🥀Dos🥀

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Informe de investigación
Actualizado
04/08/2023

Una semana después de la desaparición de la víctima.

Kim Taehyung, omega de 26 años de edad, desaparecido desde el 28/07/2023.

Se realizaron las debidas investigaciones y preguntas de rutina a cada persona familiarizadas con la víctima una semana antes de la desaparición. Dando como listado...

Jeon Junggook
Park jimin
Lee SunHee
Y
Demás personal del servicio doméstico (4 personas más)

Entrevistas a sospechosos

La iluminación en el cuarto de la comisaría era casi nula, se podían escuchar sus propios pensamientos a través de las paredes gracias al material tan ligero con el que estaban construidas. Una carpeta se encontraba en la mesa, como decía el dicho "el que nada debe, nada teme". Pues en este caso a lo único que le temía Jimin en esos momentos es que le dijeran que su mejor amigo estaba muerto.

Un hombre de mediana edad entró con aspecto demasiado serio, traje demasiado formal como para ser trabajador de aquél lugar. Tenía una mirada intensa, ojos gatunos, piel clara y cabello color negro muy bien peinado.

Jimin se encontraba sentado moviendo sus piernas en señal de nerviosismo ante el momento y ante la presencia de aquél hombre, el mayor se sentó en la silla contraria abriendo la carpeta negra y leyendo brevemente el primer párrafo para corroborar a la persona frente a él.

—¿Nombre? —el pelirosa alzó su cabeza por primera vez dejando de lado el juego que tenía con su pulsera.

—Park Jimin —Contestó.

—Muy bien señor Park... ¿Qué relación tenía con la víctima? ¿Desde cuándo trabaja en la casa Jeon?

—trabajo ahí desde que tenía 22 años, al poco tiempo empecé a tratar a Taehyung, aunque todavía no estaban casados él y Jeon Junggook, él y yo nos volvimos mejores amigos —hizo una pausa mientras sentía doler su pecho.

— ¿Qué motivos tuvo para asesinarlo?

—Espere ¡¿Qué?! — el menor casi se ahoga con su propia saliva al escuchar semejante pregunta —. Yo no cometí ningún asesinato —dijo ya molesto viendo mal al que le estaba interrogando —, mucho menos a Taehyung, el era o es mi mejor amigo. Fui yo quien llamó a la policía.

—Con todo respeto pero yo a usted no lo conozco, es mi trabajo preguntar —dijo el pelinegro en un tono tan neutral y serio que le dió escalofríos a Jimin —¿Entonces...? ¿Cuál podría haber sido su motivo? Talvez... ¿Celos? El señor Taehyung tenía un matrimonio envidiable para los ojos de muchos ¿Lo era para usted?

—¿Celos? —preguntó en tono de burla —. Mire inspector, policía o lo que sea. Si a alguien le tendría que preguntar en donde está Kim Taehyung es al bestia de su esposo, no a mí.

—Explique su argumento.

—Ese animal golpeaba a Taehyung, a él no le importaba en lo más mínimo su omega. De hecho... —el menor suspiró —. Él estaba muriendo, su lobo estaba muriendo de a poco gracias al rechazo de ese alfa. Su aroma no se sentía y la excusa de él era que usaba supresores para disminuir su olor. Era una mentira, no había razón para que él ocultara su olor.

— Si eso es cierto ¿Porqué jamás lo denunció?

— Quise convencerlo para que lo hiciera, pero él jamás tuvo el valor. Menos cuando hace días se enteró que estaba esperando un cachorro.

— Dígame qué pasó la noche antes de su desaparición —el mayor tomaba nota detalladamente de lo que el chico decía.

Jimin explicó con lujo de detalle cada acción que hizo junto a Taehyung ese día. La preparación de la cena para decirle al alfa que estaban embarazados. No tuvo reparo en hundir a su "jefe" si es que podía llamarlo así, no le importaba contal que por fin dieran con el paradero de su amigo.

Unas anotaciones más y el detective estaba dispuesto a irse, pero por más que quería el chico frente a él parecía saber algo que él no.

—Park Jimin —el mencionado hizo un sonido en respuesta de estarlo escuchando — Tome. Esto no es ético pero quiero que lo tenga y cualquier cosa que pueda ayudar a la investigación me lo hace saber. —dijo otorgándole una tarjeta en donde se encontraba su nombre en grande, su profesión y su número de teléfono más abajo junto a su e-mail. Dió un par de pasos a la salida tomando el pomo de la puerta.

—Min Yoongi —pronunció, agradándole el nombre.

— Mucho gusto y hasta pronto.

El hombre salió finalmente del cuarto permitiéndole a Jimin respirar un poco más tranquilo.



—¿Nombre?

—Esto es ridículo —dijo el contrario —¿Si sabe quién soy?

—Señor, es parte de la investigación —dijo serio Min Yoongi.

—Jeon Junggook

— Muy bien señor Jeon. ¿Cuál fue el último día que vio a la víctima? —dijo abriendo la carpeta negra donde se encontraban todos los datos.

Aparentemente no había nada fuera de lo normal en Jeon Junggook, joven empresario de 28 años con muchas compañías a su nombre, casado desde hace cinco años con su matrimonio "aparentemente" intacto. Pero algo le perturbó, y esque si su trabajo era investigar a cada uno de los presuntos sospechosos de ese caso poco a poco iba descubriendo secretos ocultos de cada uno.

—la noche antes de su desaparición.

—Ok, cuénteme a detalle que pasó.

—llegué a casa exhausto y encontré a Taehyung ordenando unas cosas dentro de casa, pero esa noche discutimos, no tengo nada más que agregar —dijo Jungkook sin ápice de importancia en el asunto.

—Mm ¿Qué piensa de la perdida de su cachorro?

—Dije que no tengo nada más que agregar.

—Conteste —respondió firme Yoongi al notar la falta de cooperación del menor.

—No pienso nada, esa noche justamente le dije que no quería que diera a luz. Que se deshiciera de él.

La falta de empatía y el mucho desinterés de Junggook provocaron una sensación ácida en el estómago del investigador privado, en todos sus años ejerciendo su trabajo se había topado con un alfa que mostrara el mismo desinterés a su omega que el que estaba mostrando Jeon Junggook.

Se levantó de la silla intentando tomar un poco de aire, el suficiente que le permitiera llevar a cabo aquél interrogatorio que estaba lejos de ser de su agrado.

— Dígame señor Jeon ¿Quién es Kim Seo Yoon? —la postura del menor pareció titubear por unos segundos que parecieron casi inexistentes. Si Min Yoongi no fuera experto en el lenguaje corporal de las personas no hubiera notado que el solo hecho de mencionarle ese nombre lo descolocó, y si, Min Yoongi jamás mencionaba un nombre en vano, no sin antes haber investigado al respecto

—Ella es mi secretaria.

— ¿Solo su secretaria? ¿Está seguro?

—Creo que esto es una perdida de tiempo —dijo levantándose bruscamente de la silla

—Puede irse si usted quiere, pero no logrará pasar desapercibida a su amante. Si su matrimonio era muy bien visto ante la sociedad, dígame señor Jungkook ¿Porqué tiene amante? —dijo encarando al menor haciendo que este se sentará nuevamente ante la intimidación del otro.

—Todos tienen amantes ¿Va a decirme que usted no? Porque créame que a muchas no le interesa la argolla que está en su anular —Min Yoongi a este punto estaba totalmente asqueado.

—A diferencia suya, no. Soy Viudo Jeon y le guardo mucho respeto a la memoria de mi esposo, a diferencia de usted.

—Diga lo que quiera, nuestro instinto siempre llama a querer marcar territorio.

—¿Tengo que recordarle que todo lo que diga puede y será usado en su contra? ¿Me hará leerle sus derechos?

—No es necesario —dijo el menor riendo sarcásticamente —. Tengo mi propio abogado para que me lo recuerde. Más bien recuerde usted que nada más se le está pagando para que haga su trabajo.

—Exactamente —dijo Yoongi —. Y tengo que recordarle que usted no me contrató, y que toda persona que a mí me parezca sospechosa voy a vigilarla minuciosamente.

—¿Es una amenaza?

—Tómelo como quiera señor Jeon. A mí no me podrá amenazar ni intimidar a cómo lo hacía con su omega.

—Usted no tiene pruebas de eso —respondió el menor sintiendo un pequeño atisbo de temor.

—Aún.

El investigador sacó de su bolsillo un cigarro electrónico y dando la primer calada al cigarrillo, fijó su vista directamente en la del contrario que trató de no inmutarse.

El menor se levantó acomodandoce su abrigo de piel y su camisa de vestir negra abotonada hasta la altura de sus pezones. Aquél espacio era demasiado reducido, lo suficiente para hacerle pensar a Min cambiar de lugar de interrogatorio a su oficina que a su gusto era mucho más adecuada.

Desde que los señores Kim, padres de la víctima lo llamaron no dudó en tomar el caso de la prestigiosa familia, le informaron que la llamada a la policía la había hecho un omega empleado de la mansión Jeon luego de buscar por todas partes a Taehyung. Por lo que no pensó dos veces en empezar por él.

El menor ya se dirigía a la puerta cuando un jalón demasiado fuerte lo atrajo desde atrás dejando expuesto su hombro en donde se encontraba una marca casi borrada por completo.

—Su marca se está borrando señor Jeon. Me parece extraño que no esté pasando por los síntomas del abandono de su lobo.

—Eso no es de su incumbencia

—Pero claro que lo es. Considerando que su omega es un omega puro que puede marcarlo pero usted no es un alfa puro es muy importante saber la explicación por la que no experimenta malestar en su parte animal.

Ni Yoongi, ni Jungkook dijeron una sola palabra, el menor se dedicó solamente en marcharse sin voltear y a Yoongi no se le pasó por alto esa interesante información.

Existían tres castas, omegas, alfas y betas; sin embargo existían los alfas puros y los omegas puros. Taehyung era un omega puro capaz de marcar a un alfa corriente, a omegas y betas, menos a alfas puros que solamente ellos podrían marcar a un omega puro y a sus inferiores.

Esa era la razón por la que a Min Yoongi le pareció tremendamente interesante el dato de que la marca de Jeon Junggook estaba casi cien por ciento cicatrizada, dado a que una marca de ese tipo era muy difícil de desvincular, a menos que el lobo del omega puro esté ausente. Que sí ese era el caso tenía nuevas interrogantes, y muchas cosas más que investigar.



Ya estaba aburrido de hacer las mismas preguntas de siempre, pero se había acostumbrado a través de los años. El trabajo monótono lo había atrapado completamente hasta acabar con sus pocas o casi nulas oportunidades de cumplir su verdadero sueño.

Min Yoongi era un hombre serio y pacífico pero implacablemente duro cuando tenía que serlo, talvez los años lo hayan hecho ser así, o quizás extrañaba a su omega. Jung Hoseok, un omega que hacía resplandecer todo lo que tocara, para Min Yoongi su difunto esposo era el sol que todo mundo necesitaba en su vida para iluminar su oscuridad, ambos chicos se conocieron en la universidad en la carrera de abogacía, empezaron siendo un par de inexpertos, pero ninguno pudo evitar enamorarse a pesar de la objeción de sus padres a la unión.

Min Yoongi empezó teniendo tres trabajos a medios tiempos, uno como mesero, uno como bar tender y el otro de repartidor en motocicleta en el tuvo un accidente que lo dejó gravemente golpeado y que con el pasar del tiempo le provocaban constantes dolores. Pidió, rogó al omega que lo dejara, que hiciera su vida, que el jamás iba a poder darle lo necesario para una vida digna como estaba acostumbrado por su padre, por qué sí, Jung Hoseok aspiraba con un excelente futuro en la empresa de su padre; sin embargo, el omega renunció a cualquier oportunidad, renunció a su propia herencia con tal de estar al lado del alfa.

«Quizás si te hubieras ido a tiempo seguirías brillando» pensó.

Entró finalmente a la habitación donde se encontraba la señora de no mucha edad sentada esperándolo. Guardó su billetera en su saco en donde se encontraba la foto ya un poco gastada de su omega, la cual venía viendo de camino al nuevo interrogatorio haciendo traer bellos y difíciles recuerdos con el que llamaba "Su sol".

—Buenas tardes, mucho gusto mi nombre es Min Yoongi. Soy el investigador privado que contrato el matrimonio Kim para llevar el caso de su hijo.

—Mucho gusto señor Min —la señora se cruzó de piernas con mirada sumamente calculadora viendo al más joven.

—Para empezar, le haré preguntas por puro protocolo —dijo el menor abriendo por tercera vez aquella carpeta— ¿Dónde se encontraba el día de la desaparición de su yerno?

—Escúchame atento y claro jovencito, estoy dispuesta a colaborar todo lo que sea necesario. Pero no permitiré que me trates como si fuera una criminal.

—No lo hago señora —respondió serio —. Cómo le dije, nada más son preguntas rutinarias que podrían ser muy significativas para la investigación. ¿Dónde se encontraba?

La mayor respiró hondo vencida, el menor tenía mucha razón y si servía de algo sus aburrido días para colaborar en la búsqueda de la única pareja de su hijo que llegó a querer iba a responder cada pregunta.

—Ese día fui de visita a su casa, eran al rededor de... —pareció pensarlo un poco haciendo memoria en su gran laguna mental que se desgastaba con la edad. —. Entre las dos o tres de la tarde.

—Prosiga.

—Fui y me encontré con que Taehyung estaba preparando una cena para pasarla junto a mi hijo —la señora tomó un vaso de agua que reposaba en la mesita para refrescar su garganta.

—Me imagino que para darle la noticia de la llegada de su cachorro —la madre de Jungkook casi se ahoga al escuchar eso último.

—¿Cómo dijo?

—Lamento que se tenga que enterar de esta manera. Pero Taehyung la noche antes a su desaparición fue internado en el hospital, tuvo un aborto espontáneo.

Los ojos de la señora empezaron a llenarse de lágrimas hasta que finalmente cayeron dejando al menor sorprendido.

—Escuche... — dijo entre hipos de llanto —. Encuentre pronto a mi Taehyungie, no me imagino el dolor que ha de estar sintiendo, seguramente su lobo...—la señora se quedó muda por un momento imaginando lo peor —. No quiero imaginarlo.

Una luz se encendió en la cabeza de Min Yoongi, no imaginaba lo terrible que debió ser si acaso el omega...

—¿Señora Jeon? —Ella levantó la cabeza poniendo atención —¿Alguna vez usted observó algún síntoma de depresión en Taehyung? ¿O talvez rechazo de parte de su hijo hacia él?

—No que yo sepa. Taehyung es un Omega muy especial, él siempre se aislaba de las reuniones y solo se la pasaba leyendo o distraído en su propio mundo —el pelinegro anotó algo en su libreta que había dejado solo para los datos de investigación de caso "Kim Taehyung" —¿Usted cree...? —la mayor se tapó la boca con ambas manos negando.

—No hay que sacar conclusiones de lo ocurrido, pero tenemos que tener en cuenta que podría ser lo más probable. O que simplemente escapó. Listo señora Jeon, eso es todo.

La señora asintió y salió de la pequeña habitación. El mayor quedó solo pensando y tratando de atar cabos pero le era imposible con las pocas preguntas y los pocos testigos del caso. Ojeó nuevamente el expediente soltando un suspiro y releyendo lo último que anotó en su libreta que se encontraba abierta.

"Posible suicidio".




























































Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro