Manfred Madarame

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Después de entrar en la sala, el grupo se encontró con un lugar al centro de la sala, al cual varios reflectores apuntaban y, al acercarse, vieron una pintura llena de diferentes garabatos que formaban una cara apenas reconocible sobre el suelo, lo cual confundió a todo el grupo, pero no a alguien que los monitoreaba.

-¡Ese es el Tesoro!-dijo Morgana-esperen, ¿qué...?

-¿Esta chingadera es el Tesoro?-preguntó Luke-personalmente, esperaba algo más grande, más brillante y que pareciera significativo...

En ese momento, Bolt se dio cuenta de tres barras metálicas que rodeaban el lugar donde estaba la pintura mientras de ellos salían chispas eléctricas, lo que le dio la idea de qué estaba por pasar.

-¡Aléjense de aquí...!-gritó Bolt, a lo que todos se hicieron hacia atrás, justo antes de que se formara una barrera eléctrica triangular que rodeaba a la pintura.

-Sabandijas Maverick Hunter entrometidas...-dijo una voz, a lo que los demás voltearon y vieron a Madarame, quien iba vestido con un kimono amarillo e iba acompañado de dos de los guardias de seguridad del museo, uno de los cuales llevaba una pintura con una marco dorado y brillante bajo el brazo-jeje...¿es esto lo que están buscando?

-¿Sabes de nuestras verdaderas intenciones?-preguntó Tramp.

-Sabía de ustedes desde que los vi dentro de mi puesto de arte, sólo que no les diré cómo-dijo Madarame-pero, en especial, sé muchísimo de ti, Bolt...

-Bueno, eso lo explica-dijo Tundra-pero, ¿qué sentido tenía ponernos una trampa así?

-Así que esa cosa era una carnada, ¿eh?-preguntó Luke-te tenías el Tesoro real todo el tiempo, ¿por qué ponernos un Tesoro falso?

-Supuse que sería más fácil atraparlos con algo así-respondió Madarame-además, las falsificaciones están aceptadas en el mundo del arte mayor...

-¿Qué te hizo cambiar así?, ¿es porque te volviste famoso?-preguntó Bolt-¿no puedes entender cuánto me dolió el descubrir todos los crímenes de mi querido "padrastro"?

-Ahora que lo pienso, la única razón por la que decidí cuidarte fue debido a mis conexiones con tu madre-dijo Madarame-esa mujer nunca perdió su pasión por la pintura, incluso después de que su esposo murió...

>>Sus habilidades y talentos eran muy asombrosos, por eso decidí acercarme y relacionarme más con ella-dijo Madarame-tu madre y todas las obras que ella creó son MIS obras de arte.

-Qué tan bajo uno puede hundirse...-dijo Icee.

-Supongo que les puedo conceder un obsequio antes de que mueran-dijo Madarame-un vistazo a la verdadera "Sayuri"...

-¿Verdadera...?-preguntó Bolt, a lo que el guardia que llevaba la pintura la mostró, revelando que era la misma "Sayuri", sólo que ahora, sobre el césped de la pintura, había un pequeño cachorro de color blanco dormido-¿esa es la verdadera "Sayuri"?, esto no puede ser, Mamá...

-Por supuesto que lo es, esto no fue pintado por mí, fue hecho por tu madre, un autorretrato-dijo Madarame-una mujer que presentía que su muerte estaba ceca, pintó sus últimos deseos para el hijo que dejaría atrás...¡esa es la verdad tras el misterio de la expresión de "Sayuri"!

-¿Robaste algo tan personal, también?-preguntó Remus.

-Lo supe a primera vista-dijo Madarame-supe que sería un enorme éxito, si es que le agregaba un retoque a la pintura y la anunciaba bajo mi nombre.

-Pero el cachorro en la pintura...¿por qué pintaste sobre él?-preguntó Bolt.

-Todo era para hacer el ambiente...si el cachorrito era borrado, la expresión en la cara de la mujer se volvería un misterio-respondió Madarame-¡sé que saben que eso es lo que le interesa al público en general, cada uno de esos malditos críticos escribió lo mismo...!

-Nunca pensé que habría algo mal con esto, pero, cuando Bolt lo comentó, supe realmente qué era-dijo Everest-si usted realmente atesorara esa pintura, nunca pensaría en replicarla para su beneficio...¡usted no ama el arte para nada!

-Incluso si hubiera alguna pintura legítima dentro de este museo, sus verdaderas habilidades no serían mejores que los garabatos en ese Tesoro falso-dijo Luke.

-Me hace reír, pendejo...-dijo Marco.

-Así que me van a contradecir sin importar qué-dijo Madarame-muy bien, entonces, como eres mi obra de arte, Bolt, voy a tomarte por el bien de mi futuro, junto con todos tus insolentes amigos.

-No puedo creer que esté tratando a una madre y a su hijo como si fueran objetos-dijo Tundra-¡usted es inhumano...!

-Recuerdo que, una vez, me dijiste que destruías tu "arte" cuando su tiempo de utilidad expiraba, Madarame-dijo Bolt, a lo que todos los demás se confundieron-¿eso incluyó a mi madre también?

-Ella tuvo ese accidente, desde luego, pero sobrevivió y, ya en el hospital, ella comenzó a tener un desangrado crónico en frente de mí...ahí fue cuando una idea pasó por mi mente-explicó Madarame-si no pedía ayuda y la dejaba ser, podría obtener su pintura sin ningún obstáculo por delante.

-No...¿la dejó morir?-preguntó Everest, asustada.

-Ella era físicamente débil, nadie sospecharía si ella moría por ese simple desangrado-dijo Madarame-sobre todo, Bolt, ¿nunca pensaste que había sido raro que yo hubiera descubierto tus habilidades artísticas cuando sólo tenías 3 años...?

>>La razón por la que te quise mantener conmigo era para evitar que conocieras la verdad detrás de "Sayuri"...-concluyó Madarame.

-Tú la mataste...-dijo Bolt, rechinando sus colmillos.

-Los talentos artísticos que heredaste de tu madre eran una maravilla incalculable, de hecho-dijo Madarame-si soy de los que roban ideas, es más fácil robar el futuro de mocosos que no dirán nada que de adultos...

>>Es gracias a ti que se me formó esa idea, tienes mi agradecimiento...-añadió Madarame, a lo que Bolt soltó una leve risa.

-¿Bolt?-preguntó Icee.

-Te agradezco, Madarame, toda razón mía para pedirte perdón y volver a tu vocación, hasta la más mínima, ha desaparecido sin dejar rastro en este mismo momento-dijo Bolt-tú no eres ningún maldito artista...¡eres un despreciable demonio que usa la piel de una artista...!

-Ah, buenos para nada, irrumpiendo en mi museo y haciendo todo lo que carajos quieren...-dijo Madarame, luego de lo que un aura roja comenzó a salir de él, lo que sorprendió al grupo-aquellos que tienen el poder hacen las reglas, aquellos que no las siguen...

>>Sin mencionar que el valor del arte es totalmente subjetivo, yo hago las reglas en la escena del arte...-dijo Madarame, luego de lo que se comenzó a retorcer-¡soy el ser supremo, soy el dios del mundo artístico...!

-Esto no se ve bueno, ¡aléjense y prepárense...!-dijo Everest, a lo que todos prepararon sus armas.

Entonces, Madarame tomó la pintura y, mientras se carcajeaba, golpeó su cabeza contra ella para que, en una abrir y cerrar de ojos, él se convirtiera en 5 enormes pinturas flotantes, de las cuales 2 contenían sus orejas, de otras 2 sobresalían sus ojos y de otra más alargada sobresalía todo su hocico junto con su nariz y las pinturas se acomodaron en el orden de una cara normal frente al grupo.

-¡Pintaré sobre todos ustedes...!-gritó Madarame, antes de que entraran en batalla.

Música: "Blooming Villain" from Persona 5.

El grupo se formó en una fila horizontal frente a Madarame, listo para luchar, mientras los ojos de éste se movían de un lado a otro y su hocico se abría y cerrada a cada momento.

-Ahora...¡empecemos, malditas sabandijas...!-dijo Madarame.

-Tú usas a otros para tus despreciables deseos, Madarame-dijo Bolt-ni siquiera eres dueño del arte que "creas"...

-Chicos, no se desconcentren, no podemos decir que podría intentar-dijo Colmillo Blanco-ataquen y usen sus Skills de Persona con sabiduría y cúbranse, si es necesario, derroten al sujeto y recuperen el Tesoro...

-Muy bien, venceremos a este sujeto para enseñarle quiénes somos y para recuperar esa pintura-dijo Everest, a lo que los demás asintieron-¡por la reputación del arte...!

Las 5 pinturas que componían a Madarame se valían de lanzar mordidas con el hocico, hacer ataques de electricidad, viento y hielo y de aumentarse el ataque para tratar de destruir al grupo, quienes usaban sus Skills de Persona y ataques para destronarlo y se aumentaban la defensa y se cubrían cuando era conveniente y pudieron salir adelante sin problemas. Luego de 5 minutos de lucha, el grupo logró bajarles la energía a las pinturas, una a una, hasta hacerlas caer al suelo, donde se volvieron un charco de pintura para que luego se convirtieran en el Madarame normal, quien se quedó parado, mientras respiraba pesadamente.

-¿Madarame ha salido?-preguntó Tramp.

-¡Demonios, no puede ser, deténganse, estúpidos, o si no...!-dijo Madarame, antes de volver a transformarse en el charco de pintura y salir como las 5 pinturas, quienes se volvieron a acomodar como antes-¡grrr...pendejos impertinentes, parece que necesitan unos buenos golpes para hacerlos entender...!

-Eh...¿se supone que debimos haber hecho algo mientras estaba en ese estado?-preguntó Tundra.

-De hecho, sí, luego de destruir a las pinturas, lograron bajarle la mitad de la energía a Madarame y lo hicieron salir-dijo Morgana-en ese estado estaba vulnerable, destruyan de nuevo a las pinturas y, cuando salga, uno de sus All-Out Attacks no vendría mal...

-Copiado, Morgana, vamos a hacerlo antes de que perdamos más tiempo...-dijo Remus.

-No sé lo que van a hacer, pero no podrán hacerlo porque...¡ESTA ES LA GRACIA DEL ARTISTA...!-gritó Madarame, antes de lanzar un ataque con el que pintó de color negro los cuerpos del grupo, bajándoles la defensa y haciéndolos débiles a cualquier afinidad en el proceso.

-¡¿Qué clase de ataque es ese?, les bajó la defensa hasta el fondo, sólo déjenme...!-dijo Colmillo Blanco, antes de subirles la defensa al grupo hasta normalizarla-eso no es sólo un cambio de color, tengan cuidado, miren su salud y no bajen la guardia en ningún momento, quién sabe qué más podría traer bajo la manga...

Luego de recuperarse del ataque, todos siguieron atacando por dos minutos más hasta lograr destruir a las pinturas de los ojos de Madarame, pero, antes de que pudieran hacer algo más, Madarame las restauró con el charco de pintura y las devolvió a su lugar con un poco de energía, en su turno.

-¿Se regeneraron?-preguntó Everest-maldita...entonces, ¿esas cosas pueden volver si no las destruimos todas a la vez?

-Tengo una estrategia para eso, pero no sé qué digan ustedes-dijo Marco, a lo que los demás lo miraron, esperando a que explicara-miren, somos 8, 4 de nosotros que se encarguen del hocico, los demás que elijan una de las otras pinturas, así podremos tirarles la vida hasta lograr llevarlas al mismo nivel a todas antes de que se regeneren...

-De hecho, es un buen plan, hermano-dijo Remus-no sabía que eras tan buen estratega...

-Ni yo pensaba que era un buen plan-dijo Marco-pero, como siempre, estoy lleno de sorpresas...

-¡Dejen su charla de hermanos y vamos a lo que necesitamos hacer!-ordenó Icee-¡Bolt, Marco, Everest y yo iremos por el hocico, los restantes, elijan otra pintura y atáquenla hasta quitarle toda la energía...!

Siguiendo la estrategia de Marco, todos siguieron atacando a Madarame, cada quien por su lado, lo que lo hizo no saber a quién atacar para lograr detener su plan, mientras seguía perdiendo más y más energía. Luego de 4 minutos, las pinturas perdieron la energía que les quedaba y volvieron a convertirse en Madarame, quien ya sólo tenía una pequeña fracción de energía total y, esta vez, todos lo rodearon inmediatamente mientras apuntaban con sus Busters hacia él.

-¡Maldita sea, soy el gran Madarame, el Madarame que consigue una enorme masa de gente cada vez que abre una exhibición!-dijo Madarame, nervioso-¡no soy alguien que ustedes, malnacidos, tienen derecho de derrotar...!

-¿Aún tienes el valor para decir esas cosas?-preguntó Bolt-vas a saborear completamente la ira de todos a los que les robaste y volviste presas a través de nosotros...

-Bolt tiene razón, a ver si ahora sí respetas a la pintura como se merece...¡All-Out Attack!...-gritó Everest, a lo que todos saltaron hacia atrás para realizar el destructivo ataque.

-¡Nuestro ataque es la mejor defensa...!-gritó Icee, mientras realizaban el All-Out Attack.

Luego de recibir el ataque, Madarame se retorció por un momento y dio un grito, antes de caer al suelo, sin energía para poder hacerles frente al grupo más.

[Termina soundtrack de "Blooming Villain"]

Después de unos segundos, la pintura apareció junto de Madarame, quien, luego de levantarse, tomó la pintura y retrocedió mientras el grupo iba hacia él, hasta que se tropezó y cayó de espaldas al suelo, usando la pintura como escudo.

-A nadie le interesa el arte de verdad, todo lo que quieren son marcas fáciles de reconocer-dijo Madarame-soy una víctima en esto también, ¿no están de acuerdo?

-¿Ahora excusas...?-preguntó Luke.

-El mundo del arte se desenvuelve con dinero, después de todo, no puedes crecer sin nada de dinero-dijo Madarame-Bolt, y esa Everest, ustedes entienden, ¿verdad?, ser un artista pobre es verdaderamente miserable...¡yo sólo no quería volver a esa vida...!

-Un demonio como tú no tiene derecho de hablar sobre el mundo del arte-dijo Bolt, tomando a Madarame del cuello-estás acabado, junto con todo este abominable mundo...

-¡No, por favor, sólo...no me maten...!-gritó Madarame, luego de lo que Bolt lo soltó lanzándolo al suelo, dónde éste dio unos cuantos tosidos.

-Regresarás al tú en la realidad y confesarás tus crímenes, ¡todos ellos!-ordenó Bolt.

-¿No me van a matar?-preguntó Madarame.

-¡Júralo!-gritó Bolt.

-¡Está bien, está bien...!-dijo Madarame, asustado-pero, ¿qué pasa con el otro, el sujeto de la máscara negra?

-¿Quién?-preguntó Tramp.

-¿Un sujeto con una máscara negra?-preguntó Everest-esperen, ¿de quién rayos está hablando?

-No puede ser, ¿había otro intruso, además de nosotros, en este Palacio...?-preguntó Icee, antes de que el Palacio comenzara a temblar y a derrumbarse, luego de lo que una puerta detrás de ellos se abrió, revelando que era un agujero para salir del Palacio.

-¡Por ahí, rápido, no perdamos tiempo...!-dijo Remus, a lo que todos corrieron hacia la puerta y Bolt tomó el Tesoro, antes de comenzar a caminar hacia los demás.

-Ey, Bolt, ¿qué debería hacer después?-preguntó Madarame.

-Si es que sales de la cárcel, ponle un fin a todo esto y usa tu propio arte por una vez...-respondió Bolt.

-¡Bolt, rápido...!-gritó Icee, a lo que Bolt aceleró el paso, dejando a Madarame desamparado.

-¡No, espera, por favor, Bolt, Boooolt...!-gritó Madarame, antes de que él despareciera y el grupo entrara en el agujero, justo en el momento en el que el Palacio colapsaba.

Luego de sentir estar flotando por un momento, todos volvieron a caer en la realidad sin mayor dificultad, dentro de un callejón vacío en el festival.

-Ya volvimos-dijo Tundra-¿logramos hacer el trabajo sin problemas?

-Averigüémoslo...-dijo Marco, antes de que todos fueran a echar un vistazo a la salida del callejón.

Al asomarse, vieron a una enorme cantidad de gente reunida en la plaza principal del festival, viendo cómo dos policías se llevaban a Madarame, mientras éste sólo lloraba y confesaba sus crímenes en voz alta.

-Madarame se ha entregado y el Tesoro está en nuestras manos-dijo Everest-el trabajo está más que hecho...

-Adiós, maestro...-dijo Bolt, cabizbajo.

-Aún te importa, ¿verdad, Bolt?-preguntó Icee.

-Así es, aunque dije que no lo iba a perdonar y que lo odio ahora, aún tengo aprecio por él-dijo Bolt, antes de mirar la pintura-al menos, gracias a que lo derrotamos, tengo esta pintura, tal vez haga juego en mi casa en el futuro y me ayude a recordar más sobre mi madre...

-Sí, me alegro por ti, Bolt, pero será mejor que nos vayamos, no queremos que la gente empiece a sospechar por vernos en estas situaciones-dijo Everest, a lo que los demás asintieron-además, hay que comentarle a Rocky y a los demás sobre lo que dijo Madarame del sujeto de la máscara negra, tal vez, Morgana o alguien sepa algo...

-Tienes razón, mejor vámonos-dijo Remus-pero, ¿por qué no pasamos por unas hamburguesas en el Burger King que está afuera del festival?, tengo un poco de hambre...

-Es una gran idea, pero no dejes fuera a los demás-dijo Tramp-con lo que Icee tiene nos alcanza para llevar a todos y así podemos comer mientras charlamos.

-Me parece de lo mejor, vamos...-dijo Luke, antes de que todos comenzaran a caminar y salieran discretamente del festival para regresar al escondite, no sin antes pasar por sus hamburguesas, teniendo ansias de descansar, pero teniendo aún dudas sobre el sujeto de la máscara negra.

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