Si alguna vez alguien le hubiera dicho a JungKook que su ex le traería verdaderos problemas al momento de intentar algo con alguien diferente a él, Jeon no lo habría creído.

Habría salido en su defensa diciendo que alguien tan dulce y tierno como YuGyeom sería incapaz de matar a una mosca...

A menos que esa mosca tuviera la cara de Kim TaeHyung.

En lo único que JungKook podía pensar era en quitarse de encima lo más pronto posible a YuGyeom, eso sí no quería que en ese lugar corriera sangre... Y por como pintaba la cosa, sería la suya seguramente. 

Ambos Kim se miraban como sí pudieran llevarse directamente a una mejor vida, algo así como el cielo o el infierno dependiendo de cada quién. 

Mejor dicho, ahora que les miraba a ambos con mayor detenimiento, los dos tenían una faz que indicaban noches de torturas interminables para aquel que perdiera la contienda, en donde su lugar era el del trofeo mayor. 

No porque realmente les importara a alguno de ellos, sino porque su orgullo estaba en juego. 

¿En qué estaba pensando cuando se había metido con personas tan posesivas? ¡Dios! ¡Ésto seguramente era un patrón, o alguna de esas babosadas que decía su psicóloga!

"— JungKookie, sí siempre caminas de la misma forma, llegarás siempre al mismo lugar. ", repetía la bella mujer constantemente. 

Pues, ¿Qué diría ella cuando se enterara que había salido de su zona de confort con su ex para meterse en la tormenta de alguien que no estaba seguro sí le gustaba el atún o el pepino?

Daba igual, Hwasa no estaba allí para analizar la situación y el menor de los tres tendría suerte de salir vivo de aquella contienda.

A pesar de estar perdido en sus pensamientos, Jeon tragó grueso al notar como el castaño se dirigía a paso seguro hasta donde se encontraban y él todavía seguía con su ex colgándose de sus hombros. ¿Qué clase de karma estaba pagando? ¿A qué se había dedicado en su vida anterior para tener que sufrir este tipo de cruel destino?

El pelinegro menor tuvo miedo de cerrar sus ojos, ya que tan sólo una respiración agitada podía ser tomada como una invitación a la guerra y él había visto demasiados documentales de animales salvajes como para reconocer un semblante sanguinario como el que portaba TaeHyung en estos momentos. 

Instantes luego, el castaño se encontraba de frente a YuGyeom. JungKook tragó grueso al notar la postura intimidante que había tomado, ¿Este era el mismo Tae del que se había enamora— 

"¿Qué?", pensó. 

Él no estaba enamorado de TaeHyung... 

Y era por eso mismo que no estaba preocupado porque él mayor le creyera que no tenía nada que ver con su ex, nótese el sarcasmo.

— T-Tae. — habló preocupado, sin embargo el castaño ni giró a mirarle. Toda su atención seguía firme en YuGyeom, quien había decidido que era una grandiosa idea pegarse un poco más al menor.

Una vena de ira se formó en el Kim contrario, en donde sus pensamientos iban en las "Mil y una maneras de asesinar a terceros en discordia".

— Disculpa... — su voz sonó sombría — ¿Podrías quitar tus mugrosas manos de mi novio? 

"No-¿Qué?", pensó el pelinegro. ¡¿Había escuchado bien?! ¡¿La demencia le había llegado de manera temprana?! ¡¿Acaso estaba soñando despierto... De nuevo?!

JungKook no salía del asombro de las palabras del castaño, y ni hablar de YuGyeom quién prácticamente había saltado de su lado como sí fuera un maldito leproso.

El menor no iba a quejarse, apreciaba su espacio personal y más cuando TaeHyung tenía una sonrisa completamente forzada en su rostro. 

Su ex le miraba como sí le hubiera encontrado en pleno acto de infidelidad. La decepción brillaba en su rostro, pero ¿Qués esperaba? Ellos habían dejado de tener algo fijo hacía mucho tiempo y Jeon era libre para continuar su vida con TaeHyung o con quien fuera. 

YuGyeom buscó algún indicio de que lo que había dicho el rompe hogares fuera mentira, pero conocía demasiado al pelinegro como para saber que estaba coladito hasta los huesos por el castaño. Su corazón dolió al reconocer que no había nada que pudiera hacer, lo único que le restaba era tratar de ser un buen perdedor.

¡¿Perder?!

Esa palabra no estaba dentro de su vocabulario, a menos de que implicara en hacer perder a otros. 

Eso justamente, tal vez no ganaría pero por lo menos podría impedir que este forastero se llevara a su preciado Bunny sin dar pelea.

Sí, se retiraría a finde cuentas, pero no sin antes de dar batalla. 

Un brillo de malicia se cruzó en su en su mirada.

— Un momento. — habló el Kim mayor — Ese hombre — señaló al Jeon — ¡No es tuyo! — se cruzó de brazos satisfecho al notar como el enojo en el castaño se incrementaba. Seguramente estaba tentando al diablo con sus provocaciones, ¡Pero al demonio!

Sí quería llevarse a su posesión más preciada, por lo menos que se la ganara en buena ley.

— ¡Ah! — esbozó TaeHyung. — Dices que ese hombre no es mío... — miró la inexistente mugre en sus uñas para luego acercarse a JungKook a paso decidido, tomarle por el cuello y atraparlo en un beso demandante y posesivo.

El pelinegro no tardó en responder ante la provocación del castaño, olvidándose por un momento de donde se encontraban, atrayéndolo más por la cintura. 

Momentos luego, TaeHyung se separó del menor, y se dirigió hacía YuGyeom quien les miraba seriamente. 

— Sí este hombre no es mío, — sin dejar de posar sus ojos en él, mordió sugestivamente el labio del Jeon, haciendo que éste gimiera levemente. — Entonces preguntale quién le eriza la piel...

JungKook dejó de lado el hecho de tener publico presente, y tomó en posesión de los belfos contrarios. 

Le besó como sí su vida dependiera de ello, ¡¿Qué importaba el mundo entero sí ya tenía a su universo completo entre sus manos?!

TaeHyung no sólo le había nombrado como su pareja, sino que también había declarado que era suyo, cosa que le había encendido de sobremanera. 

El pelinegro apenas y podía contener el deseo de tomarlo allí no más detrás del estacionamiento del local, poco le importaba sí algún curioso se posaba para mirar de más, tan sólo quería sentir más del exquisito contacto con la piel tan candente del mayor.

Mordió su labio inferior para luego chocar su lengua con la contraria, jaló sus cabellos y apretó sus caderas, sintiendo como su apretado miembro se rozaba con el del Kim. 

Solo la falta de aire hizo que ambos se separaran durante unos instantes en donde sólo ellos existían.

— Así que...— comenzó el menor, todavía agitado por la sesión de candentes besos — ¡¿Novios?! — una gran sonrisa se posó en su rostro, incapaz de terminar de procesar todo lo que había sucedido momentos atrás.

— ¡Ya! — las mejillas del Kim estaban encendidas, sin poder entender sí se debía a sus dichos o a todos los impulsos que Jeon causaba en su interior. — ¡No te burles! — susurró para luego esconderse en el amplio pecho del menor, feliz de que sólo habían quedado ellos en el lugar.

— Sería incapaz de burlarme de ti, amor. — atrajo su rostro para cruzar miradas. — Amigo, novio o amante, — habló profundamente — Seré lo que quieras que sea, TaeHyung. — declaró.

No.

Definitivamente Jeon JungKook no estaba enamorado de Kim TaeHyung.

Estaba totalmente loco por él, lo que era peor.

Holi!!! 😭😭😭 No me odien mucho ah. Sucedieron tantas cosas! Pero bueno, estoy poniéndome al día con las actualizaciones, ¡Prometo que para compensar el capítulo corto, el próximo valdrá la pena! 😈

Yo me quedé 🥴🥴🥴🥴🥴 después del cap. ¡DIOS!

Amo a Tae Savage DIOS 🥴🥴🥴🥴

Dedicado a:

litosty mi amor

Jung_Mica AdrianaAlvarado134 MAGGIETUAN Liiz_zz miniminigat3 gabibrav