Abro mis ojos y no puedo ver nada, como puedo llego a mi teléfono encendiéndolo y me percato que son las tres de la mañana, me siento en la cama y comienzo a ver las llamadas y mensajes que me llegaron mientras dormía.

Desbloqueo el teléfono y son 32 llamadas pérdidas de Izuku, 1 de Momo y otra de un número desconocido. Luego comienzo a leer los mensajes que son solo de Izuku preguntando una y otra vez en donde me encuentro hasta que leo su último mensaje.

"Estoy afuera de tu casa esperando a que abras"

Corro literalmente hasta llegar a la puerta de la casa, ilumino mi camino con la linterna del teléfono y cuando abro la puerta encuentro a Izuku durmiendo. Marco a su número y este se remueve algo incómodo y con lentitud abre sus ojos. Toma su teléfono y cuando lee el nombre se voltea hacia la puerta.

"Eres un gran idiota"

"Sabes que me preocupo cuando no me contestas... además de que tenía algo que hablar contigo"

Sonrío de lado y lo ayudo a levantarse, lo ayudo a entrar y voy directamente a la cocina para poder prepararle un café, debe tener demasiado frio. Mientras caliento el agua le entrego una manta para que comience a recobrar el calor lentamente. Me siento frente a él en la mesa mientras apoyo mis manos contra mis mejillas.

"¿Qué es lo que tenías que decirme?"

La tetera suena y camino a cortar el fuego, tomo la taza y vacío el agua dentro de ella para luego entregársela al peliverde, este agradece y comienza a beber lentamente.

"Venía a disculparme, no volveré a dejarte sola... En serio que lo lamento, pero tú sabes que esa chica fue la que le pidió a los examinadores que me dejaran entrar y me sentía en deuda con ella"

Toma un sorbo y ruedo mis ojos, tomo una galleta de la mesa y se la lanzo a la cara.

"Es obvio que ella te gusta, lo puedo ver de la forma en que la miras. No te preocupes por volver conmigo... he hecho una amiga, es aquella pelinegra de la clase, es simpática. Y creo que le agrado..."

Su rostro se colocó rojo en el momento en que le dije lo primero y trago duramente el café mientras negaba con su cabeza y ocultaba su rostro entre sus manos, sonrío enternecida con aquella acción y un pequeño recuerdo viene a mi mente al ver su expresión. Rio levemente y tomo mi teléfono para encontrar el número desconocido.

"¿Conoces este número? Me ha llamado mientras dormía..."

Tomo el teléfono y luego saco el suyo comenzando a marcar el teléfono, un nombre apareció en la pantalla de Izuku y me miro completamente sorprendido. Borro todo el número en su teléfono y lo marco nuevamente, el mismo registro apareció y se rasco algo sorprendido la nuca para luego ver sus mensajes.

"Es Kacchan... Me mando unos mensajes mientras te buscaba pidiendo tu número, pregunte por qué y me contesto que no era de mi incumbencia así que se lo di... No era mi intención pero le pedí que si sabía algo de ti que me lo dijera. Pensé que me habías bloqueado de tus contactos y a lo mejor él lograba comunicarse contigo..."

Me acerco y golpeo su cabeza con mi mano, se quejó levemente comenzando a disculparse. Le quito mi teléfono y lo guardo nuevamente en mi bolsillo, creo que ha sido una larga noche. Miro el reloj y ya son un cuarto para las cuatro de la mañana, dentro de 3 horas las clases comenzaran.

"Pasa la noche aquí, ya es muy tarde para que vayas a casa. Además de que creo que tu madre ya asumió que te quedarías aquí... Te preparo de inmediato la pieza de invitados, no demoro mucho"

Asiente con su cabeza y subo rápidamente las escaleras, entro a la habitación y comienzo a colocar las sabanas y cobertores con rapidez para que podamos dormir lo antes posible. Cuando ya está todo listo, camino a la habitación de mis padres y con lentitud entro. Hace meses que no entraba aquí, el olor de mi madre impregna mis fosas nasales y miles de recuerdos llegan a mi cabeza, cada uno mejor que el final tan poco deseado. Abro las puertas de aquel gran cajón y saco una polera junto a calzoncillos y pantalones; camino hasta la mesita de noche y la abro con lentitud encontrando la carta de suicidio, por miedo a lo que diga no me he atrevido a leerla, la giro y el nombre mío en cursivas se encuentra en el comienzo del borde. Sé que ella quería que la leyera, pero mis sentimientos no me lo permiten. Mi teléfono comienza a sonar nuevamente, lo saco de mi pantalón y el número desconocido inunda la pantalla. Me debato unos segundos entre contestar o dejarlo pasar, pero contesto y lo posiciono en mi oreja. No hablo y la respiración desde el otro lado se escucha.

"¿Katya?"

"Así suelen llamarme, ¿Con quién hablo?"

Trato de sonar desinteresada, pero su voz ronca hace que me sorprenda un poco. Levemente, pero aun así sé que él no ira con rodeos.

"Sé que Deku te ha dicho que me ha dado tu número"

"¿Con quién hablo?"

Me encanta hacerlo enojar, escucho su suspiro de exasperación y trato de no reír.

"Que soy Bakugou, joder"

"Oh vaya, hola"

Silencio, no dice nada. Cierro la puerta de la habitación con la ropa en mi otra mano, espero unos segundos y con resignación vuelvo a hablar.

"¿Para qué me llamas?"

"Solo... quería saber si estabas bien, Deku me dijo que no respondías sus llamadas y que no estabas en casa"

"Oh, siento haberte preocupado... solo estaba dormida"

"Vaya idiota, dormir como un ladrillo. Deberías estar más atenta, cualquiera podría entrar un pervertido a tu casa y podría hacerte cualquier cosa"

"No sabes donde vivo, no hay de qué preocuparse"

Me burlo y escucho nuevamente su grito de exasperación, miro a Izuku y le entrego la ropa. Me mira con curiosidad y en voz alta pregunto con quién hablo.

"¿Esa voz es Deku?"

"Si, pero no te preocupes, por lo que sé, no es un pervertido y muchos menos un ladrón"

Izuku sonríe levemente y camina al baño para poder cambiarse, agarro una silla y me siento sobre ella observando mis uñas con desinterés.

"¿Por qué Deku está en tu casa a estas horas? Acaso ustedes son..."

"No, solo que vino a quedarse a dormir, además, ¿por qué debería estar dándote explicaciones?"

"Tsk"

Y con eso, la llamada se corta. Miro el teléfono y me sorprendo, niego con mi cabeza y guardo el teléfono al ver que Izuku ha salido con la ropa ya puesta, le queda demasiado bien.

"¿Para que te ha llamado?"

"quería saber si estaba bien, al parecer lo dejaste preocupado"

Me encojo de hombros y apago las luces para subir a las habitaciones, soy la primera en subir y luego el peliverde me acompaña.

"Eso es raro, nunca se había mostrado preocupado por estas cosas. Pero es bueno de cierta manera, ya pensaba que Kacchan era un ser sin sentimientos"

"Todos pensábamos eso, ahora a dormir. Hablaremos en la mañana sobre este extraño asunto"

"Buenas noches"

Me despido con la mano y entro en mi habitación, dejo el teléfono cargando y veo que hay un nuevo mensaje. Abro el mensaje y por unos segundos mi corazón se ha conmovido. Era Bakugou. Y me ha deseado las buenas noches. Esto ya está dándome miedo y a la vez confusión.

Publique una historia llamada Aprendiendo a amar-BNHA para que vayan a leerla y decirme que tal esta, esa sera completamente de Todoroki así que... ¿qué esperan?

Nos vemos en otro capítulo, buenas noches.