He visto en un mundo,
clasificado por raza y color,
a privilegiados que torturaban,
sin ninguna razón.

Seres bastante despiados,
para considerarse humanos,
pues hacían,
todo lo que tenían en sus manos.
Todo aquello que querían,
y eso a ellos,
nadie se lo impedía.

He visto en un mundo,
clasificado por dinero y poderío,
en el que gobernaban
solo aquellos que eran fríos.

Cada uno a su cual,
cada uno
sufre a su manera,
sin afán.

Cada uno
vive la vida como puede.
No todos somos afortunados,
no todos, somos juzgados,
no todos sufrimos un balazo,
cada vez que respondemos
sin ser antes condenados.

28/06/2018