12

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Volteé mi rostro con rapidez.

-JungKook...- dije en voz baja mientras me piñizcaba para verificar si eso era solo un sueño.

-¡Hyung!- gritó y se tiró a mis brazos para abrazarme con fuerza.- te extrañé tanto, yo... no puedo creer que esto esté pasando en realidad, estoy tan feliz.- dijo rápidamente producto de la emoción.

Me había quedado estático ¿qué había pasado? Eran muchas emociones que no era capaz de reaccionar.

-¿Hyung...?- dijo el menor con una voz un poco más baja separándose del abrazo lentamente.- ¿no le gustó verme? Sabía que de ninguna manera se emocionaría al verme, solo no quería creerlo... Perdón, yo...- trataba de no trabarse en sus palabras mientras hablaba.

Lo interrumpí con otro abrazo, mientras lágrimas caían de mis ojos.

-Nunca vuelvas a creer eso...- suspiré con tranquilidad..- es solo que... esto es demasiado bueno como para ser verdad, siento que en cualquier momento te desvanecerás y despertaré de este sueño... si es así, no quiero despertarme, Kookie.- comencé a llorar un poco más y escuché como Jungkook estaba igual.

-Esto es real, hyung- respondió, sorbiendo su nariz ya rojiza.

-Te extrañé tanto mi pequeño Kookie.- le dije acariciando su cabello, sintiéndome con un peso muy grande fuera.

-Yo también... yo también hyung.- sonrió mirándome.- ya no tenemos ni un poco de maquillaje.- rio, y yo le respondí con el mismo gesto.

-Es verdad, mira esta ropa.- dije señalando la bata que tenía puesta.- esto está lejos de ser Gucci.- vi su risita con sus lindos dientes.

-Debemos hablar mucho.- habló mientras se limpiaba su rostro con sus manos.

-Es cierto.- dije mirando a MinHo, quien nos veía con felicidad y sus ojos brillosos.

-Encontraste a Jungkook.- el antes nombrado me sonrió.

-No... él me encontró.- volví a acariciar su cabello mientras él se acurrucaba en mi pecho.

-Estoy feliz por ustedes... Taehyung ¿dónde están tus modales? Lleva a Jungkook a tu habitación y hablen de todo lo que quieran.- sonrió y salió de nuestra vista.

-Vamos.- lo miré y juntos caminamos hacia dicho lugar.

Narra JiMin:

-¿Cómo que... se suicidaron?- pregunté con voz aterrada.

-Así como lo oyen... dos de los chicos escaparon y los demás tomaron la decisión de suicidarse, encontramos los cuerpos hace menos de una hora...- habló el oficial con mirada preocupada.- jamás creí que llegaran a hacer eso...- masajeó su rostro y nos miró.- entonces volvemos al mismo lugar, no tenemos ni la más mínima idea de donde están Kim y Jeon.- miró una de sus hojas.- pero estaremos buscando a los dos que faltan, ojalá y sea pronto.

-Volvemos a lo mismo, chicos...- habló YoonGi mirándonos a todos.

-¡Qué problema!- exclamó NamJoon revolviendo su cabello.

-Necesito irme.- agarré mi gorro y corrí hacia la salida de la comisaría, sentándome en la van que nos esperaba.

-¡JiMin!- gritó Jin, persiguiéndome y sentándose al lado mío.

-No quiero estar más tiempo sin ellos, hyung, siento que no puedo.- me aferré a sus brazos y comencé a llorar.

Jin hyung me abrazó y empezó a sobarme el cabello, vi como los demás salían y nos miraban con tristeza y preocupación.

Ya todos estábamos en la van regresando al departamento, y todo era un completo caos... JiWoo sollozaba en los brazos de HoSeok hyung, Jin hyung seguía abrazándome, NamJoon hyung y Suga hyung escuchaban música mientras tenían la mirada perdida en la ventana.

Llegamos y, sin decir ni siquiera una palabra, cada uno fue a su habitación. 

Pasaron alrededor de dos horas y alguien tocó mi puerta.

-¿Qué sucede...?- dije con la voz ronca, ya que había llorado hasta quedarme dormido.

-JiMinnie... quiero hacer un pastel ¿me podrías ayudar?- preguntó Jin hyung.

Sonreí, sabía que él lo podía hacer solo, pero también sabía que quería hacerme sentir mejor.

Abrí la puerta a los pocos segundos.

-Está bien, hyung.- sonreí lo más sincero que pude y nos dirigimos a la cocina, nadie aparte de nosotros estaba fuera de sus habitaciones.

-Y... ¿cómo te encuentras?- Me preguntó mientras sacaba los ingredientes.

-Yo... creo que mejor, llorar hace muy bien ¿sabes, hyung?- lo miré.

-Sí... lo sé.- suspiró.- pronto se cumplirán cuatro meses de su desaparición, y yo siento que en realidad pasaron diez años.

-Yo también lo siento así, ¿quién pensaría que eran tan importantes para nosotros esos dos tontos?- reí, Jin me respondió con el mismo gesto.

-Es cierto.- dijo por último para luego comenzar a colar la harina.

Pero no pasó mucho para que Jin me tirara un puñado de ese polvo.

-¡Jin hyung!- reí mientras trataba de limpiar lo poco que cayó cerca de mis ojos.

Eso no podía quedarse así, de modo que al instante le tiré más harina de la que él me había tirado.

-¡Minnie! ¡Mi rostro, mi cocina!- exclamó entre risas.

-Tú empezaste hyung, no te puedes quejar.- seguí riendo al darme cuenta de lo gracioso que era verlo en ese estado.

-¿Qué está pasando aquí?- entró NamJoon a la cocina, pero grande fue su sorpresa al ser recibido con un puñado de harina en la cara.- ¡hey! somos una familia civilizada ¿desde cuándo nos comportamos así?- fingió regañarnos, mientras comenzaba a reír.

-Estamos haciendo un pastel, ¿quieres ayudar, Nam?- preguntó Jin, ya más calmado.

-Claro que sí, pero saben cómo soy en la cocina, así que no se quejen si hago algo mal.- dijo acercándose a nosotros.

-De acuerdo.- Jin y yo sonreímos, al darnos cuenta que no lo negamos.

Pasaron algunos minutos y ya teníamos la sustancia hecha.

-Todo va bien hasta ahora ¿verdad?- preguntó NamJoon, algo dudoso.

-Así es, Nam.- respondió Jin, y comenzó a preparar el horno.- pónganlo en este molde y me lo dan.- nos extendió el objeto con forma circular e hicimos lo que nos pidió.

-Toma, hyung.- le devolví el molde ya lleno.

-Gracias.- lo recibió y lo colocó dentro del horno.- ¡listo! tarea hecha.- nos miró sonriendo.- solo falta esperar.- miró su reloj y lo tecleó un poco.- cuarentena y cinco minutos, ya puse una alarma.

-¡Qué organizado resultaste, Jin!- NamJoon sonrió.

-Siempre.- hizo una pose de diva.

-¿Ahora qué prosigue?- pregunté dirigiéndome a sentar a uno de los sillones.

-No lo sé...- dijo Jin sentándose a mi lado.

-¿Crees que realmente los encontraremos?- le pregunté desanimado mirando al suelo.

-Yo creo que... haremos todo lo que esté en nuestras manos, y eso es mucho.- me sonrió.

-Es cierto.- correspondí el gesto levemente.- ¿sabes? Hoy soñé con TaeHyung.- Jin hyung y NamJoon hyung me miraron sorprendidos.- estábamos en un lugar pequeño y oscuro; de pronto, él me decía que huya pero yo le decía que no lo haría... entonces, llegaron unos hombres vestidos de negro y... se lo llevaron, se lo llevaron a pesar de que yo les decía desesperadamente que, por favor, no lo hagan.- se me cristalizaron los ojos.

-Mi JiMinnie...- Jin hyung suspiró dándome un abrazo.

-Dicen que las almas gemelas tienen ese don.- NamJoon me sonrió.- tal vez, sus almas querían volverse a ver... sin importar que sea en un sueño.

-Estoy seguro que sí.- me levanté de mi asiento.- faltan Hobi hyung, JiWoo noona, y... YoonGi hyung, ¿ellos siguen en sus habitaciones?- pregunté algo confundido.

-YoonGi salió a dar un paseo cerca de aquí, pero los demás siguen aquí.- me respondió NamJoon hyung.

-Ya veo... iré a verlos, "tal vez" deberíamos adornar el pastel.- dije demostrando que iba a poner de escusa que nos ayuden a decorarlo para que así, estén con nosotros y se distraigan

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro