Al dia siguiente de la fiesta, Nezumiiro se encontraba entrenando afuera de la mansión. Haiiro la miraba a escondidas.

-Es hermosa, Genta san.-Haiiro.-Esos ojos...ese cabello...esa personalidad tranquila...sin duda, es la chica de mis sueños.-

-Primera vez que lo veo interesarse en una señorita, Haiiro sama.-Genta.

-¿Pero como voy a gustarle, Genta san? Está claro que no tiene los mismos gustos que otras chicas que he conocido. Es la primera vez que conozco a una persona así. Y debo admitir que...eso tambien me gusta de ella, aun cuando me parece raro.-

-Si no puede acercarla a usted, entonces usted acerquese a ella.-

-Acercarme a ella...¿Pero como haré eso? Nunca he salido a acampar. No se nada de supervivencia. Y tampoco soportaria estar en medio de la naturaleza.-

-Al menos haga el intento, Haiiro sama. La persona que le gusta solo se fijará en usted, cuando esta comience a conocerlo mejor.-

-...Esta bien. Seguiré tu consejo, Genta san.-

Haiiro sale de la mansión, hasta llegar al campamento de Nezumiiro.

-Ah, buenos días, Haiiro.-Nezumiiro.-¿Como dormiste?-

-Eh...dormí bien, Nezumiiro. Sin duda fue la mejor fiesta que he tenido. Y todo te lo debo a ti.-

-Yo sólo te di un consejo. Fuiste tu quién hizo su cumpleaños mas divertido.-

-Aun así te agradezco por el consejo. Llegue a conocer cosas de mis empleados que jamás creí que habian hecho o que tenian o sentían.-

-De nada.-

-...Nunca habia visto ese estilo de pelea. ¿Que es?-

-Es un estilo marcial que ha pasado en mi familia por generaciones. Se nos enseñaba desde los 4 años.-

-Parece una mezcla de varios estilos. Me parecio haber visto movimientos de kung fu, karate, tae kwon do, y hasta sayokan. No los he practicado todos ellos, pero he visto videos.-

-¿Y que estilos practicas?-

-Kendo, karate, judo, y un poco de ninjitsu.-

-¿Quieres practicar conmigo?-

-Eh...claro. Esperame un momento. Me ire a cambiar de ropa.-y se va.

Al rato, Haiiro regresa con un kimono de karate. Hace un pequeño calentamiento, y práctica combate con Nezumiiro, pero esta acaba ganandole en tan solo un par de movimientos.

-¡Woow! Si que eres fuerte y habil.-

-Tu tampoco lo hiciste mal. Aunque te faltó mas velocidad y reflejos.-

-Es que...mis maestros han estado ocupados, asi que últimamente no he entrenado mucho. No creas que soy perezoso. Amo hacer deportes, pero es que no es lo mismo entrenar solo que con alguien que sepa artes marciales.-

-Bueno, yo se artes marciales. Si quieres entrenamos juntos. Aunque no sera lo mismo que has hecho, pero deberías intentarlo.-

-Nunca he acampado, pero si logré tener un feliz cumpleaños intentando ser mas abierto, también deberia intentarlo.-

-No te preocupes. No te haré hacer nada que arriesgues tu vida. Y si no puedes continuar, no te obligare a seguir.-

Nezumiiro y Haiiro se internan en el bosque, cerca de un rio. Comenzaron entrenando, haciendo flexiones, abdominales y sentadillas cargando piedras. A Haiiro le costaba hacerlos, y quedó adolorido.

-Eso si fue...intenso.-Haiiro quejandose de los dolores.

-Creo que aun no estabas preparado para soportar el entrenamiento.-

-No...no te preocupes. Estoy bien. Sigamos con otra cosa.-

-¿Seguro? No quiero obligarte a hacer algo que no quieras hacer.-

-Estoy seguro, Nezumiiro. Continuemos con otra cosa.-

Nezumiiro y Haiiro practican golpeando unos muñecos de entrenamiento. Haiiro nota los rápidos movimientos que Nezumiiro daba, y trata de seguir su ritmo, pero acaba golpeado por los brazos de los muñecos y tumbado en el piso. En otra ocasión, ambos recolectan unas frutas de un arbol. Mientras Nezumiiro trepa facilmente, Haiiro trata de trepar, primero cayendo sentado, luego de cabeza, y despues de torso. Nezumiiro lo ayuda a levantarse y le da unas frutas. Despues, ambos practican movimientos sobre un suelo empedrado. Haiiro práctica una patada con giro, y se cae de espaldas. Nezumiiro lo ayuda a levantarse. Y en otra ocasión, ambos pescan con las manos en el rio. Nezumiiro atrapa un pescado rápidamente. Haiiro trata de atrapar un pez, y se cae al rio. Nezumiiro lo ayuda a levantarse, le da una toalla para secarse, mientras su ropa se seca, y le da un pescado frito. Mientras come Haiiro nota al otro lado del rio, una familia de zorros comiendo de un conejo.

Ya al atardecer, Nezumiiro y Haiiro llegaron a la mansión. Haiiro estaba sucio y con algunos raspones.

-Se que no te gustaba ensuciarte.-

-No, no. No te preocupes. Fue algo intenso, pero interesante entrenar en el bosque.-

-Aun me quedaré un tiempo por aquí, si quieres volver.-y se va.

Al rato, Haiiro se baña, se cambia de ropa, y se pone a buscar tecnicas de supervivencia e instrucciones de como acampar. Justo llegó Genta con una bandeja.

-Haiiro sama, ¿como estuvo el entrenamiento?-

-Algo intenso, Genta san. Aun asi...fue divertido.-mirando sus manos y recordando las veces que Nezumiiro le extendió su mano.

-¿Entonces volvera a entrenar con la señorita Nezumiiro?-Genta sirviendo té.

-Claro que lo haré. Pero no quiero parecer tan incompetente. A las chicas no les gustan los hombres que meten la pata, ¿no? Quiero demostrarle a Nezumiiro que también puedo ser capaz de sobrevivir en el bosque.-

-Pero usted solo estuvo por el día en el bosque.-

-Lo se, pero si quiero estar mas tiempo con ella, tengo que soportar vivir en la naturaleza.-

A la semana siguiente, Haiiro regresó al bosque. Estaba cargando una mochila.

-Buenos días, Nezumiiro.-

-Buenos dias, Haiiro. ¿Y esa mochila?-

-Me quedaré a acampar contigo por este fin de semana. Asi podemos entrenar mas tiempo, a parte de las tardes.-

-No tienes que hacerlo si no quieres. Si quieres entrenar mas tiempo, puedo mudarme entre el limite del bosque y tu mansión.-

-No te preocupes. Investigue un poco, asi que puedo lidiar con esto.-

Haiiro trata de armar la tienda, pero tiene varios problemas, como romper la tienda, enredarse con las cuerdas, y hasta quedar como un arrollado. Nezumiiro lo ayuda a desatarse.

-Si quieres podemos compartir mi tienda.-Nezumiiro. Haiiro se sonroja.

-De...de acuerdo.-Haiiro.

Durante el entrenamiento, Haiiro y Nezumiiro estaban recolectando comida. Haiiro encuentra unos hongos.

-Según lo que leí, hay hongos que si son comestibles y otros que son venenosos.-y estaba por recoger unos hongos, pero Nezumiiro le detiene la mano.

-Esos son venenosos.-Nezumiiro. Le muestra unos hongos que traía.-Estos si se pueden comer.-

En otra ocasión, Haiiro se queda atrapado en un pantano. Nezumiiro estaba por ayudarlo, pero Haiiro le hace una señal de alto.

-Investigue como salir de aqui.-Haiiro. Y a los segundos, estaba casi al fondo, y Nezumiiro lo saca convertida en lobo de 4 metros.

En otra ocasión, Haiiro se hace una herida. Toma una planta y se pasa la herida sobre ella.

-¿Que estas haciendo, Haiiro?-

-Lei que estas plantas son buenas para las heridas.-

-Eh...en primera, las plantas de amachacan para hacer unguentos, y en segunda, esa planta es venenosa.-

-¡Ayayayayayayayayayayayay!-Haiiro corriendo y refrescandose en el agua del rio. Al salir, estaba con sanguijuelas.-¡Ayayayayayayaya!-Sacandose las sanguijuelas.

Y en otra ocasión, arma una trampa de lazo con un arbol.

-¿Que haces, Haiiro?-

-Shhht. Hice una trampa de lazo. Esperemos a que el conejo venga.-y se esconden detras de unos arbustos.

-Haiiro, sobre esa trampa, creo que no esta bien hecha.-

-¿Por que dices eso, Nezumiiro?-Haiiro. Nota que llega un conejo, y que cae en la trampa de lazo, pero el conejo sale volando a varios metros.-...Ah. Por eso.-

Y en otra ocasión, Haiiro recolecta y come unos frutos verdes sacados de un arbusto.

-Haiiro...-

-Vi que estas bayas silvestres son comestibles.-

-Son comestibles...cuando estan rojas. Cuando estan verdes, provocan...-

Haiiro siente unos dolores de estómagos que se convierten en ganas de ir al baño. Y al rato, Nezumiiro y Haiiro estaban en la mansión de de este último, quien acabó enfermo.

-Lo lamento.-Haiiro.-Traté de demostrarte que también seria capaz de sobrevivir en el bosque, pero solo acabé haciendo el ridículo.-

-No te sientas mal, Haiiro.-Nezumiiro.-El fracaso es parte de la vida. Se aprende mas de la derrota que de la victoria. Yo también pasé por cosas así en mis primeras lecciones de supervivencia. Lo único que tienes que hacer es seguir intentándolo.-y se dirige afuera de la habitación.-Que te mejores. Yo seguiré entrenando en el mismo lugar.-y se va.

-Maldición...-Haiiro lamentandose.-Y lo peor...¡Es que me invitó a dormir en su tienda y me enferme y no podré estar con ella!...¡Hay!...-quejandose del dolor de estómago.

El tiempo pasaba. Haiiro volvia al bosque a entrenar, pero esta vez, también tomaba lecciones de supervivencia con Nezumiiro. En una ocasión, ambos estaban armando una red, y por accidente, se tocaron las manos, mirandose frente a frente. En algunas ocasiones, Nezumiiro aceptaba ir a la mansión Murasaki, cuando Haiiro la invitaba a cenar o a practicar algunos deportes. En una ocasión, Haiiro trata de bloquear a Nezumiiro en un juego de basketball, pero acaban chocando y cayendo al suelo. Haiiro estaba sobre Nezumiiro. Ambos se miraron sonrojados. Genta los miraba junto a las maids, sonriendo. También en otro momento, estaban jugando un twister. Haiiro perdió el equilibrio y se cayo con la cara en los pechos de Nezumiiro. Se levanta avergonzado.

-¡Lo siento! ¡Fue sin querer!-

-...No te preocupes.-Nezumiiro sonriendo.

En otra ocasión, Haiiro y Nezumiiro también salian por la ciudad, disfrutando de algunos restaurantes, parques de diversiones, saunas, entre otros lugares.

-Primera vez que vengo a una ciudad que no sea de pasada o para buscar comida o refugio.-

-¿Te gusta?-

-La verdad no. Me siento algo incomoda, pero no es tan malo.-

-Tal vez no estas acostumbrada al ambiente urbano. La contaminación, mucho ruido, muchas personas, muchas luces, y todas esas cosas que normalmente no estas acostumbrada.-

-Eso debe ser.-Nezumiiro. Justo detrás de un arbol, estaba un paparazzi sacando fotografias. Nezumiiro cambia de expresión.-Y algo a que tampoco estoy acostumbrada, es a ser acosada por pervertidos.-y saca un cuchillo que lanza directamente hacia la cámara del paparazzi.

-¡Aagh!-el paparazzi asustado.-¡Lo siento, me voy!-y se va corriendo.

-Paparazzis.-Haiiro.-Mi familia es muy conocida. Lo lamento, yo...-

-Tranquilo. No te culpes de algo de lo que no tienes nada de responsabilidad.-

Y en otro día, los peligrises estaban cazando en el bosque, y atraparon a un conejo. Mientras volvian, encontraron a un lobo herido. Nezumiiro le trató la herida, y Haiiro le dio el conejo. Ambos se miraron sonriendo. En otra ocasión, ambos estaban mirando las estrellas en lo alto de una montaña.

-Primera vez que veo un cielo tan estrellado.-Haiiro.

-Dicen que si usas tu imaginación, podrías ver la historia de este mundo a partir de las estrellas. Aunque solo he visto figuras.-

-A ver...-Haiiro tratando de ver las estrellas.-Creo que ahí veo...a Genta tratando de hacer un pastel. Para uno de mis cumpleaños, Ramaka y Remao se enfermaron, asi que tuvo que hacer un pastel él mismo, y acabo provocando un enorme desastre. Fue divertido. Genta puede preparar te y galletas, pero no sabe hacer un pastel...Bueno, yo tampoco. Ni siquiera se cocinarme un huevo.-

-Cocinar no es difícil. Sólo es cosa de paciencia y dedicación. Aunque yo apenas se preparar algunos platillos, pero aprendí de algunas personas que he conocido en mis viajes.-

-¿Y tu ves algo de las estrellas?-

-Veamos...veo...Shiro y Kuro.-

-¿Shiro y Kuro?-

-Eran unos muñecos que tenia cuando era niña. Yo misma los hice. Mi madre me hizo ponerles unos nombres cuando los hice, y despues de darles unos nombres, ella me dijo: si elegiste esos nombres, es porque asi se llamaran los hijos que tengas. Era un poco supersticiosa y creía en algunas técnicas que supuestamente podían ver el futuro.-

-¿Y de verdad te gustaría llamar asi a tus hijos?...Digo, si es que quieres tener hijos.-Haiiro algo colorado.

-Me gustan esos nombres. Y la verdad, aunque sea precipitado, si sueño con hacer una familia cuando sea mayor. Ojalá tuviera unos gemelos. ¿Y a ti?-

-¡Eh...! A mi...no me desagradaria tener gemelos.-Haiiro aun mas colorado.-(¿Por que me da vergüenza hablar de estas cosas?).-

-¿Estas bien? Te noto colorado.-le toca la frente.-Mejor vamos a tu mansión. Te siento un poco enfermo.-

-¡Eh...! No. Estoy bien. Solo se me subió un poco la presión por la altura.-

Al rato, Nezumiiro y Haiiro bajan de la montaña. Cruzan por una cienaga iluminada por la luna llena. Comienzan a salir varias luciernagas, iluminando el paisaje.

-Esto es asombroso.-Haiiro mirando todo el paisaje.

-¿Nunca has visto un paisaje como este?-Nezumiiro.

-...Con ver esto, ahora me da la sensación de que me he perdido de muchas cosas por limitarme solo a mi mansión y a las ciudades.-

-Nunca es tarde para disfrutar del mundo.-

El viento comienza a soplar fuertemente, levantandole el cabello a Nezumiiro. Tambien comienzan a salir mas luciernagas. El paisaje se veia mágico. Haiiro se estaba quedando maravillado mirando a Nezumiiro, al igual que esta mirando a Haiiro.

Con el pasar de los días, volvieron a los entrenamientos, pero ahora Haiiro se le hacia mas fácil sobrevivir en el bosque. Ya sabia usar herramientas, hacer trampas, recolectar comida, salir de los pantanos, cazar y pescar, y entrenar sobre rocas. El tiempo pasaba, y Nezumiiro y Haiiro estaban compartiendo aun mas juntos. En navidad, Haiiro le hace un regalo a Nezumiiro: una yukata plateada. Nezumiiro también le hizo un regalo: una estatua tallada de lobo. Y en la noche de año nuevo, Haiiro y Nezumiiro estaban en lo alto del techo. Comienzan a disfrutar los fuegos artificiales.

-¿Viste algun espectáculo similar a este?-Haiiro.

-Similar si. Pero este es único y especial.-

-¿En serio? ¿Que lo hace único y especial? ¿Los fuegos artificiales? ¿Las imagenes hechas con pirotecnia? ¿Que justo hay luna llena?-

-No. Esta es la primera vez que paso un año nuevo...acompañada por un chico...y precisamente...contigo, Haiiro.-

-¿En serio?-

-Cuando te conocí, admito que tenia mis prejuicios sobre ti. Se que no deberia ser prejuiciosa, pero a veces las experiencias de la vida te pueden dar malos ejemplos, pero también aprendí a darles una oportunidad a las personas a conocerlas mejor antes de juzgarlas. Eres un chico maravilloso, Haiiro. Es la primera vez que alguien ajeno a mi familia se interesó a conocerme mejor, y el como vivía. Algo que aprecio de las personas, es el esfuerzo y el valor para perseverar en la vida.-

-Gracias. Y yo...pienso de ti como una chica increible, Nezumiiro. Yo también tenia mis prejuicios, aunque eran mas por lo que mis padres decían que por lo que he vivido. Me hiciste ver cosas que jamás habria visto o descubierto por mi cuenta. Y siendo sincero...despertó en mi un sentimiento de curiosidad por conocer mas del mundo. Daisuki, Nezumiiro. Al principio, solo hice esto por ti, pero también comencé a amar la naturaleza. Tu estilo de vida no está tan mal, y no me importaria vivir también como un nómada, si puedo estar contigo.-

-Daisuki, Haiiro. Y me gustaria que en algun futuro vinieras conmigo, pero hasta entonces, seguire acampando y visitandose.-

-Entonces tendras que esperarme hasta salir de preparatoria para poder estar juntos.-

-Te esperaré, Haiiro.-

Ambos se dan un beso, mientas se disparan los fuegos artificiales. Al mismo tiempo, Genta estaba con Ramako y Remao.

-¿No deberiamos ir a ver a Haiiro sama?-Genta.

-No.-Ramako.-Dejemoslo disfrutar con Nezumiiro.-

-¿Y si ellos...hacen eso?-

-No creo que lo hagan.-Remao.-Creo que exagera, Genta san.-

-Es que...Haiiro sama suele ser mas activo en todos los sentidos en las noches de luna llena. Y también leí algo sobre los dones tipo zoo y el efecto de la luna llena en ellos.-

-Creo que estas paranoico.-

Y mientras se disparan los fuegos pirotécnicos, los peligrises llevaron su amor mas allá de la primera base. Ambos estaban acostados en la cama, mirando el techo.

-Esta es...mi primera vez.-Nezumiiro.

-También la mia.-Haiiro.-No se lo dire a nadie. Te lo prometo.-

-No me preocupa lo que digan los demas. Aunque debo ponerme en tu lugar. Tu familia es muy prestigiosa, y no quiero que tengas ningun inconveniente con ellos.-

-No te preocupes. ¿Que sabran ellos de nosotros? Apenas cumpla los 18 y salga de preparatoria, me iré contigo. Despues de todo, ya seria mayor de edad y mis padres no tendrían control sobre mi.-

Un pequeño tiempo después, en la mansión Murasaki, Haiiro y Nezumiiro estaban bajando juntos abrazados. Nezumiiro se aleja rápidamente y se dirige al baño, vomitando.

-¿Estas bien?-

-Si. Estoy bien. Creo que solo fue un malestar por algo que comí.-

-¿Segura? Porque ya llevas unos dias vomitando.-

-Estoy bien, Haiiro. No te preocupes.-y se lava la cara.

Haiiro y Nezumiiro vuelven a bajar juntos abrazados, hasta encontrarse con los padres de Haiiro.

-Haiiro...-el padre de Haiiro.

-¿Y esta jovencita?-la madre de Haiiro.

-¡...!-Haiiro sin saber que decir.-(¡¿Que hacen aquí?! ¡Dijeron que volverían en otoño!).-

-Buenos dias.-Nezumiiro saludando con reverencia.-Mi nombre es Nezumiiro Wolfskin. Ustedes deben ser los padres de Haiiro.-

Al rato, estaban los 4 sentados en la mesa.

-Asi que...Nezumiiro.-la madre de Haiiro.-Has estado saliendo con mi hijo.-

-Eso es verdad, Murasaki san.-

-Jamás escuche de una familia Wolfskin.-El padre de Haiiro.-¿Son de otra región? ¿Son americanos? ¿Europeos?-

-De descendencia europea. Pero soy la tercera generación asiática.-

-...¿Y tus padres? ¿A que dedican?-

-¿Adonde viven?-

Haiiro estaba preocupado por lo que iban a decir sus padres. Nezumiiro les dijo la verdad. Los padres de Haiiro hablaron con él, pidiendole a Nezumiiro que los dejaran hablar a solas.

-¡¿Es en serio, Haiiro?!-

-¡¿Con esta vagabunda caza fortuna?!-

-¡Oigan! ¡Nezumiiro no es una cazafortuna!-

-Hay, por favor. Todos los shomin son iguales.-

-Solo buscan dinero facil y aprovecharse de ti.-

-¡Eso no es verdad! ¡Opinarian distinto si la conocieran realmente!-

-¡Haiiro, no olvides tu lugar! ¡Eres un Murasaki!-

-¡No podemos asociarnos con cualquier persona! ¡Mucho menos con shomins cazafortunas de quizas donde sean que hayan salido!-

-¡Mucho cuidado con las palabras que usan!-Haiiro.-¡Nezumiiro no es cualquier persona!-

-¡Mas respeto con tus padres, Haiiro!-

-¡¿Padres?! ¡¿Respeto?! ¡Ustedes raramente vienen a visitarme en casa! ¡Casi nunca llaman, escriben, o mandan un mensaje! ¡Siempre se excusan con que estan trabajando y que estan ocupados! ¡¿Tan importante es su trabajo, como para no pasar un cumpleaños conmigo o una festividad conmigo, al menos una vez en la vida?!-

-¡Baja ese tono de inmediato!-

-¡¿O que?! ¡¿Me castigaran?! ¡¿Me quitaran mis cosas?! ¡Adelante! ¡Has lo que quieras! ¡Ya no me importa nada de lo que hagan!-

-¡Estamos casi en la quiebra!-el padre de Haiiro.-Una mala inversión nos esta costando la empresa. Estamos haciendo todo lo posible para mantenernos de pie. Y aqui es cuando entras tu.-

-¿Yo?-

-Necesitamos que te cases con la hija menor de los Daidaiiros.-la madre de Haiiro.-Es nuestro plan B en caso de que la compañia no pueda sustentarse mas, pero es mejor hacerlo cuanto antes.-

-...Me rehuso.-

-¡Haiiro, estamos apunto de perderlo todo!-

-¿Y? No perderemos la vida. No me interesa vivir como shomin.-y se va corriendo.

-¡Haiiro Murasaki! ¡Vuelve de inmediato aquí ahora mismo!-

Haiiro sube y llega hasta su habitación. Estaba reuniendo sus cosas.

-Cambio de planes, Nezumiiro. Me iré contigo de inmediato...-y nota que Nezumiiro estaba en el baño y la puerta estaba abierta.-¿Nezumiiro?-

Entra al baño, para ver a Nezumiro. La encuentra nuevamente vomitando sobre el inodoro.

-¿Quieres que vayamos a un medico?-

-...No sera necesario.-

-¿Que no será necesario? Pero si te he visto vomitar desde hace unos días. Puede que sea algo grave.-

-...Tuve unas sospechas.-Nezumiiro.

-¿Sospechas? ¿De que?-

-Acabo de comprobarlo.-

Nezumiiro se levanta. Le muestra un test de embarazo, con un resultado positivo.

Continuará...