Ambos cuerpos descansaban sobre aquella cama y se repartían caricias y besos inocentes, el doncel mantenía su espalda sobre el pecho del pálido y este lo rodeaba protectoramente con sus brazos, recargándose sobre el respaldar de la cama.

Después de que Yoongi le confesara la verdad de su embarazo habían quedado en un silencio cómodo y tranquilo, donde lo único que se escuchaba era sus respiraciones.

Las delicadas y sutiles caricias que Yoongi dejaba en el cabello del menor lo estaba adormeciendo, sus ojitos pesaban y su respiración cada vez se volvía más lenta y relajada, pero no quería; quería disfrutar más de este mágico momento, donde solo eran ellos dos, disfrutando de la agradable burbuja que los envolvía a ambos.

Los rayos de sol comenzaban a salir, infiltrándose rebeldemente por el gran ventanal, el agradable canto de los pajarillos anunciando un nuevo día.

Yoongi quería tener el delgado cuerpo del Doncel junto al suyo, seguirlo consintiendo hasta que se durmiera en sus brazos, pero debían hablar, habían cosas que tenían que dejar en claro.

─ Pequeño... ─ llamó cerca de su oído, el menor soltó un suspiro luchando por responder al llamado del rey ─ tenemos que hablar, abre tus ojos ─ agregó deteniendo sus caricias, llevando ambas manos a su vientre aún plano.

Con pesar abrió sus párpados permitiéndose pestañear varias veces para espantar el sueño.

─ Hablemos... ─ hablo. En realidad sí reconocía que esta conversación era necesaria.

Pero no así, Jimin quería verlo, por eso se removió sobre el colchón dándose una media vuelta ayudándose con sus pies y manos, quedando cara a cara con el rey, quien al ver que ya no podía protegerlo del frío con su cuerpo tomó la sábana y cubrió el cuerpo del Doncel.

Las mañanas son extremadamente frías, lo que menos quería es que su resfriado empeorara.

─ ¿Si eres consciente que nuestra vida cambiará a partir de ahora? ─ quería que el menor lo tuviera claro, era algo inevitable.

─ Si... ─ Jimin mencionó decaído ─ tendré un hijo no legítimo ─ su mirada denotaba tristeza, de verdad no soportaría que su hijo aguantara malos comentarios, como por ejemplo que era un bastardo.

El más que nada conocía lo hirientes que podrían llegar a ser unas simples palabras, porque lo había vivido en carne propia.

─ No, no será ilegítimo, si nos casamos no lo será ─ respondió el pálido, logrando que Jimin lo mirará asombrado, también pudo notar algo de ilusión en sus ojitos los cuales lo miraban profundamente.

─ Pero usted y yo... usted nunca conmigo... ─ se avergonzó por lo torpe que se había escuchado balbuceando esas palabras, pero es que en realidad no podía procesar algo más, el ya había aceptado que jamás se casaría con la persona que ama, porque este está lejos de su alcance, ya se había resignado a conformarse con tan poco y ser solo su compañía nocturna.

Yoongi aprovechó la distracción del Doncel para tomar sus pequeñas y delicadas manos, las cuales estaban frías gracias a la temperatura.

─ No Jimin, entendí que mereces más, tu mereces todo lo bueno de este mundo, lastimosamente hay cosas que no puedo darte, porque escapan de mi alcance; aun siendo rey, pero si quiero darte tu lugar, porque solo a ti te pertenece y no me importa de donde vengas, no me importan tus modales, no me importa que aun te cueste algunas cosas, lo único que me importa es que eres único, que eres irremplazable, por eso este hombre el cual ha cometido mucho errores, no el rey, si no Min Yoongi, quiero que me mires como una persona ordinaria, igual a tí, te pido que me concedas el honor de ser mi esposo, quiero que seas mío de todas las maneras posibles ─ las mejillas de Yoongi tomaron un rojo furioso, su corazón amenazaba con escapar de su pecho, incluso podía escuchar sus alocados latidos.

Las lágrimas escaparon de los ojitos del menor, lágrimas de felicidad, lágrimas que nunca espero derramar por este motivo, sus manitas fueron a su rostro y comenzó a llorar conmovedoramente porque esto parecía un sueño el cual se le estaba haciendo realidad.

Su pequeño cuerpo comenzó a temblar a causa de los espasmos, no tardó mucho tiempo para que Yoongi lo colocará sobre su regazo y sus brazos lo volvieran a acoger.

─ P-per-dón ─ mencionó con dificultad.

─ Ya, tranquilo ─ sonrió al ver la adorable reacción de Jimin, sabía que su llanto era de felicidad.

─ Es-que yo c-creí que jamás m-me p-pasaría e-esto ─ se escondió en la curvatura del cuello del mayor aspirando su aroma natural.

─ Pero es real y aún espero una respuesta ─ respondió sintiendo como las manos de Jimin se aferraban a su ropa, ah cuánto había extrañado tenerlo así de cerca, abrazarlo de esta manera, ya ni recuerda porque habían peleado.

─ ¡Si! , ¡sí quiero!, ¡quiero ser su esposo! ─ se separó y lo miró con emoción desbordando por cada uno de sus poros, entonces los labios de Yoongi se estrellaron contra los suyos, comenzando un beso lleno de emociones, donde se decían sin necesidad de palabras lo feliz que estaban ambos.

Las manos del menor rodearon tímidamente el cuello del rey, y las de este tomaron su pequeña cintura repartiendo masajes a cada lado.

Sus labios se movían sin prisa, disfrutando de la suavidad del otro, donde Yoongi se encargaba de succionar el labio relleno del menor, chupando y mordiendo, algo que derretía al Doncel. Era un momento íntimo, era su momento, donde no existían reglas ni obligaciones, donde podían amarse abiertamente.

Se separaron por falta de aire, Jimin respiraba con dificultad, manteniendo sus hinchados labios abiertos y su sonrojo que solo lo había ver deseable.

No sintieron los minutos gracias a los besos y caricias que se dieron detrás de este último, se detuvieron y juntaron sus narices, mientras sus ojos se mantenían cerrados, entonces un pensamiento llegó a la mente traicionera de Jimin, provocando que esa agradable atmósfera que los unía se rompiera con facilidad.

─ ¿Qué sucede? ─ preguntó Yoongi un poco confundido al ver como el menor se alejaba de él.

─ No es nada... ─ mintió, pero se le podía ver decaído, como si esa felicidad que antes derrochaba por los poros se hubiera desvanecido, dejando sólo un sentimiento de angustia.

Sintió la mano de Yoongi tomarlo del mentón para después levantarlo y que sus miradas se juntaran ─ no me mientas ─ dijo suavemente, sin la intención de que su voz se escuchara pesada.

Jimin no lo puedo seguir callando ─ es solo que siento que se está casando conmigo por obligación, por el bebé... y yo no quiero... no así ─ habló apagado. Yoongi negó inmediatamente.

─ No, no lo digas, estás equivocado, me casaré contigo porque me he enamorado, incluso antes de saber lo del embarazo yo ya sentía que debía pedirte esto, porque me di cuenta que debía pesar primero en mi, en lo que quiero, y lo que quiero es a tí, quiero que seas mi consorte, que reines a mi lado, tu y nadie más que tú ─ jamás había sentido tanta desesperación por aclarar un asunto, sentía como que su vida dependiera de ello.

─ ¿De verdad? ─ preguntó con inocencia, Yoongi le respondió con un beso, y eso fue suficiente para que todo quedará claro.

─ Perdón... heche a perder el momento ─ hizo un puchero, avergonzado por haberse dejado llevar por sus inseguridades.

─ No importa ─ beso su sien ─ qué te parece si nos damos un baño ─

El menor se sonrojo, jamás había compartido baño con Yoongi, jamás había estado a su lado de esta forma y le parecía vergonzoso.

─ Preparare la tina con agua tibia, en eso puedes aprovechar para desvestirte, ok ─ el Doncel asintió tímidamente.

Yoongi fue directo al lugar mencionado y mientras la preparaba Jimin aprovechó para deshacerse de su ropa, prenda por prenda fue desapareciendo, hasta quedar completamente desnudo, dejó la ropa perfectamente doblada sobre la cama y con la misma sábana con la cual Yoongi lo había cubierto anteriormente se cubrió el mismo esperando a que el mayor regresara.

No tuvo que esperar mucho, la puerta del baño se abrió dejando ver a un desnudo Yoongi, el Doncel al verlo se sonrojo e intento cubrir su rubor con la misma sabana, porque no importa cuantas veces lo había visto de esta manera Yoongi siempre lograba sacar su lado tímido, como también su lado más atrevido

─ Vamos sal de ahí ─ Yoongi mencionó con una sonrisa al ver la pequeña bolita en el centro de la cama.

El menor comenzó a salir de su escondite, Yoongi ignoro su desnudez y camino hacia el, Jimin iba a ponerse de pie, pero el mayor lo sorprendió y le sacó un jadeo de sorpresa cuando sin avisar lo cargó al estilo nupcial, posando una mano bajo sus piernas y la otra bajo su espalda, Jimin enganchó una mano detrás del cuello del rey y la otra en el hombro de este mismo.

Era increíble que este pudiera cargarlo con tanta facilidad, ¿tan ligero era?, bueno, en unos meses ya no lo sería tanto, pues su pancita comenzaría a crecer ganando más peso.

Yoongi podía ser alguien serio y simple a veces, pero cuando quería también era detallista y dulce, una versión de el que solo Jimin conocería.

Con cuidado y en un cómodo silencio el rey ingresó a su futuro esposo en la tina, Jimin sintió como sus músculos se relajaban cuando el agua cubrió su cuerpo, se sentía tan bien, suspiró profundamente y recargo su espalda en el pecho del pálido quien se había colocado detrás de él, en la misma posición que tenían en la cama.

─ Me gusta esto ─ admitió el Doncel ─ si es un sueño, no quiero despertar por nada del mundo ─ cerró sus ojos, disfrutando del momento.

Las manos de Yoongi se colocaron en su vientre y se mantuvieron ahí, mientras se encargaba de dejar besos en el cuello del menor, jugando con el lóbulo de su oreja de vez en cuando.

─ No es un sueño, y si lo fuera pues yo también quisiera permanecer dormido, pero no lo es, eso es real ─ aseguró con certeza.

Fue el mismo Yoongi quien se encargó de lavar el cabello de Jimin, este solamente se dejó consentir aunque la situación le siguiera pareciendo algo vergonzosa, pasaron unos cuantos minutos dentro de la tina, pues el tiempo de Yoongi era contado.

Ambos salieron con una bata en sus cuerpos limpios y frescos ─ quédate aquí, le diré a un sirviente que te traiga ropa y a un cocinero que te prepare el desayuno y te lo traiga aquí mismo ─ dijo mientras buscaba en su armario lo que se pondría el día de hoy.

─ ¿Me quedaré aquí todo el día? ─ la idea no le gustaba mucho.

─ No, pero quiero que Jin te revise antes, se que lo hizo ayer pero quiero que lo vuelva a hacer para ver si no hay nada diferente ─ era mejor estar seguros ─ podrás salir después de eso, pero se cuidadoso, ahora más que todo tienes que hacerlo por nuestro bebé ─

Jimin llevó su mano a su vientre para acariciarlo, aún le resultaba difícil creerlo, sin embargo era feliz, todo esto lo hacía inmensamente feliz.

─ Lo haré ─

─ También le diré a varios sirvientes que pasen tus cosas a mi habitación, a partir de ahora dormirás conmigo ─ menciono mirando al menor sintiéndose feliz al ver como los ojos de este se iluminaban al escuchar esto último.

Me puse soft ʕ ﹷ ᴥ ﹷʔ

Oigan muchas gracias por los 100K de vistas, estoy muy felíz ʕ≧ᴥ≦ʔ

De lunes a martes les estaré trayendo el próximo capítulo, quisiera actualizar más seguido pero no me alcanza el tiempo :(

Nos leemos hasta entonces, añioo.

02/07/21.