Cuando la mujer que volvió de la muerte observó a la chica acercarse a ella empezó a lanzarle los escombros que podía mientras la miraba con odio.

— ¡Muere! ¡Muere por quitarme lo que es mío! — Gritaba furiosa para luego empezar a lanzar punzadas y azotes con sus vendajes.

"Raíces, colas y ahora vendas, ¿alguien le cuenta a los demonios sobre mi?" Pensaba Mikasa algo fastidiada de que siempre terminara siendo flagelada.

La Ackerman esquivo con gracia los ataques y luego tomo rápidamente sus espadas de repuesto, agradecía un poco a Hitch y Louise por haberla atacado sin tregua tanto como para hacerla rápida para esquivar.

Reponiendo sus cuchillas en el aire se preparó para acabar con aquella muerta viviente por lo que se lanzó girando con sus espadas, técnica que había aprendido de su primo Levi, aquellas vendas fueron cortadas con facilidad y estaba por partir en dos a aquella mujer muerta, pero sintió como su cuerpo se detuvo a los pocos metros, algo la apretaba.

Eran los pedazos de vendas, se habían deslizado por su cuerpo para luego sujetarla en el aire con una fuerza sobrenatural, fue mandada contra la pared de un carro y empezó a ser golpeada por los azotes de las vendas.

Sin embargo de repente cayó al suelo, pudo ver cómo la momia Frieda recibió un certero disparo justo en la cabeza, cayendo al suelo observo a Yelena preparando otro disparo.

Mikasa no desaprovecho la oportunidad y lanzo las anclas a los escombros para alejarse y gritar a sus compañeros cazadores.

— ¡Hey! ¡Formen 3 grupos! ¡Uno debe buscar una corona de oro, eso detendrá a aquella muerta viviente!¡El otro debe encargarse de los demás muertos para que no estorben! ¡Y por último, debemos distraer a esta demente! — Grito Mikasa para luego jadear cansada, rápidamente esquivo un escombro que iba hacia ella pero estaba por recibir golpes con las vendas cuando algo la cubrió.

— Me agrada el plan, señorita Ackerman — Comento Thomas protegiéndola con su escudo — ¡Vamos!.

Frieda empezó a ser atacada por todos los cazadores tiradores, por lo que se cubrió con escombros mientras lanzaba varios hacia su alrededor.

El grupo de Petra se divido con Erd y Ghunter disparando a los muertos y Petra junto a Auruo buscando alrededor.

Zeke no perdió tiempo y dejo a su hermano inconsciente junto a Yelena para empezar a buscar con los cazadores y de paso darles una descripción más detallada de la corona.

Farlan fue con Mikasa rápidamente — Los cazadores están corriendo la voz de un plan, debido a que nosotros somos los únicos capaces de acercarnos a aquella mujer, los tiradores cambiarán de objetivo a los muertos cuando toque la campana, ese será el momento en el que la debemos atacar y tratar de contenerla, todos los demás están buscando la corona.

Mikasa asintió y empezó a correr alrededor de los objetos que se encontraban levitando, aquel idiota de Eren seguro perdió la corona lejos, la única solución era hacer pedazos a aquella mujer, pero no sabía si eso solucionaría todo.

— ¡Oigan! — Era el grito de Zeke que tenía en sus manos la bolsa de Eren — ¡Está bolsa está cortada! ¡Alguien robo la corona!.

Todos los cazadores se sorprendieron de gran manera por la noticia, uno de ellos había robado la corona y al no entregarla, estaba condenando a todos a morir.

No, la corona seguía ahí, la razón de que los muertos sigan viniendo hacia ellos era por eso.

Los pensamientos de la pelinegra fueron interrumpidos por la campana que señalaba el cambio, los tiradores cambiaron de objetivo y era el momento de ella y Farlan

Ambos cazadores saltaron de lados contrarios y empezaron a moverse por los escombros flotantes hacia la mujer con vendas.

Frieda les lanzaba todos los escombros que podría pero ellos se acercaban casa vez más por lo que hizo de su misma un tornado de vendas lanzando golpes a su alrededor.

Mikasa sonrió cuando vio en el aire la botella de vino que tenía Zeke, aún estaba medio llena, por lo que se lanzó hacia ella para lanzar un corte que la destrozó bañando sus espadas con la bebida fermentada, solo bastó un choque de espadas para provocar la chispa que prendió fuego su espadas.

Mikasa sonrió y se lanzó hacia la mujer hecha un torbellino de espadas de fuego.

Tanto el tornado de vendas como el de fuego chocaron y una onda expansiva empujó a todos, mientras que ambas mujeres caían al suelo.

Frieda estaba envuelta en fuego que consumía sus vengas, pero su piel estaba intacta, Mikasa estaba confundida cuando intento cortarla en dos su espada choco con una barrera invisible.

Frida se cubrió avergonzada por estar desnuda frente a desconocidos y levanto una mano al cielo.

Una plaga de lo que parecían langostas oscuras empezó a llegar, ella era demasiado poderosa, las balas que le llegaban solo la golpeaban sin perforar su piel.

Mikasa se levantó adolorida y observó como su bolsa cayó justo frente a ella, saliendo de ahí el fruto demoníaco, aquella granada que le daría más poder.

— Fuerza... — Mikasa tomó la granada y estuvo a punto de morderla pero antes de hacerlo volvió a las sombras.

— Hazlo — Pidió Hitch que la miraba con una sonrisa pícara, cuando Mikasa observó el fruto este era la cabeza de un niño, la bruja empezo a reír — Son sacrificios necesarios.

— Al final eres como nosotras — La voz seductora de Louise se escuchó detrás de la Ackerman mientras la abrazaba junto a su compañero Ymir.

— Nosotras estamos hambrientas de placer, pero tú de poder, ¿Cuál es la diferencia?.

Mikasa empezó a temblar y recordar las palabras de Hanji, "Es como si un humano hubiera sido comprimido en una fruta", la pelinegra sintió náuseas en ese momento pero una voz la saco de su trance.

— ¡Mikasa! — Farlan le gritaba mientras corría hacia ella para cargarla en su hombro y alejarse de la tormenta de langostas hambrientas — Reacciona, debemos hacer algo antes de que nos mate a todos.

Los cazsdores empezaron a alejarse mientras las langostas empezaban a cubrir a Frieda.

— No soy precisa como Levi — Dijo Mikasa mientras empujaba a Farlan, tirando la fruta sobre él — Ni precisa como mi tío Kenny — Empezó a correr hacia la mujer — Ni inteligente como Kuchel, pero... Soy fuerte, ¡fuerte para protegerlos a todos!

Mikasa tomo sus nudillos de plata y se cubrió con sus brazos mientras la plaga de langostas iba hacia ella.

— ¡Yelena! — Grito Petra arrojando una cantimplora al frente de Mikasa, la rubia fue rápida y disparo al objetivo, formando una esfera de fuego que alejo al insectos de la Ackerman.

Mikasa atravesó las llamas para darle un potente puñetazo a Frieda, no podia dañarla pero si romper su concentración con golpes contundentes.

La plaga empezó a irse, mientras Mikasa jadeaba agotada, aunque eso no había terminado.

— ¡La encontré! — ¿O si?, Nifa llegaba corriendo con una corona de oro en sus manos — La dejaron tirada en el suelo, talvez por miedo a la plaga.

La misión había terminado, pero no completamente.