Bon acababa de llegar a su casa, bostezo para seguido dejarse caer en el sillón con total cansancio mientras bebía una soda.

- ¡Bon, las visitas llegarán en cualquier momento! -hablo el padre desde la cocina- ¡alista la mesa!

- uhhf no siento los brazos~ -hablo perezoso desde el sillón- hazlo tú, yo hago todo en esta casa. Te toca además por que es sábado.

- te gustó estar fuera de la casa durante casi un día completo -recalcó el mayor cerrando el grifo para secarse las manos- bien, sabes que quien llega tarde, paga su parte. Ahora no reclames y ve a poner la mesa.

- uhh~ vale -se levantó del sillón- pero solo porque soy buena persona y no quiero que lastimes tus finas manos de damisela -se burló cogiendo algunas cosas menores y colocándolas en la mesa- listo. Pero que difícil era hacer esto papá.

- por eso te dije que lo hicieras -mencionó el mayor- te dejo lo más fácil siempre.

- sabes que prefiero ser yo el que cocina. soy un desastre en las labores domésticas -volvió a sentarse en el sillón cambiando la tele- tu sirves para eso, yo no.

- desde mañana vas a cocinar tú -hablo el hombre saliendo de la cocina- así y te dejas de quejar.

- al fin, aparte cocinas como yo cuando intento tomar a una hormiga -Bon suspiro tomando otro sorbo de soda- de alguna u otra manera, terminas destrozandola.

- haha muy gracioso. -

- oye y quienes son las visitas? -Bon saco el móvil para ver la hora- dijiste que llegarían a las 9:30 y ya se pasaron cinco minutos.

- tu preocupado por la hora y puntualidad? -el mayor alzó una ceja- este no es mi hijo. -posó su mano en el hombro de Bon- aquí dice hecho en china, quiero mi dinero de vuelta.

- ha ha ha que gracioso -se cruzó de brazos.

- no has pensado en lo de tu amigo Bonnie? -cambió el tema de golpe, ¿porque? Digamos que Bonnie es astuto y ah tenido una que otra charla con el mayor que se ah quedado revoloteando por ahí en la cabeza de Patrick- el de verdad esta intentando algo contigo. Se ve que le pone empeño.

- uhhmp!! ¡¿que?! ¿a que viene eso? -Bon escupió la bebida, no se esperaba un cuestionario sorpresa y menos sobre Bonnie- no logro entender, tu mismo fuiste el que me dijo que me alejara de él en esos momentos cuando era un crío enamoradizo y estúpido.

- si. y me disculpe por eso con tu amigo. El chico es agradable -Patrick reposó sus brazo en el respaldo del sillón- sólo digo, tiene un buen carisma y además tiene bastante energía... nada más mira como esta la casa.

- ¿que tiene la casa que ver con Bonnie? -El moreno rodó los ojos.

- mientras tú estabas vagando por ahí con tus amigos -comenzó a explicar el mayor- el chico se dio un tiempo para venir hasta acá a verte, pero no estabas así que se ofreció a ayudarme con la limpieza y hasta me ayudó con la comida.

- te ayuda sólo porque le conviene -excusó Bon en un suspiro- seguro y quiere ganarse tu confianza, amistad, cariño o lo que sea para que le dejes estar conmigo.

- lo tienes en la palma de tu mano, hijo -Patrick suspiro para levantarse e ir a abrir la.puerta que recientemente había sonado- ya eh visto esto antes, te aseguro que si ese chico se cansa y te deja sólo te vas a sentir abandonado y querrás recuperarle. Hasta te lo doy con firma.

- aja si claro, ya no estoy interesado en él papá, lo quiero mucho pero ya no de esa forma -recalcó el menor- para que te quede claro.

- haha esta bien, esta bien, pero no te pongas a la defensiva -río abriendo la puerta- oh! Que agradable sorpresa! Pasen, pasen. ¡Bon, ven a saludar!

- no grites si estoy al lado papá -de quejó el oji-verde invitando a pasar a los invitados- eh Hola, tío, tía y... Usagi -suspiro cerrando la puerta luego de que estos pasarán- sientanse cómodos.

- gracias sobrino -agradeció la mujer de cabello azul a melena- estas más alto y mucho más apuesto -comentó besando su mejilla como saludo.

- lo mismo digo tía, usted sigue igual de hermosa -halago el menor.

- y me imagino que mi sobrino favorito ya debe tener novia -comentó el mayor azabache en medio de un apretón de manos con el moreno- a tu edad me llovían las mujeres.

- he he bueno, al menos tenemos algo en común -Bon sonrió rodando los ojos- en fin, pueden sentarse y sentirse como en su casa.

- y a mi no me vas a saludar primito? -La de coletas de acercó al más alto para abrazarlo el cual correspondió por presión al tener todas las miradas sobre él.

- Hola Usagi -hablo el más alto rodando los ojos- que bien, si, gracias, también estoy bien y... bueno pueden sentarse  ¿quieren Algo para comer, beber, antes de la comida?

- no, gracias. que amable esta Bon, eh Patrick -hablo la mayor- veo que el viaje le hizo madurar, hiciste bien.

- si, hasta se nota que ah mejorado su condición física -comentó el hombre mayor- ese es mi hombresito bien formado hahhaha.

- por favor, basta -se quejo el moreno pues como era de costumbre su tía Isabella le agarraba de los mofletes mientras su tío Mauricio comenzaba a fisgonear y a apretar los músculos de su brazo.

- como ni hacerlo? Eres el único sobrino mayor que tenemos, es necesario y casi tradición el ver como creces, hasta tenemos fotos. -hablo la mayor- desde cuando naciste hasta ahora. ¿quieres verlas? -saco el móvil de donde lo tenia, su busto, como era de esperarse no lo guardaría ni en la cartera o bolsillos- las pase al teléfono y hasta tienes tu propio álbum con 179 imágenes donde únicamente apareces tú. Las otras 53 se me borraron.

- haha ha ya sabes como es mi mamá -río la de coletas- te adora -se acercó más a Bon para susurrar cerca- no tanto como yo~ -tomó el brazo de Bon y lo abrazo- mamá, puedo estar con Bon antes de comer?

- porque nos preguntas? Solo ve y habla con él, por algo son primos -contestó Isabella con una sonrisa.

- lo se~ -dicho esto tomó la mano del moreno y se fue a sentar con el al sillón de la sala principal- bien, ha-bla-re-mos Bon.

- epa epa ¿que quieres ahora? Deja de montar la misma escena de la prima buena una y otra vez -el mayor se cruzó de brazos- tu no eres tan cariñosa con tus padres enfrente mío.

- Bon~ perdón, se que lo que hice estaba mal -le abrazo- pero si me das una oportunidad te aseguro que no te vas a arrepentir.

- escucha, no me interesas, no te veo más allá que una prima, no te encuentro guapa y mucho menos te  daría una oportunidad -hablo enumerando con sus dedos- ya para ¿si? Entiendo que soy guapo para algunos, pero de ahí a que ya se pasen de la raya me aburre.

- oh, lo dices por tu amiguito el gay de pelo largo y teñido? Si es por el te entiendo, es un completo acosador -se mofó mientras suspiraba recargando su espalda en el obvio respaldo del sillón- no me extrañaría que un día de estos se arme un club para Stalkearte.

- como sabes sobre el? -

- el me chantajeo por Internet para que me alejara de ti, tenia fotos y un vídeo de cuando te di ese beso -contestó mirando hacia otro lado-  es odioso, el viernes se te acercó en medio de la clase como si nada, osea ¿que nadie nota que se atrevió a besarte? En medio de la clase! Oye y... -miro nuevamente a Bon- dime ¿que pasa con ese chico? Es un acosador y la verdad lo encuentro muy afeminado.

- oh... que chico es Bonnie -suspiro encogiéndose de hombros- no hay nada entre nosotros. me acuerdo cuando yo le hacía lo mismo, a esa de pelo verde la deje sin habla después de que la aleje de Bonnie, también recuerdo cuando lo miraba dormir en su cama, se veía tan tranquilo, inocente, abrazaba su almohada con fuerza y tenia las mejillas rojas. Se veía lindo y me volvía loco con cada palabra por mas insignificante que sea. En el veía mi mundo y me perdía con esa mirada -hablaba mirando hacia el techo, teniendo una mirada fija pero no fuera de la realidad- aunque... con ese cambio extraño que tuvo, su actitud y forma de hablarme ya no son las mismas y ciertamente mirarlo a los ojos se me hace difícil.

La peliazul le escuchaba con una leve mueca de enfado en su rostro y los labios apretados. Se encontraba de brazos cruzados observando los gestos que su primo hacia al hablar así de un supuesto amor pasado.

- ugh que molesto -se dijo para sí misma refunfuñando internamente mientras hacia un puchero intentando no oír lo que Bon decía. Pues se había apegado tanto al tema que si fuese por el no pararía de hablar.

- también, esta esa vez en la que el me dio una canción, esa fue la mejor después de la anterior que me había regalado -continuaba contando- ese mismo día la tocamos juntos en mi casa, mi papá se había portado mal con Bonnie y después de eso el se fue sin antes sonreír para los dos. No entendia como después de todo lo que mi papá le insulto no estaba enojado por eso. -llevo su mano Hasta su barbilla- ahora que lo noto, él siempre actuó raro y de una forma diferente conmigo. Quizá... si estaba enamorado de mi desde antes y...

- ¡¡cállate de una jodida vez!! ¡me tienes harta! ¡yo no te pedí que me contaras toda tu historia con ese chico! -Bonbon se levantó del sillón y se fue hacia donde se encontraban los demás.

Mientras tanto Bon se quedó ahí sentado meditando y procesando todo con claridad. Más bien estaba haciendo memoria de todas las veces en la que mencionó al pelimorado en su 'corto' relato.

Por otra parte, cierto pelomorado caminaba con una gigantesca sonrisa en los labios ¿hacia donde? Por supuesto, a casa de Bon. Había encontrado una perfecta excusa para ir, que... de por si no era falsa.

- que suerte tengo -se dijo para Si mismo antes de tocar la puerta. Esta no tardó en abrirse mostrando al padre de Bon con una sonrisa.

- oh Bonnie, que agradable sorpresa, pasa chico, pasa -le invito amable haciendo una especie de reverencia con su mano e inclinándose levemente- ¿que te trae por aquí?

- esto... bueno -se sintió sintió a presión al ver que al parecer había invitados y no deseaba incomodar- venía venía a dejarle sus llaves señor, usted me había pedido que las guardará mientras y pensé que podría necesitarlas he he he.

- cierto, lo había olvidado, gracias chico -cogio las llaves que Bonnie le había pasado y luego colocó su mano en el hombro de el- bueno, aprovechando que estas aquí ¿que te parece si te presento? -le guiño un ojo mientras susurraba- se que no has venido sólo para darme estas llaves, conozco ese tipo de actos.

- no es necesario, solo quiero estar con Bon un ratito -suspiró, para luego poner su mano en la perilla de la puerta- hay visitas y no me apetece molestar a estas horas.

- no, ni hablar, eres un buen chico, lindo y demás un buen partido. Acepta mi ayuda y deja que te presente -revolvió sus cabellos- no se como no vi lo increíblemente habilidoso y bueno que eres. Ahora venga, deja y te presento.

- esta bien -

Mientras tanto Bon, seguía sentado en el sillón charlando a través del móvil. No le interesaba el momento social así que estar solo y pasarla bien hablando de puras idioteces con su típico grupo de amigos le hacía sentir cómodo. Hasta que comenzó a escuchar risas demasiado frecuentes para ser normal y no dudo en ir a ver.

- hahahah pero que tierna te ves~ -comentó la mujer de cabello azul mientras sostenía el cabello de Bonnie en dos coletas- con un vestidito y una orejillas de algún tipo de animalito te verías hermosa.

- Isabella deja de molestar al pobre chico, parece un tómate haha -el mayor azabache sonrió.

- ah ese no le molesta, total es un afeminado -comentó Bonbon cruzada de brazos chasqueando la lengua- seguro y ya está acostumbrado a usar vertidos.

- Usagi! No digas esas cosas -reprocho su madre- tampoco es como si fuese tan malo usar vestidos, incluso hasta para un hombre.

- si, además yo no uso vestidos -Bonnie le miro con el ceño fruncido a la par que mantenía una sonrisa- y si los usará créeme que se me verían mucho mejor que a ti.

- hummp! Es porque a mi no me gustan los vestido -bufo por lo bajo gruñendo de enojo.

- hahaha estos chicos -suspiraron los tres adultos en el lugar.

Bon miraba todo atento, Bonnie si que sabía cómo ganarse la confianza y la atención de todos en cuestión de segundos, pero no sabia porque estaba aquí. Tenia pensado caminar en silencio hasta donde se encontraban pero al primer paso el oji-rojo le detectó mencionandole para seguido correr a abrazarle.

- ¡Bon! Hasta que apareces -sonrió colgado al cuello del mas alto- tus tíos son muy agradables Bon, diría que Hasta tú primita también hehe -al decir eso solo se escuchó un gruñido de parte de la mencionada.

- eh... hola también Bonnie -Bon corto el abrazo y miró a todos incluyendo a Bonnie- por cierto ¿que eran todas esas risas?

- este Bon -suspiro Patrick- porque mas crees? Tu "amigo" -hizo las comillas- es muy adorable y ciertamente en los pocos minutos que ah estado aquí ya te ah mencionado mencionado más de veinte veces.

- todos tus amigos son así de cariñosos contigo? -preguntó Mauricio alzando una ceja junto a una sonrisa ladeada- al parecer no sólo son chicas a las que encantas eh~

- bueno... supongo -Bon se encogió de hombros.

- pero yo seré el único ¿cierto? -Bonnie se paró enfrente del moreno con las manos en la cintura- ¿cierto Bon? Porque aún estoy vacante para el puesto de novio.

- y no te molesta que se acerque de esa forma a Bon, Patrick? -Isabella lo miro con una sonrisa.

- no. Me agrada verlo junto a mi hijo - sonará extraño y puede que piensen que me pase de pasta pero le veo futuro con Bonnie. Así que les apoyaré cuando empiezan una relación.

- ¡¿QUE?! -exclamaron todos con sorpresa, Bonnie tenía una sonrisa de lado a lado con unos destellos en los ojos mientras se aferraba del brazo del peli-turquesa. Bon estaba impactado por lo anterior mientras que los otros dos mayores suspiraron para Si mismos ya que la de coletas sólo refunfuño molesta.

.......

Bonnie estaba comiendo chucherías a mano llena mientras que a su lado estaba Bon saboreando un dulce con las manos dentro de los bolsillos de su chaqueta.

- oye Bon... -Bonnie llamó la atención del moreno quien le miro de inmediato pues sabía que si no lo hacía el contrario iba a molestarse.

- ¿que pasa ahora Bonnie? -se detuvo luego de que el mencionada lo hiciera en seco para mirarle de frente.

- nada, nada, solo... abrázame ¿si? -apoyo su cabeza en el pecho del moreno esperando los brazos del otro rodearle- entiendo que estés molesto conmigo, quería ir a verte, n-no encontré otra forma de acercarme a ti... y tu papá me ofreció su ayuda. -se abrazo más al moreno, por supuesto otra vez estaba ahogado en sus pensamientos bajos de ánimo.

- e-eh... esta bien, esta bien, pero no llores Bonnie -rodó los ojos para luego abrazar al más bajo- venga, estoy molesto por el espectáculo que te has montado en la cena pero... ya no importa. Ya deja y sigue caminando, es muy tarde y de seguro tu madre esta hecha una furia.

- cuando salí ella estaba dormida. No me importa que se enfade conmigo -se separo de el para frotar y limpiar sus ojos- al menos valdrá la pena el que lo haga.

- ¡espera! ¿a donde vas? -le detuvo agarrando su brazo- no puedes irte sólo a estas horas, te van a dar como no tienes idea si te ven sólo y además con ese atuendo. Vamos, mejor apúrate y así llegamos antes de las una de la mañana.

- hump! Estúpido -hizo un puchero para luego dirigir una mirada directa al moreno, le fulmino con la vista y esos ojos rojos para luego cogerle de las mejillas, no le beso, pero si le sonrió con arrogancia- ha! Tonto -dio un soplido causando que algunos los cabellos del turquesa se despeinaran- no necesito que me expliques y guíes al mundo, eh caminado sólo por las calles de la ciudad sin ningún problema. Ahora si, gracias de todas forma, te veo el lunes.

Bon alzó una sola ceja, estaba notando como los intentos que usaba Bonnie para acercarse a él fracasaban siempre, una parte de él amaba que no funcionasen y que simplemente siguiera con esas ilusiones. Sin embargo la otra le hacía sentir mal, muy mal, un completo idiota, odiaba verle llorar por su culpa y odiaba el ya no amarle, pues aún consideraba que el Bonnie al cual amaba seguía ahí, en el fondo, pero aún estaba ahí.

La bipolaridad del descrito aumentaba cada vez más, sus emociones estaban revueltas en su cabeza, y no podía concentrarse bien en su vida social, amistosa, familiar o personal. Bon ocupaba mayor parte de su tiempo.

- mamá? Estas despierta? no? Está bien... -el menor entró con sigilo, cerrando la puerta con cuidado para caminar hasta su habitación- con cuidado, cuidado, ¿donde esta el maldito interruptor? Agh -subió las escaleras procurando no hacer ruido al subir cada escalón ya que no había dado con el interruptor para prender la luz.

Pero como todos sabemos, esta más que típico que siempre algo acaba saliendo mal y por supuesto está no va a ser una excepción. Bonnie tropezó en uno de los escalones antes de subir, se agarro de la pata de una mesilla, rompió el florero que estaba sobre esta, el agua que contenía estaba esparcida por el suelo cayendo por la escalera, la mesa cayó por la misma hasta terminar abajo y Bonnie enredado con el pelo en la baranda, acabando sentado en uno de los peldaños.

- ¡¿pero que...?! -se oyeron fuentes ruidos en la habitación de al fondo del pasillo- ¡¡hijo un ladrón, quédate en tu cuarto yo me hago cargo!!

Si, la mujer era muy exagerada y sobre protectora por lo que el menor actuó rápido gritado el nombre de su madre y tratando de dar explicación.

- b-bien, ahora... ¿puedes ayudarme? Mami -trago saliva dirigiendo una mirada de nerviosismo a la mayor.

- pero Bonnie ¿que haces ahí? -la madre sujeto el cabello de su hijo para desenredar este de la barandilla- no vuelvas a asustarme así, casi haces que se me suban todos los humos a la cabeza.

- lo siento, es que... m-me caí y... eso -dejo que su madre ordenara su cabello- ¿no estas molesta? -utilizo ese tono tierno y mimado que solía usar siempre para salir de problemas.

- ahhw estoy muy molesta por esto hijito -respondió con el mismo tono de voz mientras abrazaba a su hijo- pero sabes que castigarte o simplemente molestarme contigo es imposible~ bien, ve a tu habitación y duerme. Yo me encargaré de limpiar este desorden.

- pero.... -en eso Bonnie observó la mirada de su madre y solo se limitó a suspirar y hacer caso- esta bien, buenas noches Mami, te quiero.

Le besó la mejilla y corrió a su habitación para cerrar la puerta, se sentó a un costado de la cama y comenzó a desvestirse para seguido colocarse su pijama para acostarse.

- no Bonnie, no lo hagas, no seas tonto -se decía entre susurros, pues ahora estaba con el móvil en la mano debatiendo entre sí enviarle un mensaje a Bon o no hacerlo. No aguantó y aunque haya sido un misero mensaje de "buenes noches" lo envío para seguido dejar el teléfono sobre la mesilla de noche. Suspiro para finalmente volver a cubrirse hasta el cuello con las cobijas y dormir.

A media noche Bon leyó el mensaje, rodó los ojos e igualmente envío una respuesta para seguido volver a dormirse pues sólo planeaba divisar la hora.

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