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         Mi padre

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Puedo sentir la mirada asesina de Draco a mi espalda, su mirada es intensa y aterradora.

—¿De qué hablas? Mattheo, yo no tengo novio.— aseguro con nerviosismo.

—¡¿Mattheo de que hablas?!— pregunta Draco exaltado.

—¿Mattheo?— dice Tom.

—Lo que sucede es que...— Mattheo no pudo terminar su oración, porque le di una cachetada en la mejilla izquierda.

¿Qué mierda me pasa?

Les juro no soy una persona violenta, pero estaba a punto de revelar algo que ni Cédric sabe, cosa que me aterra, mi padre... Si él lo descubriera... Estaría aún más de lo que ya está.

Al momento en que mi mano impacto en la mejilla de Mattheo todo el Gran Comedor estaba en silencio, mala suerte para mí, ya que todos se me quedaban viendo de manera... Similar.

El sentimiento me invade a la hora de ver cómo todos me miran, nadie en el Gran Comedor está haciendo otra cosa que no sea verme.

Mattheo se tensó a la hora de la cachetada, y la verdad lo entiendo.

—Lo lamentó tanto— me susurro a Mattheo, me levanto de mi asiento y salir corriendo al baño.

Mientras en el Gran Comedor todos se sorprendían por la acción de aquella chics, ella lloraba inconsolablemente en el baño.

—¿Saben que le pasó?— pregunta Cédric poniéndose en el asiento de T/n.

—No, ¿Tu de verdad no sabes?— cuestiona Draco y el asiente.

—Se que me oculta algo, pero...

—Yo hablaré con ella— informa Tom parándose de su asiento. —Si la encuentran solo llámenme, no intenten hacerla habla... Eso no le gustará...

Tom comienza a buscar entre los pasillos de Hogwarts a una chica sensible, pero ruda ante todos, y casualmente en un baño entre la oscuridad unos llantos llaman su atención.

Puede sentir por un momento el espíritu de mi padre apoderarse de mí, haciendo que hiciera lo que tuviera que hacer para mantener escondidos sus secretos.

—¡¿Que me pasa?!— Me grite a mí misma haciendo que Tom me pudiera encontrar más fácil

—¿Oye estás bien?— Me preguntó Tom preocupado mientras se acercaba rápidamente hacia mí.

—No... aléjate— dije con la voz cortada.

—Oye, ¿Qué pasó?— se sienta a un lado mío mientras acaricia mi mejilla. —¿Estás bien?

—No... Yo... Lo siento tanto— lo miró. —No debí darle una cachetada a tu hermano... Es tu hermano, y... Yo. En verdad lo siento— escondo mi cabeza entre mis piernas.

—Oye, sabes que puedes confiar en mí — me toma del hombro. —Lo que sea que vio Mattheo puedes contármelo... Nunca te juzgaré y lo sabes— me sonríe, esa sonrisa... La misma que hacía cuando íbamos a hacer alguna locura, la misma que tantas veces me salvó de un ataque... De mí vida.

Lo veo de reojo.

—Ron Weasley... Es mi amigo— por un momento la cara de Tom se contrajo y me vio con cara de "Estás completamente loca"

—T/n...

—Lo sé, pero él es mi amigo, y yo... en verdad lo quiero mucho y lo que Mattheo vio fue sacado de contexto el perdió a su hermano, y yo... solo intentaba ayudar— declaré con un nudo en la garganta.

—T/n... Sabes lo que tú padre diría sobre él... Y, no te culpó si tienes una amistad con él... Él es tu amigo... Y no voy a decir ni opinar al respecto...

—Por un momento pensé que era mi padre... Haciendo lo que sea por guardar mi secreto— dije en un murmuro amargo.

—¿Tú no eres tú padre? Sí, Tu eres extraordinaria y alegre... Eres una persona maravillosa... No eres igual que a tu padre... Ni a tu familia— asegura.

—¿Quieres ir a él Gran Comedor?— me pregunta tras levantarse del suelo.

—Ve tú, yo te alcanzo luego ¿Sí?— el asiente tras darme un beso en la mejilla.

—No te juzgues tanto— me sonríe antes de irse.

Tom se fue, y eso me hizo sentir sola, pensando en que sería mi vida sin el apellido Malfoy... ¿Quién sería yo? Ahora soy importante por ser una Malfoy, mi padre me lleva al ministerio cuando va por negocios y me exhibe como un objeto "Qué linda es tu hija", "Es tú mayor preciado", Esas cosas las cuales él toma como logró, la crie bien.

De verdad no sé quién sería sin él, sin mi apellido y sin mis padres.

Solo soy una persona exitosa, soy MUY buena estudiante, soy perfecta, soy sobresaliente... Soy todo lo contrario a mi padre, no soy mi padre, sé que fui criada para eso, pero... No puedo evitar pensar.

Mi vida fue siempre controlada por mi padre, por mí él se siente inútil, mi hermano es igual a él, nunca nadie lo nota solo Tom, mi vida es un desastre sin Tom... Soy un desastre sin el...

Mi mente viaja a lo que pasó en el armario con Mattheo, ese momento en donde por solo un minuto se trató de mí... No de mi dinero, ni de mi hermano... Solo yo.