2. Livie.

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng


Para Iman, por ser la mejor lectora antigua en historias nuevas.


Cuatro años después.

Olivia.

Es él.

No puede ser.

Jake Flynn está aquí.

No.

— ¡Liv! ¡Olivia Lee! —llama el pelinegro corriendo hacia mi y atrapándome en sus brazos.

—Jake —sonrío forzadamente.

En seguida se separa de mí y suspira.

—Okay, trato de que todo sea como antes, Liv. Tratarnos como un par de amigos y ya ¿Podrías cooperar? —bufa.

—Lo siento —le doy una sonrisa de lado—. Hola Jake ¡Wow! Cuanto tiempo ¿no?

—Solo pasaron dos años, Liv. En fin ¿Entramos? Quiero que esto acabe rápido —uh, somos dos—. Por cierto, estás hermosa.

—Lo mismo digo.

Los pondré al tanto de esta situación.

Estamos a punto de entrar a una reunión de egresados, dos años después de salir de preparatoria.

A ambos nos asignaron como pareja, así que aquí estamos.

Jake y yo también tuvimos una linda relación hace cuatro años, pero por motivos de la vida terminamos, y no nos fue muy bien después de ello.

Creo que aún no lo supero.

—Pe-pero ¿Por qué?—su voz se quebró. Llevó las manos a su cabeza y tragó. Imaginé que era para disolver un nudo en su garganta, aunque creo fue un intento fallido.

—No lo sé, dicen que me hieres —yo ya era un mar de lágrimas.

—Pero eso no es verdad, Livie.

—No lo es, pero ¿Qué dirán mis padres? ¿Los profesores? ¡Peor aún! Los alumnos.

— ¿Vivirás del que dirán, Olivia? —sollozó— ¿Te avergüenzas de mi, Livie?

—No —lo abracé—. Se que no quieres lastimarme, yo tampoco quiero hacerlo, pero debemos alejarnos, Jakey.

Nos separamos unos minutos después, sequé mis lágrimas y fue ahí cuando deposité un dulce beso en sus labios.

—Nunca dudes que te quise —y con ello me alejé.

Efectivamente, no lo supero.

Añoro tus dulces labios, Jake Flynn.

— ¿Estás estudiando letras? —indaga caminando a mi lado.

—Si, y tu estás estudiando ingeniería ¿no? Te encantaba —sonrío.

—Corrección, bella dama. Me encanta —sonríe—. Dios ¿Realmente han pasado dos años desde que salimos de la preparatoria?

—Si, y pensar que hemos cambiado tanto ¿eh? Recuerdo que te veías pésimo en traje ¡Y mírate ahora!

Se ve hermoso ¡Dios santo sus músculos me matan!

—Ni me lo digas, ¿Desde cuanto te vistes de negro y con vestidos cortos? Te ves muy bien y no puedo negarlo, Livie.

Livie, extrañaba ese apodo.

Multimedia, Aléjate de mi by Camila.


Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro