Tokio 16:35 PM

Han pasado varias semanas desde que Saniel ha tomado asilo por un tiempo en el hotel hospedado de la ciudad central de Tokyo. El ojirojo estaba sentado en su cama mientras revisaba unos cuantos papales de documentos de identidad junto a un maletín de dinero que máximo tendría más de 100.000 dólares bien guardados.

En el transcurso de las semanas que estuvo en este mundo, se aseguró de tener todo lo disponible para sus propios beneficios personales como los servicios básicos en su departamento, también para aprovechar sobre su poder, fue en varios casinos de la ciudad para ganarse el lote apostando lo cual era bueno ganando así dinero de las apuestas. No quería llamar la atención robando dinero de un banco o robando a otros criminales de poca monta o algo por el estilo así que se abstuvo en ir desde un perfil bajo mezclándose con la gente común aunque varias personas lo miraban curiosos cada vez que salía a caminar en la calle debido a sus rasgos y color blanco de su cabello y ojos rojos que rara vez se podía ver en algún extranjero, algo que Saniel no le dió importancia ignorando a las personas que lo veían.

Saniel: Bien, bien... esta ciudad al menos me ofrece buenos atajos para tener lo que necesito para mi independencia e instalación de equipo personal –dijo terminando de revisar sus cosas y guardarlas debajo de su cama. El peliblanco se levanta para ir a su armario y sacar otra ropa casual llevando una camisa manga corta dejando descubierto un poco su pecho atlético, pantalones negros y zapatos a juego– iré a salir un rato y sacarme el estrés que llevo de haber investigado en este lugar –dijo con seriedad para tomar sus llaves de su puerta y guardarla en sus bolsillos procediendo a salir y cerrar la puerta de su departamento.

Ya al salir a las afueras del departamento, Saniel se adentra a caminar por calles con las manos en su bolsillos mesclandose entre la gente con su rostro estoico, estuvo caminando por la ciudad durante todo un rato observando algunas rutas y puntos específicos de varias zonas rurales de Tokio mirando junto a sus pequeñas tiendas y puestos de comidas y comercios de ropas y demás productos de venta.

Un rato después, Saniel caminaba algo alejado de la ciudad saliendo fuera de la civilización para aventurarse por el bosque para estar a solas, quería entrenar en secreto para estar en forma y no perder su toque en el combate cuerpo a cuerpo. Llegó hasta una zona rocosa con un campo árido de arena y tan como se acercó comenzó a ejercitarse y practicar sus golpes.

Primero 100 sentadillas, 100 flexiones de espalda, 100 flexiones de pecho; segundo practicar con 3 muñecos de mástil mármol lanzando golpes y patadas precisas y rápidos utilizando un poco del estilo sin forma rompiendo en el proceso los muñecos; y tercero mostrando su fuerza sobrehumana destrozando rocas y piedras grandes en el campo a su alrededor dejando destrozos, no usó parte de sus poderes ya que no quiere malgastar innecesariamente energía. Después de calentar un poco se sienta en un tronco tomándose un leve descanso y pensando varias cosas que debe hacer a futuro a medida que estaría un tiempo en este mundo de la Tierra.

Hasta que de pronto un zumbido de su cabeza resuena activando su sentido de emergencia y siente una extrañas presencias de energía que estaba en el otro lado del bosque, poniéndose serio se levanta para comenzar a flotar un poco e ir volando a una velocidad moderada hacia donde sentía esas extrañas presencias sobrenaturales, tenía suerte que parte de sus habilidades no hayan sido selladas poniéndolo un poco más de ventaja.

Cuando exploró por el bosque unos 5 minutos, llegó hasta donde sentía esas energías en el fondo del bosque y vió unas siluetas de 3 soldados sombras materializadas con formas de armaduras llevando espadas haciendo que Saniel se sorprenda y más porque vio que en en esos armaduras vivientes de sombras estaba el símbolo de infinito de la Familia Shadow.

Saniel: qué es eso? –se preguntó con extrañado y serio cuando de repente los soldados sombras se abalanzan contra él dando tajos con sus espada siendo esquivado por Saniel que reaccionó rápido alejándose unos metros de ellos– mierda!

Los 3 soldados sombras lo siguen para seguir con la confrontación y Saniel decide ponerse serio para responder y abalanzarse sobre ellos dando pelea, el peliblanco no se contenía a la hora de lanzar sus puños y patadas como esquivando hábilmente los tajos de las espadas de los soldados, la pelea se extaba extendiendo más de un rato y Saniel ya arto de perder el tiempo decide usar parte de sus poderes para acabar con la pelea.

Saniel: debo teminar con esto –extiende sus manos y unas descargas de electricidad roja se manifestaba en sus manos para apuntar hacia el primer soldado de frente–  tengan!! –exclama expulsando un rayo de energía roja conectando contra el primer solado Sombra haciendo que desaparezca no dejando rastro.

Los 2 soldados restantes se mueven a velocidad para intentar llegar a apuñalar a Saniel con sus espadas y el peliblanco deja que se acerca para que juntos ascienden darle un golpe pero Saniel toma de los antebrazos de ellos con fuerza y los estampa al suelo voltenadolos y los pisa en sus espaldas para que no se levanten y aprovecha rápido para que atraviese sus nucas y gruñe soltando una expansión de energía roja que llena los cuerpos de los 2 soldados sombra haciendolos explotar y desapareciendo rastros de ellos.

Saniel: Por fin –diría alejándose un poco mientras miraba el lugar donde fueron destruidos aquellos soldados so tras vivientes– esos eran soldados de sombra que sólo Nathaniel puede crear, los reconozco bien al ver los símbolos del infinito. Acaso él los trajo aquí?

De repente una protección de energía se aparece detrás de Saniel haciendolo exaltar un poco y se gira para mantenerse en guardia hasta que mira que era la forma astral del reconocido Heredero del Vacío, Nathaniel Shadow, sorprendiendo a Saniel.

Nathaniel: Hola Saniel, veo que estás empezando a movilizarte y tomar los rumbos de lo que te depara este mundo verdad? –dijo con una pequeña sonrisa tranquila el pelinegro.

Saniel: Qué haces tú aquí? Acaso tu enviaste estos soldados de sombra? –interrogó serio.

Nathaniel: Si ese fui yo, lo hice como una prueba para ti y ver que si no has quedado oxidado en tus habilidades de combate y parte de tus poderes también. Los modifiqué para cuando sólo aparezcan para darte algunas pruebas diarias y alejados de la civilización, ah y también para tenerte vigilado si estás aprovechando bien esta oportunidad que te dí y vayas buscando ru propio camino –dijo con seriedad

Saniel: Hmp, bien –bufa un poco con mientras se cueza de brazos.

Nathaniel: Bueno sin más que decir yo me retiro ah y espero que te vaya bien en esta encrucijada tuya y más te vale que no causes problemas, porque yo y los altos mandos de mi padre te tenemos vigilado desde arriba. Nos vemos –terminó de decir serio y sonríe un poco para que la forma astral de nathaniel desaparezca dejando solo a Saniel.

Saniel: –da un suspiro y rasca su nuca con pesadez en señal de fastidio– espero que ese tonto no me fastidie mucho en este tiempo que estaré aquí. Al menos me sirve calentar los músculos y mejorar más de mi fuerza –dijo para que mire por última vez el lugar algo destruido y se retire alejándose en la salida por donde vino del bosque para regresar en camino a su departamento.

Y así Saniel termina una sus primeras semanas en reorganizarse y manteniendose en forma, sólo queda esperar quemas le depara el mundo donde está hospedado y qué cambios podrá obtener ya sea para bien y para mal.

Continuará...