Capítulo 62

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—¿Por qué esa cara larga? —preguntó Jungkook cuando contempló a su amigo volver al frente de la cafetería con él—. Pensé que estarías feliz de recibir una llamada de tu alfa a pesar de que te advirtió que tal vez no podría hacerlo —indicó.

—Lo sé —suspiró—. Y por una parte, estoy feliz por haber escuchado su voz, pero... —torció sus labios—. Me llamó porque sintió todas mis emociones a través del lazo luego de hablar con SungJae —explicó—. No me siento feliz de haberlo preocupado en medio del trabajo, estúpidamente le distraje y sabes que eso no es bueno en su profesión —hizo un puchero.

—En tu defensa, SungJae fue un verdadero imbécil —excusó observándolo—. Mira que mencionar a Taemin sin saber toda la historia y luego de casi declararse, pedirte ser solo amigos —negó.

—Ni me lo recuerdes —arrugó su nariz con molestia—. Solo el pensarlo me vuelve a molestar —gruñó bajito.

—Ves, ¿cómo se supone que ibas a poder controlar algo así? —golpeó suavemente su hombro—. Además, SungJae desde un principio sabía que estabas felizmente emparejado, Tae y yo se lo advertimos también —argumentó—. Seguir a tu lado fingiendo amistad mientras enviaba otras intenciones a tu alfa fue un golpe bajo, e hiciste bien en cortarlo antes de que crearas malentendidos —expresó sincero—. Yoongi fue muy maduro al expresártelo y no actuar como un alfa cavernícola y siendo un idiota al respecto —indicó.

—Sabe de mis horribles malas relaciones previas —suspiró—. Seguramente no quiso ser como esos idiotas y guardó todo para sí mismo, si no fuera por nuestro lazo, tal vez ni me lo habría dicho con tal de que yo fuera feliz —contó con una pequeña sonrisa.

—La mención de edad también fue una idiotez por parte de SungJae —recordó el otro omega, frunciendo el ceño.

—Por favor Kookie, no más SungJae hoy o estaré recibiendo otra llamada de mi alfa para preguntarme que me sucede —indicó.

—Bien, no más de ese tonto —resopló—. Supongo que algo de bueno tiene la mordida de un alfa, o no habrías sabido de cómo se sentía Yoongi hyung —expresó.

Curioso, Jimin le observó.

—Tú también eres un omega a pesar de ser uno dominante, ¿no sientes la necesidad de tener una marca en tu cuello o un nudo? —indagó curioso.

—Te diré lo mismo que a Taehyung, soy diferente a un omega normal, hay algo en mí que se molesta de solo pensar en un alfa mordiendo mi cuello para reclamarme, ya sea que este sea buena persona o no —explicó—. Y respecto al nudo, no niego que durante mi celo a veces siento como si necesitara algo más, pero no es como si no pudiera vivir sin ello, deberías de saberlo desde que no siempre recibes los nudos de tu alfa —le observó.

—Bueno... —esquivó su mirada.

—No juegues —dijo con sorpresa y luego se carcajeó—. Con razón hoy no te has podido ni sentar.

—Fue solo tres veces —murmuró avergonzado—. Es culpa de esos condones que encontramos, esos que soportan el nudo de un alfa y la excesiva carga que liberan al soltarlo —expresó—. Es algo adictivo sentirlo en mi interior de esa forma, ya quiero que llegue el día de su celo —sonrió sonrojado.

—Vaya, debí de darme cuenta de que se harían unos adictos tras encontrarlos —indicó divertido—. ¿Al menos funcionaron?

—Los dos primeros si —respondió.

—Pero, ¿no lo hicieron tres veces con ellos? —alzó una ceja.

—Es que no lo usamos —reconoció mordiendo su labio inferior—. Y antes de que preguntes, sí, aun así tuve su nudo, pero tome mi anticonceptivo y me limpió al terminar.

—Idiota —negó.

—Ambos lo deseábamos —se encogió de hombros con una pequeña sonrisa tímida.

—Si así son ahora que pueden controlarse y pensar, no quiero ni imaginar cuando sea el celo de Hyung —suspiró—. Creo que es hora de ir planeando un baby shower con Tae.

—No tenemos planes de cachorros todavía —negó—. Sé que en algún momento el instinto como omega me golpeará por quererlos, pero hasta entonces solo disfrutaré de mi relación con mi alfa —expresó.

—No podrán disfrutarla mucho sí toman esos riesgos, ni siquiera Tae y yo somos así —suspiró—. Pero bueno, cada uno con su relación, ¿no? —le sonrió enderezándose cuando la campanita en la puerta sonó anunciando de un cliente.

Pegando una automática sonrisa en su rostro, el pelirosa omega se movió para atender los clientes junto a su amigo.

—Minnie, tienes clientes en tu mesa —indicó Jungkook—. Ve —asintió.

Observando como su amigo solo estaba con dos personas en la caja, asintió y tomó su libreta antes de salir detrás del mesón para dirigirse a sus mesas asignadas.

Cuando llegó a la última persona, se detuvo automáticamente y su nariz se arrugó con disgusto al contemplar al compañero desagradable que trabajaba en la misma empresa con su alfa.

Debía de suponer que este intentaría acercarse aprovechando que su alfa no estaba cerca.

—Buenas tardes, ¿qué le puedo servir? —preguntó, sin ninguna sonrisa en su rostro.

—Un americano y cualquiera de tus postres que no sean tan dulces —respondió con una gran sonrisa.

Asintiendo sin decir ni una palabra más, el pelirosa omega se alejó y preparó el pedido.

—Psst, Kookie —llamó en voz baja.

—¿Qué sucede? —se le acercó curioso.

—¿Puedes ir a dejarlo tú? —pidió señalando disimuladamente al alfa—. Trabaja con Yoonie y es una especie de idiota —explicó.

—Déjamelo a mí —asintió tomando la bandeja.

Siguiendo con la mirada a su amigo, Jimin fingió trabajar en otro pedido cuando WonHo le observó tras intercambiar un par de palabras con el otro omega. Ignorando su insistente mirada, soltó un suspiro de alivio cuando finalmente la dejó de sentir sobre su persona.

—Bueno, sí fue algo descortés —pronunció el dominante omega no muy feliz cuando volvió con él.

—Siempre habla mal de Yoongi cada vez que nos encontramos —comentó terminando su café helado.

—Uhm, debe de sentirse inferior tal vez —pronunció—. O está interesado en ti.

—Difícilmente conseguiría mi atención hablando mal de mi actual y único alfa —resopló negando—. Suena más como si estuviera envidioso de Hyung —dijo pensativo.

—Hay algunos alfas que son así, que buscan peleas y competencias dónde no las hay solo para alimentar ese ego suyo —indicó.

—Alfas —rodó sus ojos.

Siguiendo con su trabajo al llegar más clientes, el pelirosa omega se olvidó de la presencia del alfa mientras atendía activamente, o eso fue hasta que se lo encontró en la caja.

Inmediatamente buscó con la mirada a su amigo, encontrándolo atendiendo sus mesas asignadas.

—¿No aceptarás el dinero? —preguntó WonHo, moviendo el billete frente a él.

—Si señor, espero que haya disfrutado —respondió de forma automática, abriendo la caja y sacando el vuelto.

—Me gustaron esos pequeños queques con chispas de chocolate —comentó.

—Me alegro de que le gustaran los muffins, su vuelto —sonrió.

—¿Ese es para las propinas? —preguntó, recibiendo su vuelto mientras señalaba el frasco de vidrio cerca de la caja.

—Lo es —asintió y observó detrás del alfa buscando una excusa para correrlo, pero lamentablemente, no había ningún otro cliente esperando pagar.

—Tal vez sea molesto, pero tú que eres un omega y entiendes a otros de tu misma naturaleza independientemente si es hombre o mujer... ¿Tienes alguna idea de cómo puedo ayudar a mi empleadora? —preguntó, echando deliberadamente lento las monedas de su vuelto en el frasco.

—No, no tengo idea —respondió.

—La señorita Young fue drogada y violada en grupo recientemente —comentó contando su vuelto—. Ya sabes el trauma que debe de significar eso, más ahora que se descubrió que quedó embarazada de uno de esos imbéciles alfas que se aprovecharon de ellos.

—Lo lamento por ella, pero realmente no creo que cualquier cosa que diga sea de ayuda, especialmente viniendo de mi parte —le recordó.

—Uhm, tal vez tengas razón —suspiró con pesar—. Incluso Yoongi la fue a visitar no hace mucho, ¿te lo dijo? —el omega negó—. Bueno, él fue a visitarla y saber cómo estaba, uno pensaría que aceptaría su presencia desde que era el alfa que le gustaba y se sentía cómoda y protegida con él, ¿no? Pero en realidad fue todo lo contrario —expresó—. Ella se alteró y gritó de puro miedo al verlo, como... Si estuviera viendo a uno de sus atacantes —le observó.

—Cualquier omega recientemente atacado sexualmente por un grupo de alfas se alteraría si estuviera cerca de otro luego de lo que le ocurrió —indicó—. Y si el chico que antes me gustaba me fuera a visitar y me encuentra de esa forma, no creo que yo hubiese reaccionado bien tampoco —defendió—. Presionarla con la presencia de otros alfas no creo que sea buena idea, y por favor, abstenerse de relacionar a mi pareja en tu trabajo porque no quiero que esa señorita confunda sus intenciones con algo más —pidió.

—¿Y si te dijera que él personalmente pidió ir a visitarla al hospital? —cuestionó, metiendo ahora un billete.

—Te respondería que no te creo, porque mi alfa dejó muy claro que no quiere involucrarse con esa persona —respondió.

—¿Sabes? Para mí que estuve presente, más que vergüenza, Na-rim sintió terror al ver a Yoongi, porque estuvo rodeada con otros alfas médicos o enfermeras y aún así no reaccionó de aquella forma hasta que lo vio —expresó.

—Bueno, me imagino que en esos momentos ella estaba con medicamentos, los médicos supieron darle su espacio y mi alfa tiene una más presencia más fuerte que el de los demás, por lo que debió de reaccionar de forma instintiva al verlo —se encogió de hombros.

—O está la posibilidad de que él se lo hizo —enfrentó.

—Difícil creerlo cuando estaba conmigo en nuestra cama cuidando de mis necesidades —argumentó cruzando sus brazos.

—No he dicho que día ocurrió.

—No es necesario decirlo, no es como si hubiera un cambio en nuestra rutina desde que comenzamos a vivir juntos —contestó rápidamente.

—En algún momento debiste de haberte quedado dormido, bajaste la guardia y no puedes asegurar que se quedó toda la noche contigo —insistió sin rendirse.

—Bueno, si lo pones de esa forma, entonces ninguna pareja podría confiar en el otro cuando sea la hora de dormir, ¿no? —le sonrió dulcemente.

—No sabía que te tenía tan bien entrenado —chasqueó su lengua con disgusto—. Es desagradable.

—Tú también eres una persona desagradable y no me ves restregándotelo en la cara —se encogió de hombros.

—Tú —gruñó.

—Aquí estás —exclamo Hoseok, acercándose a WonHo y colocando una mano en su brazo—. Saliste como una hora cuando dijiste que no tardarías mucho —se quejó.

—Me quedé conversando con mi amigo aquí —respondió señalando a Jimin.

—Yo no diría tanto que fue una conversación cuando no dejabas a mi alfa tranquilo como siempre —le sonrió falsamente—. Ahora, si me disculpan, aún tengo un trabajo que continuar —le recordó y apartó el frasco de propinas con el cual el alfa había estado jugando.

—Está bien, nosotros tenemos que volver al trabajo —aseguró el beta.

—Estoy en mi tiempo libre —argumentó WonHo y observó el menú con los distintos cafés, postres y promociones.

—El jefe te estaba llamando —anunció Hoseok tomando su mano—. Vamos, no quieres hacerlo esperar.

Observando como ambos hombres se alejaban, Jimin soltó un suspiro de alivio y sintió como su cuerpo se relajaba instintivamente al verlos salir de la tienda.

Sintiendo un escalofrío recorrer su espalda hasta su nuca, frunció el ceño y alzó su mano para tocar su cuello. Observando a su alrededor y la salida, no encontró nada fuera de lo usual.

Tal vez se trataba de la extraña conversación que había tenido con ese molesto alfa, demasiado similar a la que tuvo con SungJae, y eso le estaba molestando.

¿Por qué todos tenían que molestar a su alfa?

—¿Qué sucede? —preguntó su amigo, acercándose.

—No, no es nada —suspiró y agitó su cabeza—. ¿Qué vas a hacer saliendo de aquí? —preguntó.

—La señora Min nos invitó a cenar —se encogió de hombros—. ¿Vendrás con nosotros?

—Te invitó a ti, no a mí —le recordó.

—Idiota, como si le importara a alguno que su yerno favorito fuera a verlos —resopló.

—Hace tiempo que no voy realmente —arrugó su nariz—. Más o menos desde que comencé a salir con Yoongi.

Y descubrió lo que estos le habían hecho y pensaban de ellos dos juntos, razón por la cual había evitado acercarse.

Sí, tal vez ellos ya habían hablado al respecto y todo, pero... Una fisura había quedado en su relación que todos fingían no ver para seguir con sus vidas.

—Bueno, antes ibas más porque cualquier lugar era mejor que estar con la bruja de tu abuela, ahora que eres feliz con tu alfa no hay mucha razón para que vayas tan constante como antes —expresó—. Ven con nosotros hoy, sé que no te gustará llegar a ese departamento vacío y cenar solo.

—Uh... Supongo que podría decirle a Tae que pregunte —aceptó.

Solo esperaba que... Al igual que el idiota de ese alfa, ninguno intentara tomara la oportunidad para hablar mal de su alfa, porque entonces... Aunque le doliera, Yoongi era mucho más importante que seguir manteniendo una relación que los señores Min.




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Espero que estén teniendo una buena semana mis copitos! Se me cuidan y recuerden que se les quiere un montón <3

PD: Perdón no siempre dejar mensajitos :( a veces lo olvido y solo subo el cap, pero sepan que siempre entro a leer sus comentarios jsjsj

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