Sin saber muy bien lo que estaba sucediendo en su cabeza, Jungkook respiró hondo. Quería calmarse para que no sucediera ninguna maldita mierda y que él no arruinara nada de lo que habían planeado desde hace semanas. Pero tratar de estar tranquilo mientras seguían a unos cuantos metros a la camioneta de Donghwa, le era imposible; el muchacho que era su novio y quien le importaba más que nada, estaba ahí, seguramente siendo intimidado por el idiota de su ex jefe.

Jeon no había tenido una vida fácil, sus padres habían muerto en un sospechoso accidente de tráfico y había sido criado por su tía. En su adolescencia siempre había sido lo más tranquilo posible, nunca había causado problemas a nadie y se enfocaba en sus estudios. Siempre había tratado de no llamar mucho la atención y su personalidad en ese entonces no estaba tan jodida como ahora. Cuando entró a la academia de policías fue que conoció a Namjoon y desde el primer momento sintió mucha admiración por él, llegando a entablar la amistad que ahora tenían; una fuerte e inquebrantable. Ambos se complemeteban, porque a pesar de que Jungkook muchas veces era algo hiperactivo y llegaba a sacarte de quicio con su forma de ser, Namjoon era todo lo contrario. El menor creía que Kim era el tipo más aburrido y serio de toda la academia.

—No puedo estar tranquilo—Murmuró y Namjoon suspiró, observándolo desde el asiento de piloto.

Habían cambiado en el momento que el mayor había visto como Jungkook apretaba su mandíbula dolorosamente; Namjoon sabía que nada lo calmaría y que iba a conducir como un maniático por las calles, su personalidad tranquila llegaba a ser algo bueno en esos casos porque no llegaba a alterarse de la forma en que Jungkook lo hacía.

En cuanto a Jeon, su cabeza había empezado a joderse cuando entró la primera vez de encubierto al grupo que su ex jefe había formado. Había tenido que hacer cosas que nunca pensó que haría y la sed de sangre que había estado muy guardada dentro suyo, empezó a surgir; ese chico que le daba algo de asco la sangre cada vez que salpicaba cuando ponía una bala en la cabeza de personas que no pagaban sus deudas había sido devorado por el tipo que le gustaba tener el control y hacer sufrir a quienes le debían cosas a Donghwa, y todo eso en tan solo un mes. La personalidad de Jungkook había pasado de ser algo tranquila a una explosiva, el tipo podía enojarse con facilidad y cualquier idiota que lo hiciera enojar era torturado para después ser asesinado despiadadamente. Donghwa estaba feliz con lo que había logrado, estaba contento con la bestia que había despertado en Jeon. Si las cosas no se hubieran dado vuelta con tanta facilidad, el muchacho era más que seguro que estaría reemplazando a Donghwa cuando él se retirara.

Namjoon supo que estaban yendo hacia uno de los lugares en donde Donghwa se escondía cuando doblaron en un lugar demasiado conocido para él. El muchacho sabía que debían rondar por ahí con cuidado porque el lugar en donde estaba estacionando su ex jefe la camioneta, estaba lleno de personas que lo cuidaban y si daban un paso equivocado, ahí sí todo se iría a la mierda.

—Jungkook si no te calmas, voy a tener que llamar al jefe y decirle que te reemplace por alguien más tranquilo, y que no se vea tan afectado con la situación como vos. Pareciera que no entendés que si no te calmas vas a arruinar todo y Donghwa lo primero que va a hacer es meterle un tiro en la cabeza a Taehyung.

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Taehyung miró disimuladamente a su alrededor, recordando algunas pocas cosas que habían en el lugar. Había una cafetería y justo al lado, estaba en donde Donghwa parecía esconderse, era grande y carecía de decoraciones. justo casi al final habían algunos sofás y una mesa.

—Así que... Kim Taehyung—El nombrado no supo en qué momento, pero cuando cayó en la realidad tenía un arma apuntando en su garganta y a Kang Donghwa detrás de él—, ¿te pensás que me voy a creer todo este truquito que están haciendo? Estás equivocado, lindo. Sé muy bien lo que están planeando y cómo.

— ¿De qué estás hablando?—Tae rió, más de los nervios que otra cosa y trató de que el miedo no se notara en ninguna parte de su cuerpo.

Bueno, ¿así es cómo terminaba? ¿El plan fallando y él muerto? Pero Taehyung muy en el fondo tenía la mínima esperanza de que Donghwa le creyera la mentira que estaba diciendo. Sus piernas temblaron cuando el arma se apretó aún más en su garganta haciéndole doler, tragó con dificultad y después miró a los tipos que lo observaban con una sonrisa en sus labios.

—Taehyung. ¿Qué sabés de tu hermano?

Kim poco a poco sintió como el arma era retirada despacio y Donghwa lo soltó, empujándolo por la espalda y haciéndolo trastabillar hacia adelante casi cayendo al suelo. Los tipos que estaban en el lugar rieron y Taehyung se tragó las palabras que quería decirles.

—Está muerto—Soltó sin ningún titubeo con sus ojos duros y pocos expresivos puestos en el tipo que hacía segundos lo había amenazado con un arma.

Donghwa hizo un sonido con su boca y sus pensamientos se dispararon al por qué él no sabía que Daejung en realidad estaba vivo, y que había fingido esa muerte para que él no lo persiguiera más. Pero, fue cuestión de mover a algunas personas para que toda esa farsa se descubriera y para que también descubriera que al parecer Kim Daejung estaba muy cerca de Jeon Jungkook, el muchacho que él había cobijado hacía unos años; no tenía rencor en contra de Kook porque él conocía los motivos por los cuales se había ido de su lado, pero el que estuviera reuniéndose con Daejung a escondidas se le hacía un poco extraño. Por eso había tenido que arreglar algunas cosas con el Kim mayor.

— ¿Estás seguro que está muerto? Porque puede que lo mate hoy y esta vez va a ser de verdad—Un chasquido de dedos y tres corpulentos hombres aparecieron con un Daejung inconsciente, su rostro se encontraba completamente golpeado y Tae sabía muy bien que su brazo no debía de estar en esa posición.

Taehyung se sorprendió y llevó sus manos a su boca, amortiguando el sonido de sorpresa que casi había salido. Apretó su mandíbula con fuerza y trató de hacer todo lo posible para que sus ojos no se llenaran de lágrimas, su hermano mayor había escapado de eso una vez, esta vez no lo creía posible y le hacía doler el pecho con fuerza porque él había hecho todo lo posible en las últimas semanas en cooperar con los policías con todo lo que sabía acerca de Donghwa para lograr que él fuera atrapado y dejara de seguir el culo de Taehyung, y Jungkook.

—Voy a matarlo—Dijo Donghwa con una sonrisa de lo más terrorífica y Kim negó con la cabeza—. Taehyung ¿sabías que tu querido hermano mayor estaba reuniéndose a escondidas con tu estúpido noviecito?

Claro que lo sabía, él había estado presente en esas reuniones y estaba agradecido de que Donghwa no se hubiera dado cuenta de los muchos policías y detectives que entraban y salían del hotel en donde aún Jungkook se estaban quedando. Mientras eso no sucediera todo estaba bien, porque el plan aún seguía en pie y si podía eludirlo su hermano no sufriría más, pero todo se fue a la mierda y el plan que estaba formando en su cabeza se deshizo en pedazos cuando Donghwa gatillo hacia Daejung, y la bala impactó en su adbomen.

La puerta del lugar cayó al suelo y personas uniformadas y armadas entraron. Donghwa sonrió con burla al notar a Jeon en el frente, liderando a los demás con sus ojos siendo dos pozos fríos. El mafioso supo que era su fin y que todo lo que había sucedido de principio a fin ese día, había sido todo una trampa. Porque se dio cuenta que Taehyung amaba a Jungkook, y así sucesivamente. Él no podía hacer nada para intervenir en eso que habían formado.

—Kang Donghwa, estás bajo arresto—Dijo un policía cuando los tipos que lo protegían fueron desarmados.

Taehyung cayó en sus rodillas con sus manos temblando y sus ojos llenos de lágrimas, su respiración se había vuelto imposible de controlar mientras veía como su hermano se desangraba. La voz de Jungkook se oía lejana y parecía que veía todo de otra perspectiva, y en cámara lenta. Sabía que su cabeza entendía lo que sucedía, pero no quería aceptarlo del todo. Porque si aceptarlo significaba saber que su hermano realmente iba a morir, él realmente no quería esa mierda.

Los brazos de Jungkook se encerraron alrededor de Taehyung, sintiéndose aliviado de que nada le había pasado, pero algo molestando en su pecho cuando vio a Daejung con sangre a su alrededor. Estaba siendo tratado y tal vez viviría, pero hasta que no supieran bien lo grave de su situación no quería decir nada. Por ese motivo, separó a Taehyung y lo hizo mirarlo a los ojos.

—Amor, mírame—Dijo a pesar de los gritos de las demás personas, a pesar de los movimientos de pies siendo arrastrados por el suelo, a pesar del tipo que quería zafarse del agarre que dos policías tenían sobre él—. Respirá hondo, mi amor. Mírame y respirá conmigo ¿sí?

Taehyung acató a las órdenes de Jungkook y asintió con su cabeza, imitando lo que el castaño hacía. Lo hizo por bastante tiempo hasta que su respiración volvió a ser normal, sus manos dejaron de temblar y su vista se enfocó en el panorama a su alrededor.

— ¡Dae por favor, no te mueras!—A pesar del dolor infernal que su abdomen estaba teniendo y que le imposibilitaba el poder moverse, una pequeña sonrisa se formó en los labios de Daejung mientras unos paramédicos lo subían a una camillla. No sabía si sobreviviría, pero para ver a su hermano feliz quería hacerlo—. ¿Va a estar bien?—Preguntó con su voz temblando un poco.

—Sí, bebé. Él va a estar bien. Te lo juro.

Y por primera vez en su vida, Jungkook quiso que su promesa no se rompiera.

Eu como q amo mucho el modo nocturno de wattpad.

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Besitos💚✨