Capitulo 5: Un viejo amigo...

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Había pasado un rato desde que salieron de aquella habitación de hotel, ya descansados y con la dirección de Clyde en mano, Lynn conducía tranquilamente, ya no había necesidad de correr. Ella voltea a ver a su hermano, este se hallaba con la cabeza apoyada en la ventana y con una mirada perdida hacia el exterior, Lynn supuso que estaba preocupado por su amigo, y era lógico, la ultima vez que lo vio así fue cuando Ronnie Anne se quebró un brazo con su Skateboard, el chico peliblanco que en aquel entonces contaba con quince años estaba hecho un manojo de preocupación total, y aunque la misma Ronnie le dijo que no tenia nada de que preocuparse, no se despego de su lado para atenderla.

Lynn sintió de repente mucha curiosidad en esa vieja relación de su hermano con la hermosa belleza latina que estudio en su escuela, se rumoreaba que ambos tenían una relación secreta a pesar de que ambos lo negaran, al parar en un semáforo, la castaña mira su teléfono y no ve nada de interés así que decide hablar con su hermano.

-Oye Linky...- Dijo en una voz inocente.

-¿Si? ¿Pasa algo, Lynn?

-Es que quería preguntarte algo...- Dijo Lynn antes de poner en marcha el vehículo ante la luz verde.- Ya sabes, sobre Ronnie anne y tu.

Lincoln suspira, realmente habían pasado años desde que hablo o vio a Ronnie anne, tenia la esperanza de verla en la boda de Bobby y Lori, pero nunca se apareció...

-¿Qué quieres saber?- Dijo el muchacho.

-Pues... quería saber si era verdad ese rumor.- Dijo Lynn antes de voltear en una curva.- Ya sabes, ese que decían que tu tenias una relación secreta con ella.

El rubor en las mejillas de Lincoln le hizo pensar a Lynn que era cierto, se veía un poco nervioso, no parecía tener en claro que responder...

-Lincoln.- Dijo Lynn mientras mantenía la vista en el camino.- No tienes que ocultar nada, puedes confiar en mi.

El albino solo suspira, y finalmente decide hablar. Después de todo nadie más a parte de ellos dos y Clyde, nadie más estaba al tanto de su secreta relación.

-Si.- Dijo el peliblanco.- Era cierto ese rumor... normalmente nos veíamos después de clases, o íbamos a la parte de atrás de la escuela para besarnos y demostrarnos el amor que sentíamos.

-Oh ya veo.- Respondió Lynn.- ¿Y crees que la relación estaba funcionando?

-Oh, vaya que si.- Dijo Lincoln.- Ella disfrutaba todos los momentos conmigo y yo igual con ella... pero...

-¿Pero que?

-Ya sabes... llego el día en que se fue de Royal Woods. Y me dejo aquí solo...- Dijo Lincoln.

-Pensé que siguieron hablando por vídeo llamada.- Dijo Lynn

-No.- Respondió el peliblanco.- Hace tiempo que no... aunque no niego en que me gustaría verla una vez mas.

-Bueno, quizás el tiempo los reúna de nuevo.- Dijo Lynn.- Oh mira, ya llegamos.

Clyde vivía en el complejo de apartamentos "OverClock" en el Boulevard Sunny, apartamento 4-F. Ambos suben las escaleras hasta dicho apartamento, al llegar, Lynn toca la puerta, cuando un grito desde dentro del apartamento los sorprende.

-¡Váyanse de aquí".- Sonó una voz masculina desde adentro.

Lincoln reconoció aquella voz enseguida.

-¿Clyde?- Pregunto Lincoln.- Amigo, soy yo, Lincoln. Abre la puerta.

Todo queda en silencio por un momento hasta que abren la puerta, Lincoln queda impresionado al ver a su amigo, estaba muy flaco, su ropa estaba sucia y tenia grandes ojeras por la falta de sueño, este invita a ambos a pasar a su apartamento y cierra la puerta con llave.

-Lincoln... Pensé que estabas fuera del pueblo.- Dijo Clyde.

-Estoy de vuelta, amigo.- Respondió el joven Loud.- Por el momento no me voy a ir... tengo asuntos pendientes por resolver, ¿No es así, Lynn?

-Claro que si, Lincoln.- Respondió la chica castaña.- ¿Qué te paso, Clyde? Luces... A prueba de agua.

-Oh chicos, esto ah sido una pesadilla para mi.- Dijo Clyde llevándose las manos a la cabeza.- Estuve en donde no debía y por eso me van a matar.

-¿Qué? ¿Qué rayos paso?- Pregunto Lynn al tomarlo del hombre.- Quizas podamos ayudarte.

-¿Cómo podrían ayudarme?- Pregunto Clyde.-no puedo hacer nada por que vivo con el miedo de que me metan quince balazos, no eh comido casi nada, no eh dormido casi nada... ni siquiera me eh duchado por que me da miedo cerrar los ojos.

-Ahh, con que ese era el olor...- Dijo Lincoln.- Pero ¿Qué paso Clyde?

El chico de tez morena observa a ambos, parecían dispuestos a ayudarlo, así que se rindió y decidió sentarse para proceder a contarles.

-Miren...- Dijo Clyde.- Todo paso una semana atrás, después de tener una cita con Haiku me metí en un callejón para acortar camino a mi casa, pero allí vi a dos sujetos vestidos de manera formal, asesinando a alguien a puñaladas, intente salir de allí sin ser visto, pero me vieron, no se como pero los perdí... y cuando creí que estaba a salvo, al día siguiente recibí una carta en la que me decían que estaba sentenciado a muerte por haber visto demasiado...

-Mn ya veo...- Dijo Lincoln.- Bien, yo lamento oír eso... ¿Y donde vive Haiku?

-No muy lejos de aquí...

-¿Ella sabe de todo esto?- Pregunto Lynn.

-No... no quiero meterla en problemas.- Dijo Clyde al borde del llanto.- Yo la amo demasiado, no quiero que le pase nada.

-Eso no pasara mientras este aquí, amigo.- Dijo Lincoln.

Clyde conocía a su amigo, el autodenominado "Hombre con el plan" seguramente tenía algo ya en mente.

-¿Qué tienes planeado?- Pregunto el chico de tez morena.

-Primero lo primero, ve a ducharte por que hueles a establo.- Dijo Lincoln.- Te cambias la ropa, y te vienes con nosotros.

-¿Y luego?- Pregunto Lynn.

-Dejamos que se hospede en la casa de alguna de las chicas, no van a vivir en un tiempo allí.- Dijo Lincoln.

-Me parece una buena idea... ¿pero lo vas a dejar sin nada para que se defienda?- Pregunto Lynn.- Ya sabes, solo en caso de emergencia.

-No te preocupes.- Dijo Lincoln.- A el también le daré algo de "Poder de Fuego"

-Ehm... ¿Qué es poder de fuego?- Pregunto Clyde.

-Eso quiere decir que te daré un arma para que le dispares a todo aquel que intente matarte.- Respondió Lincoln.- Pero no sin antes darte un instructivo para que sepas usarla.

-Bien... Supongo.- Respondió Clyde.- Eso me hace sentir un poco más cómodo.

-De acuerdo.- Dijo Lincoln.- Lynn, ¿Podrías ayudarle a buscar un cambio de ropa?

-Estoy en ello.- Respondió Lynn.

-Bien, Clyde... ¿De casualidad tienes el numero de Haiku?- Pregunto Lincoln.- Necesito llamarle para decirle que se reúna con Lucy.

-S... Si, mi teléfono esta en aquel estante...- Dijo Clyde al levantarse del sofá.- Supongo que iré a tomar una ducha...

-De acuerdo.- Dijo Lincoln.- Y no temas, estamos aquí para protegerte.

El chico de tez morena se va hacia el baño, mientras que Lincoln se acerca al estante y toma el teléfono de Clyde, después de buscar entre sus contactos la encuentra, así que le marca, No tuvo que esperar mucho para que alguien contestara.

-¿Si?

-¿Haiku?

-¿Pasa algo, Clyde?

-Haiku, no soy Clyde, soy Lincoln.

-¿Lincoln? ¿Qué haces en Royal Woods?

-No hay tiempo para explicar, Haiku... mira, necesito que te reúnas con Lucy en este instante.

-¿Por qué lo dices? ¿Pasa algo malo, Lincoln?

-Haiku, de verdad no hay tiempo de explicar, Reúnete con Lucy en su casa, ya la llamare y le diré que vas a pasar por allá.

-Eh espera, Lincoln, ¿Qué pasa? Me estas asustando.

-Haiku, luego te lo explico, por favor has lo que te dije.

-Espe...- Lincoln cuelga el teléfono sin dejar terminar de hablar a Haiku.

El peliblanco guarda el teléfono de su amigo en su bolsillo, luego saca el de el y le marca a su hermanita gótica, tarda un poco pero al final contesta.

-Hey Hermano... Ya casi terminamos de recoger las cosas de las chicas, falta las de mi casa y ya.

-Lucy, escúchame, Haiku ira a tu casa, espérala allí y llévala a casa de Lynn.

-¿Haiku?... Oye, ¿Qué paso?

-Lucy, no hay tiempo, te lo explico allá, hablamos hermanita, te quiero.

-De acuerdo, yo también te quiero.

Lincoln cuelga su teléfono y Lynn entra a la sala.

-Ya esta, le deje un cambio de ropa a Clyde en la puerta del baño.- Dijo Lynn.- Supongo que ya casi termina de ducharse.

-Bien... Lynn, ¿Cuántas balas del revolver trajiste?- Pregunto Lincoln.

-Traje cinco tambores de seis balas.- Respondió Lynn.- No son muchas, pero esta arma realmente es un cañón de mano.

-Bien, yo traje seis cargadores.- Dijo Lincoln.- Espero que sea suficiente, en caso de que algo pase.

Después de unos minutos Clyde entra a la sala ya limpio y cambiado, ahora faltaba salir de allí.

(Tema para la siguiente escena)

https://youtu.be/1hLIXrlpRe8

-Lincoln...- Dijo Lynn mientras miraba por la ventana.- Eh... Creo que tenemos compañía.

-¿Qué?- Dijo el chico peliblanco, al mirar por la ventana ve una camioneta de color rojo, de esta se bajan unos sujetos bien vestidos, cada uno con un arma en sus manos.

-¡Rayos! Ahora si ya valí...- Dijo Clyde casi muerto por el miedo.

-Tranquilízate amigo.- Dijo Lincoln.- ¿Hay otra salida?

-Ehm... ¡Si!- Respondió Clyde.- En la ventana de mi casa esta el acceso a las escaleras de emergencia.

-Vamos allá entonces.- Dijo Lynn.

En ese momento se escuchan unos fuertes golpes en la puerta de entrada, alguien intentaba tumbar la puerta, Lincoln apunta su arma a la puerta y dispara tres veces, eliminando al tipo que intentaba entrar, hecho esto los tras corren a la habitación de Clyde, y comienzan a salir por las escaleras de emergencia, ahora debían ir al auto.

-¿Cómo llegaremos al auto sin que nos vean?- Susurro Clyde.

-No te preocupes, tengo un plan.- Respondió Lincoln.

-Lincoln, ¿Qué tienes en mente precisamente?- Pregunto Lynn.

-Corre rápido al auto con Clyde.- Dijo el peliblanco.

-¿Qué? ¡Es... Espera, que vas a hacer, demente!- Grito Lynn al ver que su hermano salía del escondite para comenzar a disparar a los tipos malos.

-¡Que esperan! ¡Vayan rápido!- Grita Lincoln.

Ambos corren hacia el auto, siendo cubiertos por Lincoln, quien se cubrió detrás de otro auto para recargar.

Lynn y Clyde logran llegar al auto de Lincoln, Ella entra y toma el volante, mientras que Clyde entra al asiento trasero y se tira al pido del mismo para cubrirse, ella enciende el auto y acelera para buscar a su hermano.

Los chicos malos habían bajado del apartamento y estaban combatiendo contra Lincoln, casi no podía moverse por la absurda cantidad de disparos, cuando recarga su arma por tercera vez, el sonido de un claxon y la voz de su hermana le sacan de su concentración.

-¡Lincoln, entra rápido!- Dijo Lynn deteniéndose casi al lado de el.

El chico de cabellera blanca entra lo más rápido al auto y cuando esta listo, Lynn acelera a fondo.

De los diez sicarios solo quedaban cuatro, estos entran a la camioneta para empezar la persecución.

Los chicos malos los alcanzan rápidamente, la mente de Lincoln comienza a trazar un nuevo plan.

-Lynn, Por nada del mundo te detengas.- Dijo Lincoln. Ve hacia el Puente Bradley.

-Ehm... No se que planeas, pero tu mandas.- Respondió Lynn.

-¿Y Clyde?- Pregunto Lincoln.

-Se desmayo por el miedo.- Respondió la chica de cabellos castaños.

Los balazos comienzan a llover en ese momento, Lynn se agacha sin perder de vista el camino, mientras que Lincoln parecía no inmutarse.

-¿Qué pasa hermano? ¿Ahora eres a prueba de balas?- Pregunto Lynn.

-Yo no... Pero el auto si.- Respondió Lincoln.

-¿Qué? ¿Qué rayos haces con un auto lindado?- Pregunto Lynn.

-Digamos que soy muy... Paranoico con mi seguridad personal.- Dijo Lincoln.- Ahora, si me disculpas.

El sale por la ventana y comienza a responder al fuego, el movimiento del auto le hacia perder la puntería, sin embargo sus tiros impactaban en el auto de sus persecutores, uno de estos le da en los neumáticos, reventándolo... La determinación de aquellos sicarios era sorprendente, aun sin un neumático seguían tras de si.

Por suerte para Lynn pudo tomar un poco de ventaja, esos tipos seguían tras de si, pero a una distancia muy lejana, finalmente cruzan el Puente Bradley y el joven peliblanco le ordena detenerse apenas lo cruza.

-¿Qué piensa, hermano?- Pregunto Lynn.- ¿Buscan que nos maten?

-Deja de quejarte y acompáñame a buscar algo en la cajuela del auto.- Respondió Lincoln mientras salía del auto.

-Por suerte les tomamos bastante ventaja...- Dijo Lynn.

-Veras hermana.- Dijo Lincoln mientras buscaba las llaves para abrir la cajuela del auto.- Tenia planeado que con esto fuéramos a las montañas a dispararle a los bidones de metal... Pero supongo que tendremos que cambiar de objetivos.

Cuando el peliblanco abre la cajuela, Lynn queda soprendida con lo que ve. Nunca pensó que viviría lo suficiente como para ver un Barret Calibre 50.

-¡Oh rayos!- Dijo Lynn.- ¿De donde sacaste estos armatostes?

-Bueno, nunca esta de mas tener un poco de poder de fuego encima, ¿no?

Lynn toma uno de estos potentes rifles, pesaba mucho, pero en sus manos tenia una pieza de poder militar, Lincoln toma unos cargadores de una caja metalica de la cajuela y le da algunos a Lynn.

-Sabes lo que tienes que hacer, ¿Verdad?

-Claro que si...

Ambos se ubican en el puente, pecho en tierra y paralelamente el uno al otro, por sus miras esperaban el momento para que esos locos aparecieran, el silencio se apodero del ambiente... solo escuchaban el sonido del viento y de las aves que volaban por allí, finalmente esa camioneta con sus persecutores hace presencia y Lincoln realiza el primer disparo, atraviesa de lleno el cristal y elimina al copiloto.

Lynn realiza el segundo disparo, este impacta en el motor del auto solo para recibir un tercer disparo de parte de Lincoln, este dio en el neumático delantero que quedaba intacto.

El auto pierde el control y termina cayendo al risco y así se escapan de sus persecutores permanentemente...

-Wow... esta cosa es poderosa.- Dijo Lynn mientras se levantaba y recogía los casquillos.

-Si... ¿Ya ves por que vine hacia aquí?- Pregunto Lincoln mientras se levantaba y tomaba los casquillos.

-Supongo que no querías que hubieran inocentes implicados en esto, ¿no?

-Algo así... vamos a casa, tenemos que irnos de aquí antes que nos descubran.

-Voy atrás tuyo...

Ambos hermanos caminan tranquilamente hacia el auto, dejan las armas en el maletero y luego entran para irse de allí sin dejar rastros.

Algunas horas después ya se hallaban en casa de Lynn, al parecer las chicas no habían llegado aun, entre ambos logran cargar al chico moreno hacia el sofá, seguía desmayado aun.

-Bueno, creo que ire a tomar un baño de burbujas.- Dijo Lynn.- Necesito relajarme un poco, y oye, no creo que vaya a despertar por ahora.

-Si, me lo supuse.- Dijo Lincoln.- Supongo que me tocara traerle una sabana y una almohada, ¿No?

-Quizas... en fin, hablamos al rato, hermano.- Dijo Lynn antes de irse.

Lincoln se asegura que su amigo este bien, luego va a la cocina para prepararse un tentempié, conociendo a las demás, no creía que llegarían por el momento... ahora lo importante es como iba a continuar con su misión.

(Continuara...)

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