El repartidor llegó alrededor de las 2am. Miró atentamente a alicia. Lo bueno es que ella estaba envuelta en su manta y no lo miró a los ojos. Lo que me enfureció fue que él la estaba mirando ligeramente. Maldito pervertido.

Ella le dio el dinero y rápidamente cerró la puerta, y con una sonrisa brillante, Alice me mostró las cajas de pizza. "¡Comamos!"

Teníamos las cajas en el piso mientras ambos estábamos en la sala de estar. Ella se sentó en el sofá mientras que yo me senté en el suelo de la alfombra, también comiendo una pizza. Poco sabíamos, ya llevamos una hora hablando.

Nos reíamos ligeramente, compartiendo historias divertidas incluso sobre su última cita con el pervertido. Le dije cómo le arruine la carne y nos reímos de lo furioso que estaba. Entonces, le conté sobre el tiempo en que Mikey accidentalmente dejó caer una pizza durante un partido de baloncesto.

"Oh Dios mío," ella se detuvo mirando tan impactada," ¿Eran ustedes?!"

Asentí con la cabeza y me reí, "¡Sí! ¿Lo viste en la televisión?"?

¡Yo estaba allí! Ella exclamó: "¡Estaba en una cita! ¡Y me reí!

"De ninguna manera."

¡Sí! Ella se rió tan fuerte, "me reí de eso mi cita probablemente se molestó. Nunca hablamos después de eso ".

Hice una pausa, observándola reír.

"Mira, eso es lo que no entiendo."

"¿Qué?"

"¿Vas a citas y me dices que a la gente no le gustas?"

"No les gusto. Se dan cuenta de que no somos compatibles ".

"¿Es porque eres demasiado divertida?"

Ella se burló, "o porque soy demasiado para que ellos lo manejen. Vamos, me río cuando tengo la boca llena a veces cuando tengo que divertirme mucho. Soy rara ".

"Eres genial, y ellos se lo están perdiendo".

Ella hizo una pausa y me di cuenta, "¿Por qué?" Ella preguntó, "¿Crees que vas a durar conmigo?"

Me encogí de hombros y miré mi pizza, "quiero decir, si lo piensas, soy una tortuga parlante. Mira quién es más extraño. Mordí mi pizza y la miré.

Ella sonrío cálidamente.

"No creo que seas extraño. Todos somos criaturas de este mundo si lo piensas." Ella dijo, de forma seria y genuina.

Hizo una pausa antes de tomar otro bocado. Coloqué la pizza en la caja.

"Creo que eres genial." Ella dijo, de nuevo con su voz suave.

Me tragé. Creo que eres hermosa y tan genuina y tan malditamente  agradable.

"Creo que tú también eres genial."

"Bueno," ella dijo," probablemente debería ir y dejarte descansar un poco."

"Sí, necesitas dormir también." Dije y limpié mis dedos.

Luego preparó la cama y la compartimos. Se sentía diferente. Tan diferente. Yo estaba acostado junto a ella justo después de que lo hiciéramos. Y aunque me sentí tentado de nuevo, me sentí mejor estar allí a su lado y acurrucarme.

Estábamos hablando mientras nos fijábamos en el cuarto oscuro hasta que me di cuenta de que la hermosa chica acostada sobre mi brazo finalmente se quedó dormida. La miré, sonreí y me dormí también.

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No podía dormir. Cada hora, quería levantarme y hablar con él. Pero tenía que ser comprensiva y pensar en que él descansara también. Imaginen los problemas que tendrá cuando llegue a casa.

Entonces mis ojos finalmente se sintieron demasiado cansados. Me sentí demasiado cansado que me desperté a las 12 del mediodía! Cuando desperté y tomé mi teléfono, mis ojos se abrieron.

Me senté rápidamente y el dolor atravesó mi cabeza. Me estire y toqué mi frente. Miré el balcón y vi las cortinas balancearse con el viento saliendo. Mi puerta de cristal está ligeramente abierta. Miré a mi cama y él tampoco estaba allí.

Me obligué a ponerme de pie. Salí por la puerta y vi la sala vacía. Caminé lentamente y me desperté. Miré la ventana y vi las persianas.

Se fue y ni siquiera pude despedirme.

Pero entonces, noté un papel rectangular en mi puerta principal. Caminé rápidamente a él y lei;

               Te veré esta noche.
                           Raph.

Tomé el papel y lo volteé. Era el recibo de entrega de pizza. Sonreí y  me mordí el labio y suspiré. No pude evitar gritar y saltar como una chica de secundaria.

Entonces fui y me puse en el sofá e inhalé. Miré por la ventana y me pregunté qué podría estar haciendo.

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Rafael sostuvo la caja de pizza en la mano, comiendo la última pieza mientras caminaba a través del túnel que conducía a su guarida.

Caminó, balanceándose ligeramente, y comiendo la pizza.

Leonardo levantó la vista y vio a su hermano entrar en el lugar. Él lo miró fijamente.

¿Dónde estabas? Leonardo preguntó, arrojando el equipo sobre la mesa y centrándose en rafael que parecía no importarle.

"Flojeando"

Mikey entró y vio a rafael, "Hey! ¿Tienes más de eso?"?

"Terminé todo, hombre."

Mikey chasqueo la lengua, "podrías haber guardado algo para mí.

"Vamos, no pensé que lo terminaría en el camino."

"¿Eso es lo que has estado haciendo?" Leonardo preguntó,

Raphael se dio la vuelta y miró a su hermano con calma, "sí. No te preocupes Leo, la próxima vez volveré a traer a casa."

Leonardo de alguna manera le creyó a su hermano.

"¿Dónde has estado?"

De papá John." Señaló la caja vacía del cubo.

¿Toda la noche?

"En realidad he estado en pizza-hopping". Raphael sonrió, "yo también vi el último partido de baloncesto".

"¿Dónde?"

"Desde fuera de la casa de esta familia al otro lado de la calle. ¿Sabías que ellos mantienen la televisión encendida mientras duermen?"? Él movió la cabeza, como si él mismo creyera la mentira.

Leonardo asintió, finalmente casi creyendo a su hermano.

"¿Por qué tienes tanta curiosidad?" Rafael preguntó, volteandose contra su hermano.

"Nada. Sólo asegurándote de que no estás haciendo nada"...

"¿Flojeando? Sí bueno eso es lo que hago y al parecer, no se puede hacer nada al respecto"

"Correcto." Leonardo respondió y continuó trabajando en el equipo en la mesa con Donny. En su mente, trató de calmarse y creer a su propio hermano porque no quería molestar a Splinter otra vez por una estúpida discusión y confrontación que comenzaron.

Leonardo sólo deseaba que rafael no estuviera haciendo nada que él escogiera no hacer: comunicarse con los humanos.

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Esa noche, alicia se preparó de nuevo, sabiendo que él volvería. Ella llevaba su camisa suelta sintiéndose cómoda. Ella ni siquiera quería pensar en nada que pudiera suceder o a dónde llevaría — ella sólo se aseguró de que el lugar sería cómodo para ambos como anoche.

Ella se sentó en el sofá y siguió mirando a la ventana. Entonces, no era suficiente. Ella se quedó en el balcón de su habitación, esperándolo. Pero ella se dio cuenta de lo ansiosa que la hacia ver, así que regresó al interior.

De repente, un golpe en la puerta la sorprendió. Confundida.
Alicia se acercó a la puerta principal y miró. Era Angela. Ella se enfrenta a ella, sorprendida por la repentina visita.

"Hola". Angela saludó. Alicia se dio cuenta de que no sonaba como ella misma.

"¿Qué pasa?" Alicia preguntó,

"Sólo quiero pasar tiempo aquí esta noche."

"¿Qué pasa?" Alicia volvió a preguntar y la llevó al sofá, "normalmente no se ponia toda triste y cosas así. ¿Qué pasó?"?

"... Solo …" Ella no pudo decirle.

Por la ventana, rafael miró y vio que alicia tenía compañía. Alicia miró a la ventana y lo vio. Ella le abrió los ojos y le dijo a ángela que la esperara mientras preparaba la cama.

"Espera, ¿Si?" Ella dijo y entró en su habitación para reunirse con rafael.

Ella se acercó a él cuando llegó al balcón, "mi hermana está aquí".

"Eso veo". Rafael se volteó,

"lo siento, no puedo esta noche."

"Eso no es problema."

Ambos hicieron una pausa, con los ojos mostrando lo mucho que se querían. Ella quería besarlo y él también. Pero él sabía que tenía que irse.

¿Alicia? Angela llamó,

"Tengo que irme." Alicia se lo dijo y miró a su espalda. Cuando Angela entró, rafael se había ido. Ella fingió cerrar la puerta del balcón y junto ligeramente las cortinas.

"Lo siento, estaba preparando la habitación para ti esta noche."

"Vamos a dormir juntas." Angela dijo tristemente y se acosto en la cama.

Alicia la miró y cruzó los brazos, "bueno, tienes que decirme lo que está mal. No puedo consolarte si nose  lo que está pasando."

"¿Puedes conseguirme helado y verme llorar?" Ángela dijo, sentándose y mirando a su hermana.

Alicia se rió, "bien". Luego, cuando salió, ángela la llamó de nuevo.
"¿Alicia?"

"¿Sí?"

"¿Has estado alguna vez enamorada? ¿Pero se sentía frustrado porque no conseguías lo que necesitaba?"

Alicia hizo una pausa, luego se dio la vuelta y miró a su hermana, desamparada, acostada en la cama. Estaba frunciendo el ceño, esperando la respuesta de alicia.

"Bueno... Alicia hizo una pausa, "sí".

"¿Qué hiciste para arreglarlo?"

"Angela, en realidad no soy la persona que se lo pide". Alicia se rió y se sentó al borde de la cama, "no sé si lo has olvidado, pero soy la persona con la que has establecido una cita".

"Lo sé, pero... ¿Cómo lo tomas todo? "No ser capaz de salir con el tipo que quieres?"

"Me muevo fácil de todas esas fechas porque ni siquiera me gustan."

"¿Pero dijiste que has estado enamorada?" Ángela se volvió y miró a alicia,

"No dije con ellos."

Angela suspiró. "Entonces, ¿Qué hiciste tú con quienquiera que sea?"

"Para ser honesta..." Alicia miró al balcón, "todavía no lo sé."

"Supongo que las dos estamos jodidas." Dijo ángela. Alicia la miró y ambas se rieron.

"¿Por qué, Angie?" Alicia frunció las cejas, "¿De quién estás enamorada?
¿Es Wes?"?

Angie hizo una mueca y sacudió la cabeza violentamente, "¡Diablos no! He estado sobre él durante meses ".

"¿Rompieron?" Alicia preguntó, mirando fijamente. "¿Ni siquiera lo sabía? ¿No me lo dijiste?

Angela se encogió de hombros,
"Bueno, segui adelante,
Así que ".

¿Con quién?

Ángela se quedó callada.
"¿Este tipo por el que estás triste?"

Ángela suspiró, pensando en el «tipo» en el que siempre había estado pensando. Lo estaban haciendo bien, pensó, hasta que se volvió distante días antes. Ella se sintió triste otra vez.

"Bien dime más sobre esto, o no te traeré un helado." Alicia dijo y se puso de pie, luego salió a comprar un helado en la tienda de la cuadra.

"Gracias." Angela dijo y se tiró en la cama.
Cuando alicia se fue, se quedó allí, callada.

Entonces ella se levantó y salió del balcón. Se apoyó en las barandillas e inhaló el aire mientras miraba a su alrededor.

De repente, sus instintos le dijeron que alguien estaba detrás de ella.

Bajo la luz de la luna, ángela sintió bien la mirada. Ella miró hacia abajo y suspiró. Entonces ella dijo, "¿Cómo me encontraste?" Ella le preguntó a la figura detrás de ella. Cuando ella dio la vuelta, un figura grande de una criatura estaba parada en el lado de la puerta con un bandanna azul que se ondeaba con el viento. Salió de la sombra, "tenemos que hablar.
Por favor." Dijo.