CAPÍTULO 31: LÁRGATE DE MÍ CASA

Màu nền
Font chữ
Font size
Chiều cao dòng

Disfrútenlo muchas gracias!!.

—¿PACÍFICA ESTA ES LA GENTUZA QUE CONTRATASTE PARA QUE TE SIRVAN? —Ethan estaba actuando de manera histérica, no dejaba de gritar al respecto, sobre actuando de manera. Por su lado, Pacífica solo observaba lo que el rubio hacia, con una mirada calmada, al parecer, el show de Ethan había llegado demasiado lejos.

—Señorita Pacífica, eso no es verdad, yo jamás agarré el reloj de este tipo, está mintiendo —decía Dipper, a su ama, con una voz algo temblorosa.

—¡¿Estoy mintiendo?! ¡¿Quién te crees que eres tú para decirme eso? —decía Ethan, totalmente histérico—. ¡VOY A LLAMAR A LA POLICÍA EN ESTE PRECISO MOMENTO! Dipper... ¡NO TIENE IDEA DE CON QUIÉN TE HAS METIDO!.

Pacífica continuaba observando la situación, pero sobre todo, observaba a Ethan y la manera en la que estaba sobre actuando. Por su parte, al comedor ingresó Sasha, quién desde el segundo piso alcanzó a escuchar los gritos del jóven rubio millonario.

—¿Señorita Pacífica qué sucede?, ¿Por qué los gritos?.

—¡Sasha que bueno que llegaste! —mencionó Ethan—, tú también deberías saber la clase de gentuza que tienes como compañero, Dipper me robó este reloj e intentó llevárselo —Ethan le enseñó a Sasha el dichoso reloj.

—¿Qué? —preguntó un tanto confundida Sasha, miró a Ethan y después miró a Dipper—. ¿Dipper eso es cierto?.

—¡Por supuesto que no!, Yo no robé nada, este tipo está mintiendo —Dipper también comenzaba a perder los estribos. Su voz temblorosa fué desapareciendo poco a poco y entró en acto una voz seria y molesta.

—¿Cómo qué este tipo?, ¡Respétame mugroso pordiosero! ¿Quién te crees que eres tú para tratarme de "este tipo", eh?. Definitivamente voy a llamar a la policía y te voy a demandar tanto que desearías no haber nacido.

Cuando Pacífica escuchó "mugroso pordiosero" una pequeña vena apareció en su sien y su expresión sería cambió por una molesta. La jóven millonaria también empezaba a perder la paciencia, peor ahora que Ethan estaba insultando a su sirviente personal, cuando ella le dijo claramente que no lo hiciera.

—¡El que debería demandar aquí soy yo por una falsa acusación! —gritó Dipper. Miró a su ama para darle su explicación—. Yo en ningún momento agarré ese reloj señorita Pacífica, siempre traté de mantenerme lo más alejado posible de este tipo, porque sabía perfectamente que podría ocasionar problemas.

—Yo puedo confirmar eso, Dipper en todo el día se mantuvo alejado del jóven Ethan —comentó Sasha—. En ocasiones me ayudó con la limpieza, personalmente no creo que Dipper se haya atrevido a cometer semejante acto tan repudiable.

—¡¿Sasha vas a defender a este tipo?!, ¿Acaso no escuchaste que me robó este reloj?, Por si no lo sabías este reloj es muy preciado para mí, me lo regaló mi padre, significa mucho para mí y jamás me separo de él a menos que vaya a dormir, y ahora viene este imbécil a robarme, tengo todo mi derecho de demandarlo y de estar enojado.

—Yo solo estoy diciendo lo que eh visto, no conozco a Dipper tan bien, solo hemos sido compañeros por casi un mes, pero... me atrevo a decir que Dipper jamás haría algo como eso —dijo Sasha, poniéndose de lado del castaño.

—¿PACÍFICA VAS A PERMITIR ESTO?, YO SOY EL AFECTADO Y AHORA LA SERVIDUMBRE SE PONE DE LADO DE ESTE IDIOTA, ¡¿NO VAS A DECIR NADA?! —preguntó Ethan otra vez gritando a todo pulmón mientras observaba a Pacífica.

Pacífica observó a Ethan, en cómo estaba actuando, como gritaba, como insultaba a Dipper, en como lo estaba acusando. Ella respiró profundo y después le contestó al tipo...

—Vaya, que situación tan complicada es esta —dijo Pacífica—. Al parecer Dipper cometió algo muy repudiable como lo es el acto de robar, eso es algo que personalmente no puedo permitir en esta casa, o fuera de la misma, si se llegan a enterar de algo como esto, el nombre y la reputación de la familia Northwest se vería afectada. ¿Qué debo hacer ahora?.

—¡Pues echar inmediatamente a este tipo de tú casa! —dijo Ethan, señalando al castaño.

—Hum, ¿Debo echar a Dipper?.

—¡Si! —dijo Ethan.

—Señorita Pacífica no haga eso, ¿Realmente le va a creer a este tipo? —preguntó Dipper, quién seguía defendiendo su inocencia.

—¿Y sigues tratándome de esa manera?, ¡No solo eres un ladrón sino también un igualado! —observó a Pacífica—, Escúchame muy bien Pacífica, sino echas inmediatamente a este tipo de tú casa, en serio voy a llamar a la policía y no me importará lo que ocurra después, ¿Te quedó claro?.

Pacífica entrecerró un poco sus ojos. Ella no podía permitir eso, por lo que debía hacer algo inmediatamente.

—Tienes razón Ethan, tienes toda la razón, voy a echar a alguien de mi casa esta noche —respondió Pacífica, levantándose lentamente de la mesa adoptando una postura meramente intimidante.

Ethan sonrió sutilmente, creyó firmemente en que había ganado y que Pacífica echaría a Dipper de su casa, pensó  que su pequeño y simple plan había funcionado perfectamente; sin embargo, sucedería que Pacífica le diría una palabras que lo dejaron desconcertado.

—Ethan... deja tú show barato, ¿Quieres?.

Todos quedaron extrañados con el comentario de la jóven rubia, sobretodo Ethan quién por dentro estaba celebrando su victoria antes de tiempo; pero ahora se sentía confundido.

—¿Eh?, ¿De qué estás hablando?, ¿Show barato? —preguntó Ethan.

—Sí tal como escuchaste déjate de tonterías, sabía que eras alguien con una actitud desagradable en ocasiones, pero jamás me imaginé que llegarías a cometer semejante estupidez —el tono que usó Pacífica fué uno muy serio.

—¿Pero de qué mierda estás hablando?, ¿Acaso tú también le vas a creer a este inepto? —preguntó un Ethan muy furioso.

—Sí —respondió Pacífica.

—¿Pacífica estás segura de eso? —preguntó Melissa.

—Miren, solo piensen en esto, Ethan dijo que cargó su reloj todo el día, jamás se apartó de el y a mí me consta, lo eh visto con ese dichoso reloj todo el bendito día, pero que curioso ¿No?, Justo cuando cae la noche, cuando ya terminamos de cenar, cuando Dipper me pide permiso para retirarse, Ethan de pronto reacciona diciendo que desapareció su reloj. ¿No que supuestamente lo cargaba con él?, Y como dijo Sasha, Dipper se mantuvo lo más alejado posible de Ethan en todo el día y también mientras cenabamos, pero ahora convenientemente ese reloj apareció en el bolsillo de mi sirviente. ¿No les parece eso, curioso?.

—Pero Pacífica, te estoy diciendo que mi reloj desapareció, de seguro este tipo aprovechó que lo dejé por ahí en alguna parte y lo agarró —Ethan seguía manteniendo su postura de ser la víctima en este problema.

—¿Ah?, ¿Lo dejaste por ahí en alguna parte?, hum que interesante, ¿No que supuestamente nunca te separas de tú reloj a menos que vayas a dormir? —mencionó la jóven rubia.

—¿E-Eh?, Bueno... tal vez lo dejé por ahí, tengo tantas cosas en qué pensar, y a lo mejor no me percaté de eso, pero eso no significa que este tipo lo agarre, aunque lo haya dejado por ahí tirado, tú sirviente no tenía porqué tomarlo —dijo Ethan. Por uno momentos su voz sonó algo temblorosa, pero luego siguió firme. Pacífica ya sabía que Ethan estaba mintiendo, pero debía confirmarlo de algún modo.

—¡Que yo no tomé su reloj! Yo jamás haría eso y tampoco tengo motivos para hacerlo, no me explico cómo su reloj terminó en mí... —Dipper recordó cuando Ethan de repente se chocó con él, de la nada—. ¡Es verdad!.

—¿Qué sucede, Dipper? —preguntó Pacífica.

—Este tipo se chocó conmigo en el pasillo, cuando regresaba a recoger los platos él se chocó conmigo, de la nada, y me dijo que yo tuve la culpa, seguramente aprovechó esa oportunidad para meter su reloj en mi bolsillo e culparme, acusarme de ser un ladrón.

—¿Eso es cierto, Ethan? —preguntó Pacífica, muy seria.

—¿Cómo se te ocurre preguntarme eso?, Osea, ¿Por qué metería mi propio reloj en el bolsillo de tú sirviente?, No tiene sentido, ni siquiera el más estúpido del mundo se atrevería a hacer eso —dijo Ethan—. Pero eso no es lo importante, lo que importa ahora es que no puedo creer Pacífica que confíes más en este pueblerino asqueroso  en vez de mí, tú amigo.

Pacífica entrecerró sus ojos cuando escuchó eso último, ya no iba a soportar más escuchar tantas estupideces.

—Ethan... el hecho de que nuestros padres sean amigos y socios, que hayan hecho buenos negocios, y que nuestras familias se lleven bien, no significa que deba tolerar tus tonterías, tus acusaciones estúpidas, y tampoco debo soportar que molestes a mis empleados solo por el capricho de que uno de ellos no te agradó cuando llegaste.

—Pero Pacífica...

—Te dejé muy en claro que sí volvías a molestar a mis empleados, a Sasha, a Dipper, a Luc, a los cocineros, al jardinero el señor Jason, o a cualquiera, te ibas a ir de mí casa, porque no tienes ningún derecho de hacerlo.

—¡Pero Pacífica!... —Ethan de nuevo fué interrumpido.

—Y al parecer, tú coeficiente intelectual de menos cinco no comprendió mis palabras, no comprendió la clarísima advertencia que dije, y la ignoraste completamente, entonces... no me dejas alternativa —Pacífica dió un golpe en la mesa con ambas manos, el ruido del golpe retumbó por todo el comedor, sorprendiendo a todo el mundo—. ¡Lárgate de mí casa ahora!.

—¡¿Enserio me vas a echar de tú casa?! ¿Enserio le vas a creer a esta rata o la estúpida de tú empleada en vez de a mí? ¡¿Por qué?!.

—¡CON SASHA NO TE METAS, ETHAN!.

—¿O SINO QUÉ? ¿VAS A DEMANDARME?, ¡EL QUE DEBERÍA METER UNA DEMANDA POR ROBO Y FALSAS ACUSACIONES SOY YO!

—Oigan chicos por favor, calma, no griten —dijo Melissa, tratando de calmar la situación, pero fué en vano, sus intentos no sirvieron para nada.

—¡LÁRGATE DE MÍ CASA, AHORA!.

—¡¿Y como demonios voy a hacer eso?!, ¡Mi chófer está en mi casa, y son cinco horas de viaje, ¿Cómo diablos me voy a ir ahora?, Es imposible.

—No te preocupes por eso, mi chófer te llevará sano y salvo hasta tú casa —respondió Pacífica—. ¡Así que no tienes excusas, quiero verte abandonar mi casa ahora!.

—¡¿Esto es enserio?! —preguntó Ethan.

Pacífica entrecerró sus ojos, mandándole al rubio una mirada muy intimidante, tanto que asustaría a cualquiera que lo mire. Ethan apretó sus puños, sus dientes rechinaron producto de la rabia que sentía. Miró a Dipper y lo amenazó...

—Esto no se queda así, Dipper, me las vas a pagar.

—¡DIJE LARGO! —volvió a gritar Pacífica.

Ethan se marchó del comedor rumbo a la habitación que le dieron para quedarse durante esos tres días. Dió fuertes pistones, como si de un niño regañado se tratase.

Tanto Dipper como Sasha quedaron tan rígidos como un árbol al ver la reacción de Pacífica, nunca antes la habían visto tan furiosa, menos Sasha, ya que ella llevaba trabajando más tiempo en la mansión Northwest. El duro carácter que llevaba por dentro Pacífica floreció de repente, no le tembló el pulso de echar a su amigo de su casa, no le importó que sus padres sean amigos de los padres de Ethan.

Dipper y Sasha no se atrevieron a decir nada, no querían recibir algún grito por parte de su ama.

Qué mujer... —pensó Dipper, mientras una gota de sudor caía por un costado de su frente—. Nota mental, nunca hacer enojar a Pacífica, ni meterse con sus empleados.

Natty y Melissa estaban caminando de puntitas alejándose del comedor, no querían recibir gritos por parte de su mejor amiga. Pacífica se percató de aquello y le preguntó...

—¿Y ustedes qué? —preguntó, levantando una ceja.

—¡Ay! —dijeron ambas, encogiéndose de hombros.

—¿Qué están tramando?.

—Na-Nada, Pas, s-solo íbamos a recoger nuestras cosas también —respondió Melissa, con algo de miedo, en tanto que una gota de sudor bajaba lentamente por su sien.

—Venga tía, no te enojes, ya nos vamos jeje —al igual que Melissa, Natty respondió con voz temblorosa.

—Ustedes no tienen porqué irse, se pueden quedar, todavía les queda un día más, no se preocupen, mañana en la tarde o en la noche le diré a mi chófer que las lleve a su hogar, no se preocupen.

—¿E-Enserio? —preguntó Natty.

—Sí, ¿Acaso me ven cara de payasa o qué? —preguntó Pacífica, volviendo a ponerse seria.

—No para nada jeje, en lo absoluto —dijo Melissa.

Al cambiar la escena se podía ver cómo Ethan estaba guardando sus cosas en su mochila, echando fuego por sus ojos, estaba muy furioso porque no podía creer que Pacífica, la chica a que le gustaba, le haya creído a un simple "sirviente" en vez de a él.
La escena vuelve a cambiar y podemos ver cómo Ethan se estaba embarcando en el auto junto con sus cosas. El señor Flynn el chófer de los Northwest estaba esperando en el carro, y lo encendió cuando Ethan ingresó en el mismo.

—Bueno, será un largo viaje, menos mal que tomé un buen descanso en la noche —dijo el viejo chófer, acomodándose la gorra, una que llevaba grabada las palabras "Northwest Family"—. ¿Está listo jóven Ethan? —preguntó, mirando al rubio a través del espejo retrovisor.

—Señor Flynn, no quiero hablar por ahora —respondió muy serio el jóven.

—Como usted guste —fué lo único que dijo el viejo chófer.

En la puerta yacía de pie Pacífica, observando todo cruzada de brazos. El auto arrancó y comenzó a moverse llevándose a Ethan consigo. El portón se abrió y prontamente el vehículo abandonó la mansión Northwest, perdiéndose en medio de la oscuridad de la noche rápidamente. Pacífica respiró profundo, intentó calmarse, todo había transcurrido demasiado rápido. Cerró la puerta cuando ingresó en su casa, ahora debía hablar con su sirviente personal.

Continuará...

Bạn đang đọc truyện trên: Truyen2U.Pro