Después del emocionante viaje a Italia y Brasil, Naruto, Menma y Konohamaru regresaron a casa con una sensación de renovada perspectiva y un profundo aprecio por la diversidad cultural. Las experiencias vividas en Roma, Venecia, Palermo y Río de Janeiro habían sido enriquecedoras, proporcionando no solo recuerdos inolvidables, sino también valiosas lecciones sobre la importancia de la multiculturalidad y la comunicación efectiva.

Pero la realidad pronto reclamó la atención de Naruto. Un conflicto creciente en el estrecho de Taiwán entre China, Taiwán y Singapur requería la intervención urgente de las fuerzas especiales. Naruto recibió una convocatoria para regresar al servicio y participar en operaciones críticas en la región. Menma y Konohamaru, aunque deseaban estar con él, sabían que su rol en la vida cotidiana y en Londres era igualmente importante. Así que, mientras Naruto se preparaba para su misión, ellos regresaron a sus responsabilidades diarias en la ciudad.

El día de la partida, Naruto reunió a Menma y Konohamaru para despedirse.

—Es hora de regresar al servicio —dijo Naruto con firmeza, sus ojos reflejando la seriedad de la situación—. La situación en Taiwán es delicada, y necesito estar allí para asegurar que todo se maneje adecuadamente.

Menma, siempre valiente, asintió con determinación.

—Entendemos, Naruto. Haz lo que sea necesario. Estaremos aquí, esperando tus noticias y trabajando en nuestra parte.

Konohamaru, leal como siempre, agregó:

—No te preocupes por nosotros. Volveremos a nuestras actividades normales y nos prepararemos para cuando regreses. ¡Buena suerte!

Con un último abrazo, Naruto se dirigió al aeropuerto para su vuelo a Taiwán, mientras Menma y Konohamaru regresaban a Londres, listos para enfrentar sus propias rutinas y desafíos.

En Taiwán, la situación era tensa. La región era un punto neurálgico en el conflicto, con la tensión entre China, Taiwán y Singapur alcanzando niveles críticos. Naruto se unió a las fuerzas especiales de la RAF y SAS, destacándose por su experiencia y habilidades. Las operaciones comenzaron con un enfoque en la vigilancia y el control del espacio aéreo para evitar cualquier escalada del conflicto.

Una mañana, mientras el equipo de Naruto realizaba una patrulla rutinaria, los radares detectaron una incursión inesperada de aviones en el espacio aéreo taiwanés. Se trataba de aviones de combate chinos que estaban acercándose rápidamente a la frontera. La situación era crítica: cualquier violación del espacio aéreo podía desencadenar una confrontación directa y potencialmente devastadora.

Naruto, en su rol de líder y estratega, recibió el informe de la incursión mientras estaba en el centro de mando. La amenaza era inmediata, y las decisiones que tomara serían cruciales para evitar un conflicto a gran escala.

—Tenemos aviones no identificados acercándose a nuestras fronteras —informó el oficial de control—. Se cree que son de origen chino. ¿Cómo procedemos, Capitán?

Naruto analizó la situación rápidamente, sus pensamientos moviéndose a una velocidad vertiginosa mientras evaluaba las posibles acciones.

—Debemos evitar un enfrentamiento directo a toda costa. Activen los sistemas de contramedidas electrónicas para interferir con sus comunicaciones y navegación. A la vez, iremos a interceptarlos –diría desde su avión-. Necesitamos hacerles entender que no estamos dispuestos a permitir una intrusión.

Los sistemas de contramedidas electrónicas se activaron, generando interferencias en las comunicaciones y los sistemas de navegación de los aviones invasores. Cuando el escuadrón de Naruto detectó a un escuadrón de aviones Chengdu J-10, el grupo se dirigió hacia los aviones del gigante asiático.

—Recuerden, el objetivo es disuadir, no provocar —dijo Naruto por el intercomunicador—. Eviten cualquier acción que pueda ser interpretada como hostil. Nuestro objetivo es mostrarles que tenemos el control y que estamos preparados para proteger nuestro espacio aéreo.

Naruto se mantuvo atento mientras los aviones chinos se acercaban. La estrategia consistía en acercarse lo suficiente para enviar un mensaje claro, sin cruzar la línea que pudiera llevar a un enfrentamiento abierto.

Con una maniobra precisa, Naruto y su equipo posicionaron sus aviones en una formación que bloqueaba la trayectoria de los aviones enemigos. Los pilotos chinos, al darse cuenta de la posición de los interceptores y la presencia de una fuerza organizada, comenzaron a reducir la velocidad y a realizar maniobras evasivas.

—Aquí al Centro de Mando —comunicó Naruto—. Mantengan la presión, pero no inicien fuego a menos que sea absolutamente necesario. Nuestro objetivo es hacerles entender que no permitiremos ninguna violación de nuestro espacio aéreo.

Los aviones chinos, viendo la clara demostración de fuerza y determinación de las fuerzas de Taiwán y sus aliados, finalmente dieron media vuelta y comenzaron a retirarse. Naruto y su equipo siguieron patrullando hasta que estuvieron seguros de que la amenaza se había disipado.

De regreso en la base, Naruto recibió felicitaciones por su manejo eficaz de la crisis. Sus habilidades estratégicas y su capacidad para mantener la calma bajo presión habían sido cruciales para evitar un conflicto innecesario.

Con la situación en Taiwán bajo control, Naruto comenzó a planificar su regreso a Konoha. Sabía que su enfrentamiento con Danzo era inevitable y que era el momento de cerrar una nueva etapa en su vida. La misión en Taiwán había sido un éxito, pero la resolución de los conflictos personales y familiares requería su atención.

Mientras tanto, Menma y Konohamaru habían regresado a Londres y retomaron sus responsabilidades diarias. Menma continuó con sus estudios académicos y entrenamientos y competiciones de karate, mientras que Konohamaru organizaba eventos deportivos y actividades comunitarias. Ambos estaban comprometidos con sus tareas y esperaban con ansias el regreso de Naruto para enfrentarse a los próximos desafíos juntos.

Con la situación en Taiwán bajo control, Naruto se encontraba en su base militar, preparándose para un nuevo capítulo en su vida. La exitosa misión en el estrecho de Taiwán le había permitido consolidar su posición en las fuerzas especiales y fortalecer su habilidad con armamento moderno. Sin embargo, sabía que el verdadero desafío que le esperaba era personal. Danzo Shimura, el actual gobernante de Konoha, había tomado el poder de la aldea y había implementado un régimen tiránico. La resolución de los conflictos personales y familiares requería su atención, y su regreso a Konoha era inminente.

—He terminado aquí —dijo Naruto a sus compañeros de unidad mientras revisaba su equipo—. Ahora es el momento de enfrentar mi pasado y cerrar este capítulo.

Uno de sus compañeros, un militar experimentado que sabía de Naruto y sobre lo que sus líderes planearon con el intercambio cultural que hicieron junto a Jiraiya, le dio una palmada en el hombro.

—Buena suerte, Naruto. Sabemos que lo que vas a hacer es importante. Tu regreso será significativo, y estamos aquí para apoyarte en lo que necesites.

Naruto asintió, agradecido por el apoyo y la comprensión. Luego, se preparó para su viaje de regreso a Konoha. Sabía que tendría que enfrentarse a muchos desafíos, pero estaba decidido a recuperarse y resolver los asuntos pendientes.

De regreso en Londres, no le costó mucho hablar con Menma y Konohamaru, pues los dos perdieron a alguien importante, siendo Konohamaru a Hiruzen Sarutobi, que murió tras dejarlo en manos de Jiraiya. Eso le causó un trauma y un poco de deseos de venganza, algo que Naruto estuvo tratando de corregir aunque no negaría que querría venganza por la muerte de sus padres, así como Menma la quería también.

El viaje de regreso a Londres fue tranquilo y al aterrizar, Naruto se encontró con Menma y Konohamaru en un campo cercano a su hogar. La calidez de la reunión era palpable, pero la tranquilidad pronto se vería interrumpida.

—¡Naruto! —exclamó Konohamaru mientras corría hacia él—. ¡Es genial verte de nuevo!

Menma, igualmente emocionado, se unió al abrazo.

—Te extrañamos mucho. ¿Cómo fue todo en Taiwán?

Naruto sonrió mientras se ponía al día con sus hermanos. Sin embargo, su momento de tranquilidad se vio interrumpido cuando unos shinobis de Konoha aparecieron repentinamente en el campo. Estos ninjas, al servicio de Danzo, habían sido enviados para capturar a Naruto antes de su regreso a la aldea.

—¡No puede ser! —dijo Menma al notar a los ninjas acercándose—. ¡Rápido, tenemos que prepararnos!

Naruto observó con calma a los ninjas que se aproximaban, su expresión cambiando de sorpresa a determinación. Reconoció al líder del grupo, un shinobi alto y con una actitud amenazante.

—¡Deténganlos! —ordenó el líder mientras el grupo se posicionaba para atacar.

Naruto, sin perder tiempo, sacó su equipo moderno, un rifle de alto calibre y una serie de armas avanzadas que había adquirido durante su tiempo en las fuerzas especiales. Su habilidad con estas armas era impresionante, y estaba decidido a usarlas para proteger a sus seres queridos.

—No queremos causar más daño del necesario —dijo Naruto con firmeza—. Pero no podemos permitir que nos detengan.

Los ninjas de Konoha atacaron con velocidad y precisión. Sin embargo, Naruto estaba preparado. Utilizó su rifle con maestría, disparando a los adversarios con precisión mortal. Los proyectiles impactaron con rapidez, eliminando a los shinobis que intentaban detenerlos.

Menma y Konohamaru, al ver la situación, también se unieron a la defensa. Menma usó sus habilidades en karate, combinando técnicas tradicionales con movimientos precisos para enfrentar a los ninjas que se aproximaban. Konohamaru, por su parte, utilizó su agilidad y habilidades en taekwondo para enfrentar a los enemigos. A la par que ambos se sentían tentados a sacar una pistola que Naruto les deja a cada uno, para casos de emergencia, sabían usarla, al menos un poco, no al nivel de Naruto, pero entendían su uso para defenderse, pero la mirada de Naruto reflejó que no sacarían esas armas.

—¡No dejemos que nos detengan! —gritó Naruto mientras continuaba disparando—. ¡Tenemos que avanzar!

La batalla en el campo de Londres fue feroz, pero la combinación de armamento moderno y habilidades ninja permitió a Naruto, Menma y Konohamaru superar a sus adversarios. La determinación y el entrenamiento les dieron la ventaja necesaria para asegurar su seguridad.

Konoha:

El sol se alzaba sobre Konoha, proyectando una luz dorada sobre la aldea que contrastaba con la creciente sombra que Danzo Shimura, el nuevo gobernante, había extendido sobre ella. Danzo, decidido a consolidar su poder y capturar a Naruto Uzumaki, Menma Uzumaki y Konohamaru Sarutobi, estaba frustrado por la serie de intentos fallidos de captura, pues ninguno de los shinobis que enviaba, podía dar con ellos en todo el continente elemental, y aunque sospechaba de alguna jugada de Jiraiya con una misión de un lugar al que el peliblanco llamo Londres, antes de desertar de Konoha.

En su oficina, Danzo se encontraba rodeado por sus asesores, sus ojos llenos de una fría determinación.

-Nuestros intentos de captura han sido un desastre. Estos jóvenes son más astutos de lo que esperábamos.

-Nuestros equipos han fallado en cada intento de búsqueda. Quizás necesitamos una táctica diferente. -respondería uno de los asesores

-No me interesa cuántos intentos fallidos tengamos. Necesitamos una operación definitiva para capturarlos. Preparen un ataque directo y asegúrense de que esta vez tengan éxito. -diría Danzo con su tono frío y serio.

Naruto había logrado recordar el camino que hacía con Jiraiya en sus viajes, después de todo, Naruto en vacaciones escolares, solía regresar unos días a Konoha con sus padres, o ellos solían visitarlo cuando tenía algún evento, gracias a Jiraiya, por lo que, usando el paso, regresaron al Continente elemental, en un bosque que ahora que lo veía, y pensaba, estaba muy cerca de Konoha, cerca de la frontera con Nami No Kuni, y cerca de un puerto que llevaba a la antigua isla de los Uzumakis.

Si bien en los primeros días no tuvieron problemas, al tercer día, un grupo de captura apareció ante ellos, fue un ataque por sorpresa dado que varias caras conocidas estaban allí. Un equipo de captura, bien armado y entrenado, se preparaban para emboscar al grupo en una zona que creían segura.

-Mantengan la formación y prepárense para emboscar. Asegúrense de no dejar escapar a ninguno de ellos. -ordenaría el líder

Naruto, sin embargo, estaba al tanto del movimiento. Había colocado una serie de trampas y dispositivos de alerta avanzados alrededor de su campamento.

-Parece que Danzo sigue insistiendo. Prepárense para la emboscada. -diría el rubio

¡Listo para cualquier cosa! -asentiría determinado Menma

Vamos a hacer que se arrepientan de haber venido. -expondría el menor del grupo

Tan pronto como el equipo de captura entró en el área designada, las trampas se activaron. El suelo comenzó a ceder, y los shinobis cayeron en fosas preparadas previamente. Desde una posición elevada, Naruto observaba con calma, empuñando un fusil de asalto HK416.

-Así es como se hace. Manténganse alertas. -diría motivado

Menma, con su pistola en mano, cubría las retaguardia, aunque no se animara a dispararle a una persona, mientras Naruto hacía uso de su rifle para desarmar a los adversarios que intentaban salir de las trampas

El combate fue feroz, con Naruto demostrando un dominio impresionante tanto con técnicas de artes marciales como con armas modernas, acabando con varios de ellos. Finalmente, los sobrevivientes del equipo de captura se retiraron. Danzo, al recibir el informe de la fallida operación, estaba furioso y frustrado.

-¡Otra misión fallida! ¡Necesitamos ajustar nuestra estrategia de inmediato! -diría Danzo en su oficina molesto

En medio de la frustración de Danzo, Naruto, Menma y Konohamaru estaban en una misión en el continente europeo. La operación en curso era de alta importancia, y mientras Naruto investigaba una serie de eventos extraños, su camino se cruzó con el de Konan.  Su apariencia es distintiva: tiene el cabello corto y de color azul claro, generalmente decorado con una flor de papel que lleva sobre la cabeza. Sus ojos son de un tono ámbar claro, lo que le da una mirada serena y reflexiva. Viste un atuendo negro con nubes rojas que cubre la mayor parte de su cuerpo. Es una mujer delgada pero fuerte, y proyecta una aura de calma y frialdad en sus acciones. Además de poseer un trasero que le empezó a llamar la atención a Naruto.

Naruto estaba saliendo de su cueva refugio, recogiendo cartuchos que disparó para un conteo de armas y saber el gasto para poder economizar a futuro, cuando se topó con la mujer. Quedó embobado en su belleza, y dado que Jiraiya varias veces le habló de ella, decidió hablar un poco.

-Asique tú eres Konan -diría empezando una conversación.

La peliazul quedó sorprendida dado que no hacía mucho Danzo cazó junto a sus equipos a todo Akatsuki, dado que temía que esta organización frustrara sus planes. Por lo que con voz desconfiada habló

- ¿Quéhace un shinobi como tú en un lugar como este? -diría seria

Naruto simplemente contestó

-SoyNaruto Uzumaki. No esperaba encontrarme con alguien como tú aquí. Y no, no soyshinobi -diría tajantemente, no negaría que de niño le hubiera gustado, pero ahora con una edad madura, estaba disgustado y prefería mil veces vivir en Londres que regresar a Konoha.

Konan observó a Naruto con una mezcla de curiosidad y cautela.

- Heoído hablar de ti. Parece que el destino nos ha reunido por una razón -diría con su curiosidad

Naruto, intrigado, respondió con una sonrisa.

-¿De verdad? ¿Qué sabes de mí? -diría con su sonrisa, al mismo estilo que aprendió ligarse a alguien

Konan sonrió levemente, mostrando un interés genuino en la conversación.

- Sélo suficiente para saber que eres un jugador clave en esta intrincada red deeventos -diría más calmada

Naruto, manteniendo una actitud relajada, continuó.

-Parece que estamos en el mismo juego, aunque nuestras metas puedan ser diferentes. -diría sonriente

Konan asintió, y la conversación entre ellos continuó con una mezcla de respeto y curiosidad.

-Aunque nuestras misiones pueden no alinearse, parece que hay algo interesante en ti. -expresaría sinceramente

Naruto, mirando a Konan con una sonrisa, respondió.

-El destino tiene una forma peculiar de unir a las personas. Tal vez podríamos aprender algo el uno del otro. -diría sabiendo que su recientemente conocida peliazul estaba respondiendo a sus encantos

El diálogo entre ellos, cargado de significado y un toque de coqueteo, reflejaba una conexión inesperada. La noche avanzaba, y el encuentro terminó con una despedida cordial pero prometedora.

Konoha:

Danzo estaba decidido a no permitir que sus planes se vean frustrados una vez más. Convocó a un grupo de ninjas de élite para discutir la nueva estrategia.

Nuestros intentos hasta ahora han fallado. Debemos adoptar un enfoque más agresivo y directo. Estos jóvenes no solo son hábiles, sino también impredecibles. -diría con severidad la momia

Entre los presentes estaban Kakashi Hatake, Might Guy y Asuma Sarutobi.

Tal vez deberíamos considerar un enfoque diferente. Naruto y sus compañeros están bien entrenados y tienen acceso a tecnología moderna. -respondería el peliplata

¡Estoy preparado para darlo todo! Si vamos a enfrentarnos a ellos, debemos hacerlo con todo nuestro poder. -expresó el cejudo

Debemos ser estratégicos. No subestimemos sus habilidades ni la preparación que han tenido. -expresaría el Sarutobi

Danzo asintió con decisión.

Asegúrense de que la próxima operación sea perfecta. No podemos permitirnos más errores. -diría con frialdad y seriedad.

Time Skip 2 días después:

Naruto estuvo acampando con Menma y Konohamaru, esperando otro ataque de Konoha, lo cual pasó. El siguiente ataque fue un asalto directo y coordinado. Danzo había enviado a un equipo de ninjas de élite, equipados con la última tecnología en armas modernas y técnicas de infiltración. Entre ellos se encontraban Kakashi, Guy y Asuma, listos para enfrentar a Naruto y su grupo con todo lo que tenían.

El equipo se dirigió a la nueva base de Naruto, sabiendo que esta vez no podían permitirse fallar.

- Vamos a seguir el plan con precisión. Naruto y sus compañeros son formidables -diría el peliplata

- ¡Vamos a darles una buena batalla! -expresaría el cejudo

Mantengamos la calma y sigamos nuestras tácticas. -expresó el fumador del equipo

Naruto, al recibir información sobre el ataque inminente, se preparó para lo que parecía ser el enfrentamiento final. Era buena idea haber tomado un drone entre los materiales que equiparon.

- Esta vez parece que vienen con todo. Prepárense para una batalla difícil. -ordenó el rubio

Menma, armado con su pistola, y Konohamaru, con la primer pistola que le dio Naruto, estaban listos para enfrentar a los atacantes.

- ¡Haremos todo lo necesario para defender nuestra base! -diría el pelirrubio menor

- ¡No les daremos ninguna ventaja! -expresaría el Sarutobi del equipo

El ataque comenzó con una lluvia de balas y técnicas shinobi. Kakashi y Asuma usaban sus habilidades de combate mientras Guy se lanzaba con energía inagotable. Naruto, con su rifle M4A1 y ametralladora ligera, se movía con agilidad, enfrentándose a cada uno de los atacantes con una mezcla de precisión y fuerza.

- ¡Son más fuertes de lo que pensábamos! ¡Necesitamos intensificar nuestro esfuerzo! -diría el peliplata poniéndose a cubierto

- ¡No podemos retroceder ahora! -expresó el fumador

El enfrentamiento fue una prueba exhaustiva para ambos bandos. Naruto y su grupo demostraron una increíble resistencia y habilidad en el combate, utilizando tanto sus técnicas shinobi como su dominio de armas modernas para repeler el ataque.

Finalmente, después de una batalla ardua y agotadora, el equipo de Konoha se retiró, con Kakashi, Guy y Asuma exhaustos pero impresionados por la capacidad de sus oponentes.

- Estos jóvenes son realmente impresionantes. Nos hemos encontrado con un adversario formidable. -diría elogiando el peliplata

- ¡Sí! ¡Nunca había visto armas como estas! -expresó el cejudo

- Debemos reconsiderar nuestra estrategia y prepararnos para el próximo encuentro. -diría Asuma

Danzo, al recibir el informe de la última misión fallida, estaba furioso.

- ¡Esto es inaceptable! No podemos seguir fallando. Necesitamos una solución definitiva. -diría muy furioso.

Con el ataque finalizado, Naruto, Menma y Konohamaru estaban exhaustos pero victoriosos. Sabían que la sombra de Konoha seguía presente, y que su lucha estaba lejos de terminar. La lucha contra Danzo y sus fuerzas continuaba, pero su determinación y habilidades seguían siendo su mayor fortaleza. La historia estaba lejos de terminar, y el futuro prometía ser tan desafiante como intrigante.

Fin del Cap.