Todos los alfas estaban al pendiente de Yoongi, pues este al parecer todavía no se disponía a salir de su respectiva habitación, sabían que habían cometido un grave error al dejar que Hoseok fuese el primero en aplicar su plan de conquista, pero demonios, pensaban que iba a funcionar aunque sea un poco, aunque Hoseok jamás se ganaba a los omegas de buena manera.

En cambio, Yoongi se encontraba recostado en su cama con los brazos cruzados mientras seguía refunfuñando un montón de maldiciones, y es que en verdad lo habían hecho enojar a tal punto que inclusive quería salir de aquella casa y quedarse en su propia casa, miro el reloj sobre la mesita de noche, faltaban dos horas para que fuese a su trabajo de medio tiempo, odia ir en la mañana, pero es necesario, odia que sean vacaciones también, pero bueno, soportaría lo que fuese, al menos por breves momentos, no quiere ni imaginar cómo sería vivir por más tiempo dentro de esa casa de los espantos, ¡no lo soportaría!

Se incorporó sentándose en el borde de la cama para disponerse a levantarse, pero alguien toco a su puerta, frunció el ceño al escuchar aquel toque, parecía ser muy tímido.

—Más vale que no seas Hoseok, porque si lo eres te patearé en las bolas, hijo de... —seguía diciendo mientras se acercaba a pasos pesados a la puerta y la abría con brusquedad, allí estaba Taehyung, dejo de fruncir un poco el ceño, al menos era él, no quería ver al otro Kim—, ¿qué quieres?

—B-bueno —junto sus manos jugando con sus dedos, demonios, nunca pensó ver a su vecino tan enojado con lo ocurrido, y sabe que debía estarlo—, q-quería pedirte si puedes venir con nosotros a desayunar.

—¿Estará Hoseok presente? —Taehyung dio un asentimiento ante la pregunta—. Entonces olvídalo, no estaré en un mismo lugar que ese pervertido de quinta.

—P-pero, tienes que comer —Taehyung le mostro una diminuta sonrisa—, el desayuno es la comida más importante del día, y n-no me gustaría que se lo perdiera...

Debía darle la razón a ese alfa, pero no estaba en sus planes quedar de nuevo cerca de Kim Hoseok, no después de lo que paso, además seguramente todos esos alfas estaban planeando algo más, Yoongi lo sabía, esas sonrisas no lo podían engañar, tal vez a otros omegas sí, pero a él no, miro al alfa que se encontraba parado frente a él, parecía estar demasiado nervioso, Yoongi lo miro de pies a cabeza, Taehyung tenía un leve temblor en el cuerpo, además de que pudo notar la ligera capa de sudor sobre su frente a pesar de estar cubierta por su cabello, ese alfa estaba ocultando algo, y Yoongi lo averiguaría.

—Taehyung —el mencionado lo miro a los ojos.

—¿Sí?

—Ya dímelo —el alfa dejo de sonreír para tragar en seco—, ¿qué se supone que planean tú y tus hermanos? —el alfa se paralizo en su sitio al escuchar esa pregunta, se supone que no debe decir nada, nada de nada.

No podía simplemente hablar de su plan maestro con el omega, no podían era una regla que no debía romper, pero Yoongi le está mirando con mucha intensidad, odia que hagan eso, podía soltar y decir todo de una sola vez para poder librarse de aquella mirada tan penetrante del omega, demonios, aparto la vista, observando la pared, y Yoongi sonrió ladino, ese alfa si estaba ocultando algo.

—Será mejor que me lo digas —comento Yoongi—, o le diré a tu madre todo lo que confesaste aquella noche, además de acusar a Hoseok por lo que me hizo.

—¡No te atreverías! —Taehyung le miro de nuevo, sus ojos se abrieron en demasía, ese pequeño omega sí que sabe jugar sucio—. Por favor, no le digas nada.

—Entonces dime lo que planean —cruzo sus brazos sobre su pecho—, ¿o quieres que tú y tus hermanos sean castigados severamente? —Taehyung negó frenéticamente con la cabeza—. Bien, entonces, te escucho...

Taehyung sabía que había sido una mala idea que lo enviasen a traer a Yoongi para que desayunasen juntos, él había votado insistente en que fuera Jimin o Seokjin quienes vinieran, pero no, todos creían que era mejor que él fuese quien invitara al omega al desayuno, como odia a sus hermanos por esto, y ahora ellos lo odiaran por lo que estaba a punto de decirle a Yoongi, Taehyung es muy malo con las mentiras, así que mentir no era una buena opción en este momento, casi siempre evitaba los problemas, su madre inclusive sabe a quién debe preguntar por alguna travesura que han hecho, y por supuesto era a él, ya que Taehyung no sabe mentir, no puede, mucho menos si lo están viendo fijamente y lo amenazan como ahora mismo aquel lindo omega lo hacía.

—Estoy esperando, Taehyung, no me hagas perder mi tiempo —demasiada presión para el alfa.

—N-no, no planeamos nada, Yoon... —sonrió apretando sus dientes para poder mantener la calma, pero el omega no le creía nada, se acercó a Taehyung quien dio un paso retrocediendo.

—No te creo —comento el omega mientras seguía caminando y Taehyung retrocediendo—, y si no quieres decirme la verdad, en este momento bajaré, y si esta la madre de todos ustedes allá abajo, le diré lo que me hizo Hoseok, y lo que confesaste aquella noche.

Taehyung trago grueso, dio unos pasos más hasta dar la vuelta y detenerse para su mala suerte en la pared, demonios, Yoongi se detuvo de igual forma.

—E-estoy diciendo la verdad... no planeamos n-nada.

—Está bien —Yoongi se hizo para atrás, dio media vuelta y camino en dirección a su habitación—, será mejor que avises a tus hermanos que no tendrán mucha libertad en su casa como antes —Taehyung parpadeo un par de veces—, bajaré, no desayunaré, hablare con su madre, y los dejaré para escuchar por afuera de la casa su regaño —miro por detrás de su hombro al alfa que se veía sumamente preocupado por lo dicho—, los veo en unos minutos.

Taehyung no podía creer en todo lo que estaba pasando, demonios no quería que nada de eso ocurriera, miro a Yoongi que seguía caminando a su habitación, luego al pasillo vacío, y de nuevo, estaba decidiendo si aceptar el castigo severo de su madre, o mejor decir la verdad, y sinceramente prefería decir la verdad a tener que soportar un castigo de su madre, su madre es un ángel, pero no cuando se enoja, así que antes de que Yoongi tomase la perilla de la puerta de su habitación para entrar, grito.

—¡Espera! —Yoongi detuvo sus acciones, sonrió sin que el alfa lo viese, esto había sido más fácil de lo que pensó—. T-te lo diré todo, pero por favor no le digas nada a mi madre.

Yoongi dejo la perilla de la puerta y se giró sobre su eje para mirar al alfa, quien se relamió los labios, parecía que el estrés se le había ido de su cuerpo, vaya que lo había puesto en un dilema muy grande.

—No le diré nada a su madre —contesto Yoongi—, ahora dime ¿qué se supone que planean?

El alfa soltó un resoplido, camino los pasos que le faltaban para estar frente a frente con Yoongi, y entonces bajo la mirada, no quería encararlo, sabe que seguramente sus demás hermanos terminarían por golpearlo por esto, pero era mejor a recibir un castigo por un mes.

—A-aquella noche —Yoongi asintió a pesar de que Taehyung no lo miraba—, todos nos reunimos para hacer un plan —levanto su mirada, encontrándose con los ojos cafés del omega, ahora que Taehyung los miraba, no pudo evitar pensar en lo lindos que eran—, el p-plan era poder saber cuál de nuestros métodos para ligar con omegas era más efectivo —se encogió en su lugar al ver como el ceño de Yoongi se fruncía por sus palabras—, y así poder usarlo todos para obtener al omega que nos gusta desde hace tiempo...

—Me estás diciendo, que prácticamente querían usarme como conejillo de indias para sus malvados planes —hablo Yoongi entre dientes, se estaba molestando, y más cuando Taehyung dio un asentimiento a sus palabras, pues era la verdad—, ¿acaso son idiotas?

—Lo siento... en verdad lo siento, y-yo les dije que era una mala idea, pero n-no me escucharon...

Yoongi no dijo nada, soltó un suspiro, jamás creyó que sería la carnada de alguien, demonios, esto era espantoso, esos alfas son de lo peor, nunca pensó que algo como eso le sucedería, paso sus manos por su rostro restregándolas con poca fuerza, esto debía de ser una maldita broma, al menos lo había descubierto antes de que todo se volviese un caos.

—¿Está su madre abajo? —Taehyung negó con la cabeza—. Diles a los tontos de tus hermanos que bajaré en unos momentos, y —se acercó a Taehyung, lo tomo por los hombros y lo hizo agacharse un poco más para que se vieran a los ojos—, gracias por decírmelo, Tae...

El alfa sintió su boca secar por aquel agradecimiento, a pesar de que el semblante del omega era serio, no pudo evitar pensar en lo lindo que se había escuchado agradecerle de aquella forma, sintió cuando Yoongi soltó sus hombros y le daba una palmada en su hombro derecho.

Demonios, ahora estaba en problemas con sus hermanos, pero al menos Yoongi bajaría a desayunar, ¡pero definitivamente él no sobreviviría si es que sus hermanos se enteraban de que le había dicho todo a Yoongi!