Muchos escritores nos hacemos un rollo a la hora de escribir la sinopsis de nuestras historias, porque no sabemos hasta dónde debemos revelar, y a veces revelamos mucho, o muy poco.

Pero entonces, ¿qué debemos tener en cuenta a la hora de escribir una sinopsis? A continuación les dejo algunos tips que probablemente les puedan ser de utilidad.

La sinopsis debe responder preguntas

¿Quién es el o la protagonista? No te explayes demasiado en esto, solo da un panorama para que el lector tenga una idea. ¿Cuál es su aspiración? Qué quiere conseguir. ¿Qué le impide cumplir su meta? Menciona lo que sería el nudo. ¿Qué consecuencias tienen esos impedimentos?

Cuida la longitud

Escribir más de la cuenta es igual a revelar más de la cuenta. Las sinopsis deben ser breves pero concisas. Menciona sucesos importantes que puedan marcar un antes y un después en tu historia, reléela y plantéate si todo lo que pusiste es esencial, o si hay cosas que pueden omitirse, y en tal caso, si la historia pierde cuerpo al omitir esa información. La recomendación que se da a la hora de escribir una sinopsis es que no exceda las doscientas cincuenta (250) palabras.

No utilices lenguaje muy rebuscado.

Las mejores sinopsis son las más sencillas, por eso es importantísimo que sea clara y entendible para todo público, más allá de que probablemente tu historia esté dirigida para un público en particular. Ten en cuenta que la historia puede ser leída por una persona adulta, con mucho vocabulario, o por un adolescente que se lleva mejor con las cosas sencillas.

¡No hagas spoiler!

Es importante que tengas claro el nudo y el desenlace de la historia para NO mencionar más de lo que deberías en la sinopsis. Si la protagonista se enamora de un chico y al final acaban juntos, eso no es algo que debas revelar. Tal vez puedes decir que surgen sentimientos entre ellos, y a partir de allí las cosas se complican, pero no le cuentes todo lo que va a pasar al lector, deja que él averigüe cómo se enamoran, por qué se complican las cosas y qué es lo que sucede al final.

Revisa y corrige tu sinopsis

Es buena práctica tener varias sinopsis en el tintero, y si tienes colegas escritores o algún lector, o amigo, le enseñes tus opciones para ver cuál es la que le va mejor a tu historia. Lee todas las sinopsis que escribiste para ti y revisa la que hayas elegido varias veces, para asegurarte de que todo está en orden.

Utiliza palabras clave

Las palabras clave pueden atraer mucho la atención si se usan de forma correcta. Debes tener en cuenta el género de tu historia para saber qué palabras son las que mejor se adecúan a tu relato. Palabras que generen dudas, expectativa, y que sirvan como carnada para los posibles lectores que den con tu historia. Métete en la cabeza del lector y conéctate con sus sentimientos para conseguir que entren a tu historia para saber qué más va a pasar.

Céntrate en la trama principal

Tu sinopsis debe hablar sobre la trama y los protagonistas. Trata de no irte por las ramas mencionando personajes secundarios que no van a cumplir un rol importante en la historia. Tampoco menciones la trama secundaria (si la hay).

¡No uses nada de esto!

Al momento de escribir tu sinopsis, intenta no recurrir a esto:

-Diálogos de la historia.

-Descripciones de personajes.

-Fragmentos de la historia (por más interesantes que te parezcan, NO sirven como sinopsis).

Preguntas retóricas: ¡ugh!

"¿Qué pasará entre fulanito y menganito?", "¿Cómo podrán solucionar sus conflictos?", "Sultanita estará enamorada de Pedrito?". Las preguntas al aire le quitan mucha credibilidad a tu historia. De alguna manera, al hacerla, estás diciéndole al lector la respuesta de forma implícita, así que la opción que existe para evitar estas preguntas, es generar una incógnita pero sin llegar a la pregunta en sí.

Tiempos verbales

Lo mejor para escribir una sinopsis es hacerlo en tercera persona, en tiempo presente. "Fulanito de Tal es un chico de tantos años, que hace tal y tal cosa". No influye en absoluto el tiempo o la persona que hayas utilizado en tu historia.