Royal Woods 4:00 pm:

Por la tarde del día siguiente tanto Lincoln como Lola, no hablaron del tema, ni siquiera durante el inicio de la mañana ni mucho menos en la misma escuela a donde ambos iban a educarse.

Pero lo que si no dejaban de pasar ninguno de los dos de su mente fue aquel beso que ambos se dieron por pura casualidad. Pero ahora eso no era motivo para tenerse atormentado por lo que paso, si bien es cierto, para Lincoln, no era su primer beso, ya que el peliblanco, anteriormente ya había tenido besos con algunas chicas, pero no lo era para su pequeña hermanita, pues para ella fue su primer beso y se suponía que un primer beso se dan ente dos personas que verdaderamente se amen y entre ellos dos solo había hermandad y nada más.

Durante la noche de la madrugada Lola se despertó sin hacer ninguna clase de ruido que despertara a su gemela menor. Esa noche la chica  jamás dejo de pensar en aquel beso, pues por más que lo intentaba suprimir ese pensamiento, no pudo hacerlo, la pequeña princesita había sido marcada de por vida con su primer beso y nunca pensó que aquella persona quien se lo daría seria su hermano mayor Lincoln.

Si por si fuera poco, el peliblanco tampoco habita dormido por la madrugada, pues luego de recibir a sus padres y hermanas en la entrada de la casa, se dirigió a su habitación a intentar conciliar el sueño, pero fue inútil, pues Lincoln al igual que su hermana Lola se levanto por la madrugada a continuar meditando ese casual beso que no los dejaba tranquilos por nada.

Pero por que ese beso no los dejaba en paz tanto en su mente como en su conciencia ¿Acaso seria un indicador que dijera que ambos chicos estaban hechos el uno para el otro? O que quizás por magia de arte el destino hallo en ellos dos un amor casi imposible, que implicara un sendero lleno de obstáculos y barreras que les impida amarse? En este caso no tenia una explicación, pero lo que si sabían los corazones de ambos eran que ese beso accidental marco sus corazones, generando sentimientos de amor inconscientes en cada uno de los dos.

Mientras todos los integrantes de la casa Loud realizaban como siempre todos sus quehaceres acompañados siempre del presente ruido, la pequeña rubia se encontraba ahora afuera de la casa, ensayando el modelaje de pasarela, pero aun practicando eso, su mente estaba suficientemente aturdida aun por lo ocurrido la noche de ayer, pues ella ahora trataba y trataba, pero por mucho que lo intentaba sustraer ese pensamiento,  por nada la dejaba concentrase en sus ensayos.

De igual forma el peliblanco estaba en la ventana de su habitación y no hacia nada más que pensar en aquel beso. Pues de igual forma durante la hora que fue de la escuela, el solo continuaba meditando lo ocurrido, mas aun poco le importo de que todos hablaran de aquel gran episodio perdido de Arggh. De igual forma, Lincoln no respondía a las interrogantes de sus amigos, inclusive a las de su mejor amigo Clyde. Pero luego de tantas exigencias, el chico hablo y les dijo que no pudo ver el programa de la serie, debido a que se le fue el fluido electrico por la tormenta que arreciaba de manera intensa. 

Todos los chicos entendieron eso y pensaron que era eso lo que lo tenia demasiado pensativo, cuando fue el beso que tuvo con su pequeña hermana rubia.

Sus amigos lo comprendieron, pero poco tiempo después, el chico McBride se le acerco y lo tomo por el hombro y comenzó a hablarle.

Clyde: No te preocupes amigo, que yo tengo grabado el episodio perdido de Arggh y si gustas lo podemos ver al termino de la escuela.

El peliblanco por un breve momento puso una pequeña expresión de alegría, pero luego esta se fue como sin nada y le respondió a su amigo.

Lincoln: Gracias por decírmelo Clyde, pero sera en otra ocasión, ahora tengo mi mente en otro lugar.

El moreno no lo entendió y solo pensó que seria algo de la pubertad que lo tendría a si y que pronto se recuperaría de ese estado emocional que pasaba.

Y así fue como paso el chico de pelo blanco la mañana de la escuela, continuando asomado en la ventana redonda de su habitación, Lincoln se comenzaba a sentir muy inquieto, pues ahora daba vueltas por toda su habitación tomándose el mentón y se comenzó a hablar.

Lincoln: Cielos, no puedo negarlo, Lola y yo prometimos no hablar más sobre esto, pero no puedo sacar el beso que le dio, rayos tampoco lo puedo olvidarlo, cada vez que cierro mis ojos, solo puedo sentir los labios de Lola.

Lo que el inconsistente del peliblanco necesitaba verdaderamente era estar a la do de su pequeña hermana, pero aun así negando todo eso Lincoln decidió salir de su recamara e ir a ver lo que su pequeña hermana rubia hacia, pero lo cierto fue que era su inconsciente quien estaba actuando y lo saco a ver a su hermana.

La parte de Lola tampoco se quedo tranquila. pues de igual manera ella necesitaba la presencia de su hermano mayor y que también le diera algunos consejos ya que una vez él la ayudó a practicar para un concurso, pero esta vez era muy diferente y ella solo quería que su hermano estuviera presente presenciando lo mucho que ensayaba.

Pues todo era para ambos ya algo novedoso, pero nunca supieron que fueron los sentimientos inconscientes quienes los reunieron, pues como si fuera arte de telepatía ambos interactuaron planeando eso, o quizás era que ambos si habían sentido realmente algo por ese beso la noche de ayer.

El peliblanco se acerco a presenciar los ensayos de su hermana y ella comenzó a realizaros, pero luego de un cierto tiempo ambos decidieron hablar.

-Lincoln / Lola - ambos hermanos hablaron al unisono y se quedaron callados por un momento.

Ahora ambos estaban lo suficientemente sonrojados como para decirse algo, asi que sin pensarlo decidieron hablar y el peliblanco fue el primero en romper el silencio.

Lincoln: Lola, quisiera ayudarte aaaaahh.... Quisiera...... Quisiera ayudarte en tus ensayos, me dijiste lo mucho que te importaba ese certamen de belleza de querer ser la señorita de Royal Woods y conozco un método que puede ser infalible para ti, ademas soy el chico del plan no es así? - dijo el peliblanco con un leve sonrojo.

Lola: Lincoln, en verdad si quisiera que me ayudaras como la ultima vez, ya que se que también conoces de esto - dijo la pequeña princesa de igual forma con un sonrojo.

Dicho todo eso el peliblanco comenzó a ayudar a su hermana con sus respectivos ensayos, comenzando desde el manejo de la cinta rítmica hasta terminar con el modelaje.

Mientras Lincoln ayudaba a Lola en los ensayos, otros rayos y truenos volvían a amenazar a la ciudad con otra intensa tormenta.

Pero aun con todo eso, el peliblanco fue quien llego a un punto donde el cual ya no lo pudo soportar más y decido interrumpir mientras su hermana practicaba. 

Lincoln había tomado lo poco del valor que se le vino e inmediatamente la tomo de las manos y la miro directamente a los ojos Lola.

Lincoln: Lola, necesito hablar contigo a solas fuera de nuestro hogar, quisiera que me acompañaras a un sitio en donde tengo algo que decirte respecto a algo que me esta pasando, por favor ven conmigo, es necesario que lo sepas.

Lola: Esta bien Lincoln, solo déjame subir por mi impermeable, mis guantes y mi paraguas ya que hoy volverá a llover - decía la chica teniendo en sus mejillas un leve sonrojo.

Lincoln: Creo que también subiré por mi chaqueta, en verdad también debo llevar algo para el camino - hablo el peliblanco también con un leve sonrojo.

Luego de que ambos cogieron todo lo necesario, avisaron a los padres y a sus hermanas que saldrian juntos por unas cuantas horas a realizar una compra de tiara para Lola por que lo iba necesitar para el día del concurso que ya se acercaba, pero en verdad pusieron ese pretexto para poder salir.

Asi Los hermanos Loud salieron de casa rumbo al lugar donde el peliblanco le dijo y solo así se calmaría del tormento que no lo dejaba cesar y por ello ahora estaba decidido a terminar lo que había empezado.

Lincoln: Lola luego de decirte todo esto, quizás sea la ultima vez que hablamos juntos, por que temo que ya no volveremos a ser los mismos cuando esto haya terminado, por eso necesitamos hablar sin interrupciones.

Lola: Lo entiendo Lincoln, pero pase lo que pase, aun seguiremos siendo hermanos - dijo la pequeña mirando hacia el suelo.

dicho eso hermano y hermana continuaron caminando hacia el lugar previsto por el peliblanco, sin saber lo que los iba a deparar luego de que dialogaran a solas, pues pase lo que pase esa tarde terminaría con una lluvia intensa.