin embargo, esta cerró los ojos y controló la respiración agitada por el enfado, por unos segundos, le pudo la imagen de su padre faltándole el respeto a su madre ¿quería eso para Aden? No, ella no era así y se maldijo por haberse dejado llevar por la rabia. Afligida, soltó las muñecas de su mujer y con dulzura le aferró las mejillas para depositar un tierno beso en cada lado:

_ Lo siento_ se volvió a disculpar llena de remordimientos_ lo último que pretendo es hacerte daño_ se abrazó a la chica y escondió su rostro en su cuello, para ocultar las lágrimas, las primeras en meses_ pero compréndeme tú también a mí, siento que cada cosa que hago no es suficiente para ti ¿Qué es lo que quieres? ¿Qué quieres y te lo daré?

_ La libertad

Musitó la chica, con voz casi inaudible, casi, puesto nada más decir aquello, Lexa sintió como si le rompieran parte de su corazón, tensando su cuerpo, lentamente fue separándose para mirar a los ojos castaños de su mujer:

_ Lo que viene siendo el divorcio_ Costia quería gritar que sí, más por librarse de Alicia que de Lexa, antes de que pudiera contestar, comenzó a sonar la nueva BlackBerry, la tecnología del momento, la ojiverde se quitó la humedad de las mejillas y contestó_ ¿Qué quieres?_ no se había separado ni un centímetro de Costia_ no, hoy no me encuentro bien, no voy a ir a la oficina_ tensó el gesto_ no, Alicia_ Costia sintió un escalofrío cuando mencionó su nombre, como fuera capaz de ir y encontrar a Lexa disgustada, no sabía que podría hacerle_ no quiero que vengas, luego te llamo

Cabizbaja y abatida, se separó de su mujer y se sentó en el borde de la cama. Costia se sentó a su lado y obligó a Lexa para que le mirara a la cara:

_ Me refiero a ser libres de Alicia, quiero que nos alejemos, quiero recuperar a la Lexa que conocí

_ Recuperar a la Lexa cuya única cosa que sabía hacer era llorar por los rincones, para sentir pena por mí_ frunció el ceño_ antes no estaba muy segura, porque lo cierto es que nunca termino de conocerte, no sé qué piensas, no sé qué sientes y la mayoría del tiempo actúas como si me ocultaras cosas_ le agarró de las manos_ ¿qué es? Déjame ayudarte

Durante unos segundos Costia permaneció dubitativa durante unos segundos, pero como desde los comienzos, entre ellas se cernía la sombra de Alicia, como en antaño, para su madre tuvo el de Gustus. Así pues, hizo como llevaba haciendo desde un principio, mantener a Lexa los ojos cerrados, con un:

_ No te oculto nada Lexa, ya sabes lo que quiero

Y como desde los comienzos, Lexa a pesar de intuir que había mentido, dejó su venda puesta ¿por qué? Miedo a sufrir más. La ojiverde apoyó la frente con la de su mujer y acercó sus manos hasta su pecho, inconscientemente le hacía sentir que dentro de este había un corazón que latía, el único musculo del cuerpo humano que podía ser dañado con malos actos y palabras. Llena de dulzura reclamó los labios de Costia, más reciproca al sentirla tan suave, libre de aspereza y posesión. Se miraron durante unos segundos, Lexa no haría nada que Costia no quisiera, así pues su mirada le daba a elegir. Pudo elegir decirle la verdad, la verdadera cara de Alicia Woods o simplemente un no te quiero, pero Costia también cayó en el circulo vicioso de "Estoy sola y lo único que me queda es lo que hay en este piso". Así que, una vez más tomó la decisión más cobarde. Sin prisas, quizás por buscar eso que había solicitado al comienzo de la discusión, en busca de conectar, comenzó a desnudar a la ojiverde...

Actualidad (Clarke y Lexa)

Uno, ya era muy tarde para entrar en detalles cada dos por tres, punto dos, Clarke ya estaba muy nerviosa por lo que le había dicho Lexa y punto tres:

_ He escuchado con pelos y señales tu escarceo amoroso con Sarah, con la sirvienta, con Costia y con las guarrillas de la playa_ hizo una señal de Stop con la mano_ no me interesa saber cómo le hiciste el amor a tu difunta esposa.

Los labios de Lexa se curvaron levemente, la primera vez en toda la noche desde que entró en la habitación. Clarke era tan chistosa cuando sacaba su vena celosa, era comprensible era su esposa y a nadie le gusta saber que hubo otros antes, bueno, en el caso de Lexa otras. Esta le tiró de la mano e hizo que se sentara encima de ella y comenzó a acunarla entre sus brazos, mientras le miraba fijamente a los ojos:

_ Como sea_ siguió_ el caso es que lo hice, cambié, pero solo con ella y respecto a Alicia y todo lo que me dijo. Me negué a creer que pegaba a mi madre, tantos años viviendo con ellas, me habría enterado, aun así intenté indagar, mi madre no soltaba prenda, "Ambas sois mis niñas" me decía_ apoyó la cabeza en el cabecero mientras acariciaba con sus dedos largos su cabello rubio_ ¿Cómo creer que una hija es capaz de pegar a una madre?

_ ¿Cómo creer que un padre es capaz de pegar a una hija?

Lexa torció el gesto y se removió nerviosa. Antes de seguir con la historia:

_ El caso es que Costia pareció querer cambiar, dejar de luchar y comenzamos a pasar más tiempo juntas, parecía que comenzábamos a encontrar un equilibrio, claro que todo se jodía cuando Alicia pisaba por la casa, muchas veces incluso sin estar yo. Me costaba mucho mantener el bienestar de la relación, así durante todo un año, el siguiente no fue para a bien.

Ocho años atrás (Lexa y Costia)

Costia había conseguido mediante la disciplina, conseguir relacionarse con Aden, no es que no lo quisiera, fue como si al no sentir el parto, ese lazo madre e hijo fuera mucho menos intenso. Ya tenía un año de vida, con su cara redondita, sus ojos castaños, su pelo moreno como el de Lexa, incluso su tez. Dibujó una sonrisa y sintió una pequeña oleada de calor. ¿Estaba enamorada de Lexa? Si eso era amor, no es como se lo imaginaba, más bien, había aprendido a quererla sin llegar al punto de estar perdidamente enamorada. La ojiverde, había encontrado el punto de hacerla sentirse bien, a pesar de que gran parte de ella era pura culpabilidad, por su mujer y sobre todo por su hijo, le podía la necesidad de querer compensar a Aden. Al niño más que a Lexa. Así es como tomó la decisión de querer darle un hermano. Aun a riesgo de que le podía el miedo de sufrir lo mismo por su segundo embarazo. ¿Depresión post parto? No se lo deseaba a ninguna mujer.

Mientras tanto Lexa había ido a la mansión Woods para buscar unos papeles que había en el despacho, como siempre, para hacer el favor a Alicia. Se supone que era unas propuestas de LexaCorp, no eran difíciles de distinguir, tenían el logotipo de la empresa, lo difícil era encontrarlo entre tanto archivador y carpetas, estaba sacando uno de los archivadores de la estantería que estaba al lado del escritorio, cuando una carpeta se cayó al suelo desparramando una gran cantidad de papeles. La ojiverde maldijo y se agachó para recogerlo, cuando la foto de una ecografía le llamó la atención, pensó que sería una copia de cuando se la hicieron a Aden, pero las fechas que ponían ahí no concordaban. Los datos que venían en los informes médicos, no es que se acordara mucho de esa chica, Angelien. Ahora que caía, después de su encuentro en el ropero al poco tiempo dejó de trabajar en la casa.

Lexa aparecería en la empresa con unos documentos pero no los que les pidió Alicia. Su empresa no empezó en el rascacielos, más bien era un par de plantas y los departamentos, más pequeños tenían que compartir espacio en cada planta, el despacho de Alicia era el mediano, junto al de Lexa, despacho presidencial y luego estaba el tercero, la nueva empleada y con mucho talento Ontari Fish:

_ Genial me has salvado la vida hermana_ le dijo Alicia levantándose y acercándose a Lexa, pero al ver la cara de enfado de esta, borró su sonrisa_ ¿Qué ocurre?

_ Esto_ le dijo entregándole las revisiones médicas del embarazo de la ex empleada y también las revisiones que le hicieron al niño después de nacer_ me parece curioso que tanto tú como madre_ ya que había firmas de ambas_ os preocupéis por el embarazo y el hijo de una ex empleada de la casa_ Alicia puso los ojos en blanco y regresó a su sitio, tirando la carpeta sobre la mesa y con pose chulesca se apoyó en el respaldo, subiendo los pies sobre el escritorio y los cruzó_ he echado cuentas, ¿Es mío vedad?

_ Te dije que no te liaras con ninguna empleada, pero no tuviste que hacerlo y encima sin condón_ la miró con expresión divertida_ ¿Qué te tengo dicho de las mosquitas atrapa fortunas?_ Señaló la carpeta_ ahí tienes el claro ejemplo de una, Lexa vino a casa exigiendo que te encargaras del mocoso, no solo eso, querías que cumplieras casándote con ella y con lo gilipollas que eras lo hubieras hecho.

_ Es mi hijo, tengo derecho a conocerlo

Alicia puso los ojos en blanco y se volvió a levantar, se acercó a Lexa y posó una mano en su hombro, poniendo esa cara y ese tono de voz en el que supuestamente lo hacía para transmitir confort, en realidad era para llevarse a Lexa a su terreno:

_ ¿Qué le dirás a Costia? "hola cariño, hace años cuando discutimos aproveché para follarme a una sirvienta, por cierto la dejé embarazada y Aden tiene un hermano mayor" _ le aferró de las mejillas_ Lexa, ahora que estáis bien, que estáis siendo felices ¿joderás tu matrimonio por una puta que solo busca dinero?_ por unos segundos Lexa pareció dudar_ Madre y yo ya nos estamos encargando de que a ese niño no le falte de nada, tú no tienes por qué preocuparte de ese marrón y si por un casual te empeñas en querer a ese niño_ curvó los labios_ no podemos permitir que esa zorra se salga con la suya, conseguiremos la custodia tenemos la de ganar, un hogar lleno de amor, mucho dinero y poder

_ No le voy a quitar la custodia a su madre

Alicia pareció perder la paciencia durante unos segundos y endureció su expresión:

_ENTONCES DEJA DE SER LA PAYASA DE LA FAMILIA_ Elevó un poco la voz_ Y OLVIDA A ESE PUÑETERO MOCOSO

Lexa la miró con cierta sorpresa, desde el instituto no se había atrevido a insultarla y mucho menos a levantarle la voz. Se alejó de ella, no quería ni mirarle a la cara, sin decir ni una palabra, se dispuso a marcharse, cuando una Alicia más arrepentida le agarró de la mano y le detuvo:

_ Perdona Lexa, es que estoy un poco estresada_ abrazó a nuestra ojiverde y le decía llena de remordimientos_ perdona, Lex, eres mi hermana tan solo te quiero proteger de la gente mala.

_ Llegas siete años para eso Alicia_ le separó y la miró con dureza_ déjame quiero estar sola

Los siguientes días Alicia estuvo muy atenta con Lexa, la cual solo iba a la empresa por las reuniones importantes. Nuestra ojiverde estaba en dos encrucijadas, la primera ¿Decírselo o no a Costia? La segunda ¿conocer o no al niño? A la primera no llegó todavía a ninguna conclusión, la segunda sí.

Una mañana salió desde muy temprano y condujo hasta Asheville, Carolina del norte. Un lugar muy acogedor, más natural y verdoso. Se puede decir que la chica no vivía en mal barrio, una urbanización en Clovelly Way. Consiguió la dirección gracias a los datos que tenían los últimos informes médicos, que enviaba cada seis meses, a petición de su madre. Revisó el número de la casa, con el jardín bien cuidado. Llamó al timbre y esperó a que abriera Angelien, pero lo hizo un hombre, alto, moreno, delgaducho y comenzaba a tener canas, pensó que sería el padre de la chica:

_ ¿Le puedo ayudar en algo?

Lexa revisó las notas que tenía en su mano, si, esa era la dirección y bueno, también es que no se acordaba mucho de su apellido:

_ ¿Aquí vive la señorita Angelien Brooks?

El hombre no dijo nada, se giró y vociferó dentro de la casa:

_ Cariño, te buscan

_ VOY

Se escuchó la voz de la chica. Lexa alzó una ceja y miró a ese hombre de pies a cabeza, vestía bien, giró un poco la cabeza y vio la zona del garaje, una camioneta y un coche elegante familiar:

_ Dígame caballero ¿Puedo saber a qué se dedica?

_ Limpiador de piscinas_ dibujó una amable sonrisa_ ¿necesita de mis servicios?

Lexa se guardó las manos en el bolsillo y miró con más seriedad a ese desconocido, que estaba criando a su hijo. Un limpiador de piscinas ¿podía permitirse vivir en una urbanización así? Mantener un vehículo tan elegante, tener una vida tan cómoda. Por lo que vio su madre les pasa todos los meses una buena cantidad de dinero, no quería creer a Alicia, pero todos los indicios apuntaban a eso. La chica por fin apareció, había cambiado, iba vestida con un traje de ejecutiva, premamá estaba embarazada. Cuando está vio a Lexa quedó pálida:

_ Alicia_ negó con la cabeza_ que diga señorita Woods, ¿Qué hace aquí?_ miró a su marido_ es una antigua jefa a quien servía, porque no nos dejas a solas

El hombre asintió y entró en la casa, dejando a las mujeres solas en la puerta de la casa. Angelien cerró la puerta para que no se escuchara nada. A Lexa no le extrañó que le confundiera con su hermana, cuando esta se marchó de su casa la ojiverde era una joven desaliñada con su estilo rockera:

_ No soy Alicia

Angelien cerró los ojos, eso era peor:

_ Lexa

Musitó:

_ La misma_ no iba a estar perdiendo el tiempo tomando cafés y preguntando ¿eh que es de tu vida?_ ¿Dónde está? Quiero verlo

Angelien negó con la cabeza, no es porque quisiera prohibirle conocerlo, siempre y cuando Lexa respetara ciertos puntos:

_ Ahora mismo está en la guardería, Lexa, para él, su padre es ese hombre que está dentro de la casa, ¿quieres verlo? Vamos a la guardería pero no esperes comportarte como su madre

_ Solo quiero verlo

Angelien apretó los labios. La última vez que estuvo en la casa de la familia Woods le insultaron de la peor manera, sin mencionar lo desagradable que fue Lexa cuando, llamar acostarse a eso, más bien cuando la usó y para colmo en el ropero:

_ Está bien, voy a por las llaves tú me sigues con el coche

_ Te llevo yo

_ No_ negó rápidamente_ te llevo, ves al niño y te marchas

Lexa resopló con molestia, encima con exigencias, ahí la que podía exigir y tenía las de ganar era ella. Aun así se contuvo y acabó asintiendo con la cabeza. Asheville no era grande como la ciudad. La guardería, estaba bien, era bilingüe y había muchos niños. Angelien solicitó que sacaran al niño. Aden caminaba, torpemente y con ayuda, pero Alex, tenía unos meses más y caminaba mejor. Cuando lo vio por el pasillo, se le dibujó una sonrisa, era alto, había heredado mucho de su madre, pero en él pudo ver el color de sus ojos verdosos. Angelien cogió al niño en brazos y fueron hasta un parque que había cerca. Solo ahí dejó que Lexa lo cogiera en brazos. Era un niño muy sociable y se reía mucho:

_ Si, eres un niño muy guapo_ decía mientras sonreía con orgullo_ serás todo un rompe corazones

_ Por favor Lexa_ comenzó a decir la chica suplicante al ver la cara de la ojiverde_ si has venido para quitármelo...

Lexa la miró durante unos segundos, pero enseguida regresó su atención en el niño que acunaba y le decía bobadas:

_ No te lo voy a quitar, pero solo si aceptas una condición

Los Woods y su fama de chantajistas. Angelien la miró con precaución, el disgusto que se llevaría su marido si le quitan los derechos como padre, se moriría:

_ ¿Qué condición es esa?

_ A partir de ahora seré yo quien se encargue de sus gastos médicos, sus gastos académicos y quiero fotos, de todos sus cumpleaños_ miró a la chica_ tampoco te pido mucho ¿No? ¿De que trabajas?

_ Doy clases particulares

La ojiverde achicó los ojos:

_ Una profesora de clases particulares y un limpiador de piscina ¿pueden permitirse la calidad de vida que llevan ahora?

Angelien la miró dolida, lo había dicho con un tono llena de insinuación:

_ Mi marido no es solo el limpiador de piscinas, es su propio jefe y su empresa funciona lo suficientemente bien, como para vivir cómodamente_ se cruzó de brazos_ si te preocupa que vivamos de la manutención de Alex, deberías saber que todo el dinero es suyo y va a una cuenta a su nombre, mi hijo no es un negocio. Los ricachones siempre creyéndoos tan importantes y menospreciando a la gente de clase media trabajadora.

La ojiverde prefirió no discutir más y disfrutar del poco tiempo que le quedaba con su hijo. A la hora de despedirse le depositó un beso en la frente y se lo entregó a su madre:

_ Quiero que sepas, que si el día de mañana descubre la verdad, le digas que las puertas de mi casa están abiertas_ curvó la comisura de sus labios_ se parece un poco a su hermano

_ Para él solo tendrá un hermano y es el que viene de camino

Lexa se guardó las manos en los bolsillos, ya era algo que le salía por sí solo, el gesto impasible. La mujer que le ocultó un hijo, quisiera dinero o no, en parte le jodía estar privada de su compañía:

_ Cuídate, Angelien y recuerda, incumple una de las condiciones y te quedas sin custodia

Angelien puso expresión de asco:

_ Has cambiado, eres la viva imagen de la endemoniada de Alicia

_ piérdete de mí vista antes de que cambie de idea y empiece a llamar al abogado

Actualidad (Clarke y Lexa)

Bien, fue en contra de los deseos de su hermana, aun así, consiguió implantarle esa duda. ¿Y si la chica decía la verdad y el dinero iba a un fondo de ahorros para el niño? Lexa fue hasta uno de los cajones de su ropa interior y sacó una cajita, en el que había fotos. Clarke alzó las cejas, pensaba que Lexa era a lo Dorian Gray y no podía ver ninguna instantánea suya. Aunque mayormente eran fotos de Aden cuando era bebé, de Costia, Anya y otro niño que rápidamente llegó a la conclusión de que era Alex. Tenía el mismo color de ojos que Lexa, era alto y también parecía adorar los deportes, solo que Aden era de béisbol y Alex de baloncesto:

_ ¿Se lo seguiste ocultando a Costia?

Un hijo oculto, eso era muy fuerte y Clarke dudaba de que Costia le perdonara algo así:

_ Odio la mentira Clarke, te estoy contando todos los aspectos de mi vida, los bonitos y no tan bonitos, de ello depende que me sigas queriendo o no, pero siempre con la verdad por delante_ la miró con adoración y le acarició la mejilla sonriente_ tú al menos me has contado las razones por las que te hiciste pasar por alguien que no eres, créeme que lo valoro y eso hizo que te amara mucho más

Aquello hizo que Clarke se sintiera como una mierda. Por una parte compadecía a Costia, por otra no, puesto que fueron sus decisiones las que le llevaron hasta ahí, pero ¿Quién era ella para critica a la difunta esposa de Lexa? Prácticamente hacía lo mismo, iba contando medias tintas. Lexa tenía en esos momentos los sentimientos a flor de piel. ¿Cómo decirle? "Cariño, en realidad no es que me obligaran a prostituirme, era actriz porno y robé a productor":

_ ¿Cómo se lo dijiste?

_ Fui un poco burra en ese sentido la verdad, cuando llegué a casa Costia había decidido darle un hermanito a Aden, me tenía una sorpresa llena de erotismo_ frunció el ceño y ladeó la cabeza_ fue la única vez que hizo eso, bueno creo que vas a querer que suprima esa parte...

Clarke reaccionó con sorpresa cuando le dijo con eso:

_ Un momento, me estás diciendo que te la tiraste y luego le dijiste, "je cariño, acabamos de hacer un bebé pero que sepas Aden ya tiene un hermano mayor"

Lexa carcajeó:

_ Bueno, quizás no fui así de burra y que conste fue ella quien me violó en esa ocasión_ se encogió de hombros_ se lo estaba diciendo cuando por una vez en nuestra puñetera relación se atrevió hacerme un oral, como que mi sangre se fue a otro lado y dejé de pensar con claridad.

La rubia achicó los ojos:

_ vamos que se lo dijiste después de hacerlo

_ Prácticamente sí

_ ¿Cómo se lo tomó?

Lexa alzó una ceja:

_ Propuso que nos fuéramos todos al parque de atracciones de Orlando

Lo dijo con tanta seriedad que a Clarke le pareció extraño. Es que si fuese ahora Lexa y le dijera "Cari, hice un bebé a la empleada del hogar después de besarnos" la asesinaba, eso lo tenía más que claro:

_ ¿De verdad dijo eso?

_ No Clarke, me odió durante días y cuando supo que estaba embarazada los primeros meses

Clarke asintió eso ya era más normal:

_ Por hacer un resumen, tu primera mujer se casó contigo coaccionada, a tus espaldas, pero lo estaba, la madre de tu otro hijo vive con miedo de que algún día te de la vena de quitarle el niño y yo me casé contigo coaccionada por ti.

Lexa le dedicó una mirada asesina:

_ Eso, recuérdame lo mal bicho que soy

Clarke esbozó una risotada y se puso a horcajadas sobre la ojiverde, le abrazó alrededor del cuello y le besó, un beso que Lexa respondió con mucho, tomar un descanso para besarse no estaba nada mal. La ojiazul paró entre risas y miró hacia abajo:

_ ¿qué?_ se defendió Lexa_ te ves sexy con mi camisa, hueles extremadamente bien y estás demasiado pegada a mí, dios te bendijo con un buen par de tetas como para sentirlas ahora

Lo ojiazul traviesa comenzó a mover la cadera, buscando fricción sobre cierta parte de su anatomía, Lexa rio, a cada fascículo de su vida que le contaba, era como si se liberara de un gran peso y le resultaba más fácil reír:

_ Déjame de contarte la historia y luego jugamos si quieres

Clarke paró y puso los ojos en blanco:

_ Lexa he escuchado como perdiste la virginidad, como tu mujer te hacía el amor y como te follastes a otras cuantas ¿Sabes que tenemos vida conyugal no? _ La morena dibujó una triste sonrisa, pero no dijo nada_ ¿Qué ocurre Lexa?

Preguntó más seria la rubia

_ Déjame terminar de contarte todo, Clarke quiero que sepas con quien te has casado

La ojiazul gruñó y casi pataleó como una niña pequeña:

_ ¿Es que no podemos tener recreos como en el colegio? Un descanso_ achicó los ojos_ ¿Cómo dijiste que dejabas de pensar con claridad?

Empujó a Lexa contra la cabecera de la cama, se separó y aprovechando las debilidades de la ojiverde se inclinó para comenzar a hacerle sexo oral después de haber bajado un poco su ropa interior:

_ Mierda, Clarke_ dijo sofocada la ojiverde, que cerró los ojos y apoyó la cabeza_ esto es aprovecharse_ miró hacia abajó encontrándose con la intensa mirada oscurecida de la rubia, sacó de forma erótica su lengua y humedeció el glande mientras hacía circulitos con ella_ joder, tu ganas

Dijo antes de acomodarse, tumbándose un poco y colocarse unas cuantas almohadas a su espalda, la rubia rio triunfante y siguió disfrutando de su dura erección, introduciéndoselo en la boca, de vez en cuando Lexa apartaba la mirada para echar la cabeza hacia atrás, sobre todo cuando Clarke hacía muchos truquitos sorprendentes en la zona con más terminaciones nerviosas. Emitiendo un sonido quejumbroso cuando esta paró se incorporó un poco y se desabrochó la camisa, dejando a la vista sus voluptuosos senos. La ojiverde ansiosa quiso tocar pero esta se lo prohibió. Puesto que tenía otros planes:

_ No te muevas

Lexa gruñó y sonriendo con travesura:

_ Como me excitas cuando te pones dominante

Clarke sí que la miró con malicia ¿Qué no se moviera? Los ojos de Lexa se le pusieron como platos cuando vio como esa portentosa rubia, comenzaba a usar esos voluptuosos senos, sobre su miembro bien dotado. Miss Cocos enloqueció una vez más a la morena:

_ Virgen santa Clarke

La ojiazul carcajeó y subió hasta encontrar de nuevo sus labios:

_ De todo, menos virgen y santa

A horcajadas sobre la ojiverde cogió su mano y la guio hasta su mojado sexo. Lexa sin quitar la mirada de la ojiazul, comenzó a masturbarla, primero acariciando alrededor del clítoris, recogiendo toda la humedad posible, Clarke siempre encima, siempre dominante movía la cadera en busca de más fricción directa, más placer. Lexa aprendió muy bien la lección que le dieron, no solo estimulaba de maravilla, masturbaba como el mismísimo demonio, cuando ya su obertura estuvo lo suficientemente mojada y dilatada procedió a introducirle dos dedos, en busca de esa zona que hacía gritar a la rubia, que casi era quien se follaba la mano de Lexa, ella solo movía los dedos para tocar esos puntos que la harían estallar en un placentero orgasmo y le importaba un huevo el que Raven la escuchara gritar. Lexa quiso recuperar el mando, pero Clarke una vez más le empujó contra las almohadas y sonriente negó con la cabeza, llevó su pene erecto hasta la obertura:

_ Dios, si Clarke, follame

Clarke descendió, lento hasta la mitad ahí bajó de golpe, jadeando y en lo que se acostumbraba a la intrusión, agarró el mentón de Lexa apretando fuertemente de sus mejillas, haciendo que sus labios parecieran una boca de pez y en plan guarrona:

_ ¿Quieres que te folle? _ Bueno, a veces cuando la ojiazul se sobre excitaba, podía pasarse muy mucho de guarrilla_ vas a ver lo que es bueno

Terminó la frase en forma de amenaza mientras le pasaba la lengua por sus labios, en plan gata salvaje. Lexa abrió los ojos como platos:

_ Joder

_ Calla

Ordenó antes de mover la cadera, porque no hacía falta ese básico arriba abajo, tenía un don para mover la cadera y no de forma suave. Lexa ya no dijo nada más, más bien disfrutaba de su ojiazul dominante. Entre jadeos y dios que mujer la iba a dejar en jaque mate antes de tiempo, le agarró de los glúteos con fuerza para ayudarla con los movimientos, entre jadeos Clarke acercó el rostro a Lexa y antes de besarla:

_ Dame un azote

Dios eso sí que no se lo esperaba Lexa, eso ya era demasiada excitación:

_ Madre mía Clarke

Dijo Lexa entre dientes antes de complacer a su amazona salvaje y con su mano derecha le dio un sonoro azote, se escuchaba el sonido de sus caderas chochar, Clarke gimió con fuerza y pidió que le diera otro en el otro lado. Lexa volvió a obedecer si cabe más excitada, le agarró con fuerza de los glúteos y comenzó a mover la cadera, siendo ahora desde abajo la activa:

_ Córrete Clarke, vamos

Y no hizo falta que se lo volviera a repetir, todo su cuerpo tembló a la vez que Lexa sintió los espasmos de sus músculos vaginales. Esta iba a salir para terminar con la mano, cuando la amazona pegó los últimos trotes rápidos:

_ Joder Clarke que no puedo más

Dijo Lexa cerrando los ojos con fuerza, jadeó y se dejó llevar por su orgasmo:

_ Dios_ dijo casi sin aire Lexa y eso que había sido la pasiva_ ¿Dónde has estado todos estos años?

Clarke con respiración acelerada, sudando como una cerda se tumbó a su lado y apoyó la cabeza sobre su pecho:

_ Ya puedes seguir con tu historia

_ La historia_ dio unas palmaditas en el hombro de la rubia_ ahora viene lo duro, solo deja que mi corazón se tranquilice.

_ Duro en qué sentido

La sonrisa de Lexa se le borró:

_ En que me creí que Costia se enamoró de mi al final y en como las pillé en la encimera de la cocina.

_ ¿Cómo puede afectarnos eso Lexa? Sigo sin entender

_ lo entenderás

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