1

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Narra Taehyung:

Nosotros siempre seguíamos la rutina que nos ponía la empresa, y ese día no era la excepción. Pero una supuesta "gran idea" se me ocurrió, justo ese día. Justo ese horrible día. Justo ese 16 de enero de 2021.

-Hyungs, ¿les parece si hoy salimos?- cuestioné con las esperanzas que todos tengan tiempo y me acompañen.

-¡Yo sí quiero!- respondió emocionado J-hope.- llevo un tiempo queriendo salir a tomar aire, y mejor si es juntos.

-Excelente. Dos de siete, ¿alguien más?- volví a preguntar sin bajar mis esperanzas.

-Yo los acompaño, chicos. Tenía planeado quedarme hasta tarde practicando la nueva coreografía, pero no, ya me estoy exigiendo mucho.- habló Jimin.

-Yo sí quiero relajarme, pero lo haré durmiendo.- dijo Suga. 

No pude evitar reírme juntos a los demás chicos.

-Quisiera acompañarlos, aunque, en verdad, no tengo ni un poco de ganas. Que la pasen bien.- esta vez habló Jin con una sonrisa.

-Yo tengo que coordinar unas cosas con el manager aún. También deseo que se diviertan.- Nos respondió Namjoon.

-Bien... ¿y tú, Jungkookie?- Le pregunté al menor de todos.

-Yo... no lo sé. Quiero ir, pero a la vez no quiero.- contestó con una mueca de disgusto.- no me sale el último paso de la coreografía y estoy muy estresado. No sé que hacer. Tengo que mejorar.

Me quedé sin palabras, a ninguno nos gustaba cuando uno de los nuestros se sentía así.

-La decisión es tuya, Jungkook. Pero recuerda que, sí, nuestras vidas se basan en mejorar cada día, pero por nosotros, no por los demás.

-... tienes razón, Tae. Lo voy a pensar.- se encogió de hombros.

-Entonces... ¿Salimos a las cinco de la tarde?- preguntó Hoseok.

-Ay, no. Qué aburrido. ¿Qué tal a las siete de la noche?- sugirió Jimin.

-No me gustaría quedarme hasta muy tarde, Jimin.- contesté.

-¡Oh, vamos, Tae! Que sea nuestra noche.- dijo riendo.

-¡Sí, Tae! Saldremos juntos. No te preocupes.- se emocionó J-hope.

-De acuerdo, de acuerdo.- respondí.

 ¿Qué podría salir mal?

Pasaron las horas, y sin sentirlo, solo faltaba media hora para las siete.

-Chicos, terminaron?- pregunté.

-Ya salgo.- respondió Hoseok.

-¿Y Jimin?- volví a cuestionar.

-Sabes que me demoro un siglo, Tae, ¿me pongo delineador o no?- lo escuché hablar desde su baño.

-Con todo te ves bien. Termina de arreglarte de una vez.- le respondí con un tono de voz aburrido.

-Puede que sí. Mejor me pongo delineador.

-Jimin...- me quejé alargando la última sílaba.

-¡Ya, Tae, ya!- exclamó en forma de respuesta.

Veinte minutos después, Jimin salió de su habitación. Yo me encontraba jugando en mi celular en ese entonces.

-¡Al fin! Creí que...-me detuve al ver que no llevaba delineador, ni la ropa que dijo que se pondría.

-¿Qué?- habló con indiferencia.

-Nada.- reí lo más disimulado que pude, él era un completo caso.

-¡Hoseok! Deja de dormir. Jimin ya está listo.- grité.

-¿En verdad? De acuerdo.- frotó sus ojos mientras se levantaba del mueble.

-Chicos- la voz de Jungkook nos detuvo antes de salir.

-¿Jungkook?- habló confundido Hoseok.

-Quiero ir con ustedes.- sonrió.

-¡Sabía que razonarías, Kookie! Pero no te sientas obligado, eh.- dije con emoción.

-No, hyung. Ya no veo la hora para salir.- habló Jungkook con una sonrisa.

-Cuatro de siete. Recalcando que no es una fecha importante para celebrar y salimos por nuestra cuenta, rompimos récord.- dijo Jimin.

-Tae...- la voz de Jin inundó la sala.

-¿Qué pasó?

-Recibí un mensaje de tu padre diciendo que Yeontan llegará en unos minutos.- bajó por las escaleras.- ¿Por qué no le respondías sus llamadas?

-Estaba jugando...- respondí con sinceridad.

-Eso explica todo. 

-En verdad... ¿Yeontan?- pregunté confundido.

-Dijo que lo mandaron aquí porque estaban muy ocupados y tú ya casi terminabas tus cosas para el comeback.

-¡Qué bien!- sonreí. 

Cada vez que me veía obligado a dejarlo con mis padres lo extrañaba demasiado.

De pronto, el sonido del timbre de la casa nos alertó a todos.

-¡Está aquí!- exclamé con gran emoción.

Abrí la puerta y, tal como creía, un señor tenía a Yeontan en brazos. Era un amigo de mi padre que estaba de paseo en esta ciudad y le hizo el favor de traérmelo. Le di las gracias para luego dejar pasar a mi perrito y cerrar la puerta.

-Bien, ahora vas a querer estar una todo el tiempo con Yeontan, ¿y nosotros?- habló Jimin con los brazos cruzados.

-No. Lo llevaré conmigo. No va a ser mucho trabajo. Él es muy inteligente.

Comencé a acariciarlo. El perrito no dejaba de mover su colita desde que llegó.

-Jungkook, Jimin, Tae, un perrito de colación y yo. Eso es genial, ¿no?-mencionó J-hope.

-Son las siete y veinte. Ya decídanse, ¿van a salir o no?-dijo Jin entre risas.

-Sí. Hasta pronto, hyung.- me despedí.

-Cuídense y no vuelvan tan tarde.- recalcó el mayor.

-Lo haremos.- respondí.

Al salir, comenzamos a caminar hablando de cosas triviales.

-Y bien, ¿qué haremos primero?- preguntó J-hope.

-Tengo mucha hambre.- dijo Jimin.

-¡Yo voto por pizza!-propuso Jungkook.

-¡Apoyo la emoción!-esta vez J-hope.

-De acuerdo. Yo también quiero. ¿Y tú, Jimin?

-Igual. Llevo tiempo sin comer pizza.- comentó.

Luego de esa conversación, fuimos a nuestra pizzería favorita y nos sentamos juntos esperando a que nos tomen lista.

-Buenas noches, jóvenes. ¿Qué desean?

-Una pizza americana, por favor.- respondí.

-A mí una hawaiana.- pidió Hoseok.

-Americana, también.- dijo Jimin.

-Una... de pepperoni.- por último Jungkook.

-Ya se los traigo.

-Gracias.- respondimos juntos.

-Tae, ¿recuerdas cuando estábamos en Estados Unidos y nos perdimos?- me hizo recordar Jimin.

-¡Ay, Jimin! Fue horrible. Ese hombre me asustó.

-Casi lloras. Menos mal yo sí me mantuve cuerdo para ponerlo en su lugar, a mi modo.

-Pero si apenas sabes ingles.- recalcó Jungkook.

-¡A mi modo, dije! Y mira quién habla.-lo miró con desprecio fingido.

Todos terminamos riendo al final, después seguimos contando más y más anécdotas. Cuando llegó nuestro pedido, comimos y seguimos con lo mismo.

-Y cuando Jungkook se cayó por las escaleras, nos reímos creyendo que no fue fuerte, pero la verdad es que casi te mueres allí.

-Hyungs, se los decía y ustedes seguían riendo.

-Yo fui el primero en darme cuenta de lo mal que estaba, gracias al cielo no hubo necesidad de llevarlo al hospital y que Army se entere.- seguí la conversación.

-Lo extraño es que Jin siempre era esa persona, o... ¿no estaba?- preguntó Jimin tratando se recordar.

-No, no estaba en ese momento. Luego nos regañó por casi matar a su hijo.- Hoseok le respondió.

-Hablando en serio, Jin será un buen padre.- recalcó Jungkook.

-No es necesario que lo digas. Todos lo sabemos- respondió Jimin.- chicos... ¿podremos ir al cine?-animó.

-No lo sé. La verdad, ya es algo tarde...- hice una mueca.

-Solo son las diez y media de la noche, no pasará algo malo si llegamos un poco después de las doce.- insistió.

-Bueno... está bien- respondí con una sonrisa.}

¿Qué puede salir mal?

-Paguemos la cuenta y vayamos.- agregó Hoseok, levantándose de la mesa junto a nosotros.

Y así lo hicimos.

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro